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La Literatura española en el Siglo XVIII Índice: 1. La literatura española en el siglo XVIII - Un poco de historia. - Características literarias. - Estilos literarios. 2. La prosa. Feijoo, Cadalso y Jovellanos. 3. La poesía. Iriarte y Samaniego. 4. El teatro. Leandro Fernández de Moratín. 1. Un poc...

La Literatura española en el Siglo XVIII Índice: 1. La literatura española en el siglo XVIII - Un poco de historia. - Características literarias. - Estilos literarios. 2. La prosa. Feijoo, Cadalso y Jovellanos. 3. La poesía. Iriarte y Samaniego. 4. El teatro. Leandro Fernández de Moratín. 1. Un poco de historia...  Un poco de historia... El siglo XVIII marca el inicio de la Edad Contemporánea. Supone al ascenso al poder de la burguesía y surge el proletariado. En lo político predomina el llamado despotismo ilustrado, bajo el lema: “Todo para el pueblo, pero sin el pueblo” ( el gobierno realizaba medidas para el "pueblo", o para su mejora; pero las decisiones eran tomadas sin la participación ni intervención del pueblo.)  Un poco de historia... En lo cultural el siglo XVIII se conoce como Siglo de las Luces. La “razón” es la luz que guía al hombre. Nace la Enciclopedia francesa, compilación del saber humano que será imitada en otros países. En España se funda la Real Academia Española (Limpia, fija y da esplendor) y se elaboran el Diccionario de Autoridades, una Ortografía y una Gramática de la lengua castellana. También se funda la Biblioteca Nacional o el Museo del Prado.  Características literarias del s. XVIII Didactismo: La literatura sirve para educar. Se critica todo lo que no se apoye en la razón. Búsqueda de la verdad y no de la belleza. Se abandona lo estético. Predominio de la razón sobre sentimiento o imaginación. Las nuevas bases de la literatura se recogen en la Poética de Luzán. - Teatro. Regla de las tres unidades - Lírica. Géneros clásicos: odas, epístolas o églogas - Narrativa. Se cultiva poco. Destaca el ensayo.  Estilos literarios Rococó. Transición entre Barroco y Neoclasicismo. Neoclasicismo. Movimiento que se basa en el didactismo, y búsqueda de un arte reflexivo. Destaca El sí de las niñas de Leandro Fernández de Moratín. Prerromanticismo: Más sentimental y cercano al Romanticismo del siglo XIX. Prerromántico será José Cadalso y su obra Las noches lúgubres.  PROSA EN EL SIGLO XVIII. Ensayistas destacados: Benito Jerónimo Feijoo. Teatro crítico universal y Cartas eruditas y curiosas. Ambos son ensayos. José Cadalso: Cartas marruecas (textos epistolares entre tres personajes que opinan sobre la sociedad y cultura española) y Las noches lúgubres (Obra prerromántica sobre un joven enamorado que pretende desenterrar a su amada) Gaspar Melchor de Jovellanos. Destaca por sus ensayos: Informe sobre la ley agraria y Memoria para el arreglo de la policía de espectáculos y diversiones públicas.  PROSA EN EL SIGLO XVIII FICCIÓN: Diego de Torres Villarroel: Escribió la obra picaresca llamada Vida, crianza y aventura de don Diego de Torres y Villarroel que narra el ascenso social de este personaje. José Francisco Isla: Escribe Fray Gerundio de Campazas, alias Zote. Narración en la que se ridiculiza la retórica de los predicadores.  POESÍA EN EL XVIII El género característico será la fábula en verso, que narra, con propósito moral, una historia protagonizada por animales. Sus mayores cultivadores fueron: Tomás de Iriarte y Félix María de Samaniego (lectura pág. 37, 38 y 43)  TEATRO EN EL XVIII Leandro Fernández de Moratín fue hijo del también escritor Nicolás Fernández de Moratín. Autodidacta, se educó de acuerdo con las directrices de su padre y su entorno ilustrado. Sus comedias suponen el triunfo del teatro neoclásico. Se ajusta a la regla de las tres unidades (acción, tiempo y espacio), defiende un fin moral y plantea situaciones verosímiles. Sus temas favoritos son la educación y los matrimonios desiguales.  TEATRO EN EL XVIII Obra de Leandro Fernández de Moratín: El sí de las niñas: Se critica la educación irresponsable y los matrimonios concertados por interés, sin amor. Este mismo tema aparece en El viejo y la niña y El barón. La comedia nueva o El café. Se critica el teatro de mala calidad de su época.