Tema 1. La educación. Concepto y diferenciación. PDF
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Profª. P. Casares
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This document introduces the concept of education as a human, social, and cultural phenomenon. It explores the historical context and examines various related terms and concepts. Profª. P. Casares' analysis provides a foundational overview for those studying or interested in education.
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Tema 1. EL CONCEPTO DE EDUCACIÓN Y DIFERENCIACIÓN DE VOCABLOS AFINES PROFª. P. CASARES Introducción. 1.La educación como fenómeno humano, social y cultural. 2.Raíz etimológica del concepto d...
Tema 1. EL CONCEPTO DE EDUCACIÓN Y DIFERENCIACIÓN DE VOCABLOS AFINES PROFª. P. CASARES Introducción. 1.La educación como fenómeno humano, social y cultural. 2.Raíz etimológica del concepto de educación. 3.El concepto de educación. Diversidad de acepciones y sentidos. 4.En busca de una definición. 4.1. El análisis de definiciones. 4.2. Características de la educación. 5.Criterios para analizar si un proceso es educativo o no. 5.1. El criterio del contenido. 5.2. El criterio de la forma. 5.3. El criterio del uso. 5.4. El criterio de equilibrio. 6.Términos afines a la educación. 6.1. Aprendizaje. 6.2. Enseñanza. 6.3. Manipulación. 6.3.1. Condicionamiento. 6.3.2. Adoctrinamiento. 7.Instrucción. 7.1. Adiestramiento. 7.2. Entrenamiento. 8.Formación. 9. Actividades para la autoevaluación. Bibliografía. INTRODUCCIÓN Todas las personas tenemos experiencia de la educación. Educación nos transmite la familia y la escuela: Los padres y los maestros. Educación o, al menos, experiencias que nos cambian y nos hacen ser la persona que somos ahora, tal como somos en este momento, con nuestras virtudes y nuestros defectos, nuestras capacidades y nuestros límites, nos transmiten los amigos, la radio y la televisión, el periódico, los libros y revistas que leemos, los tebeos, las videoconsolas y juegos de ordenador, las canciones que escuchamos, las películas que vemos en el cine, internet... y un largo etcétera. La experiencia relacionada con la propia educación o con la de personas cercanas a las que nos unen vínculos de afecto puede hacer que cualquiera piense que sabe de educación, y, por lo tanto, que puede opinar con cierto conocimiento y hasta con fundamento. Sin embargo, más allá del saber popular basado en la propia experiencia, quienes aspiran a ser educadores profesionales han de tener un conocimiento especializado, basado en el análisis teórico y científico. Esperamos que parte de ese conocimiento os llegue a través de esta asignatura, comenzando, como no podía ser de otra manera, por el concepto de educación. 1. La educación como fenómeno humano, social y cultural La idea central del presente apartado es la educación como un fenómeno inherente al hombre y, como tal, constante en la historia de la humanidad. En todas las civilizaciones, desde antes de la aparición de la escritura, existen formas educativas en las que los modelos de persona educada se configuran de acuerdo con las peculiaridades culturales de cada sociedad. Desde los tiempos más remotos, las comunidades humanas, e incluso prehumanas, han ejercido su influencia sobre las nuevas generaciones. La intervención de los humanos adultos sobre los niños y los jóvenes es una cuestión de supervivencia, tanto individual como colectiva: Supervivencia individual porque al nacer necesitamos cuidados y ayuda para sobrevivir, desarrollarnos físicamente y adaptarnos al entorno. También supervivencia colectiva, porque los grupos humanos procuran mantener su identidad diferenciadora y única, por eso interesa que los descendientes incorporen la idea de pertenencia al grupo social y, para ello, se les alecciona en técnicas, costumbres, normas, creencias, valores... con las que han de identificarse y que constituyen el legado cultural de los mayores. En las sociedades primitivas, se trata de asegurar la transmisión y reproducción exacta del legado cultural para garantizar su inmutabilidad y, con ella, la pervivencia de la identidad del grupo; mientras que en las sociedades civiles se pretende formar individuos que sean capaces de asimilar y perfeccionar la herencia cultural de sus mayores1; estas sociedades civiles -más dinámicas- estarán más abiertas a cambios internos que se producen a lo largo del tiempo o a cambios procedentes del contacto con otros gupos sociales 1 Vid. CASARES, P. M. (1990) Introducción a las Ciencias de la Educación, ICE, Granada, pp. 13-14. 1 A partir de estos planteamientos podemos entender la educación como aquella actividad que "tiene por objeto suscitar y desarrollar en el niño cierto número de estados físicos, intelectuales y morales”2 que exigen de él tanto el entorno físico como el humano. Y también como un "proceso de inculcación/asimilación cultural, moral y conductual"3. Desde el momento en que en una sociedad ha construido sus primeras manifestaciones culturales, tiende de manera natural a conservarlas y transmitirlas4. Esta será nuestra primera aproximación al concepto de educación: La idea de educación como transmisión de cultura. Las sociedades son distintas porque sus expresiones culturales también lo son, por esta razón, el modelo de persona educada es diferente en la medida en que son diferentes las culturas de las que proceden unos modelos u otros. El modelo de persona, la idea de perfección, el ideal humano, los fines de la educación... son distintos de acuerdo con la cultura de la sociedad de origen, pero, "toda sociedad tiene su modelo educativo. Desde la concepción del tipo de hombre que quiere promover"5. Definir la educación como transmisión cultural requiere explicar qué es la cultura. Lo haremos recurriendo a tres aportaciones clásicas procedentes de la antropología: La de Alfred Kroeber y Clyde Kluckhohn, la de Edward Taylor, y la de Ralph Linton. Edward Taylor definió cultura como “aquel todo complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y cualesquiera otros hábitos y capacidades adquiridos por el hombre en cuanto miembro de la sociedad"6. Pero la cultura no es estática, sino dinámica al menos en dos sentidos: a) Condiciona el comportamiento de las personas y de los grupos y b) en la medida en que los sistemas de culturas no sólo surgen de las acciones humanas, sino que, el desarrollo cultural que progresivamente se vaya alcanzando condicionará el comportamiento de los individuos humanos el resto de su historia7. No todas las producciones culturales humanas son dignas de ser conservadas y transmitidas, sino sólo aquéllas que merecen la pena y, por esa razón, se han mantenido a lo largo de la historia. En este sentido, el núcleo esencial de la cultura son las ideas tradicionales (es decir, históricamente generadas y seleccionadas) y especialmente los valores vinculados a ellas8, lo que es muy próximo a decir que la socialización y la educación pretenden conservar y transmitir aquello que colectiva o individualmente permanece en nuestras memorias y que se considera valioso. Por el contrario, mostramos como valor negativo y desaconsejamos aquello que nuestra memoria registra como de consecuencias nefastas en la vida de las personas9. Así, enseñamos, por ejemplo, a lavarse las manos antes de las comidas y los dientes después porque es bueno para la salud, también por cuestiones de autoestima y cuidado personal, de estética y hasta de buenas relaciones sociales. Enseñamos que no es bueno mentir porque, aunque los efectos inmediatos de la mentira pudieran reportar algún beneficio, a la larga siembran la desconfianza y el alejamiento de quienes nos rodean. Unas ideas finales en torno a la cultura las obtenemos de la definición de Ralph Linton quien considera que "la cultura de cualquier sociedad es la suma total de las ideas, 2 DURKHEIM, E. (s/a): Educación y sociología, La Lectura, Madrid, p. 70. 3 CASTILLEJO, J.L. (1988): "Educación", en: Sánchez Cerezo, S. (dir.): Diccionario de las Ciencias de la Educación, Aula Santillana, Madrid, pp. 475-476. 4 Vid. NÚÑEZ, L. Y ROMERO, C. (2003) Pensar la educación, Pirámide, Madrid: 39-44. 5 POSTIC, M. (1982) La relación educativa, Narcea, Madrid, p. 35. 6 TAYLOR, E.: "Primitive culture". Traducido al castellano en Khan, J.S.: El contexto de cultura, textos fundamen- tales, Anagrama, Barcelona, pp. 29 - 46, con el título "La ciencia de la cultura", original de 1871. 7 Vid. KROEBER, A. y KLUCKHOHN, C. (1952) Culture: A critical review of concepts and definitions. Cambridge Mass: Peabody Museum of Archeology and Ethnology, 47, I, p. 181. 8 Ídem. 9 Vid. ESTEVE, J.M. (2010) Educar, un compromiso con la memoria, Octaedro, Barcelona, pp. 11-18 2 las reacciones emotivas condicionadas y las pautas de conducta habitual que los miembros de esa sociedad han adquirido por instrucción o imitación y que comparten en mayor o menor grado"10. Al hilo de esta definición, nos interesa reflexionar sobre el hecho de que la cultura tenga impacto en nuestras emociones, porque esto indica que la acción de la cultura es muy poderosa y porque, a su vez, las emociones condicionan lo que las personas hagamos; esto, que puede ser positivo, entraña también riesgos que más adelante comentaremos como influencias no educativas. La identidad de las personas y de las sociedades viene dada en buena medida por valores. La cultura y sus valores, así como las emociones que van ligadas a ambos, se aprenden, esto significa que puede ser objeto de educación. “Las variaciones culturales de emociones y valores indican que hay componentes aprendidos y, por lo tanto, unas y otros no proceden del puro condicionamiento genético, sino que son educables, habiéndose constatado que la cultura no sólo mediatiza la biología, sino más aún: El aprendizaje genera modificaciones biológicas”11. 2. Raíz etimológica del concepto de educación. Por lo clarificadora que resulta, la aproximación etimológica al concepto de educación, que veremos en este apartado, resulta de interés. El estudio del origen y significado de las palabras, o Etimología, nos permite una primera comprensión de lo que significa el término educación, más allá de la experiencia personal y de su uso en el lenguaje coloquial. Etimológicamente, el término "educación" procede del latín. Este origen latino es doble y proviene de dos verbos: educare y ex-ducere (o educere), de significados opuestos: Educare = “criar, nutrir, alimentar”. Ex-ducere = “sacar, hacer pasar algo desde dentro hacia fuera”. Como se observa, los procesos educaren/educere son inversos por lo que nos encontramos ante una aparente contradicción. La etimología del término, pues, suscita polémica. Algunos expertos defienden que el origen del término educación es "educare", otros han defendido "ex-ducere" como fuente etimológica. "Educare" alude a una influencia exterior; así, las personas nos desarrollamos a partir de intervenciones externas de otras personas (heteroeducación). De acuerdo con este término, que se eduque o no, depende más del educador12 que del educando13, ejerciendo el primero una función directiva de transmisor de cultura basada más en la receptividad, la autoridad y la disciplina14. Supone una relación del educando con otra u otras personas, una polarización educanda/educador. “Educación” desde este enfoque es, pues, la comunicación de un ser formado con un ser en formación. La influencia del primero desencadena sobre el segundo los cambios positivos que denominamos educación. "Ex-ducere", concede mayor protagonismo al educando: Éste posee, ciertas capacidades, y la función del educador es ayudarlo a desarrollarlas. ¿Oposición o complementariedad?: Optamos por la segunda posibilidad: Son términos que expresan procesos complementarios, ya que, gracias a la intervención del educador, el educando alcanza paulatinamente mayor desarrollo. Tanto influencia externa y como desarrollo interior son necesarios y se complementan. La intervención del educador permite al educando aproximarse a grados de autonomía cada vez mayores, con lo que 10 LINTON, R. (1972) Estudio del Hombre. Fondo de Cultura Económica, México, p. 284. 11 CASARES, P.M. (2008) Valores, afectividad y desarrollo de la persona. En Touriñán, J.M. (dir.) Educación en valores, educación intercultural y formación para la convivencia pacífica, Netbiblo, Oleiros (La Coruña). 12 Educador es la persona que procura la educación de otra. 13 Educando es la persona que recibe educación. 14 Vid. GERVILLA (2010) Educar en la postmodernidad, Dykinson, S.L., Madrid, pp. 24-26. 3 puede llegar a ser el principal motor de su propia educación (autoeducación). "Ambas significaciones son interesantísimas (...) por una parte, el propio hombre (...) es capaz de desenvolver o desarrollar sus propias posibilidades (...), por otra, la acción externa de conducir a otro (...) es la vertiente de ayuda y orientación de la educación (...). No se trata, por tanto, de adscribirse a una u otra. Serían parcialismos"15. De acuerdo con el desarrollo evolutivo y la madurez del educando se recurrirá a un modelo u otro. Respecto al problema etimológico, queda resuelto cuando nos remontamos a la raíz indoeuropea "duco", de la que proceden "educare" y "ex–ducere" ya que “duco” reúne en sí los significados de ambos términos: llevar, traer; sacar, tirar de, hacer salir, guiar, conducir...). Por último, es importante tomar conciencia de que decantarse hacia una u otra idea de educación tendrá consecuencias en la práctica. Valgan como ejemplo las asociadas a dos modelos diferentes de educar en la escuela, en donde "educare" se asocia al modelo etiquetado como “escuela tradicional” –expresión que se usa para contraponerla a concepciones novedosas del planteamiento escolar-, mientras que "ex-ducere" se vincula al movimiento de la Escuela Nueva. Precisamente "escuela tradicional" es una expresión acuñada por los defensores de la “Escuela Nueva” con la que se refieren de modo crítico, y a veces despectivo, a un modelo de enseñanza del que hacen destacar ciertas características que consideran negativas: Algunas características de la escuela tradicional En la organización, transmisión En la organización social de la enseñanza: y evaluación del conocimiento: 1. Curriculum centrado en las 1. Papel pasivo del alumno, mero receptor de conocimientos materias de enseñanza, sin prestar y sujeto a normas en cuya elaboración no participa. atención a los intereses y evolución 2. El profesor tiene todo el poder: Impone el contenido, psicológica del niño. ritmo y secuencia de la transmisión, trabaja aislado y no en 2. Pedagogía colectiva, dirigida al equipo o cooperativamente. alumno medio, verbal, 3. Fuerte delimitación del espacio y el tiempo: La unidad memorística, que pone énfasis en organizativa es el aula cerrada; el horario es inflexible y los los contenidos frente a los procesos periodos de tiempo se repiten rígidamente. y en las soluciones, frente al 4. El agrupamiento de alumnos es homogéneo, en función planteamiento de problemas. de criterios como sexo, edad, capacidad. 3. Evaluación concebida como 5. La disciplina es represiva, basada en la imposición. examen, no continua. Por su parte, la “Escuela Nueva”16 destaca entre sus planteamientos: Algunas características de la Escuela Nueva 1. Relacionar la escuela y la vida: Es finalidad de la escuela preparar para la vida; por lo tanto, se introduce en la escuela la vida social y humana con sus problemas y preocupaciones. 2. La infancia como etapa de la vida con sustantividad propia, es decir, con rasgos específicos que se deben tomar en cuenta cuando se plantea su enseñanza y educación. 3. La escuela es una comunidad de trabajo, en donde los alumnos se perfeccionan y se ayudan mutuamente. 4. Atención al crecimiento total de la persona: Moral, estético, social, físico e intelectual, sin privilegios ante ninguna clase social. 5. Valor de la experiencia, ya que de ella derivan nuestros conceptos intelectuales y morales. 6. Necesidad de ayudar al ser humano en su formación física, mental y social. 7. La educación tiende a lograr el máximo desarrollo personal. El profesor usa su poder con el aprendiz -no contra él-, está al servicio de sus alumnos. 8. Se practica la coeducación (educación conjunta de niños de ambos sexos en la misma aula, que promueve, además, la convivencia también en espacios exteriores a la clase). 15 CASTILLEJO, J.L. (1978) Nuevas perspectivas en las Ciencias de la educación, Anaya. Madrid, pp.17- 18. 16 Se profundizará sobre este movimiento en el tema 5. 4 9. Se atiende a las capacidades e intereses de los alumnos 3. El concepto de educación. Diversidad de acepciones y sentidos. Una segunda aproximación al concepto de educación nos lo da el Diccionario de la Real Academia, en el que podemos leer cuatro acepciones distintas: a.- "Acción y efecto de educar". Acción y efecto de educar se nos presentan como términos, en cierto modo enfrentados, aunque, en realidad, podríamos interpretarlos como una progresión en la que el segundo debería ser consecuencia del primero. Son dos caras distintas y necesarias de una misma realidad: Acción de educar Efecto de educar Realidad dinámica Realidad estática Actividad Consecuencia, resultado de la actividad Proceso Producto b.- "Crianza, enseñanza y doctrina que se da a los niños y a los jóvenes". Esta segunda acepción es mucho más amplia y aparece en ella mayor diversificación. En sentido primario, crianza es complemento de la procreación. La madre que amamanta está criando a su hijo. Crianza equivale, pues, a "nutritio", la nutrición necesaria para la supervivencia y el crecimiento. Precisa la existencia del alimento que se da. La enseñanza es transmisión de conocimientos, se relaciona con el saber; tiene un sentido intelectual; en sentido metafórico, podría entenderse como alimento de la inteligencia. Doctrina entra en el campo de las creencias y de lo normativo; está relacionada con lo moral. Su sentido es, ante todo ético. Implica la existencia de normas de conducta de acuerdo con un cierto credo ideológico, religioso... En sentido metafórico podría tomarse como "alimento espiritual o moral". Crianza Enseñanza Doctrina - Nutrición - Transmisión de conocimientos - Transmisión de creencias y normas - Acrecentamiento - Relacionada con el saber - Relacionada con el orden moral - Sentido físico - Sentido intelectual - Sentido ético Existencia del alimento Existencia de saberes Existencia de normas de conducta En los tres casos, se señala como destinatarios a los niños y a los jóvenes, lo que supone una idea limitada de la educación, puesto que la restringe a una sola etapa de la vida, cuando es un hecho reconocido que la educación es un proceso que se prolonga durante toda la existencia de la persona. c.- "Instrucción por medio de la acción docente".- Alude a los conocimientos que se adquieren mediante la enseñanza; supone intervención de otras personas para que alguien aprenda. Pero no de cualquier persona, sino de un “docente”: Un educador profesional, maestro o profesor. 5 d.- "Cortesía, urbanidad”. - Se alude aquí, por una parte, a una cualidad de la persona; por otra, a una forma determinada de comportarse en sociedad (la corte, o personas próximas al rey, sabedoras del protocolo. La urbe: la ciudad, en donde el comportamiento diferente del rural). Educación se nos presenta ahora como comportamiento personal individual, de acuerdo con normas socialmente pertinentes, sancionadas como tales por el grupo de referencia. 4. En busca de una definición. Análisis y descripciones. A la vista del universo de matices que encierra el término educación se deduce enseguida que no es fácil definirla: Siempre faltará algo o se introducirá algún dato que resulte excesivo o desborde el concepto. Tal vez por esta razón, las definiciones más convenientes son las que tienen un carácter más general –definiciones formales-, en las que podríamos decir que se contempla lo esencial y quedan implícitos otros aspectos de lo educativo. Valga como ejemplo la de Víctor García Hoz: "Perfeccionamiento intencional de las potencias específicamente humanas"17. 4.1. El análisis de definiciones. Para dar una definición propia, algunos autores, como René Hubert (1980), han recogido las aportaciones de otros y han buscado en ellas aspectos comunes. Tras el análisis realizado, Hubert llega a las siguientes conclusiones: 1. La educación es un fenómeno humano. 2. La educación es una acción que ejercen unas personas sobre otras. 3. La educación se dirige hacia la consecución de una finalidad. 4. La educación tiene un matiz instrumental: Más que un bien en sí misma, su valor está en proporcionar los medios para conseguir otros bienes. Por ejemplo, educar la inteligencia no persigue tanto la posesión del saber, como proporcionar a la persona los medios para que alcance el saber por sí misma. Hubert termina definiendo la educación del modo que sigue: "La educación es el conjunto de las acciones e influencias ejercidas voluntariamente por un ser humano sobre otro; en principio por un adulto sobre un joven, y orientadas hacia un objetivo que consiste en la formación juvenil de disposiciones de toda índole, correspondientes a los fines para los que está destinado, una vez que llegue a su madurez" (p. 4). 4.2. Características de la educación. Otros autores se han aproximado a la idea de educación tratando, en primer lugar, de describirla descubriendo sus notas características, enumerándolas y explicando cada una de ellas (cfr. Ferrández y Sarramona, 1985; Castillejo Brull, 1983; Sanvisens Marfull, 1.987; García Aretio, 1.989; Casares García, 1990). Las más comunes son las siguientes: Perfeccionamiento.- Educar supone mejorar, optimizar: Llevar a la persona de una situación presente -real-, a otra situación distinta, futura e ideal -modelo, patrón-, de acuerdo con sus propias capacidades y con las peculiaridades socio-histórico-culturales. La educación crea hábitos positivos y neutraliza los negativos, desarrolla nuestras facultades potenciales y las actualiza, es decir, nos coloca en situación de pasar de una situación presente a otra, futura, que se considera mejor, más valiosa, por tanto, lo que es mejor o bueno lo definimos de acuerdo con valores. Esto exige de los responsables de la educación considerar y definir qué es lo óptimo y explicitar y definir los valores que definirán el modelo de persona educada. 17 GARCÍA HOZ, V. (1981): Principios de Pedagogía Sistemática, Madrid, Rialp, p. 25. 6 Finalidad.- La idea de perfeccionamiento exige plantearse qué es lo que se desea alcanzar: qué es lo bueno, lo mejor, lo más perfecto, lo óptimo, el estado definitivo al que deseamos aproximarnos. La educación pretende la realización del ser humano: que llegue a ser lo que puede y debe ser, que alcance su plenitud. Y ello se define, como hemos dicho, a partir de unos valores que se eligen, "de un cuadro axiológico18 que hace deseable el fin propuesto y constituye la base que orienta el proceso educativo" (Casares García, 1990). Un fin de la educación se elige porque se considera valioso. En la medida en que es valioso, cuando dicho fin se alcanza, la persona se perfecciona. La subjetividad en la opción por lo axiológico hace que no haya unanimidad en la elección de los fines de la educación: "la opinión en torno a su determinación no es unánime, así como tampoco la prioridad de unos sobre otros en torno a la consecución de la perfección humana. No obstante, una realidad ha estado siempre patente: no se puede educar sin finalidad. Se podrá discutir si los fines los determina el Estado, la familia o el mismo sujeto; si lo biológico precede a lo espiritual, o a la inversa; si fundamentalmente la educación es individual o social, si la finalidad radica en el sujeto o fuera de él, etc. De lo que no cabe discusión alguna es del sentido teleológico de la educación, sea éste cual sea. La historia nos enseña cómo a través de los siglos unas finalidades han prevalecido sobre otras, unos valores sobre otros. La filosofía dominante, el poder político en turno, las creencias religiosas, etc., han sido siempre y son elementos históricos condicionantes de la teleología educativa"19 (Gervilla Castillo, 1987: 333). Intencionalidad y propositividad.- Propositividad20 es un término relacionado con "propósito". Hablar de finalidad hace presuponer un propósito de alcanzarla, y un propósito es siempre deliberado y consciente, es decir: intencional. La presencia de finalidades nos mueve a buscar los métodos y los medios necesarios para alcanzarlas. La educación se planifica porque deseamos conseguir el fin propuesto. Por tanto, el proceso educativo no es involuntario, sino deliberado, intencional. Ello distingue la educación de la de la mera evolución psicofísica y nos la define como artificio que transforma en cierto sentido la naturaleza humana, en este sentido, la educación "es algo que se adquiere y con lo que no se nace; algo que no se puede confundir con la naturaleza del hombre" (Castillejo, 1.978: 17). La intención debería ser compartida por educador y educando lo que supone consenso, comprensión y/o aceptación de los fines y la búsqueda de los medios por parte de ambos. Ríus y Cánovas señalan que "la propositividad supone conocimiento de la meta o patrón a alcanzar, así como el deseo de alcanzarla, para lo cual, tanto el sujeto que se educa, como el interventor establecerán los instrumentos, técnicas y normas para conseguirlo"21. Sin embargo, en palabras del profesor Castillejo (1.978: 21): "Rigurosamente, la intencionalidad reside en el sujeto que se educa y en los primeros estadios de la vida no puede haberla. Esta, entonces, es suplida por el educador y progresivamente debe ir adquiriéndola el sujeto, a medida que se hace presente lo que antes no era perceptible". 18 Axiología.- Teoría general de los valores que trata de determinar la naturaleza y carácter de los valores y de los juicios de valor. Valor.- "Aquello que todos pretenden, lo que rompe su indiferencia y les mueve a obrar" (Marín, 1990: 172). 19 GERVILLA CASTILLO, E. (1987) Los fines de la educación, hoy. Revista de Ciencias de la Educación, nº 131, pp. 333-339. P. 333. 20 AZNAR, P. (coord.) y otros (1999): Teoría de la Educación. Un enfoque constructivista. Valencia. Tirant lo Blanch, pp.28-29) 21 Rius, M. y Cánovas, P. (1999) Concepto y características de la educación, en Aznar, P. y otros. Teoría de la Educación. Un enfoque constructivista. Tirant lo Blanch, Valencia, p. 29. 7 Humanidad.- La educación es una actividad humana cuyo destinatario es la propia persona. Se dirige a la totalidad del ser humano pero, sobre todo, el rasgo "humanidad" se refiere a aspectos intelectuales y volitivos, racionalidad y voluntad. La humanidad de la educación viene dada, además, por el hecho de ser consciente de la educación misma: Yo sé que tengo intención de educar como puedo y también tengo derecho a saber que se me educa. Esta conciencia de lo educativo está vinculada a lo teleológico y a lo intencional, situando a la educación por encima de lo meramente biológico y de lo meramente ambiental. Por último, la educación tiene presente la dignidad de la persona, el respeto que, en cuanto persona, se le debe a cada ser humano. Influencia.- Tal como deja entrever el sentido etimológico de "educare", la educación es influencia porque supone acción de una persona sobre otra que experimenta los efectos de esa intervención. Ahora bien, no toda influencia es educación, por ello, como ya hemos señalado, el educando, debe tener conciencia tanto de la finalidad que se persigue, como del tipo de intervención y las consecuencias que tendrá todo ello para el educando, y estar de acuerdo con lo uno y con lo otro. Integralidad.- El ser humano es un todo integrado, una unidad, y es el ser humano a quien se educa, la educación debe dirigirse a perfeccionar la totalidad de sus dimensiones (física, intelectual, social, moral, afectiva...). Cuando hablamos de integralidad queremos decir, pues, que la educación debe afectar a todas las dimensiones de la persona. Sin duda, es necesario instruir en materias disciplinares, cultivar el saber e incrementar el bagaje cultural y la preparación técnica de la persona; pero a éstos deben unirse otros objetivos para que la educación sea integral. ¿Cuáles son los objetivos fundamentales de la educación integral?: El desarrollo corporal y el aumento de las resistencias orgánicas Enseñar a la persona a comunicarse y convivir con los demás. Enseñar a la persona los principios básicos de moralidad y solidaridad; el desarrollo de la capacidad intelectual y formación científica; la formación estética, económica y religiosa (...). En definitiva, el fin de la educación es el desarrollo de la totalidad de la persona"22. Numerosos documentos internacionales y nacionales se han referido a la educación integral. En la LOE23, que es la ley orgánica de educación vigente en la actualidad en España se señala: A) “Entre los fines de la educación se resaltan el pleno desarrollo de la personalidad y de las capacidades afectivas del alumnado” Preámbulo. B) Artículo 2. Fines. 1. El sistema educativo español se orientará a la consecución de los siguientes fines: a) El pleno desarrollo de la personalidad y de las capacidades de los alumnos. C) Disposición final primera. Modificación de la Ley Orgánica 8/1985, de 3 de julio, reguladora del Derecho a la Educación. (…) El artículo 6 de la Ley Orgánica 8/1985, de 3 de julio, reguladora del Derecho a la Educación, queda redactado de la siguiente manera: (…) 3. Se reconocen a los alumnos los siguientes derechos básicos: a) A recibir una formación integral que contribuya al pleno desarrollo de su personalidad. Los educadores profesionales han de disponer de modelos de educación integral que les ayuden a diseñar sus programaciones para intervenir en el aula de manera que todas las 22 ESCÁMEZ SÁNCHEZ, J. (1985): Autorrealización personal fin fundamental de la educación, en: Castillejo, J.L., Escámez, J. y Marín, R.: Teoría de la Educación, Salamanca, Anaya, pp. 87-98, pp. 89-90. 23 LEY ORGÁNICA 2/2006, de 3 de mayo, de Educación. (BOE n. 106 de 4/5/2006). 8 dimensiones de la educación estén recogidas en las mismas. Esto es de tal importancia que se considera entre los criterios de calidad de la educación. Anticipamos aquí uno de estos modelos24, que será desarrollado en el tercer tema del programa, destinado exclusivamente a la educación integral. Comunicación.- La educación es una relación interpersonal por la que (1) alguien (emisor/educador) transmite a (2) alguien (receptor/educando) un determinado (3) mensaje (contenido educativo) mediante un (3) canal apropiado (medio), con la (4) finalidad de mejorar al destinatario en algún aspecto. Actividad.- La educación implica acción. En cuanto proceso, deben concurrir en ella la actividad del educador y la actividad del educando; lo activo tiene, pues, un doble sentido: Atendiendo a la función del educador, que trata de influir sobre otros y favorecer en ellos procesos perfectivos sistematizados, es decir, estructurando en ellos ideas, necesidades, actitudes, etc., para presentarlas de modo ordenado y coherente. Ello está en relación con el diseño de una programación de aula que abarca desde el establecimiento de objetivos, contenidos, actividades, temporalización, medios, y evaluación, hasta el feed- back que revisa todo el proceso. Atendiendo a la función del educando, desde un planteamiento mas tradicional éste no sólo recibe informaciones, sino que las decodifica, las clasifica, establece relaciones con informaciones previas, las aplica..., en definitiva, las integra activamente en una estructura personal. Desde un planteamiento próximo al de la Escuela Nueva, se espera de 24 GERVILLA, E. (2010) Educar en la postmodernidad, Dykinson, S.L., Madrid., pp. 50-64. 9 los maestros que propongan actividades a partir de las que los niños adquieran experiencias con las que irán desarrollándose y construyendo el aprendizaje. Según la idea de educación funcional el proceso de aprendizaje sigue el siguiente esquema: necesidad interés motivación acción aprendizaje Proceso gradual.- La educación, como se ha señalado, pone en juego la dinámica proceso/producto, de tal manera que cada producto que se obtiene es un logro que permite alcanzar el logro siguiente. Se alude aquí a la necesidad de presentar los contenidos de instrucción de lo fácil a lo difícil, de lo particular a lo general, de las estructuras simples a las complejas, de la realidad próxima a la remota, a la necesidad de adquirir en primer lugar los conocimientos que son fundamento de otros. Socialización.- El hombre es un ser que vive en sociedad. Como hemos visto, los grupos sociales (nación, estado, familia, iglesias...) tratan de transmitir su cultura (lenguaje, costumbres, creencias, normas de conducta, conocimientos, habilidades...) a sus miembros. En este sentido, la educación es socialización. Este proceso salvaguarda la identidad del grupo y adapta al individuo para que viva en él estableciendo relaciones satisfactorias con sus semejantes y participando como miembro activo y productivo. Continuidad.- La educación es un proceso permanente. Si a través de ella buscamos el perfeccionamiento de las personas, mientras exista la posibilidad de mejora en el individuo, puede y debe haber educación. Puesto que el hombre está permanentemente inacabado, la educación puede abordar todas las etapas de su vida, en todos ellas tendremos y sentiremos necesidades que pueden resolverse con nuevos aprendizajes. Autorrealización.- La educación conduce al hombre a su propia autonomía. Una vez alcanzado cierto grado de madurez, la persona, a partir de sus necesidades e intereses traza sus propias finalidades educativas, busca los medios para alcanzarlas, se aproxima al ideal decidido por sí misma...: se ha convertido en su propio educador. Se podría decir que la persona ha dado el paso de la dependencia a la independencia, de la rigidez al proceso de cambio que ha deseado, elegido y al que ha dado sentido perfectivo, tratando de favorecer su desarrollo integral. Llegados a este punto, a partir de las características de la educación que hemos visto, y tratando de recoger el mayor número posible de ellas, se pueden construir definiciones como las siguientes: “Proceso de optimización integral e intencional del hombre, orientado al logro de su autorrealización e inserción activa en la naturaleza, sociedad y cultura"25. "Actividad humana intencional que persigue el perfeccionamiento integral de la persona de acuerdo con un marco axiológico de referencia"26. 5. Criterios para analizar si un proceso es educativo o no. Cuatro criterios pueden ayudarnos a diferenciar si un proceso es o no educativo: Criterio del contenido, criterio de la forma, criterio del uso y criterio de equilibrio27. 5.1. El criterio del contenido. - Lo que se enseña (contenido), debe ser valioso y, en todo 25 GARCÍA ARETIO, L. (1.989) La educación, teorías y conceptos. Perspectiva integradora, Paraninfo, Madrid, p.26. 26 CASARES GARCÍA, o.c., p. 45. 27 ESTEVE, J.M. (2010) Educar: Un compromiso con la memoria, Octaedro, Barcelona. pp.19-28. 10 caso, coherente con los valores morales que admitimos. Sólo es educativo y, por tanto, deseable y admisible, enseñar y aprender contenidos moralmente irreprochables. Por ejemplo enseñar a cometer un delito, o a creerse superior que los demás por pertenecer a determinada etnia o por tener mejor posición económica, va en contra de este criterio. Nadie pensaría que es educativo alguno de los aprendizajes señalados en el ejemplo, sencillamente porque el contenido que se aprendería no es moral. De acuerdo con este criterio, educación es un proceso que se realiza de acuerdo con lo que se estima valioso y ha sido transmitido de forma moralmente inobjetable. 5.2 El criterio de la forma. - Un proceso, para ser considerado educativo, debe respetar la libertad y la dignidad de la persona. Las actitudes y métodos de los profesores en las relaciones con sus alumnos –o de los padres con sus hijos– también dejan huella en las personas. Métodos disciplinarios como el castigo, la coacción o el condicionamiento, pueden ser muy eficaces para que alguien aprenda determinados conocimientos, pero también muy contradictorios con el crecimiento del ser de la persona e incluso contraproducentes en la medida en que se imiten justamente las mismas conductas que se padecen. 5.3. El criterio del uso. - Un aprendizaje sólo es educativo cuando la persona lo integra en sus esquemas conceptuales y es capaz de aplicarlo en la práctica, es decir, de “usarlo”, de ahí la denominación del criterio. Es decir: “no calificamos de educativos aquellos aprendizajes en los que el alumno repite algo que no entiende y que no sabe cómo usar; o, mejor, en positivo, que para calificar de educativo un aprendizaje, el alumno debe desarrollar algún tipo de esquema conceptual propio sobre lo aprendido, a partir del cual pueda usar el contenido que acaba de aprender con ideas propias, incorporándolo a su forma personal de entender el mundo o de entenderse a sí mismo”28. 5.4. El criterio de equilibrio se refiere a un desarrollo razonable y armónico de las diversas dimensiones de la persona. No ha de haber desarrollo exagerado de alguna dimensión, desproporción de un aspecto de la persona frente cualquiera de los otros. No calificaríamos de educado al niño con excelentes notas, pero tímido y carente de habilidades sociales, o, en el extremo opuesto, impertinente y caprichoso en el trato con los demás. No consideramos bien educado a quien cultiva su cuerpo, pero no su inteligencia; ni a quien tiene gusto por las artes, pero no respeta su turno en la cola para entrar concierto o trata violentamente a los demás. En el plano de lo intelectual, el equilibrio requiere enseñanza de los campos fundamentales del saber (educación general); sólo en una estructura general de conocimiento, que debe permanecer y actualizarse, se puede plantear la especialización. 6. Términos afines a la educación La idea de aprendizaje es central en este epígrafe. Educarse es siempre aprender alguna cosa. En torno a la idea de aprendizaje existen términos cuyo significado conviene precisar, ya que se trata de procesos diferentes con resultados también diferentes en la práctica. Algunos de ellos ni siquiera son compatibles con la educación. En este apartado nos referiremos a los siguientes: Aprendizaje Instrucción: Adiestramiento Enseñanza Entrenamiento Manipulación: Condicionamiento Formación Adoctrinamiento Educación 28 Ídem, p. 25. 11 Todos estos términos hacen referencia al aprendizaje. El aprendizaje es un resultado final, un logro que se consigue a través de ellos. 6.1. Aprendizaje.- ¿Cuándo hemos aprendido algo? Cuando hemos incorporado nuevos conocimientos o nuevas destrezas, una forma distinta de relacionarnos con el entorno o de manejar nuestros sentimientos. El aprendizaje es saber, saber hacer, saber ser, saber estar en el mundo, saber relacionarse y saber comportarse. Delclaux lo ha definido como un "Proceso mediante el cual un sujeto adquiere destrezas o habilidades prácticas, incorpora contenidos informativos o adopta nuevas estrategias de comportamiento y/o acción29". Esta idea de que el aprendizaje proporciona nuevas estrategias y modos de acción se encuentra también en las definiciones de Georges Miller: "cambio adaptativo en el pensamiento o la conducta", así como en la de Hilgard y Marquis30 según la que aprendizaje es un "cambio permanente en la conducta del sujeto que ocurre como resultado de la práctica". La capacidad de realizar nuevas conductas es justamente lo que indica que el aprendizaje se ha producido: se produce aprendizaje cuando una experiencia modifica de manera concreta una forma de conducta (Foppa) El aprendizaje siempre está presente en la educación pues no tiene sentido decir que alguien se educó sin aprender nada. Sin embargo, no todo lo que aprendemos nos educa. Hay aprendizajes que no son educativos. ¿Cómo comprobarlo? Recurriendo a los criterios de contenido, forma, uso y equilibrio. 6.2.- Enseñanza.- Es el proceso y la actividad mediante el que una persona pretende inducir un aprendizaje en otra. En el mundo académico, es la actividad del profesor que espera, como buen resultado, inducir aprendizaje en los alumnos. Lógicamente, para considerar que la enseñanza forma parte de un proceso educativo, debe realizarse de acuerdo con los criterios que se vienen señalando: Transmitir contenidos moralmente inobjetables, respetar a la libertad y la dignidad de la persona, ser acorde con sus capacidades racionales. La intención de quien enseña debe ser promover un aprendizaje que perfeccione a la persona tanto a través de los contenidos que se transmiten como a través de los medios que se emplean para enseñar, de la relación educativa, de los climas de aula, etc. Sólo es de calidad una intervención en la que la enseñanza contribuye al logro del aprendizaje esperado, en este caso, la relación entre enseñanza y aprendizaje es de causa/efecto, siendo causa la enseñanza y efecto el aprendizaje. Tanto la enseñanza como el aprendizaje pueden ser educativos o no. Cada caso ha de analizarse de acuerdo con los criterios expuestos en el punto 5. Un proceso de enseñanza/aprendizaje que no es educación es la manipulación, que estudiamos en el apartado siguiente. 6.3.- Manipulación.- En los procesos de manipulación, las personas adquieren respuestas nuevas o modifican su conducta influidas por un agente exterior, sin percibir lo que realmente pretende quien le influye. El manipulador oculta parte de la realidad en beneficio de la finalidad que persigue, de tal manera que la persona influida, si lo supiera, rechazaría la influencia y el fin que persigue. "La acción de manipular incluye toda una serie de procesos tendentes a que el sujeto manipulado adquiera, inducido por un agente externo y en provecho de éste, unos esquemas mentales y pautas de acción 29 DELCLAUX, I. (1988) Aprendizaje. Diccionario de las Ciencias de la Educación. Sánchez Cerezo, S. (dir.). Madrid, Santillana, 116-118. 30 HILGARD, E. R. y MARQUIS, D. G. (1969) Condicionamiento y aprendizaje. Trillas, México. 12 determinados"31. Los procesos manipuladores no se fundamentan en la racionalidad de la persona, sino que la impiden o anulan suscitando emociones como el miedo, el odio, etc. u ofreciendo una parte de la realidad distorsionada o parcial, bien por omisión o descalificación de otras partes; bien ocultando sus motivaciones y objetivos. La intención del manipulador es conseguir "adeptos de sus convicciones, haciéndoles repetir ideas y pensamientos ajenos" (Esteve, 1983), en este sentido en-ajena a las personas, y esta enajenación sustituye al desarrollo personal en que consiste la educación, por lo tanto, la manipulación no es educación. La intención de manipular es fundamental para diferenciar procesos educativos de procesos de manipulación. Hay dos formas de manipulación: condicionamiento y adoctrinamiento. 6.3.1. Condicionamiento.- Condicionamiento es el aprendizaje de una respuesta invariable, inducida mediante la repetición de estímulos pero en la que no hay correspondencia entre estímulo y respuesta. Es bien conocido, en este sentido, el experimento de condicionamiento clásico de Pavlov con perros. A modo de ejemplo, supongamos, que se desea crear en una persona una disposición permanente a comportarse de determinada manera, pongamos que hacia el trabajo cooperativo. Supongamos también que, para lograrlo, se le aplican descargas eléctricas cada vez que el comportamiento no es el esperado. Tras cierto número de descargas y por el reflejo de evitar el dolor, la respuesta será de cooperación en el trabajo. Sin embargo, difícilmente pensaremos que quien ha sido sometido a un proceso semejante es ahora más educado; simplemente responde de forma automática por un reflejo condicionado, pero no es probable que pueda justificar su respuesta de una forma razonable relacionada con los beneficios del trabajo cooperativo, con lo que se incumple el criterio del uso. Otro tanto sucede con el criterio de la forma porque el procedimiento no respeta la libertad y la dignidad de la persona que aprende. 6.3.2. Adoctrinamiento.- Es una transmisión de doctrina que se realiza con un sesgo ideológico. Según White hay dos criterios para descalificar este tipo de aprendizaje: a.- La intención del agente de implantar sus propias convicciones ideológicas de forma inamovible, para lo que no las fundamenta en razones que puedan inducir a la crítica. b.- La parcialización del contenido aprendido, presentando sólo aquellas ideas que favorecen las convicciones del agente, y eliminando o descalificando las contrarias. En cuanto al método, el adoctrinamiento se consigue dirigiéndose a la emotividad, sentimientos e instintos de la persona; nunca a su inteligencia, inculcando creencias a través de lo irracional32. Este tipo de aprendizaje no es educación porque a) no hay en la persona comprensión de las razones en las que se fundamenta lo aprendido; b) por un criterio de apertura intelectual no puede aceptarse un aprendizaje que restringe a las personas el conocimiento y la comprensión y que, por lo tanto, es deformante; y c) se han seleccionado contenidos unilateralmente, escogiendo los que convienen a las convicciones ideológicas del agente que pretende reproducirlas en otra persona, se ha producido un sesgo en la realidad. 7. Instrucción. - En ocasiones, pueden realizarse aprendizajes sin justificación racional que son compatibles con la educación. A veces porque son datos (nombres, fechas...); a veces 31 PÉREZ ALONSO-GETA, P.Mª (1990), Manipulación. En: VVAA. Filosofía de la educación, hoy, Dykinson, Madrid, p. 143. 32 Vid. Pérez Alonso-Geta, P. o.c. 13 porque son convenciones básicas (símbolos matemáticos, terminologías específicas...); a veces el profesor omite momentáneamente la justificación racional, pero no con la intención de manipular, sino porque sabe que confundiría a sus alumnos innecesariamente con una explicación que no llegarían a comprender porque está fuera de su alcance. Este tipo de aprendizajes es lo que llamaremos instrucción. Aunque puede ser la base para el desarrollo posterior de esquemas conceptuales que darán al aprendizaje una justificación racional, la instrucción no requiere el desarrollo de tales esquemas, sino que es ejecución automática de una tarea aprendida33. En opinión de Esteve34, siguiendo a Peters (el criterio de uso) y Hamlyn, la instrucción es aprendizaje, pero, esencialmente, no es educación porque se trata de un aprendizaje memorístico, sin ningún tipo de esquema conceptual que permita organizar y dar sentido a lo aprendido, limitándose a una práctica automática con nula activación de la inteligencia mientras se realiza. En coherencia con el criterio del uso, que explicita la elaboración de esquemas conceptuales aunque no se opone a la educación no podemos considerar que la instrucción lo sea. Adiestramiento y entrenamiento se consideran un caso especial de instrucción. 7. 1. Adiestramiento.- No se trata de aprender datos de conocimiento, sino una destreza para realizar una tarea concreta de manera automática, sea escribir en un teclado, tocar un instrumento musical o cambiar las marchas de un coche. El dominio de este tipo de destrezas termina, después de una etapa inicial de esfuerzo, con la adquisición de automatismos que requieren una atención y un esfuerzo voluntarios muy distintos que los que precisaban al principio. Cualquiera que escriba a máquina, conduzca un coche, o toque un instrumento musical puede comparar la atención y el esfuerzo voluntario que necesitaba al principio y el que necesita ahora. Sus características definitorias: 1. Se trata de aprender a dominar una tarea específica. 2. La imitación y la práctica repetida son indispensables para dominar la tarea. 3. Es irrelevante el desarrollo de esquemas conceptuales que justifiquen las razones que avalan los procedimientos que se enseñan. 7.2. Entrenamiento.- Sus características definitorias son las mismas del adiestramiento. La diferencia está en que “adiestramiento” tiende a usarse más cuando se trata de enseñar a animales, mientras que entrenamiento se suele usar referido a personas en la práctica de un deporte y conlleva esfuerzo físico. 8. Formación.- Según el diccionario de la Real Academia, es "acción y efecto de formar o formarse", definiéndose formar como: "Adquirir una persona más o menos desarrollo, aptitud o habilidad en lo físico o en lo moral". En el concepto de formación se encuentran tres elementos constitutivos: 1. Capacidad de reflexión. 2. Capacidad de valorar críticamente. 3. Sensibilidad para los valores estéticos. Un proceso que reúna estas tres condiciones es superior a la instrucción y ha alcanzado un aprendizaje formativo. En los procesos formativos la persona ha interiorizado esquemas conceptuales propios que pone en práctica utilizando los razonamientos y principios tecnológicos o científicos que los hacen aplicables a cada acción concreta. 33 Por ej., cuando aplicamos memorísticamente la fórmula que permite resolver ecuaciones de segundo grado o escribimos correctamente una palabra de acuerdo con una regla ortográfica o recitamos la lista de preposiciones. No podemos decir lo mismo de quienes conocen el proceso de demostración de esa misma fórmula, sabe el origen y sentido de las reglas de ortografía o sabe identificar una preposición por la función que realiza en el texto y el significado que aporta al mismo. 34 Esteve, 2010, o.c. pp. 40-43. 14 A través de un aprendizaje instructivo y superándolo, a veces "el alumno no sólo llega a saber algo, sino que también aprende una forma de investigar la realidad, una forma de valorar críticamente lo aprendido o una forma de disfrutar con ello; desarrollando en cada caso ideas propias sobre la información que se posee, sobre su valor objetivo para entender la realidad y sobre las satisfacciones que puede esperar del aprendizaje realizado"35. Se trata, en palabras de Peters («Education as initiation») de que "el conocimiento nos permite «viajar con una visión diferente» y no sólo con las maletas más llenas". En este salto cualitativo el conocimiento, organizado en esquemas conceptuales, permite usar los contenidos aprendidos con ideas propias, incorporándolos a nuestra forma de entender el mundo y de entendernos a nosotros mismos. PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN 1. Redacta un breve desarrollo (máximo de medio folio) sobre el tema Cultura y educación. 2. ¿Por qué en cada sociedad el modelo de persona que pretende conseguir la educación es diferente? 3. Educare y educere. Análisis de sus significados y reflexión en torno a sus consecuencias educativas. 4. Enumera las características de la educación. ¿Qué característica de la educación consideras de mayor importancia? Explica por qué. Defínela. 5. Describe cuatro situaciones, cada una de ellas relacionada, respectivamente, con los criterios de contenido, forma, uso y equilibrio. Indica si el criterio se cumple o no en la situación descrita. 6. A partir de lo estudiado en el tema, observa, reflexiona y comenta las imágenes siguientes. 35 Ídem, p.49. 15 7. Responde sí o no en las casillas correspondientes Educación Enseñanza Aprendizaje Le corresponde sólo al profesor, no al alumno. Siempre es perfeccionamiento. Es el resultado de la enseñanza cuando ésta es eficaz. Transmite siempre valores. Es posible que transmita antivalores. Puede ser un instrumento de manipulación. Es el resultado en el educando. Es moralmente inobjetable y deseable. Puede no producir perfeccionamiento. A la vista de tus respuestas y de otros contenidos que has estudiado ¿qué diferencia encuentras entre educación y enseñanza y cual es la relación de éstas con el aprendizaje? 8. Comenta la noticia “La letra con voltios entra”. http://www.elpais.com/articulo/ultima/JAPON/letra/voltios/entra/elpepiult/19921110elpepiult_1/Tes 9. Escribe tres afirmaciones sobre la educación deducidas del estudio del tema (conclusiones). BIBLIOGRAFÍA AZNAR, P. 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