Inserción Sociolaboral: Proceso, Recursos y Programas PDF

Inserción sociolaboral: proceso que conlleva un conjunto de acciones, recursos y programas para incorporar a personas en riesgo de vulnerabilidad social al mercado de trabajo, y por tanto, favorecer su integración social. El trabajo dignifica, por lo que da capital social, necesario para vivir en so...

Inserción sociolaboral: proceso que conlleva un conjunto de acciones, recursos y programas para incorporar a personas en riesgo de vulnerabilidad social al mercado de trabajo, y por tanto, favorecer su integración social. El trabajo dignifica, por lo que da capital social, necesario para vivir en sociedad. Factores que favorecen situaciones de exclusión o vulnerabilidad: vivir en un barrio desfavorecido Falta de redes familiares Bajos niveles educativos Violencia de género o infantil Discapacidad Cultura o etnia Renta por debajo de la media Cumplir una de estas características te hace estar dentro de uno de los siguientes colectivos vulnerables: discapacidad Desempleados por largo tiempo Personas con poca formación Personas en riesgo de exclusión social (PRES) Características de personas en riesgo de exclusión social: no llegar a la renta mínima o renta mínima Personas de 18 a 30 años en una ley de protección de menores Drogodependientes Personas en falta de libertad Personas que han sufrido violencia de género Menores de 18 en medidas judiciales MODALIDADES DE INSERCIÓN SOCIOLABORAL Se llevan a cabo para lograr insertar a las personas en la sociedad. Son las siguientes: modelo didáctico: el técnico es el protagonista y guía al demandante o usuario. Es un modelo tradicional o magistral. Modelo de asesoramiento: es protagonista tanto el técnico como el demandante. Acompañamiento más cercano. Es un modelo de asesoramiento y apoyo. Modelo centrado en los recursos: el protagonista es la persona demandante de empleo. La persona está desmotivada, es un proceso  de e ponderamiento y toma de decisiones. Se trata de sacar partido a los recursos del demandante. ENTORNOS LABORALES PROTEGIDOS 1. Centros ocupacionales: surgen a finales de los 60 por padres de personas con discapacidad intelectual. Inicialmente tenían una perspectiva docente o educadora, salida a jóvenes que dejan los estudios obligatorios y eran atendidos por maestros de educación especial. Actualmente la perspectiva es más profesional, y se visualizan estos centros como alternativa formativa, ocupacional y laboral para discapacitados intelectuales. Se realizan actividades ocupacionales con supervisión de profesionales especializados. Quienes participan (las personas con discapacidad) reciben una gratificación. 2. Entornos laborales protegidos: Modalidad de inserción sociolaboral (ISL) para que desempleados con discapacidad puedan trabajar. Los centros especiales de empleo y los enclaves laborales son dos modalidades que forman parte de los entornos laborales protegidos. centros especiales de empleo: realizan un trabajo productivo y aseguran un empleo a personas con discapacidad. El entorno está adaptado a los trabajadores. En estos centros mínimamente el 70% de la plantilla debe tener una discapacidad, el centro cuenta con compensaciones remuneradas por administraciones públicas y es promovido por una entidad pública o empresa. Enclaves laborales: fórmulas de contratación entre empresa ordinaria y el centro especial de empleo. Solo son admitidas personas que provienen de dicho centro. Contrato de máximo 6 años. EMPLEO CON APOYO Su origen se encuentra en Estados Unidos con David Mank en el año 1986. Su teoría era que las personas que provenían de centros especiales de empleo y habían sido expulsadas de las mismas podían desarrollar un empleo en una empresa ordinaria siempre y cuando contaran con un apoyo en ese proceso de incorporación al mercado de trabajo. Deben desarrollarse en un modelo de empleo con apoyo las siguientes acciones: orientación y acompañamiento Acercamiento entre persona con discapacidad y trabajador Desarrollo de habilidades sociales Enseñar y formar al trabajador  Evaluación del proceso y seguimiento Acompañamiento e informar a la empresa de la evolución del trabajador Los destinatarios de este empleo son: demandantes de empleo inscritos en los servicios públicos de empleo de su comunidad autónoma sin trabajo Trabajadores discapacitados que desarrollen su actividad en un centro especial de empleo (para ser considerado persona con discapacidad debe tener mínimo un 33% de discapacidad mental o mínimo un 65% de discapacidad física) El contrato en este empleo debe durar mínimo seis meses con una jornada del 50% del tiempo que establezca el convenio colectivo en cuestión. Cuentan con preparadores laborales para el desarrollo de las acciones propuestas. Deben tener formación y mínimo un alto de experiencia en procesos de inserción laboral e integración social. EMPRESAS DE INSERCIÓN SOCIOLABORAL Sociedades mercantiles o cooperativas que realizan una actividad remunerada de producción de bienes y servicios y que se plantean como objetivo la integración social o formación laboral de personas en riesgo de exclusión social. Es un vehículo de tránsito hacia el mercado de trabajo ordinario con acompañamiento sociolaboral. Los destinatarios son personas que cumplan con los siguientes requisitos: no llegar a la renta mínima o renta mínima Personas de 18 a 30 años en una ley de protección de menores Drogodependientes Personas en falta de libertad Personas que han sufrido violencia de género Menores de 18 en medidas judiciales Personas procedentes de servicios de prevención e inserción social autorizadle Personas procedentes del sistema de alojamiento alternativo Requisitos de las empresas de inserción: deben estar inscritas en el registro correspondiente a nivel estatal y autonómico Con o sin ánimo de lucro  3 primeros años el 35% de la plantilla deben ser personas en riesgo de exclusión social A partir del cuarto año serán el 50% FORMACIÓN Y TRABAJO Las modalidades e iniciativas de inserción sociolaboral relacionadas con los programas de formación y empleo se ubican dentro de las políticas activas de empleo en España y gestionadas por cada comunidad autónoma. Son las siguientes: Formación profesional para el empleo: dirigidas a personas trabajadoras o demandantes de empleo Formación de demanda: se le ofrece a las empresas, fórmulas de reciclaje de los trabajadores Formación en alternancia: se aprende y se pone en práctica Programa de garantía juvenil: para jóvenes de 18 a 30 años que busquen empleo y ni estudien ni trabajen. Se pone en marcha en España en 2014 coordinado por el SEPE y otras organizaciones del ministerio de la educación. Prácticas no laborables en empresas: jóvenes de 18 a 25 años que buscan tener una experiencia que no tienen. Realizan convenios con el SEPE, deben estar inscritos como demandantes de empleo y haber terminado una formación oficial. Las prácticas son se 3 a 9 meses y obtienen una beca de mínimo 80% IPREM. Prácticas no remuneradas en empresas: no tienen derecho a paro pero sí a jubilación. Hacen convenios con el SEPE. RECURSOS SOCIOLABORALES Y FORMATIVOS PARA PERSONAS CON DIFICULTAD DE INSERCIÓN SOCIOLABORAL formación profesional: formación encaminada a la adquisición de competencias técnicas necesarios para la inserción o incorporación en el mercado de trabajo. Dentro de esta se encuentran los títulos FP en el sistema educativo reglado y no reglado. Dentro del reglado están los ciclos de FP básica (desarrollados por la LOMCE en el año 2014/2015), grado medio y grado superior. RECURSOS PARA LA ATENCIÓN A MUJERES VÍCTIMAS DE VIOLENCIA. Estos están desarrollados por el instituto de la mujer y para la igualdad de oportunidades. Destacan: 1. Programas de colaboración con la empresa  2. Programas territoriales con entidades locales como los programas CLARA y AURORA 3. Programas sectoriales como SARA para la discriminación doble En Andalucía los planes dirigidos a este colectivo se articulan a través del distrito andaluz de la mujer. Las mujeres víctimas de violencia de género también son colectivos prioritarios en programas de servicio desarrollados por el SAE.