Un mismo árbol verde, Claudia Piñeiro PDF
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This document is a play about the dramas of a family. The play is titled "Un mismo árbol verde". The play is in Spanish
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' DRAMAS ,, UN MISMO ARBOL VERDE Espacio: mesa, una lámpara, Cuarto de Silvia, que ella usa también de escritorio: una orden, el desorden libros, papeles, car...
' DRAMAS ,, UN MISMO ARBOL VERDE Espacio: mesa, una lámpara, Cuarto de Silvia, que ella usa también de escritorio: una orden, el desorden libros, papeles, carpetas, una computadora encendida. Des música portá de alguien que trabaja con obsesión y desborde. Un equipo de pero sigue til. Es el cuarto de un adulto, que podría tener su propia vivienda viviendo con su madre. Cuarto de Dora: una habitación con una cama chica, en el espacio ganado a la cama matrimonial que ya no está hay un sillón y un televisor grande con video. En algún costado un biombo. El cuarto está obsesivamente ordenado. Cada cosa en su lugar, casi alineada. A un costado del cuarto está la cocina. División entre el cuarto de Dora y el de Silvia: Entre el cuarto de Dora y el de Silvia hay una pared imaginaría, podría estar insinuada por un velo, una tela semi transparente a la que las dos pueden acercarse pero no traspasar, o simplemente ser una división que no vemos sino a través de la acciones de los personajes. Nota: Antes de que empiece la acción se oye todo el tiemp o un viento intenso de d sierto, y cada tanto la melodía inconclusa de un duduk, como sí quien lo e1ecutara em ezara un acorde y se interrumpiera. Ambos sonidos, viento y duduk, se detienen cuando empieza el 1 er cuadro. 101 1. PAIABRAS ,._, he cerrada. El cuarto de Silvia iluminado y el de D ,,~ º~ª~ ·ta apMJada dorm' 1.,J en una mano y con el mate en /a otra, eI suefio curas. s·,1, 1 en medio de su tarea. Sobre el escritorio ha~ una caja de bombo:ª e11co~1 Envoltorios arru¡ados de bo~bonesya comidos _dentro y fuera de ;s ah¡e,,¡ ~ al'll,11ún rinc6n ¡anado al trabajo, hay una bandeja con un ermo. aCaja_ l: Si/. e cea y se despierta, se sobresalta, sefrota la cara y se empieza a "la Cahe. d ,. mover cuperarse. Se levanta y va aI equipo e muszca, busca un CD l Parare. O música Jol/elórica popular armenia (podría ser el Tamza~ y Pone. S14efla.. a o el K.4 a/t1o moderado pero ale¡re, a/¡o t¡ue invite al cuerpo a hoo 1Zake,.1 'll ,,. verse le" i, Silvia vuelve al escntorio eintenta retomar el trabajo Es ev;,, e11ien1e.. tUente que. neio de la computadora no es su fuerte. Primero para vence e/111a. 'J r aI suefio 11o como al¡o que le sale naturalmente , su cuerpo se mueve I Y/14e_ lJ , a compás música que suena.La danza le luce mas 9enuma que el tipeo s h de la o reeltecl,.1 Cada tanto jue9a con su pelo lar90 y enrulado. Se lo levama e "'"O. n un rode1 lo suelta.El pelo danza con el resto de su cuerpo. Lo vuelve aatar us e, se lapicerade pinche. Trabaja al ritmo de la música. Se sirve un"'" ªndouna "ff,f,tey lo ro Dora acostada en su cuarto, en penumbras, no lo9ra dormir. D. 111a.. ora enciefld ~~ e DoRA: Silvia, ¿podés apagar esa música y dormir de una ve > z. S11v1A: ¿Qué decís, mamá? DoRA: Que si podés apagar esa música y dormfr... Silvia obedece, se levanta y apaga la música. SILVIA: Apagar la música sí, dormir no... Vuelve a su Jugar, deja el matey come otro bombón. SILVIA: Si sabés qu. e tengo que trabaJar toda la noche, mamá. Mañana... 102 I - - a ala luz y se cubre con la frazada. Silvia se interrumpe un instante 00,aaP ,gue.~ como al principio, sólo queda encendido en el cuarto de Dora 5 0 YlrJeg ador ,nuy tenue' Ouna luz de noche, casi como la luz de una vela s.1... i via rJTI vel uenta deque su madre no quiere que le cuente de mañana, pero lo me-. se da ~ hablando como si ella pudiera escucharla. gaysigue. Illañana presento mi demanda. Todavía me falta correO'irla , rt&... b~ ' 51iv=· , ll. primirla... ¿Queres que te eve un mate? (Espera la respuesta que : llega) cualquier cosa pedime... Cua~do trabajo de noche yo sin el rnate ·· Para no comer... me da ansiedad traba1·ar de noche. e..,..1e acorda,sen la facultad? Por cada final engordaba dos O tres kilos... Después los bajaba fácil. Pero esas eran otras épocas, ahora los kilos se me instalan... Termina su mate y agarra otro bombón. SILVIA: y para colmo me regalaron bombones. ¿Querés uno, mamá? (Pausa) ¿Sabés quién? Lila Karkarian. ¿Te acordás de Lila, no? La sobrina de Koar. Me quiere ver gorda Lila Karkaian. ¿Te conté que le estoy haciendo el divorcio? Me ama, le estamos dando vuelta los bolsillos al marido. Me ama pero me quiere ver gorda, esas contra- dicciones que tenemos las mujeres. Sobre todo las armenias, ¿no?... Para colmo la nueva mujer del marido, o ex marido mejor dicho, se llama Silvia como yo... y por momentos a Lila se le mezcla todo y arma unos líos muy intensos... Después me termina regalando bombones... ¿Seguro no queres , ).... Silvia toma la caja, mira hacia el cuarto de su madre. Duda. Parecería que va a ir para allá a ofrecerle bombones pero se arrepiente y se termina comiendo el bombón. SILVIA: , si· me quedo El último... A primera hora la presento, mama,. · Sino voy a ser dormida despertame a las siete. Siete Ymed1ª me1or. 103. Le dan entrada y va a sorteo para que le a51. una zom b 1 &nen ; ) ·Cruzá los dedos que no me toque con eIJ·u Jllz&a- do ¿sabes. 1 , ez 1vr ' , Para mí es mufa Marnnez G1not. Yo ya th ªl'tínez Gmot, mama.1.- ( ¿,1e coJ ,. de la tira del corpmo... Busca la medallit, &ue uh san Expedno , adeba·0 ''. haciaa;,,erayledaunbeso) Despues para quep ~ des ropa,la tira ,; IN , ase al o 4 erque esperar... Eso sabes... ytenerpacien. _& con. creto va ahab , c1a...J la ansiedad... (Come otro bombon) Derecho Ustoy0 quememata. ada más... que nadie confunda gato por li b rdad, ªª½ 1 demando... n e re.sanos creen que enloquecí y quiero recuper ··· capaz nuestros Pal ar el lll0 Vi0 s los conocés... Sólo la verdad. Sólo eso y nte Ararat... ,.. ··· que tod o que paso por su nombre: genoc1d10. Escuch' os 11amen a l a, te le r¡ d !apantalla): Por todo lo expuesto a V.E, "ve e es VUestr 11 º··· \' ee e aexce}e. olicito que haciendo lugar a la presente demanda por d n- cia... s ,.. erecho al a fin de conocer cual fue el destino de mis f amiliaresy d l ª verdad, JI e PUebl0 intet1raban que 'lJ así como para conocer el lugar donde yacen sus ' restos(s traba pero enseguida retoma)... donde yacen sus restos y realiza I e.. re due- lo de acuerdo a mis creenc_zas, oportunamente se proceda a... y ahí pido todo lo que hay que pedir, ¿no?, apertura de los archivos in'10 ' rmes etc, etc... ' Sirve un mate y se acerca con él al lugar que separa su cuarto del de sumadre. Se queda en ese lugar, parada frente a esa pared imaginaria. SILVIA: Un mate, mamá, dale... Se queda con el mate extendido y como su madre no viene ni ella puede pasar del otro lado se lo termina tomando algo incómoda. SILVIA:¿Qué somos, mamá? ¿Armenios argentinos, o argentinos ar- menios? ¿Vos cómo decís? Para la diáspora somos armenios naci- dos en Buenos Aires... y en los documentos somos argentinos. Pero yo no digo eso, yo digo de verdad, sin papeles ni diáspora de por medio, ¿qué somos?... Me gustaría que hubiera una palabra que 104 \ \ u.Jinbrara. Una sola. Pero no h 110s I. ay. No s 1113 sola palabra. Argentinos e nos pued(' ~vº L. con rnerno. nornbrar maría as1 pero eso me lleva 'rue na armenia I1a1 ·. \ ' nta t'n el. ··· yo nw..m>nrina --:1,~- con memoria armenia ,..... ,endriarnª'~) Cltat1-o p b aIa ras: labra, la que nos nombre. A vos. a. os que invenrar ~ pa rn1. Y a Anttsh. t:sa. mto5¡fi1ü1 nombra ,i Anush. Dora apc1.. f71 Lll 9a e1unito tie/ d _1:1vvst'tapat mira las manos y llora pero sin aspavientos, apenas /ágrin&4s que le recomn la cara sin que ella haga nada ni por que salgan ni por impedirlo. S1 tv1A: No hay palabra para nombrarte, ni tumba donde llevarle flo- res a mí hennana. Dora st tmpitlA a acariciar las manos otra vez obsesivamente, recorre cada plie9tu, la junta~ les dedos, las arrugas. DoRA: Mis manos no conocen la arena Mamá se pasaba horas ha- ciendo esto Era el único momento en que se podía sospechar en 124 - \ teza Yo le preguntaba, " ¿que, haces, , mama."· ') o de tris. 0 joS alg d ,, y seguía frotando una mano con la otra. Yo sl.1S , "na a y eUa ¿eci: Se sacaba la arena. Como si todavía tuviera metida , hacia. l - , d d , sé que atolia dentro, no en as unas, mas a entro to avia, "4)na de An. ,.. 1a ªl". M má nunca pudo precisar cuanto uempo caminaron l piel. a. bajo ª. rto antes de llegar a Jerusalem. Caminaron los seis un e desie en es. que ella no podía contar como se cuenta el tiempo. 0nernP0 , targ lo contaba en tumbas. "El dia que tengas que cavar con E tonces n anos la tumba de tus hijos, ese día vas a saber lo que es el \ túS l1l r" Debería haber naciºdo manca yo... de que, me s1rv1eron.. estas i3a... s·i no h ay cuerpo, dolo. i no pudieron cavar l a tumb a d e m1. h.. S manos tumba. Entonces que no haya manos... no haY De ·ade acariciarlas, se aprieta las manos con bronca. Se clava las uñas. Se /a:tima. Llora. Las manos se reconcilian con ella secándole las lágrimas. DoRA: Mamá sí pudo. Cavó tres tumbas con sus manos en el desierto de Anatolia. Solo se salvó Agop, el menor, mi hermano. Pero Agop era muy chico para ayudarla a cavar. Y a mi padre las lágrimas le habían quitado la fuerza. Vartení cavó, porque no iba a dejar que los cuerpos de sus hijos se pudrieran al sol como les hubiera gustado a los turcos. ¿Dónde se habrá podrido el cuerpo de mi 1 hija? ¿Qué gusanos la habrán comido? ¿O estará en el lecho del río, \ oscuro y frío? Mi madre pudo darles cristiana sepultura, aunque sus manos sangraran, aunque la arena de Anatolia se le quedara incrustada en el cuerpo para siempre. En esas manos. Mientras mi padre lloraba, y Agop temblaba, mi madre cavaba tumbas en el \ 1 desierto. \ Silvia se levanta y pone otra vez la música del Tamzará. Se acerca al velo. \ 1 SILVIA: ¿Bailás conmigo, mamá? 1 125 T la mira deja de llorar, habla con firmeza. Levanta la cara, ,. casa ya no se baila... DoRA· Enm1 ·. e que yo te enseñe el baile que olvidaste... SILVIA: 0 eJam D. No quiero recordar. oRA. M tzma me enseñó a bailar a escondidas tuyas SILVIA: La e... Silvia baila. Hay que dar pasos pequeños, solo los hombres pueden d SILVIA: ar os largos y en esta casa no hay hombres Para 1as 1 y Pas satos ·. ··· mujeres pasos pequeños. Sensuales y graciosos, pero sutiles. Casi tímidos. Algo así, ¿ves? DoRA: No quiero ver... SILVIA: casi como si uno estuviera patinando. Y si es posible luego de cada paso, una pequeña pausa, imperceptible, como si el tiempo se detuviera un instante apenas, ese instante, y fuera la danza quien despertara al tiempo para dar ün próximo paso. Así, ¿no, mamá? Para los hombres el movimiento es más brutal, con el ritmo mucho más marcado. Ellos representan la fuerza, son los guerreros. Las mujeres armenias no. Nuestra fuerza es otra, no tiene nada que ver con la guerra nuestra fuerza. Baila alrededor de su cuarto. SnvIA: Otro error muy común, el secreto de la danza no está en la cadera corno en otros bailes. Está en los brazos, y en las manos. Los brazos se extienden en el aire, dibujando ondas, como el viento. Jugando con el viento. Las manos y los dedos también hacen su propio movimiento, una caricia. ¿Me sale?... Las manos imitan pá- jaros. La cabeza y los pies apenas acompañan. Quien guía al grupo lleva un pañuelo que prolonga el movimiento de sus brazos. 126 critorio y toma una servilleta de la bandeja que usa com ca ª l eS o un 5et1cer strando lo que acaba de decir. "uelo ,no pall. con los brazos te extendés para darle la mano a otros arme- 5riv~· ara formar una cadena de brazos. La diáspora. "Cuando 11105, p , bailás renés que pensar que estas celebra~do la vida", me decía la Jll a "de eso se trata, de celebrar la v1da Eso decía tu mama' 11 M~' ' mamá. ahacia ta pared. Extiende su mano hacia su madre, pero su madre no se Vi.,8 p,a,usa. Silvia espera, y luego vuelve a bailar por su cuarto muev.. SILVIA: Nunca llegamos a armar el semicírculo. Una vieja y una niña no alcanzan para armar un semicírculo. Me hubiera gustado que la Metzma me enseñara cuando le enseñó a Anush, entonces la casa se llenaba de primas y bailar era una fiesta. Tenés razón, mamá, la nuestra fue siempre una casa de mujeres, aunque entonces estuvie- se papá. Me tocó aprender en otra época. La abuela me enseñó el baile a escondidas, cuando vos no estabas. Apurándonos para que no nos encontraras en medio de una danza. Cuando bailaba Ansuh era todo distinto, ¿no es cierto? Pero yo era demasiado chica. La abuela les apagaba el televisor y les decía: "Vengan que yo les voy a contar una historia mucho más interesante que esa novela Y 11 sentaba a sus nietas alrededor de ella, y les contaba. De Armenia, del desierto, del viaje en barco hasta la Argentina. Siempre tenía una historia para contar. Y después ponía un disco negro de vinilo en el tocadiscos, ¿te acordás del Wincofon que teníamos en Valen- tín Alsina, mamá? ¿Dónde fue a parar ese Wincofon? Y las primas bailaban. Todas las mujeres de la casa bailaban. Hasta vos bailabas la danza de la abuela.. bai·1a en si·1encio. Si·¡via. Do""a , , la m;""ª ,,, , Silvia se acerca a su madre de a poco, cruza por primera vez del otro lado. 127 suerte cuando tuve edad para bailar An Yo no tuve esa ,. Ush SILVIA: h b'as prohibido el baile. Pero la Metzma n Ya b y vos a 1 o te h· no esta a , II aste de la calle y nos encontraste bailanct izo Und1aque eg. ºtneen caso... y empezaste a los gritos con la abuela G. - ' re en m1 pieza. ruaba cerras , odéstenerganasdebailar,mamá?"."·Y., s loca "¿Comop < qu1ente como · asi". ";Por qué bailás entonces? "Porque s·i. 11 1 ¿··10 ue rengo gan · ". , 1v1a J q d r" "En esta casa no se baila mas". "Bed q tiene que apren e ·,... ),, ". Uevor "·Qui·en dice que hay que v1v1r.. Dios lo ct· b ·m Dora". < ' ice". a ri ' ,. hablas! ¿Del tuyo? ¡Aborrezco a tu Dios qu "·De que Dios me e se 1 , h" 1,, "Deberías agradecerle que te haya dado otra a tu llevo a m1 IJª·. ,... , itarte a Anush". "La umca h1Ja que quiero es 1 edad, antes de qu. , a , no quiero otra". Grnaste muy fuerte mama, gritaste que se 11evo,..,. 1 "no quiero otra hija" y después se s1nno el rmdo de un cachetazo -el que te dio la Metzma-, un portazo, y ya no escuché más. Pausa. Se miran, se sostienen la mirada. Silvia se aleja y otra vez se mueve por el cuarto. SILVIA: La danza armenia dibuja un semicírculo. Cuando la danza es mixta el que dirige es un hombre. Pero en nuestra danza no había hombres, entonces dirigía la Metzma. Yéramos sólo dos. Entonces la abuela traía mis muñecas, las sentaba en el piso formando la cadena y jugábamos a que también bailaban y extendían sus bra- zos. "¿Y si viene mamá?", le pregunté una tarde que quiso bailar después de aquella cachetada. "Bed quevor abrim me dijo. Ybailó. 11 , Silvia sigue bailando. Dora la mira. DoRA·· Mi mamá baT 1 0 en e1des1erto · para los turcos ellos la obliga- ron... bailó. para ellos cerca de papa, y Agop... No quiero '. que m1. h1Ja.. haya bailado para ningún turco... Silvia apaga la música intem st. pe wamenteY vuelve a la computadora. 128 \ \ ién podré enseñar\e a bailar el Tamzará si no tengo hi- q~vtf.: ¿~ ~) Escuchá (lee)... Un genocidio implica además del asesinato J inalllª·. , joS,. de las personas, un asesinato de los simbolos y de su transmisión a ,,,.. ,idientes....So'loquedara, entonces sostener, med.iante el recuerdo.,111.s1110 /os dl::ente del horror, el momento del trauma como única identidad posi- perm nsmisión a los descendientes... ¿Yo no soy tu descendiente ble". rra. , ') Sólo Anush, ¿no?... Pero ella ya no puede bailar porque está tnalllª· uisieras que elba1·1e tamb'1en , munera · con ella. Pero yo no a tnuert · Q ,., deJ·ar que se muera, mama. (Pausa) ¿Prefennas que yo tam- ,¡oy a.., me muriera? (Pausa) No traJe un hombre a esta casa es cierto bien ' · No tengo hijos... pero quiero enseñar este baile... A veces lloro por esos hijos míos que nunca van a nacer... lloro porque nunca van a aprender a bailar. Silvia mira hacia donde está su madre. Se acerca a la pared. SILVIA: Necesito que me mires, mamá... Dora no la mira. SILVIA: Y que me toques y que huelas... Silvia termina gritando. SILVIA: ¡Sos mi mamá! Ante el grito Dora la mira. SILVIA:¿Por qué no podés ser mi mamá? DoRA: Sola te crié, viuda. ¿Te faltó algo todos estos años? SILVIA: ¿No te das cuenta de todo lo que me faltó? DoRA: Hubieras pedido. SILVIA: No podés escuchar. 129 DoRA: sos injusta. SILVIA: Acaríciame, mamá... DoRA: Mi piel está muerta... SILVIA: Acaríciame... DoRA: Se me murió una hija... tenés otra que no conoce tus manos... SILVIA: Pero DoRA: No puedo. SILVIA: La Metzma pudo.... ·La Metzma, siempre la Metzma.. J Yo no soy la Metzm. DoRA. 1 a... Ojalá sintiera arena en las manos por haber cavado la tumba de rni hi' , Ja... Yo no cavé una rumba, yo no cargue su cuerpo mueno en mis brazos... SILVIA: Cargame a mí en tus brazos... DoRA: No puedo... SILVIA: Cargame antes de que se vaya esta noche... DoRA: Tendrían que haberte matado... sólo así podría cargar tu cuer- po... muerto. SILVIA: Matame... DoRA: y0 no soy quién, soy tu madre. SILVIA: Ya estoy muerta, mamá. DoRA: Esta noche ya se fue... SILVIA: Esta noche ya se fue... Pausa. SILVIA: Llega el día... Ellas dos en silencio, frente a frente. La luz cae hasta que el espacio queda totalmente a oscuras. Pausa. El duduk completa alfin su melodía inconclusa. Penumbra. Silencio. 130 \ , O o PAIABRAS + VOLVER+ HIJAS + BED QUEVOR ABRIM: 4, ft'll,OG 1 sla ,nañana siguiente. La luz_ ~ntra por las ventanas de la casa. Finalmente 1 E óla luz del día. Desaparecio la pared que las separaba y en su lugar hay 1 1ea mesa con las cosas del desayuno que Dora termina de servir. Aparece Sil- 1 ~: cambiada con ropa formal de trabajo, con el pelo mojado, recién bañada 1 v biada· Trae consigo la carpeta con la demanda. La deja sobre la mesa 1 ycam yse sienta. Buen día... S1LVI~- &...... Buen día... ºº¡\n' siiv1t-.: Me quedé dormida. ooM: ¿Se te hizo tarde? sxiv1t-.: Sí, pero igual estoy bien... ooiv.: ¿Tostadas? StLVIA: No, no voy a comer nada sólido... Dora le sirve café. Silvia pone azúcar en la taza y revuelve. Dora se sienta frente a ella. Se miran. Silvia bebe su café. Dora el suyo. Se miran. DoRA: ¿No le ponés leche? SILVIA: Nunca le puse leche al café, mamá. DoRA: Sería bueno que empezaras a ponerle, te va a perforar el estó- mago tanto café negro... SILVIA: Si no me lo perforaron los bombones que me comí anoche... DoRA: ¿Trajiste bombones? SILVIA: Me regalaron. Te quise convidar, pero dormías... DoRA: Alguno habrá quedado por ahí... S11vIA: Tengo mis dudas... Pausa. Se miran en silencio. DoRA: Te cosí el dobladillo que me pediste. 131 ,- ;' SILVIA: Gracias... pausa. e es un lindo día... D0 RA.· Parece, qud vía ni miré para afuera. Frio , no hace... SILVIA. No se, to ada de frío... es casi. un d1a ,. de primavera y DoRA: No hace na..... eso que , termina el mv1erno... rodav1a no Pausa. ,h , ) SILVIA: ¿Y hoy que aces. , iempre... lo de todos los dias. DoRA: Nada, 1o de S SILVIA: Un día más... DoRA: Un día más... Pausa.. b. ) DoRA: ¿Pudiste termmar tu tra a30. SILVIA: Sí, pude por suerte... DoRA: Llamó tu tío Agop... SILVIA: ¿Qué dijo? DoRA: Nada, te dejó saludos. Un día de estos tendríamos que ir a visitarlo. SILVIA: Sí, tendríamos que ir un día de estos... DORA: ¿Más café? SILVIA: No, mejor me voy ames de que se me haga tarde en serio... Silvia agarra su cartera y empieza a salir. Dora la detiene. DoRA: Tu carpeta... Dora sostiene la carpeta de la demanda de Silvia en el aire. Silvia regresa y la agarra. 132 ·--- , que no me olvide algo.... El dia 511.VlÍ\· no es ese d'ia... no!V>: ttoY d' J./....r hoy es otro ia... 11\' 1'10, siiv ·. , día es hoy? poM: lQue. Martes... 5¡1,VlA· 1. Martes... No me gustan os martes... poRA·. pero hoy es un 1·mdo d'1a... d...l)lSte eso, ¿no?... 5¡1,VIA,. ,. ·DiJ.e eso? OJala. poRA· l silvia se va otra vez. Dora la detiene. , DoAA: Aver, vem... iamira. DoAA: Estás muy cerrada en el cuello... no te queda... Le abre un botón de la camisa. La mira, le acomoda el cuello, las solapas, ta mira con cierta distancia otra vez. La acomoda tocando la ropa pero no aella. No le convence. Silvia espera. Se miran. Finalmente Dora se saca la cadena de donde cuelga la piedra de Tomarza y se la cuelga del cuello a su hija. Silvia se queda sorprendida. Dora actúa como si el gesto no tuviera más significado que el estético. DoRA: Ahora sí... ahora está mejor... Se miran. Silvia lleva una mano como para acariciar a su madre, Dora la toma en el aire y aprieta fuerte la mano de su hija contra su pecho, pero en- seguida la suelta. Ese es todo el contacto que puede hacer con ella. Quisiera abrazarla pero no puede. Silvia espera. Parecería que Dora va a hacer algo más, pero finalmente no. DoRA: Andá, que no se te haga tarde... 133 Silvia no termina de ª"anear. Aprieta la piedra que cuet. a r,g desuc1, l &(,e lo DoRA: Andá... Dora queda sola. TELÓN 1 134