Manual de la Entrevista Psicológica PDF
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Universidad Privada de Tacna
Conxa Perpiñá
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This document is a manual about psychological interviewing, which details the importance of the interview in psychology, including historical aspects, definitions, classifications, comparisons with other information-gathering techniques, and ethical considerations. It aims to provide a comprehensive understanding of the multifaceted nature of this essential psychological tool. It will also help the reader understand the various roles and skills of a good interviewer.
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1. DEFINICIÓN Y ASPECTOS CONCEPTUALES DE LA ENTREVISTA CONXA PERPIÑÁ La entrevista es una técnica de recogida de información, y por tanto de evaluación; pero también es mucho más que eso. Su versatilidad y...
1. DEFINICIÓN Y ASPECTOS CONCEPTUALES DE LA ENTREVISTA CONXA PERPIÑÁ La entrevista es una técnica de recogida de información, y por tanto de evaluación; pero también es mucho más que eso. Su versatilidad y flexibilidad permiten moldear una entrevista para cada finalidad y adap- tarla incluso a las necesidades del entrevistado y al estilo personal del entrevistador, lo que le confiere gran ventaja respecto al resto de las técnicas de evaluación psicológica. Los objetivos del presente capítulo son la descripción y estudio de: 1. La importancia de la entrevista en psicología: aspectos históricos. 2. Definición de la entrevista y características esenciales. 3. Clasificaciones en función de varios criterios. 4. Comparación con otras técnicas de recogida de información. 5. Garantías científicas de este instrumento (fiabilidad, validez, utilidad). 6. Cuestiones éticas. Tras haber leído este capítulo, el lector será capaz de: ➪ Conocer el origen, utilidad y objeto de la entrevista en el ámbito psico- lógico. ➪ Saber reconocer sus características definitorias. ➪ Diferenciar sus finalidades, propósitos y ámbitos. ➪ Familiarizarse con las competencias necesarias para ser un buen entre- vistador con respecto a sus garantías científicas y éticas. 1.1. LA IMPORTANCIA DE LA ENTREVISTA EN PSICOLOGÍA: ASPECTOS HISTÓRICOS La manera más directa de saber qué le sucede a una persona es preguntarle, y en esto consiste básicamente la entrevista. Es la técnica de recogida de datos más ampliamente utilizada, pero también la más difícil y compleja de llevar a cabo. Es tal su versatilidad que, aunque 23 PI00176601_01.indd 23 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica nace en un contexto de evaluación y diagnóstico, se ha venido utili- zando con otras muchas funciones en el proceso de evaluación-inter- vención e incluso fuera del ámbito de la salud o de la relación de ayuda. La entrevista se ha ido adaptando y, sobre todo, enriqueciendo de todos aquellos campos por los que ha sido utilizada. Son diversos los autores (por ejemplo, Silva, 1988) que indican que la entrevista comien- za a tener una especial relevancia en el campo clínico de la mano de Kraepelin en su interés por explorar con minuciosidad los síntomas de los pacientes. Ello permitiría poder realizar un diagnóstico que se pu- diera articular en una clasificación de los trastornos mentales. Con este fin, la exploración del estado mental del paciente resultaba imprescin- dible, y esa exploración y otros datos de la historia clínica del paciente se recababan, precisamente, a través de una entrevista. Otra aportación fundamental fue la del psicoanálisis, la «terapia par- lante» de Freud, en la que se funde la búsqueda de la información, la evaluación y la terapia. La entrevista se convierte en un estupendo me- dio para fomentar la comunicación espontánea del paciente y con ello suscitar su «curación» gracias, entre otras cosas, al flujo de sus asociacio- nes libres. Freud es uno de los primeros en entender que el entrevista- dor (el terapeuta) tiene una notable influencia en la dinámica de la entrevista. El terapeuta no es un elemento neutral de la entrevista, y por ello mismo ha de esforzarse por ejercer un papel pasivo en ella, de modo que no es anecdótico que para controlar esa influencia el entre- vistador se mantenga fuera de la vista del entrevistado y permanezca tomando notas tras el diván de su paciente. Un paso más allá en este reconocimiento de que el entrevistador no es un elemento neutro en la inevitable «relación» que se establece en la entrevista entre sus dos protagonistas lo da Sullivan, quien en su clásico de 1954 The Psychiatric Interview indica que la entrevista es un proce- so de relación interpersonal planificada. Subraya que entre ambos miembros de esta díada se produce una interacción «real» y que el tera- peuta ha de sacar ventaja de ello ejerciendo de «observador participan- te» y trabajando activamente esa interacción social real en beneficio de su paciente. Finalmente hay que mencionar la figura de Carl Rogers, que en su terapia centrada en el cliente imprime a la entrevista terapéutica un es- tilo «no directivo» por excelencia que se consolida y que se centra en el marco de referencia del cliente y en su expresión y comprensión emo- 24 cional y evita cualquier tipo de interpretación del mismo; por otra parte, PI00176601_01.indd 24 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista hay que mencionar el avance que Rogers supuso en la investigación de la entrevista. La primera transcripción textual la realiza Rogers en la década de los cuarenta, además de adoptar como metodología habitual la grabación rutinaria del audio de las entrevistas para su estudio pos- terior. Junto a las críticas al diagnóstico psiquiátrico, Skinner y Eysenck en la década de los cincuenta pusieron también en solfa la entrevista al poner de manifiesto ciertos sesgos producidos, por ejemplo por los reforzamientos verbales, así como otras fuentes de error que también se comienzan a evidenciar desde el área social y las entrevistas de investi- gación. Sin embargo, con la aparición del conductismo de los años se- tenta, los propios terapeutas de conducta no estaban dispuestos a re- nunciar a una técnica que, aun con sus problemas, resultaba tan útil (Turkat, 1985, 1987). En 1965 Kanfer y Saslow publican Behavior Analy- sis, entre cuyos argumentos cabe destacar que señalan que la entrevista es un instrumento fundamental en el análisis funcional de la conduc- ta, pero exigiendo un buen nivel metodológico para garantizar su fiabi- lidad y validez. Las críticas a la falta de estandarización y de cuantificación, a la ex- cesiva confianza que se deposita en el entrevistador para que la entre- vista sea fiable y válida —más incluso que en la propia técnica—, uni- das al reconocimiento de la gran utilidad de esta herramienta, llevarán a muchos autores a esforzarse por dotarla de mecanismos que ayuda- ran a asegurar su fiabilidad y validez. Las entrevistas estandarizadas con propósitos diagnósticos, como la SCID (Structured Clinical Inter- view for DSM-IV Axis I Disorders, SCID-I; First, Spitzer, Robert, Gibbon y Williams 1996), o las series de las ADIS, nacen con ese propósito, asegurando que el entrevistador pueda a través de su técnica llegar a conclusiones diagnósticas fiables o formular hipótesis de intervención válidas. La aportación de la investigación social a la entrevista, desde un campo completamente distinto, también ha contribuido a la estandariza- ción y cuantificación de la técnica, muchas veces obligada a manejar gran cantidad de datos y de personas evaluadas. Desde la sociología y la psicología social cabe mencionar, al menos, dos tipos de desarrollo: las entrevistas destinadas a la selección de personal y evaluación de re- cursos humanos en empresas, centradas fundamentalmente en la valo- ración de las capacidades, actitudes y motivación de los candidatos para el puesto de trabajo al que aspiran, y las entrevistas de encuesta, desti- 25 nadas a evaluar una parte de la muestra de población a la que se pre- PI00176601_01.indd 25 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica tende sondear sobre algunos aspectos concretos, para luego generalizar los resultados. Aquí la posibilidad de cuantificación y estructuración será crucial, no sólo para ser eficientes en el momento de la recogida de las respuestas sino también para generalizar a la población de referencia. 1.2. DEFINICIÓN. ELEMENTOS ESENCIALES DE LA ENTREVISTA La definición tal vez más genérica e intuitiva de la entrevista sea la clásica de Bingham y Moore (1924; en Bingham y Moore, 1973). La entrevista es una conversación con un propósito. Por tanto, los elementos que se encierran tras esta afirmación son: ➪ Conversación: «COMUNICACIÓN». ➪ La conversación se da, al menos, entre dos personas: «INTERAC- CIÓN». ➪ Propósito: «OBJETIVO», FINALIDAD. Aun siendo elementos que se solapan y participan del resto, pase- mos a analizar cada uno de ellos. El componente de «COMUNICACIÓN» cuenta con las siguientes ca- racterísticas: ➪ La entrevista es una conversación entre dos o más personas pero en la que uno —el entrevistador— es el que pregunta (con un ob- jetivo predeterminado). ➪ La vía es de comunicación simbólica, preferentemente oral y bidireccional, pero también hay un importante componente no verbal. ➪ Tanto la información verbal como la no verbal son registradas y analizadas para realizar la evaluación, el diagnóstico, el asesora- miento o la intervención psicológica. Por lo que respecta al componente de «INTERACCIÓN», hay que des- tacar: ➪ Proceso bidireccional. Los participantes comparten actividad en 26 el curso de la entrevista, y se influyen el uno al otro, siendo la PI00176601_01.indd 26 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista información recabada en la entrevista el resultado de esta inte- racción. ➪ Entrevistador y entrevistado pueden ser una o varias personas. ➪ Entrevistador y entrevistado ejercen dos roles diferenciales y asi- métricos. ➪ En el campo de la salud, se trata de una relación de ayuda en la que uno es un profesional y el otro es un cliente. En ese sen- tido, no es una relación entre iguales. Es en el entrevistador en el que recae la responsabilidad de conducir la entrevista, no al contrario. Esta asimetría evita que se convierta en una charla en- tre amigos. ➪ En definitiva, la entrevista, en su aspecto de interacción, se de- fine como una situación asimétrica: «relación interpersonal asi- métrica» en la que cada uno tiene un rol diferente. El entrevista- dor es reconocido como experto en la materia, es el que pide información. El entrevistado es el que origina la demanda es- perando sacar provecho de tal relación, y es quien proporciona la información. Por último, con respecto al «PROPÓSITO» u objetivo: ➪ Las personas en la entrevista dialogan con arreglo a ciertos esque- mas o pautas de un problema o cuestión determinada y persiguen un propósito profesional, que, en el campo de la clínica, tiene que ver con la relación de ayuda. ➪ El objetivo y motivo de la entrevista parten del entrevistado, pero el objetivo último de la misma es conocido al menos por el entrevis- tador, pudiendo o no coincidir con el del cliente-paciente, y puede comunicarlo o no al paciente-cliente según considere adecuado para obtener información o proporcionarle ayuda. ➪ Las preguntas e intervenciones verbales se realizan en función de ciertas pautas y están relacionadas con el problema o la demanda que hace el entrevistado. ➪ En el ámbito clínico, es una técnica longitudinal mediante la cual se realiza todo el proceso clínico, es decir, es el instrumento a tra- vés del cual se establece la evaluación, la intervención y la evalua- ción de la intervención. En la tabla 1.1 se hace una comparativa entre una conversación or- 27 dinaria y una entrevista. PI00176601_01.indd 27 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica TABLA 1.1 Diferencias entre conversación y entrevista (basada en McConaughy, 2005) CONVERSACIÓN ENTREVISTA Informal, casual. Se planifica en el tiempo y se realiza Espontánea. con «cita previa». Sobre tópicos de mutuo interés. Tiene un propósito y una intencio- Los conversadores llevan a partes nalidad. iguales el peso de la conversación. Los «conversadores» tienen roles No hace falta llegar a ninguna con- y funciones diferentes, siendo uno clusión. de ellos el que elige el tema. El Puede ser simplemente por pasar el entrevistador pregunta, o plantea tiempo o divertirse. temas sobre los que reflexionar, y el entrevistado contesta o refle- xiona. El entrevistador acepta las expresio- nes de sentimientos y los hechos narrados por el entrevistado sin juz- garlos o discutirlos. El entrevistador está obligado a mantener confidencialidad y a no revelar la información obtenida. De este análisis se puede ya extraer una primera conclusión, y es que, bajo su apariencia de simplicidad, la entrevista es realmente una de las técnicas más complejas y de más difícil manejo. En principio, la entrevista es una técnica que puede parecer fácil porque se basa en una de las habilidades que desarrollamos todos los días: conver- sar y comunicarnos. Pero de lo que se trata es hacer de algo espontá- neo y «natural», una técnica que apliquemos al servicio de unos pro- pósitos, buscando unos efectos y resultados, independientemente de que en ese momento nos apetezca «conversar, o no», o exhibir nues- tras habilidades de diálogo. Como profesionales, hemos de ser cono- cedores de determinadas reglas de comunicación e interacción y apli- car una serie de técnicas para modular efectos en beneficio de nuestro cliente. Como se ilustra en la figura 1.1, la diferencia entre una con- versación ordinaria y una entrevista la marca, fundamentalmente, la interacción entre los participantes y el objeto o finalidad de tal inte- 28 racción. PI00176601_01.indd 28 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista COMUNICACIÓN CONVERSACIÓN VS. FINALIDAD ENTREVISTA INTERACCIÓN Figura 1.1. Intercambio verbal de información: entrevista vs. conversación. El elemento «interacción» es el que marca la diferencia en esta con- versación que se establece en la entrevista. En este diálogo todo gira en torno a que el entrevistado proporcione la información adecuada al propósito de la demanda; el entrevistado ha de sentirse pues cómo- do y con libertad de hablar sobre aquello que se le vaya a preguntar o plantear. El entrevistador utiliza sus conocimientos, aporta su expe- riencia y trabaja con las técnicas más adecuadas. Debe saber qué pre- guntar, cómo preguntar y saber guardar silencio y escuchar. El entre- vistador es el responsable de dirigir y controlar los comportamientos verbales y no verbales, por supuesto los suyos, pero también ha de saber influir en los del entrevistado, controlar la distribución de las in- tervenciones y conocer la naturaleza de los contenidos que se van a desarrollar. El que hace la demanda, normalmente el entrevistado, ne- cesita ayuda, y el profesional la ofrece. Esta diferencia de roles hace que la entrevista se diferencie de una relación de amistad o entre igua- les, aportando por ello mismo la ventaja del distanciamiento emocional y la objetividad para abordar el problema. Al final del capítulo, en el cuadro 1.1 se resumen algunas de las características que definen a un buen entrevistador. 1.3. CLASIFICACIÓN DE LA ENTREVISTA Existen muchos tipos de entrevista y muchos criterios que nos pue- den ayudar a clasificarlas. Hay algunas tipologías que las clasifican in- cluso según el número de participantes (individual o en grupo) o la cantidad de sesiones en las que se distribuye. Aquí se optará por elegir aquellos criterios que están más relacionados con las dimensiones esen- 29 ciales de la entrevista, y que parecen ser más útiles en su conceptuali- PI00176601_01.indd 29 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica zación y delimitación. Según el marco teórico de referencia terapéutica, las entrevistas se pueden clasificar en función de su: ➪ Estructura. ➪ Grado de dirección o participación. ➪ Ámbito de aplicación-fines u objetivos. ➪ Funciones. ➪ Secuencia temporal. ➪ Marco teórico terapéutico. 1.3.1. Estructura Por estructura de la entrevista se suele entender el grado de especi- ficación y estandarización de sus distintos elementos/componentes, ta- les como: preguntas, respuestas, secuencia de las preguntas (fijación de una secuencia), registro y elaboración de la información e incluso la interpretación de la información. En ese sentido, hay entrevistas estruc- turadas, no estructuradas y semiestructuradas. a) No estructurada La entrevista sólo se realiza en función de algunas líneas muy gene- rales; es el propio proceso de interacción el que determinará el orden de preguntas y su tipo, por lo que permite tratar a cada entrevistado de manera idiosincrásica (Segal y Hersen, 2010). b) Estructurada Aquella entrevista en la que los elementos anteriormente menciona- dos, en su totalidad o en parte, tienen un formato prefijado; es decir, las preguntas están previamente establecidas, el orden de formulación y las posibilidades de respuestas del entrevistador están acotados y restringi- dos, hay una orden de dirección de la entrevista a través de sus seccio- nes y la combinación de ciertos criterios ayuda a la interpretación de las respuestas del entrevistado. Según Segal y Hersen (2010), en las entrevistas estructuradas se pregunta de una manera y con una secuencia predeterminadas. Las res- puestas del entrevistado se suelen codificar bien en un formato dicotó- mico, bien usando una escala Likert, sobre todo para evaluar la fre- cuencia, la duración o la gravedad de aquello sobre lo que se le 30 pregunta. En la tabla 1.2 se ilustra con un ítem de la ADIS-IV (Di Nardo, PI00176601_01.indd 30 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista Brown y Barlow, 1994) un ejemplo de entrevista estructurada o semies- tructurada. TABLA 1.2 Entrevistas estructuradas y semiestructuradas: un ejemplo 4a. ¿Se siente ansioso acerca de estas situaciones porque teme que pueda tener un ataque de pánico inesperado? (si es necesario, explicar qué es un ataque de pánico) SÍ _________ NO _________ Si la respuesta es SÍ, 4b. En otras ocasiones en las que se expone a _________, ¿ha experimenta- do un episodio de miedo intenso/ansiedad que ha aparecido de forma brusca e inesperada? ADIS-IV (Di Nardo, Brown y Barlow, 1994) El que la entrevista esté estructurada facilita la posibilidad de estan- darizar, cuantificar y, por tanto, someter los resultados a comparacio- nes numéricas. Como antes se ha comentado, este tipo de entrevista surgió para solventar el problema de la poca fiabilidad y validez de las entrevistas, sobre todo de aquellas que implican decisiones clasificato- rias (por ejemplo, diagnóstico) y tienen consecuencias para el futuro y la predicción. Son el tipo de entrevistas adecuadas para la investiga- ción, ya que a todos los entrevistados se les hacen las mismas pregun- tas, que se codifican de igual manera, con lo que se obtiene una infor- mación más uniforme, válida y fiable. Suelen ser las más indicadas para realizar diagnósticos y tareas de selección de personal porque reducen el grado de variabilidad y de discrepancia de la exploración. En el ca- pítulo 8 se ilustran algunas de las entrevistas estructuradas más rele- vantes. c) Semiestructurada Las preguntas tienen algún tipo de estructuración: el guión está for- mado por áreas concretas, dentro las cuales el entrevistador puede ha- cer las preguntas que le parezcan oportunas, siguiendo algún tipo de 31 orientación algo detallada. Ejemplo de entrevistas semiestructuradas PI00176601_01.indd 31 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica son la ADIS-IV (Anxiety Disorders Interview Schedule for DSM-IV) an- teriormente mencionada o la SADS (The Schedule for Affective Disor- ders and Schizophrenia; Spitzer y Endicott, 1978), diseñada para el diag- nóstico de trastornos afectivos y psicóticos en adultos. Ahora bien, la estructuración en la entrevista también puede presen- tar ciertas desventajas y limitaciones: ➪ La rigidez a la que se tiene que someter y su poca flexibilidad en la aplicación individual podrían llevar a formular las preguntas en el momento menos conveniente. ➪ Puede presentar el riesgo de convertirse en un interrogatorio. ➪ Puede generar resistencias. ➪ Precisamente para no caer en los dos riesgos anteriores, requieren una doble habilidad: saber hacer entrevistas y saber hacer esa en- trevista estructurada en concreto; es decir, requiere una formación específica para tal fin. 1.3.2. Grado de dirección o participación Grado en que el entrevistador determina el contenido y el desarrollo de la entrevista. Ello afectará a la manera de formular las preguntas o sus intervenciones verbales, cuándo hablar, cuándo escuchar y cuándo cambiar de foco o de tema. En este sentido, se habla de entrevistas di- rectivas y no directivas. a) Directivas Desde el punto de vista de un parámetro «objetivo», por ejemplo cuantificando el tiempo en que cada interlocutor está hablando, en las entrevistas directivas el entrevistador emplea mucho tiempo en sus in- tervenciones. Sin embargo, no sólo es cuestión del tiempo en que habla uno y otro, sino del estilo que le imprime: el entrevistador habla más con el fin de formular preguntas e intervenir, parece más activo en la iniciativa de la conversación, elige el tema para hablar, lo encauza. La participación del entrevistador está determinada por su marco de refe- rencia, por su propia perspectiva, es decir, sus interpretaciones, su aná- lisis de lo que en ese momento puede ayudar más a su cliente, sus in- dicaciones y su visión del problema. Es un estilo de entrevista cuyo objetivo principal es obtener el máximo de información para formular 32 hipótesis que guíen la evaluación y la intervención. PI00176601_01.indd 32 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista b) No directivas En este caso, el que ocupa más tiempo en sus intervenciones es el entrevistado. El entrevistador procura interferir lo menos posible en el curso natural del habla del cliente. Las intervenciones que hace el en- trevistador se realizan desde el marco de referencia y el foco del entre- vistado, puesto que el objetivo primordial es ponerlo en contacto con su experiencia y con sus vivencias, evitando, por tanto, ofrecer el punto de vista del entrevistador o constreñir al entrevistado. El objetivo inmediato de este estilo es crear un buen clima, la capta- ción empática del entrevistado, al que se le ayuda a esclarecer su pro- blema desde su propia posición (Ibáñez, 2010). Su máxima expresión serán el estilo de terapia centrada en el cliente de Rogers (1961) y las técnicas verbales no directivas que se comentarán más adelante en el capítulo 4. Es el paradigma de la escucha activa; ello exige gran capa- cidad de concentración y empatía, encauzando al entrevistado cuando empiece a divagar, bien haciéndolo consciente de ello, bien evitando las barreras que se detectan para verbalizar sus ideas. En la tabla 1.3 se hace una comparativa de ambos estilos de conducir una entrevista. TABLA 1.3 Comparación estilos directivos y no directivos en la entrevista ESTILO DIRECTIVO ESTILO NO DIRECTIVO Obtener la máxima cantidad Conseguir una relación y de información fiable, válida y ambiente que potencien la Propósito útil. disponibilidad del entrevis- tado a reflexionar y elabo- rar sus pensamientos. Lleva el peso de la conversa- Muestra explícitamente acep- ción. tación y comprensión. Hace preguntas específicas, Anima a la expresión de Entrevistador elige temas, explica. emociones, actitudes y re- Activo: propone áreas a explo- flexiones sobre comporta- rar o modificar. mientos. Convertir la conversación en Derivar a una conversación un interrogatorio. trivial. Peligros Se puede incurrir en sesgos (te- La información relevante mas precipitados, selección ina- puede diluirse. propiada de información, etc.). 33 PI00176601_01.indd 33 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica En cualquier caso, como se ha mencionado anteriormente, una de las cualidades de la entrevista es su flexibilidad; por tanto, el estilo que se le imprima puede variar y, de hecho, es bueno que varíe en función de ciertos factores: ➪ Del objetivo de la entrevista: aquellas entrevistas cuyo propósito sea obtener el máximo de información en el menor tiempo posi- ble claramente requieren un estilo directivo. Para aquellas cuyo propósito sea incrementar la autodirección del entrevistado será más apropiado utilizar un estilo no directivo. ➪ De las características del entrevistado: las personas que tienen ten- dencia a divagar, a perderse en sus razonamientos y precisan an- clajes concretos para seguir una conversación necesitarán un esti- lo más directivo. ➪ De la escuela terapéutica: hay entrevistas terapéuticas con un es- tilo muy definido. Así, las entrevistas de corte fenomenológico o humanista son casi por definición no directivas, mientras que las entrevistas de corte conductual tienen una orientación direc- tiva. ➪ Del estilo personal del entrevistador: dado que parte de las habi- lidades de la entrevista proceden de nuestra destreza cotidiana a la hora de conversar y relacionarnos con los demás, hay amplias diferencias individuales en nuestros estilos y preferencias al dialo- gar con otros. ➪ Puede variar a lo largo de la entrevista, y de hecho variará. Iniciar la entrevista con un estilo no directivo ayudará a crear un mejor clima. Ahora bien, no hay que confundir el estilo directivo o no directivo de la entrevista con su «dirección». Quede claro que, sea cual sea el es- tilo de la entrevista, quien la ha de dirigir en todo momento (y ello es un tema de interacción y roles diferenciados) es el entrevistador; de lo contrario, algo estará yendo irremisiblemente mal. 1.3.3. Ámbitos de aplicación-fines u objetivos de la entrevista La distinción más relevante en cuanto a ámbitos o campos de aplica- ción es la que se refiere a sus fines u objetivos. Sin pretender ser ex- 34 haustivos, y teniendo en cuenta que la entrevista con función de eva- PI00176601_01.indd 34 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista luación será común a varios campos, los ámbitos más importantes de la entrevista suelen ser: a) Asesoramiento (counselling) En este contexto, el entrevistado pide ayuda profesional para ubi- carse, centrarse en alguna faceta, bien sea en relación con aspectos de la vida cotidiana, lo que en nuestro ámbito se conoce con el térmi- no counselling (véase el capítulo 11), o bien en lo referente a su orientación escolar o vocacional (véase el capítulo 15). Se trata de una relación de ayuda, pero en este caso el cliente cuenta con todos sus recursos mentales intactos; su problema es algo que él mismo solucio- nará con ayuda del profesional, quien le acompañará en todo el pro- ceso de resolución. b) Clínico En este ámbito el problema por el cual el cliente pide ayuda y con- sulta tiene que ver con la psicopatología y las alteraciones mentales. En este caso el entrevistado no está en plenitud de sus recursos mentales, y lo que se requiere es un cambio terapéutico. Como se verá a conti- nuación, dentro de la entrevista clínica hay diversas funciones y fines: evaluación y diagnóstica, motivadora y terapéutica. c) Selección En este campo de aplicación la demanda consiste en encontrar el mejor candidato para un puesto de trabajo. El perfil que ha de tener el nuevo trabajador lo proporciona la empresa, y el entrevistador suele utilizar la entrevista como técnica para seleccionar a la persona que me- jor se ajuste a él. Este tema se desarrolla en el capítulo 13. 1.3.4. Funciones Al ser la entrevista una técnica tan versátil, se utiliza con diversas funciones incluso en un mismo ámbito de aplicación. Así, nos encontra- mos con que en el ámbito clínico la entrevista desempeña al menos tres funciones claramente diferenciadas: 35 PI00176601_01.indd 35 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica a) Evaluación y diagnóstico Su función es recabar la información precisa y necesaria para valorar, evaluar o diagnosticar el problema. Se debe abarcar tanto la informa- ción verbal como la no verbal. La información se utiliza para valorar el funcionamiento de la persona y decidir, si es preciso, una intervención, y, si es así, de qué tipo. Aquí también se podría incluir la entrevista de anamnesis, un tipo específico de entrevista de evaluación, en este caso de la biografía y desarrollo de la persona entrevistada. Este tema se de- sarrolla en el capítulo 8. b) Motivadora Se trata de animar al paciente a que asuma su problema, a que inicie el proceso de cambio terapéutico y vea la necesidad no sólo de involu- crarse en él, sino también de mantenerlo (capítulo 10). c) Terapéutica Pretende establecer metas terapéuticas y pasos para conseguirlas con el fin de inducir un cambio que ayude a la persona a mejorar su calidad de vida con respecto a su enfermedad o trastorno. La relación paciente-terapeuta siempre es fundamental, pero en este caso va a ser una parte esencial en el proceso de cambio (véase el capítulo 11). 1.3.5. Secuencia temporal En el ámbito clínico el proceso de evaluación-intervención va cu- briendo distintos objetivos en función del momento en que se ubique en el proceso; así, en este ámbito se suelen distinguir los siguientes ti- pos de entrevista: a) Screening Es un tipo de entrevista, normalmente semiestructurada y de me- nor duración, que permite evaluar aspectos importantes que suceden o sufre la persona con el fin de valorar que sus necesidades pue- den ser cubiertas por los servicios prestados en esa unidad o dispo- 36 sitivo. PI00176601_01.indd 36 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista b) Entrevista inicial Aquella que sirve de primera toma de contacto y que tiene como propósito identificar el objetivo genérico de la relación de ayuda que se puede llegar establecer. c) Entrevista de devolución Una vez que el entrevistador ha acabado su evaluación, es fundamental no sólo dar respuesta a la demanda del paciente sino también dar feedback de la visión que el profesional tiene del problema que le trajo a consulta y comunicar la formulación que ha realizado el clínico. Suele ser el primer paso para incrementar la motivación del paciente, a través de la compren- sión de lo que le sucede y los medios de los que dispone para mejorar e iniciar la terapia. Será más compleja cuanto más complicado sea el pro- blema que presente el paciente. Este tema se desarrolla en el capítulo 9. d) Entrevista de alta clínica Su propósito es terminar el proceso y despedir al paciente cerrando el caso. Puede que se concierte alguna cita en el futuro como segui- miento; puede que la despedida sea temporal y que la relación se reto- me en un tiempo posterior por una recaída o por otra causa, pero el objetivo que motivó este encuentro y esta consulta se ha resuelto y, por tanto, se ha de cerrar el proceso. 1.3.6. Según el marco teórico de referencia terapéutica La fundamentación teórica de la orientación terapéutica va a determi- nar en realidad qué información es relevante recabar, qué cosas habrá que modificar, cuáles serán las metas terapéuticas, cómo se estructura la entrevista, e incluso el estilo que mejor va a ayudar al terapeuta a con- seguir sus objetivos. Dentro de este apartado hay tres grandes modelos terapéuticos que dan lugar a tres maneras de concebir la entrevista: a) Entrevista dinámica Centrada en el descubrimiento de lo inconsciente y en las interpre- taciones que va haciendo el terapeuta con el fin de que el paciente in- 37 tegre en su conciencia sus conflictos y los resuelva. El entrevistador no PI00176601_01.indd 37 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica es un elemento neutro y por ello se esfuerza en no interferir en el flujo libre de las asociaciones de ideas del paciente, aunque tiene un estilo claramente directivo. La expresión verbal es fundamental para el análi- sis y la interpretación que haga el terapeuta. b) Entrevista fenomenológica Paradigma de un estilo no directivo de entrevista; la estrategia es ayudar a promover el autoconocimiento y el desarrollo de potencial humano del cliente, cuyas dificultades han tenido su origen en un de- sarrollo personal insuficiente, de modo que no es considerado un «en- fermo», sino alguien que desconoce la forma en que su peculiar manera de percibir la realidad afecta a sus conductas específicas. El entrevista- dor y el entrevistado, terapeuta y cliente, mantienen una relación huma- na real y por tanto la propia interacción tiene un importante papel te- rapéutico. Se potencia la expresión de sentimientos y de actitudes y su integración. c) Entrevista conductual En tanto que los problemas del paciente tienen origen en experien- cias desadaptativas de aprendizaje, la entrevista recaba datos para rea- lizar un análisis funcional de tales conductas. Las conductas problema se descomponen en unidades funcionales que se definen topográfi- ca y funcionalmente para, posteriormente, esbozar algunas indicacio- nes sobre medidas terapéuticas a seguir según las hipótesis que se han planteado. El estilo es claramente directivo, y el terapeuta en esta interacción es el experto que evalúa los datos obtenidos, delimita los objetivos terapéuticos y las técnicas a emplear, para finalmente analizar momento a momento los resultados del tratamiento seleccio- nado. 1.4. COMPARACIÓN CON OTRAS TÉCNICAS DE RECOGIDA DE INFORMACIÓN La entrevista se puede enmarcar en sentido amplio dentro de las lla- madas «técnicas de autoinforme», es decir, aquellas en las que la perso- na informa sobre sí misma, sobre sus experiencias y significados. Hay 38 otro tipo de autoinformes, los tests, que son técnicas estandarizadas de PI00176601_01.indd 38 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista recogida de información que en su gran mayoría proporcionan un re- sultado cuantitativo, permitiendo hacer comparativas con respecto a una población o condición de referencia. En cambio la entrevista, pre- cisamente por su flexibilidad, permite individualizar al máximo la eva- luación, consiguiendo acomodarse a las circunstancias y problemática de cada entrevistado, así como a la información que va surgiendo a lo largo de ella. Son dos tipos de instrumentos muy utilizados por los profesionales; de hecho, en el quehacer profesional del psicólogo, las técnicas de eva- luación más empleadas son entrevista y cuestionarios porque suelen ser instrumentos complementarios. En la tabla 1.4 se expone una compara- ción entre ambos tipos de estrategias. TABLA 1.4 Ventajas de la entrevista frente a los tests como técnicas de recogida de información VENTAJAS TEST VENTAJAS ENTREVISTA Resultados que se comparan con Se recaba información verbal y no valores de referencia. verbal. Se pueden estudiar —y mejorar— sus Se obtiene gran cantidad y variedad bondades psicométricas (fiabilidad y de información en relativamente poco validez). tiempo. Aplicar un test es menos complejo Comunicación bidireccional. que realizar una entrevista. Proporciona feedback inmediato. Es una relación unidireccional (las Permite la observación de muestras respuestas no influyen en la presen- de comportamiento de la propia re- tación de los estímulos siguientes), lación de entrevista. lo cual facilita la simplificación de la La relación interpersonal permite técnica. que el entrevistado se sienta escu- chado. Interacción mediante la cual se rea- liza todo el proceso de evaluación- intervención. El mejor, a veces único, medio para evaluar a personas con dificultades (sensoriales, mentales, etc.). Por otra parte, hay que señalar que las fuentes potenciales de error 39 de una y otra técnicas son similares por lo que respecta a su dimen- PI00176601_01.indd 39 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica sión de autoinforme (Fernández-Ballesteros, 1992; Márquez, 2004): cuando una persona informa sobre sí misma, la información es sus- ceptible de estar falseada por ocultar datos o silenciar circunstancias, o bien puede estar sesgada positivamente por efecto de la deseabi- lidad social; también puede ocurrir que el informante no esté nada motivado y se niegue a responder (negativismo, falta de colabora- ción), o exista una tendencia a contestar afirmativamente, o aquies- cencia. En cuanto a inconvenientes propios y específicos de la entrevista, señalar que es una técnica muy susceptible de generar sesgos prove- nientes de sus tres componentes: del entrevistador, del entrevistado y de la situación de entrevista. Sin duda, y por último, el mayor inconve- niente de la entrevista es que es una técnica de gran coste, ya que exige una buena preparación y formación en varios ámbitos, precisamente para que cada una de las ventajas que arriba se han mencionando no acabe convirtiéndose en un arma de doble filo e introduciendo desven- tajas y errores en la evaluación. Tal y como se tratará más detenidamente en el capítulo 8, la en- trevista es un instrumento que está presente a lo largo de todo el pro- ceso de evaluación-intervención: en el inicio de la evaluación, en la comunicación de los resultados, en la formulación del caso y el con- traste de hipótesis, en la motivación al cambio, en la intervención y proceso de cambio, en la evaluación de ese cambio y en el seguimien- to y en el alta (Márquez, 2004). No obstante, hay que tener presente que los profesionales tratamos con casos únicos y particulares, y cada uno de ellos hay que abordarlo de la manera más individualizada y adecuada posible. En su función de recogida de información, el obje- tivo de la entrevista es sacar el máximo partido de sus características para crear una base de información rica, útil y sólida que permita su utilización para generar hipótesis, y de la calidad de la información recogida dependerán en buena parte su fiabilidad, validez y precisión (Ibáñez, 2010). 1.5. GARANTÍAS CIENTÍFICAS Como se ha comentado en las notas históricas, la preocupación desde las orientaciones más experimentalistas y conductistas por la calidad que tenía la entrevista como medio de obtención de informa- ción fiable y válida no acabó de dinamitar su necesidad de ella. La 40 necesidad de no renunciar a un instrumento tan versátil y útil hizo PI00176601_01.indd 40 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista que muchos investigadores analizaran sus posibles sesgos y fuentes de error precisamente para poder obtener así un mejor control. Desde el paradigma conductista, uno de los que más reticencias ponía a la entrevista, pero también con la voluntad de no renunciar a ella, se realizaron una serie de estudios en la década de los setenta partien- do de un supuesto fundamental: que la comunicación de la entrevista es una «conducta verbal». De este modo, se podía empezar a plantear el estudio de las leyes que regularan la conducta verbal del entrevis- tado y controlarla con el fin de obtener la información más fiable y válida. Al considerar la información que aporta la persona como conduc- ta verbal, y, como toda conducta, algo susceptible de ser reforza- do, empiezan a ser relevantes las aportaciones del tipo greenspoon y su conocido efecto de «aha, mmm, mmm» y el uso del condiciona- miento verbal, la susceptibilidad de condicionamiento de las respues- tas verbales (un poderoso reforzador que hace que el entrevistado se anime a seguir profundizando en el tema que se vea reforzado). Aunque el reforzamiento verbal del discurso es una magnífica herra- mienta para que el entrevistado organice el discurso del entrevistado al servicio del objetivo de la entrevista, no todo puede radicar en ello. El propio Kanfer (1968), en una segunda fase de estudios, resaltó el hecho de que el problema del control de la conducta verbal era mu- cho más complejo de lo pensado inicialmente, ya que actúan más va- riables que el simple refuerzo. Por ejemplo, el estatus del entrevista- dor, las expectativas del entrevistado, el contexto de la entrevista, etc., todos ellos temas que se desarrollarán en el capítulo 5 sobre la inte- racción. Otra importante fuente de estudios sobre el control verbal de la entrevista provino del trabajo de Matarazzo y su anatomía de la entre- vista (Matarazzo y Wiens, 1972). Sus estudios sobre la anatomía de la entrevista se centraron en analizar cómo las verbalizaciones del entre- vistador acaban por modelar las verbalizaciones de su entrevistado en cuestiones que tienen su interés, como es la duración de las emisiones verbales, el tiempo de reacción en contestar o el tiempo de iniciativa en la verbalización o las interrupciones. Los principales parámetros son «verbalización»: variable que actúa como una unidad de análisis, en concreto la duración total que le lleva a un comunicante a emitir todas las palabras con las que alude a un contenido común. De esta medida se saca una media: tiempo total de habla del entrevistado o 41 entrevistado dividido por el número de unidades de habla; «latencia PI00176601_01.indd 41 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica de tiempo de reacción»: tiempo en silencio que transcurre entre la intervención verbal de un interlocutor y la del otro; «latencia de tiempo de iniciativa»: tiempo que transcurre entre la autointerrup- ción del discurso de un sujeto y su posterior continuación, sin que medie verbalización del otro, y, finalmente, «interrupciones»: inter- ferencias de una verbalización del otro interlocutor. Se detecta como una simultaneidad de vocalizaciones. Estos parámetros ayudan a iden- tificar el ritmo de habla de cada uno de los interlocutores, e incluso sirven para detectar patrones de comunicación en el entrevistado y para conseguir procesos de «sincronización» entre ambos interlocuto- res mediante el «modelamiento» de estos parámetros por parte del entrevistador. Al ser la entrevista una técnica de evaluación, como tal se le puede exigir que la información recabada a través de ella tenga fiabilidad y validez, como cualquier otra técnica de evaluación, aunque más adelan- te consideraremos la perspectiva contraria. Ahora bien, si consideramos que la entrevista ha de cumplir con las mismas garantías que cualquier otro instrumento estandarizado de información, las preguntas que de- bemos plantearnos, siguiendo a Márquez (2004), serían: ¿cómo garanti- zar que la información obtenida sea fiable? (i.e., que los contenidos verbales se correspondan con lo que se pretende saber); ¿cómo garan- tizar que la información sea válida? (i.e., que la información representa lo que es preciso evaluar), y ¿cómo garantizar que lo representa con precisión? El concepto clásico de fiabilidad hace referencia a la consistencia y estabilidad de las medidas de un instrumento. Operativamente, con res- pecto a la entrevista esto se concretaría en: si la información obtenida en una parte de la entrevista es consistente con la obtenida en otros apartados; si al repetir la entrevista tras un período de tiempo se obten- dría la misma información, y, sobre todo a efectos diagnósticos, si la información que obtuvieran dos entrevistadores distintos entrevistando a la misma persona sería igual, y llegarían a iguales conclusiones. Por lo que se refiere a la validez, y más concretamente a la validez de contenido, vendría a ser la representatividad de la información que se recoge en cuanto al problema a evaluar, es decir, se valoraría la en- trevista en cuanto a su capacidad para generar respuestas que represen- ten el universo de aquello que se pretende evaluar. Por lo que respecta a la validez criterio, expresa el grado en que la información recogida puede usarse para predecir (predictiva) o inferir una covariación con 42 otra variable similar (concurrente). PI00176601_01.indd 42 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista Tanto los aspectos de fiabilidad como los de validez son pues cruciales para las entrevistas con finalidades diagnósticas. Spitzer, Endicot y Robins (1975), en su trabajo clásico sobre la estandariza- ción de entrevistas y criterios y diagnósticos, pusieron de manifies- to diversas fuentes de varianza que afectarían tanto a la fiabilidad como a la validez: «de las fuentes de información y de observación» (diferente cantidad de información recabada y procedimiento de re- gistro); «del sujeto» (puede presentar distintas conductas problemá- ticas en diferentes momentos del tiempo, por ser etapas de un mis- mo proceso o, por el contrario, por ser problemas distintos); «de utilización exhaustiva o no de los recursos informantes» (por ejem- plo, consultar con otros familiares), y «de criterio» (no usar los mis- mos criterios diagnósticos). De hecho, con el aumento del uso de las entrevistas estructuradas, así como de los sistemas oficiales de clasi- ficación, se han incrementado la fiabilidad y la validez de los diag- nósticos. Al final del capítulo, en el cuadro 1.2 se recogen algunas de las estrategias para asegurar la calidad de la información de la entrevista. Sin embargo, hay posturas que no están de acuerdo en aplicar los criterios de bondad de las técnicas psicométricas a la entrevista por- que no son comparables, y dadas sus características especiales, no tie- nen por qué aplicarse los mismos parámetros; sin embargo, ello no significa renunciar a proporcionar mediante la entrevista información de calidad para la evaluación de las personas; ésta es la postura de entender y utilizar los métodos cualitativos en la investigación. Por ejemplo, Kvale (1996) indicó que los métodos cuantitativos de investi- gación aplicados a la entrevista no tenían sentido ya que en ella no se plantea la objetividad o la subjetividad de los datos sino que lo esen- cial es la «intersubjetividad» de la interacción. Este autor propuso una metodología de investigación a través de siete etapas para asegurar los requisitos científicos de una entrevista. En la tabla 1.5 se exponen las etapas del proceso de investigación de la entrevista según Kvale (1996). Mientras que el enfoque cuantitativo recaba y analiza datos para comprobar hipótesis previamente establecidas, como es el caso de una prueba diagnóstica, el enfoque cualitativo no necesariamente pone a prueba hipótesis, sino que se usa para descubrir o refinar pre- guntas de investigación y por tanto puede ser una metodología útil en la comprobación de la calidad de la información en los otros muchos ámbitos y finalidades que la entrevista puede tener (Vázquez y Angu- 43 lo, 2003). PI00176601_01.indd 43 27/04/12 10:42 Manual de la entrevista psicológica TABLA 1.5 Etapas de investigación cualitativa en la entrevista (Kvale, 1996) Delimitar el tema. Formular el propósito a ser investigado antes de iniciar la entrevista. El porqué y el qué deben preceder al cómo. Diseñar el plan que se va a seguir para obtener la información que se re- quiere. Entrevistar a la persona, guiando la entrevista hacia el objetivo planteado. Transcribir lo ocurrido, mediante algún sistema de registro mecánico o escrito que pueda posteriormente ser analizado. Analizar los datos obtenidos con los métodos de análisis apropiados a la entrevista. Verificar los resultados, con una metodología propia de entrevista de tipo cualitativo y de análisis del contenido. Informar (comunicar) verbalmente o por escrito de dichos resultados te- niendo en cuenta criterios científicos y la comprensibilidad de éstos. 1.6. CUESTIONES ÉTICAS El entrevistador, bien sea porque está recogiendo información, o in- cluso más aún porque lo esté haciendo desde un ámbito que implica una relación profesional (muchas veces de ayuda), ha de velar por el buen uso que se haga de los datos de los que le hace depositario el cliente. Por tanto, no preguntará sobre aquellos contenidos que no se ajusten al cliente por razones de edad, sexo o cultura; no se formularán preguntas sobre contenidos que no sean accesibles para el entrevistado (Márquez, 2004). A ello habría que añadir una especie de «máxima» en la evaluación: no preguntar nada que el entrevistador no sepa por qué lo está preguntando; el objetivo de la pregunta tiene que estar claro; detrás de cada pregunta ha de haber un porqué, un motivo y un propó- sito; o, dicho en otras palabras, no preguntar nada que no se sepa jus- tificar por qué se pregunta. Además de las normas deontológicas que deben regular la toma de decisiones a lo largo de todo el proceso diagnóstico y terapéutico, en esta particular interacción que viene dada por la asimetría de los roles, es el profesional el que, en primer lugar, tiene en sus manos una in- formación que sólo le pertenece al cliente, y en segundo lugar, se encuentra en la posición del que «dictamina». Ello implicará desde un punto de vista ético una doble consideración moral: la propia, siendo coherente con sus principios y valores sin dejar de ser honesto, autén- 44 tico y respetuoso con la persona con la que se establece esa relación PI00176601_01.indd 44 27/04/12 10:42 Definición y aspectos conceptuales de la entrevista asimétrica, y, por otra, aquella ética que le guía y marca su propia profesión. En resumen, los principios más directamente relacionados con la evaluación en general y con la entrevista particular serían (Ibá- ñez, 2010): ➪ Respeto, privacidad y confidencialidad, consentimiento infor- mado. ➪ Competencia referida a la ética, a su preparación, a su capaci- dad, a los procedimientos utilizados y la actualización de conoci- mientos. ➪ Integridad en cuanto al reconocimiento de los límites profesiona- les, imparcialidad, honestidad, prudencia, sinceridad, no tener conflicto de intereses. ➪ Los problemas que pueden surgir: incompetencia (real o sugeri- da por el usuario), negligencia, invasión de la intimidad, de pro- tección de la intimidad y merma de la garantía de secreto profe- sional. A lo anterior hay que añadirle todo lo referente a las garantías, ya no sólo de la confidencialidad de lo relatado, sino de los datos registrados y almacenados, es decir, de la protección «física» de datos y su guarda y custodia. 1.7. RESUMEN La entrevista es una técnica de evaluación psicológica, si bien, de- bido a su flexibilidad, puede cumplir otras muchas funciones y, de hecho, puede estar presente a lo largo de todo el proceso de evalua- ción-intervención. Se trata de una conversación que, a petición del entrevistado, tiene un propósito, un objetivo conocido, al menos, por el entrevistador. La vía de comunicación es tanto verbal como no ver- bal, estableciéndose un proceso bidireccional entre ambos comuni- cantes, cuya interacción se caracteriza por ser una relación asimétrica. Hay varios criterios de clasificación de la entrevista: grado de estruc- tura (estructuradas vs. no estructuradas), de participación o direc- ción (directivas vs. no directivas), ámbitos o fines (counselling, clínica, selección), funciones (evaluación y diagnóstico; motivadora y tera- péutica), temporalidad (screening, inicial, devolución, alta clínica) o según el marco teórico terapéutico (dinámico, fenomenológico, con- 45 ductual). 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