Los obreros cristianos - Lección 1 PDF
Document Details
Uploaded by Deleted User
Luciano
Tags
Related
- La Consolidación Del Reino Español PDF
- Los Reinos Cristianos (S. VIII-XIII) PDF
- Evolución territorial de los reinos cristianos en la Edad Media PDF
- 2.3 Los reinos cristianos: Evolución de la conquista de la Península y organización política PDF
- Secuencia 4: Reinos Cristianos [711-1037] PDF
- La Sociedad Andalusí PDF
Summary
Esta lección introduce el concepto de la familia de Dios, explorando su desarrollo a través del Antiguo y el Nuevo Testamento, y cómo los cristianos pueden ser parte de la obra de Dios hoy. Se discuten tres aspectos clave del plan de Dios para su familia: ser como su Hijo, llevar el evangelio y pasar la eternidad con él.
Full Transcript
16 1 La familia de los LECCIÓN obreros de Dios Luciano, quien ha sido cristiano desde hace sólo dos meses, se deleita con las hermosas verdades que descubre en su estudio de la Palabra de Dios. Él lee acerca de las maneras en que Dios le ha...
16 1 La familia de los LECCIÓN obreros de Dios Luciano, quien ha sido cristiano desde hace sólo dos meses, se deleita con las hermosas verdades que descubre en su estudio de la Palabra de Dios. Él lee acerca de las maneras en que Dios le habló al mundo y descubre un patrón interesante que está tejido a través de la Biblia. Cuando lee la Biblia, él ve que Dios siempre ha tenido una familia, y que esta familia ha llevado a cabo su obra en el mundo. Lee acerca de los profetas que vivieron en la época del Antiguo Testamento, y de los discípulos y apóstoles de la iglesia primitiva en la época del Nuevo Testamento. Ve cómo estos hombres y mujeres han comunicado a otros el mensaje de Dios. Luciano se encuentra diciendo en sus oraciones: “Señor, ¿cómo puedo ser parte de tu obra?” Esta oración se ha convertido en el ruego de su corazón cuando ve las necesidades del mundo que lo rodea. ¿Es esta oración el clamor del corazón de usted? Al estudiar esta primera lección comenzará a descubrir cuál es el plan de Dios para usted y cómo usted puede ser parte de su obra hoy. La familia de los obreros de Dios 17 El plan A. Dios tiene una familia B. El plan de Dios para su familia Los objetivos 1. Hablar del desarrollo de la familia de Dios. 2. Declarar tres cosas que Dios planea para su familia. A. Dios tiene una familia Objetivo 1. Hablar del desarrollo de la familia de Dios. La familia de Dios en el Antiguo Testamento El libro de Génesis dice que Dios creó al hombre y a la mujer a su semejanza y que le agradó lo que había creado (Génesis 1:27, 31). Aunque Dios creó a todos los seres vivientes, sólo los humanos podían tener comunión con su Creador. Dios quería compartirse a sí mismo con la humanidad. Él quería una familia. Pero la comunión con el Creador pronto fue interrumpida por el pecado de Adán y Eva (Génesis 3:1–24). Aun así, Dios todavía tenía una familia, y a través de la historia Él continuó la comunión con los que le obedecían. En Génesis 4:26 leemos que la gente comenzó a invocar el santo nombre del Señor en adoración. La historia de Noé indica claramente que Dios tenía una familia en esa época. “Y lo hizo así Noé; hizo conforme a todo lo que Dios le mandó” (Génesis 6:22). Dios ya tenía hombres que hicieran su obra. Comenzando con Abraham, tenemos un registro completo de una familia, la que llegó a ser la nación judía―el pueblo especial de Dios. Era un pueblo con una misión que Dios le había dado. Esta nación judía se llamaba Israel. Entre sus líderes estaba Moisés, quien sacó a los hijos de Israel de 18 Obreros cristianos Egipto; David, un poderoso rey; los profetas, que comunicaban el mensaje de Dios al pueblo; y muchos otros. Podemos seguir la historia del pueblo especial de Dios a través del Antiguo Testamento. Muchos de ellos obedecían a Dios y hacían su obra. Aplicación 1 Escriba el número de la persona (lado derecho) frente a cada frase que diga algo de ella (lado izquierdo). a Fue un poderoso monarca de Israel. 1) Abraham 2) Moisés b Sacó a Israel de Egipto. 3) David c El registro de la nación judía comienza con él. Compruebe sus respuestas con las que están al final de esta lección. La familia de Dios en el Nuevo Testamento Cuando Jesús, el Hijo de Dios, vino a la tierra, Él trajo consuelo y ayuda, sanidad y perdón. Pero Él también tenía una obra más grande que sólo Él podía hacer. Él dio su sangre como el sacrificio perfecto por el pecado. Todos los sacrificios de animales que Dios ordenaba en el Antiguo Testamento señalaban a Cristo. Después que Jesús se dio a sí mismo, ya no hubo necesidad de los sacrificios de animales. La muerte de Jesús estaba dentro de la voluntad de Dios, pues Jesús había venido para hacer la voluntad de su Padre. Jesús dijo: “Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra” (Juan 4:34). Complacido con la obra de su Hijo, Dios resucitó a Jesús de los muertos. Y después de pasar cuarenta días con sus discípulos, Jesús volvió al cielo (Hechos 1:3–9). La familia de los obreros de Dios 19 ¿Qué debían hacer los seguidores de Jesús cuando su líder se fue? Él se lo había dicho antes de partir. Debían ir por todo el mundo y predicar el evangelio (Hechos 1:8). En el libro de Hechos leemos acerca de hombres y mujeres que trabajaban para Jesús después que Él volvió al cielo. Algunos de éstos habían seguido a Jesús cuando Él estaba en la tierra. Dos de ellos, Pedro y Juan, iban camino al templo para orar cuando se encontraron con un mendigo cojo de nacimiento. Siendo que no tenían dinero que darle, Pedro le dijo: “No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda” (v. 6). Pedro lo tomó de la mano y le ayudó a levantarse. El hombre se fue caminando, saltando y alabando a Dios (Hechos 3:1–10). La obra de Jesús continuó a través de Pedro y Juan, pues muchos se hacían cristianos y la iglesia crecía. Otro obrero especial de quien leemos en el libro de los Hechos era el apóstol Pablo. Antes de comprender el mensaje de Cristo él perseguía a los cristianos. Pero después de un encuentro personal con Jesús, Pablo llegó a ser uno de los obreros más fieles de la iglesia. Estableció iglesias en muchos países. Aplicación 2 (Escriba en el blanco.) Una vez un perseguidor de cristianos,.......... después creyó en Jesús. a) Juan b) Pablo c) Pedro La familia de Dios hoy La obra de Jesús continúa hoy―más de 2.000 años después que Jesús volvió al cielo. Antes de irse, Jesús mandó a sus discípulos: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16:15). El mandamiento de Jesús es para 20 Obreros cristianos los creyentes de todas las generaciones. Las palabras de Jesús son para nosotros hoy. Cuando se recibe y se cree en el mensaje de la salvación de Dios, la familia de Dios continúa creciendo. Los hombres y mujeres piadosos de la época del Antiguo Testamento, los creyentes de la iglesia primitiva y los creyentes de hoy son todos hijos de Dios y parte de su familia que continúa. Dios le habla al mundo a través de su familia. Jesús está en el cielo, pero su obra en la tierra continúa a través de nosotros. El mensaje de vida, el mensaje de salvación por fe en el Hijo de Dios siempre será divulgado, pues ese es el trabajo de los cristianos. Aplicación 3 El versículo bíblico que nos dice cuál es el mandamiento de Jesús para nosotros hoy es a) Génesis 6:22. b) Marcos 16:15. c) Hechos 3:1. 4 Encierre en un círculo la letra que está frente a cada declaración CORRECTA. a) La familia de Dios comenzó en el Nuevo Testamento. b) La familia de Dios incluye a la gente que vivió antes que Jesús viniera a la tierra. c) Los creyentes en Jesús hoy son parte de la familia de Dios. d) No les era posible a los que vivían en la época de Moisés ser parte de la familia de Dios. B. El plan de dios para su familia Objetivo 2. Declarar tres cosas que Dios planea para su familia. Sabemos que Dios tiene una familia y que la ha tenido desde la creación de Adán. Ahora pensemos en sus esperanzas y planes para su familia. La familia de los obreros de Dios 21 Ser como su Hijo ¿Le sorprendería enterarse de que Dios busca su imagen en sus hijos? Romanos 8:29 dice: “Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo”. Nada le agrada más a un padre que ver su imagen en sus hijos. Dios quiere que nuestra vida y nuestros deseos sean como los de Él. Debemos procurar ser justos y santos así como Él es justo y santo. Entonces seremos como su Hijo. A menos que seamos como su Hijo no podremos continuar con la obra de su Hijo aquí en la tierra. Una vez un misionero fue a un nuevo país para predicar el evangelio. Él creía que nadie había visitado este país antes para testificar de Jesús. Cuando el misionero habló de la asombrosa personalidad de Jesús y de sus obras maravillosas, la gente respondió: “Ah sí, Jesús estuvo aquí. Nosotros lo hemos visto”. El misionero sabía que no podía ser cierto, pero al seguir la plática con la gente lo comprendió todo. Otro misionero había estado ahí dos años antes. ¡Era tanto como Jesús, que la gente creyó que había visto a Jesús! Debemos ser como el Hijo de Dios si es que hemos de continuar con su obra. Debemos andar con Él, hablar con Él, leer y obedecer su Palabra. Debemos tratar de saber cuál es su voluntad y hacerla. Entonces llegaremos a ser como Él. Aplicación 5 Cuando decimos que Dios quiere ver su imagen en nosotros queremos decir que debemos ser como Él en a) apariencia física. b) carácter. c) rasgos externos. Llevar el evangelio Tenemos el mandamiento de Jesús de llevar el evangelio a todo el mundo. ¿Qué quiere decir esto? En primer lugar, 22 Obreros cristianos debe haber obreros dispuestos a ir. Luego debe haber obreros que oren por los que van. También debe haber obreros que los apoyen económicamente para que puedan ir y predicar. En la obra del evangelio se necesitan biblias y materiales didácticos. Cuando se establece una iglesia, se necesita de mucha gente para enseñar, orar, visitar a los enfermos, consolar a los que sufren. Algunos serán necesarios para construir el edificio de la iglesia y otros para limpiarlo. En la obra de Dios hay lugar para todo el que esté dispuesto a trabajar. Todos los cristianos deben estar dispuestos a trabajar para la gloria de Dios. Pasar la eternidad con Él Al final del día los padres reciben con alegría en casa a sus hijos. Aun cuando los hijos son mayores y viven lejos del hogar, los padres todavía quieren verlos y estar juntos con ellos. Jesús dijo: “En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros” (Juan 14:2). Dios espera con ansia el día cuando su familia vuelva a casa. Él sabe que el día se acerca, de modo que ha preparado y planeado una reunión de la familia que será para la eternidad. En esa celebración, el Padre dará recompensas. Jesús dijo que habrá una recompensa especial para los que han padecido por su nombre: “Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos” (Mateo 5:12). Aplicación 6 Suponga que usted quiere hablarle a un amigo de los planes que Dios tiene para la familia de Dios. Escriba abajo las tres cosas que usted compartiría y una cita bíblica para cada una. a)................................................ b)................................................ c)................................................ 24 2 Los obreros en la LECCIÓN primera iglesia A medida que Luciano aprendía lo que significaba para él ser parte de la familia de Dios, él comenzó a entender lo que incluía el plan de Dios para él. Su deseo de ser parte de la obra de Dios siguió creciendo, pero se dio cuenta de que también había muchos otros creyentes. Luciano comenzó a estudiar con más cuidado la iglesia en el libro de los Hechos. ¿Qué era lo que unía a esos primeros creyentes? se preguntaba. ¿Qué clase de gente eran? ¿Qué sucedía cuando se reunían? Al descubrir las respuestas a estas preguntas, él descubrió por qué era importante reunirse y trabajar con otros creyentes. Él vio el propósito de Dios para la iglesia. Los obreros en la primera iglesia 25 El plan A. La primera iglesia B. La iglesia hoy Los objetivos 1. Identificar por qué los primeros creyentes se reunían. 2. Demostrar similitudes entre la primera iglesia y la iglesia de hoy. A. La primera iglesia Objetivo 1. Identificar por qué los primeros creyentes se reunían La primera iglesia se componía de gente común y corriente que tenía necesidades, problemas, temores y preocupaciones. Aunque esta gente común y corriente había recibido a Cristo como su Salvador, era imperfecta. Por ejemplo, Pedro era creyente, pero en un instante lleno de presión, negó conocer al Señor (Marcos 14:66–72). Tomás también era creyente, pero dudó de que Jesús se hubiera levantado del sepulcro (Juan 20:24–25). Desde el día en que Juan el Bautista anunció: “He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” (Juan 1:29), muchos siguieron a Jesús. Pero con igual rapidez, Él tenía hacía. Sus enseñanzas no siempre coincidían con las enseñanzas de los gobernantes y de los sacerdotes. Desde el principio ellos planearon darle muerte. La misma gente que maltrató a Jesús también maltrató a sus seguidores. En Hechos 9:1–2 leemos que antes de creer en Jesús, Saulo (más tarde llamado Pablo) recibió permiso del sacerdote para destruir a los cristianos. ¿Por qué se reunían los cristianos si sabían que podrían ser encarcelados o golpeados? Se reunían porque se necesitaban mutuamente. 26 Obreros cristianos Aplicación 1 Suponga que un amigo le confiesa que no puede ser creyente porque tiene muchas dudas. ¿Cuáles serían los mejores versículos para compartir con él para animarlo? a) Marcos 14:66–72 b) Juan 20:24–25 c) Hechos 9:1–2 En Hechos 12, Pedro había sido encarcelado por predicar. Después que un ángel lo puso en libertad, él encontró a los creyentes reunidos orando por él. La necesidad de enseñanza con frecuencia reunía a los creyentes. Por ejemplo, Aquila y Priscila llevaron a su casa a Apolos poder explicarle el camino de Dios más correctamente (Hechos 18:26). Pablo les dijo a los creyentes de Colosas que se enseñaran e instruyeran mutuamente (Colosenses 3:16). Y había ocasiones cuando los creyentes necesitaban estar juntos para tomar decisiones, como vemos en Hechos 6:1–6. Estos ejemplos muestran que las necesidades reunían a los creyentes. Aplicación 2 Aquila y Priscila se reunieron con Apolos para a) oírlo predicar. b) explicarle el camino de Dios. c) tomar decisiones. Es raro que los miembros de una familia se nieguen a ayudarse mutuamente. Cuando algunas de las viudas de la iglesia creían que no recibían lo que les correspondía, los discípulos hallaron una manera de atender su necesidad (Hechos 6:1–6). Sabemos que Dorcas confeccionaba ropa para las viudas necesitadas (Hechos 9:39), y que otros compartían su hospitalidad (Hechos 16:15). La iglesia estaba compuesta de creyentes que ayudan a los demás. Los obreros en la primera iglesia 27 Pablo era uno de los apóstoles mejor conocidos de la iglesia. Cuando tuvo necesidad material, la iglesia de Filipos compartió con él, y Pablo les dio las gracias por ello (Filipenses 4:14–16). Estos eran creyentes comunes y corrientes que estaban dispuestos a ayudar. ¡Pero qué impresionante ministerio extendieron a Pablo! Pablo les dijo a los corintios que Dios los había consolado en sus sufrimientos para que ellos pudieran hacer lo mismo con otros (2 Corintios 1:4). Esta era otra forma en que los creyentes se ayudaban mutuamente. El libro de los Hechos registra que los creyentes se enseñaban, se animaban y se consolaban mutuamente. La iglesia estaba llena de obreros que atendían las necesidades de la gente. Así se fortalecía la iglesia. Aplicación 3 Empareje cada versículo bíblico que describe a la primera iglesia (lado izquierdo) con la frase que dice por qué se reunían los creyentes (lado derecho). a Hechos 6:2–6 1) Para orar los unos por los otros 2) Para aprender acerca de Dios b Hechos 11:22–23 3) Para atender las necesidades c Hechos 11:29–30 materiales 4) Para consolarse y animarse d Hechos 12:5, 12 mutuamente e Hechos 14:22 5) Para escoger gente para cierto f Hechos 18:26 trabajo Podemos ver de nuestro estudio que los miembros de la primera iglesia trabajaban juntos. Cuando alguien estaba en necesidad, los creyentes oraban, mandaban comida, daban ropa o consolaban. Si alguien no entendía el camino de Dios, los creyentes le enseñaban. Si alguien fracasaba de cualquier forma, los creyentes le ayudaban a seguir al Señor. Había cooperación y cuidado. En un tiempo los creyentes compartían sus bienes para que todos tuvieran lo suficiente 28 Obreros cristianos (Hechos 4:32-35). Cuando había peligros, se protegían los unos a los otros (Hechos 9:29-30). El ministerio del cuerpo de Cristo en la primera iglesia era ayudarse mutuamente y a cualquiera que estuviera necesitado B. La iglesia hoy Objetivo 2. Demostrar similitudes entre la primera iglesia y la iglesia de hoy. Usamos la palabra iglesia para referirnos a la asamblea o reunión de aquellos a quienes Dios ha sacado del mundo para que le pertenezcan a Él. Puesto que la iglesia no es un edificio sino la gente que se reúne, usted es parte de la iglesia si cree en Jesús, aunque no haya un edificio especial para que usted adore. La iglesia incluye a gente de todas las razas. Podríamos hablar distintos idiomas, pero somos un solo cuerpo. Dios quiere que el mundo vea a Jesús a través de su iglesia. La iglesia es la continuación de la obra de su Hijo en la tierra. Los creyentes han de llevar el mensaje de vida y sanidad a las naciones. Este es el propósito de Dios para la iglesia hoy. Las necesidades de la gente no cambian. Por eso el ministerio de la iglesia hoy es el mismo que era al principio. Sabemos que todos necesitan ser salvos, de manera que la iglesia predica a Cristo como el que perdona el pecado. Los creyentes necesitan el poder de Dios en su vida, por lo que la iglesia les insta a ser llenos del Espíritu Santo. Hay necesidad de ánimo y consuelo, por lo que la iglesia ofrece momentos para compartir y tener comunión. Muchos necesitan sanidad, dirección o consejo. Dios nombra a pastores y líderes para que ayuden de estas maneras. Los obreros en la primera iglesia 29 Aplicación 4 (Escoja la respuesta correcta.) La razón más importante por la que los creyentes deben reunirse es para a) orar por los que están encarcelados. b) ser como la primera iglesia. c) ministrar a sus necesidades mutuas. d) conocer a gente de otras razas. Podemos recibir fortaleza cuando estamos con el cuerpo de la iglesia. Esta fortaleza nos ayudará a vencer a Satanás, nuestro enemigo, que trata de desanimarnos y tentarnos a pecar. Cuando nos reunimos con nuestros hermanos, recibimos ayuda cuando se predica la Palabra y cuando cantamos y oramos juntos. No trate de vivir sin la ayuda de la iglesia. La iglesia está allí para ministrar a nuestras necesidades. En la iglesia se explica la verdad y la gente ora unida. Es un lugar donde los creyentes se sirven mutuamente en el amor de Cristo, donde se comparten las dificultades y se confiesan los pecados (Santiago 5:16). No todas las reuniones son iguales. En 1 Corintios 14:26 leemos: Cuando os reunís, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación. Hágase todo para edificación. Si todos tienen algo que decir o hacer, ¿quién debe dirigir? En Efesios 4:11–16 se nos dice que Dios le ha dado dones a la iglesia. Estos dones incluyen a los líderes. En casi todas las iglesias un pastor, o un líder, dirige el culto. Un evangelista o maestro es también un don de Dios para la iglesia. Nadie trabaja solo. “Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios” (1 Corintios 3:9). 30 Obreros cristianos Aplicación 5 Las siguientes declaraciones eran ciertas respecto a la iglesia en el libro de los Hechos. ¿Cuáles también deben ser verdad en la iglesia hoy? a) Comenzó en Jerusalén y fue dirigida por los apóstoles Pedro, Juan, Pablo y otros. b) Se reunía para enseñar y orar. c) Fue perseguida por el apóstol Pablo antes que él creyera en Jesús. d) Oró que el apóstol Pedro fuera libertado de la cárcel. e) Compartía sus bienes con los que tenían necesidades. 6 ¿Es usted parte de alguna iglesia? Sí así es, conteste las siguientes preguntas: a) ¿Con cuáles necesidades suyas le están ayudando los líderes y otros creyentes? b) ¿Con cuáles necesidades de otros creyentes está usted ayudando? c) ¿Con cuáles necesidades suyas y de otros creyentes todavía no han recibido ayuda? 32 3 El plan de Dios para LECCIÓN los obreros Luciano vio que los creyentes se reunían por muchas diferentes razones ―necesidades de enseñanza, de ánimo, de ayuda material, de dirección y de fortaleza. Pero Luciano quería saber más sobre cómo debía ser la iglesia para verdaderamente poder satisfacer esas necesidades. Quería saber cómo debían funcionar a una todas sus diferentes partes. A medida que Luciano seguía estudiando la Biblia, encontró varias imágenes o ilustraciones de la iglesia. Cada una le ayudó a entender mejor el propósito y el plan de Dios para ella. También descubrió que los que eran miembros de la iglesia tenían ministerios―capacidades especiales para ayudarse mutuamente. Si los miembros de la iglesia usaban sus capacidades, la iglesia podía cumplir el propósito de Dios. ¡Luciano se asombró al ver cuántas capacidades había! Usted está a punto de descubrir más acerca del propósito que Dios para su iglesia y los ministerios de sus miembros. Ojalá que las verdades que aprenda en esta lección lo inspiren a ser parte del propósito de Dios y a integrarse en su plan para su iglesia. El plan de Dios para los obreros 33 El plan A. Imágenes de la función de la iglesia B. El cuerpo en acción Los objetivos 1. Usar tres ilustraciones para describir la iglesia. 2. Diferenciar entre la obra de Cristo como la cabeza del cuerpo y la de los creyentes como miembros del cuerpo. A. Imágenes de la función de la iglesia Objetivo 1. Usar tres ilustraciones para describir a la iglesia. Una esposa Como creyentes en Jesucristo, nos reunimos para adorar a Dios, animarnos unos a otros y dar a conocer a Cristo otros. Al trabajar unidos, logramos hacer más para su Reino. El Nuevo Testamento nos da varias ilustraciones de la iglesia. Veremos tres de ellas: una esposa, un edificio y un cuerpo humano. El apóstol Pablo usó la ilustración de una desposada para ayudar a que los creyentes corintios comprendieran cuál era su relación con el Señor Jesucristo. Pablo escribió: “Porque os celo con celo de Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen pura a Cristo” (2 Corintios 11:2). Apocalipsis usa esta misma imagen para describir las bodas del Cordero (Cristo) y su esposa (la iglesia). “Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado” (Apocalipsis 19:7–8). Un ángel del Señor habló a Juan, el escritor del libro de Apocalipsis diciéndole: “Ven acá, yo te mostraré la desposada, la esposa del Cordero” (Apocalipsis 21:9). Se describe a la iglesia como la esposa de Cristo para ayudarnos a entender nuestra íntima relación con Cristo. 34 Obreros cristianos Un edificio Así como el apóstol Pablo comparó a la iglesia con una esposa, así otro escritor bíblico la comparó con un edificio. Las piedras eran un material de construcción muy común en Israel, por eso era natural que Pedro pensara en las piedras para hablarnos de un edificio. En 1 Pedro 2:4–5 él nos insta a edificarnos para ser un templo espiritual de piedras vivas. Fíjese que sólo hay un edificio pero muchas piedras, así como hay muchos creyentes pero sólo una iglesia. Primera Corintios 3:9 también dice que somos edificio de Dios. Nos convertimos en vivienda de Dios. Él vive en cada uno de nosotros los creyentes, pero es también importante que entendamos que todos los creyentes juntos formamos un edificio espiritual donde Dios vive. Un cuerpo Una tercera imagen o ilustración de la iglesia la compara con un cuerpo humano (Efesios 1:23; Romanos 12:4–5). El cuerpo de Cristo no es sólo un grupo de creyentes reunidos en un lugar. Sus miembros son como las diferentes partes del cuerpo que trabajan unidas. Aunque son diferentes entre sí, hay unidad de propósito y de corazón. De manera que el cuerpo no expresa la idea de sólo un miembro; se presenta como una unidad completa. El cuerpo de Cristo, la iglesia, se compone de muchos miembros que forman un solo cuerpo que trabaja unido. Aplicación 1 Encierre en un círculo la letra que corresponde a cada versículo bíblico que compara a la iglesia con un edificio. a) Romanos 12:4–5 b) 1 Corintios 3:9 c) 1 Corintios 10:17 d) Efesios 1:23 e) 1 Pedro 2:4–5 El plan de Dios para los obreros 35 2 Cada una de las tres ilustraciones de la iglesia muestra una verdad especial. Empareje la ilustración (lado derecho) con la verdad que usted cree que enfatiza más (lado izquierdo). a Vivienda de Dios 1) Esposa 2) Edificio b Partes que trabajan unidas 3) Cuerpo c Íntima relación con Cristo B. El cuerpo en acción Objetivo 2. Diferenciar entre la obra de Cristo como la cabeza del cuerpo y la de los creyentes como miembros del cuerpo. Una de las grandes maravillas de la creación de Dios es el cuerpo humano, que tiene la capacidad de sanarse a sí mismo y de recobrarse después de un accidente o enfermedad. El cuerpo de Cristo, la iglesia, también tiene esta capacidad. Cuando llegan problemas, tiene una manera de sanarse por medio del Espíritu Santo. Esta capacidad de sanarse da mejor resultado mejor si cada una de las partes está presente y todas trabajan unidas. Dios quiere que la iglesia sea un cuerpo saludable al que no le falte ninguna parte. Considere cómo es que trabaja el cuerpo de Cristo. Cristo es la cabeza En la Biblia, el ejemplo del cuerpo humano se usa para demostrar la manera en que los creyentes trabajan unidos con Cristo. El cuerpo humano sin la cabeza es inútil. La cabeza de la iglesia es Jesucristo. En el cuerpo humano, la cabeza dirige al cuerpo y hace que todas las partes funcionen como una unidad. La cabeza controla las actividades del cuerpo. Cuando el cuerpo necesita algo, la cabeza está consciente de ello. De la misma manera es la obra de Cristo, la cabeza, dirigir las diferentes partes del cuerpo para que trabajen unidas y se ayuden mutuamente. 36 Obreros cristianos Un hermano podría estar sufriendo y en necesidad de ayuda. Como la cabeza, Cristo le dice a otro miembro del cuerpo que ore por el enfermo. Cuando el maestro se está preparando para impartir un estudio bíblico, él ora y Cristo le da dirección. Acuden a su mente pensamientos que le ayudarán a enseñar. Esta es la obra de Cristo como cabeza. A veces Cristo nos da instrucciones, pero las desobedecemos. Esto estorba la obra de la iglesia. Se cuenta la historia de una mujer a quien el Espíritu Santo le puso en el corazón que diera dinero a una familia pobre. Ella pensó obedecer pero siempre estaba muy ocupada con su trabajo. Pasaron tres días antes que le diera el dinero a la familia. La madre le dijo: “¡Gracias, muchas gracias! Hace tres días que no comemos y Dios ha contestado nuestras oraciones”. Como la cabeza, Cristo imparte dones a su iglesia para darle lo que necesita para hacer su obra. Antes de volver cielo, Jesús prometió mandar al Espíritu Santo. El día de Pentecostés, Él mandó al Espíritu Santo (Hechos 1-2). Dios quiere que cada uno de nosotros, como miembros de la iglesia, recibamos el don del Espíritu Santo (Hechos 2:38-39). La iglesia debe cooperar con Cristo. Cuando nosotros, los miembros de la iglesia, oramos el Espíritu Santo nos ayuda a entender lo que Cristo quiere que hagamos. Aplicación 3 La relación de Cristo con la iglesia se compara con la cabeza de un cuerpo humano para demostrar que a) la iglesia debe ser dirigida por Cristo. b) cada miembro del cuerpo tiene una función diferente. c) el cuerpo humano es inútil sin la cabeza. Los creyentes son el cuerpo Por medio de su cuerpo, Cristo continúa su obra en el mundo. Dios ha dado diferentes dones y ministerios a los miembros del cuerpo para poder hacer esta obra. Estos dones y El plan de Dios para los obreros 37 ministerios también mantienen vigoroso al cuerpo y le ayudan a combatir el mal. Cuando cada uno de los miembros, lleno del Espíritu Santo, permite que la vida de Cristo fluya a través de su ser, la iglesia es fortalecida. Estudiemos estos dones y ministerios, que se mencionan en Efesios 4:11, Romanos 12:6–8 y 1 Corintios 12:8–10. Lea cada uno de estos pasajes y preste atención especial a las siguientes explicaciones: 1. El apóstol es enviado a establecer nuevas iglesias. 2. El profeta anuncia la Palabra de Dios. 3. El evangelista va de un lugar a otro predicando el evangelio. 4. El pastor dirige a la iglesia como el pastor dirige a las ovejas. 5. El maestro explica la Palabra de Dios. 6. El que exhorta llama a la gente a acercarse más a Dios y a su propósito. 7. Servir quiere decir dar alivio y ayuda. 8. Compartir es dar, ya sea dinero, tiempo o talentos, para difundir el evangelio. 9. El que tiene autoridad gobierna sabiamente a sus subalternos. 10. El que demuestra bondad da ayuda práctica a los necesitados. 11. Un mensaje divino de sabiduría da consejo o palabras oportunas. 12. Conocimiento es el uso de información y hechos para una necesidad particular según dirija Dios. 13. Fe es creer en Dios de una manera especial. 14. Poder para sanar es la capacidad de orar por los enfermos con eficacia. 38 Obreros cristianos 15. Poder para hacer milagros es una habilidad especial para hacer cosas que superan las leyes naturales. 16. El que pronuncia mensaje profético de Dios fortalece, consuela o anima a los demás. 17. La habilidad de distinguir la diferencia entre los dones que proceden del Espíritu Santo y los que no proceden de Él es saber si el Espíritu de Dios está presente o no. 18. La habilidad de hablar en lenguas extrañas es el poder para decir cosas por el Espíritu Santo en un idioma desconocido para el que habla. 19. La habilidad de explicar lo que se ha dicho es el poder de dar el significado de las palabras expresadas en un idioma desconocido. Cuando estos dones están activos entre los creyentes, el cuerpo recibe bendición y fortaleza, y hace la obra de Dios. Aplicación 4 Empareje cada necesidad (lado izquierdo) con el don o ministerio que ayudaría mejor a subsanar esa necesidad (lado derecho). Escriba el número del don frente a la necesidad que podría subsanar. a Sara se siente desanimada. 1) Enseñanza 2) Ánimo b Jaime está muy enfermo. 3) Poder para sanar c Roberto no entiende la Biblia. 4) Mostrar bondad d La familia de Luis necesita ropa. e Susana quiere aprender acerca de los dones espirituales. 40 4Yo puedo ser obrero LECCIÓN Ahora Luciano entiende más acerca de la iglesia y los ministerios que Dios ha dado a sus miembros. A medida que examina a la iglesia, ve que no todos tienen el mismo ministerio. Están los que predican y enseñan, los que dan mensajes de sabiduría y conocimiento, y los que sirven y comparten. Hay muchas diferentes maneras en que Luciano podría ayudar a sus hermanos en el Señor, pero hay más cosas que le gustaría saber. Por ejemplo, quiere saber cómo trabajar para Dios, y le gustaría saber cómo descubrir y recibir los dones de ministerio que Dios tiene para él. ¡Usted también se podría haber preguntado esas mismas cosas! Usted podría ser creyente desde hace mucho tiempo pero cree que no hay nada especial que usted puede hacer. Dios tiene un ministerio para usted. Primera Corintios 12:7 nos asegura que “a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho”. Que las verdades de esta lección le muestren cómo usted puede descubrir cuál es su ministerio especial en el cuerpo de Cristo. Yo p u e d o s e r o b r e r o 41 El plan A. Ayuda especial para los obreros B. Dones para los obreros C. Un don para usted Los objetivos 1. Identificar de dónde viene la ayuda para el obrero cristiano. 2. Decir cómo Dios escoge a la persona para trabajar para Él. 3. Describir la parte que Dios tiene en darnos los dones de ministerio. A. Ayuda Especial Para Los Obreros Objetivo 1. Identificar de dónde viene la ayuda para el obrero cristiano. Una gran tarea Jesús mandó: “Id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado” (Mateo 28:19–20). Esta es nuestra tarea―hacer discípulos y enseñarles. La mayoría del mundo no es salvo, de modo que los obreros cristianos tienen el deber de ayudar a que las masas a oigan el evangelio. No podemos descuidar esto. Jesús dejó el mandamiento para que sus seguidores lo obedecieran. Esta es una gran tarea para la que necesitamos la ayuda especial de Dios. Tenemos un enemigo Solos no podemos vencer a nuestro enemigo. Nuestro enemigo es Satanás, quien quiere ver que la obra de Dios fracase. Si el obrero cristiano fracasa, la obra de Dios padece. ¿Recuerda la historia de Sansón en Jueces 16? Sansón fue apartado para un trabajo especial para Dios. Pero por un 42 Obreros cristianos momento se descuidó del llamado de Dios. De modo que Sansón perdió la presencia de Dios y quedó sin ningún poder para vencer a sus enemigos. Tenemos el poder de Dios Puesto que la tarea es inmensa y el enemigo es fuerte, Dios nos da ayuda especial para trabajar para Él. Jesús dio a sus discípulos poder para que fueran sus testigos (Hechos 1:8), y hoy nosotros tenemos ese mismo poder del Espíritu Santo. Dios quiere que el mundo sea salvo, por eso nos ha dado al Espíritu Santo para que nos ayude a hacer la voluntad del Padre en la tierra. Dios da el poder, y nosotros trabajamos para Él usando su poder. Aplicación 1 Leemos del poder que Dios nos da para hacer su obra en a) Mateo 28:19. b) Marcos 16:15. c) Hechos 1:8. 2 La ayuda especial para el obrero cristiano viene a) del poder que ha recibido del Espíritu Santo. b) de un profundo deseo de servir a Dios. c) de la obra para la que ha sido apartado. B. Dones para los obreros Objetivo 2. Decir cómo Dios escoge a la persona para trabajar para Él. Dios es omnisciente. Él ve la obra y al obrero. En su sabiduría Él puede elegir a la persona correcta para el lugar correcto. De modo que Él nos llama a trabajar para Él. A veces recibimos el llamado mientras leemos la Biblia. El Espíritu Santo puede usar la Palabra inspirada de Dios para hablarnos. En nuestro corazón llega a ser un llamado a servirle. O Dios puede ponernos una carga en el corazón Yo p u e d o s e r o b r e r o 43 mientras oramos. Podríamos interesarnos en un lugar que necesita el evangelio. Mientras trabajamos para ayudar a llevar el evangelio allí, sentimos en el corazón que Dios quiere que vayamos como obreros a ese lugar. El llamado de Dios también puede llegar cuando los creyentes buscan al Señor. En Hechos 13:2, el Espíritu Santo instruyó a la iglesia de Antioquía: “Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado”. Dios no llama a todos a la misma obra. Por ejemplo, Dios podría llamar a un hombre de negocios a ser un testigo de Cristo con la manera en que maneja su negocio. Una mujer podría ser ama de casa y dar un testimonio santo en su comunidad, testificando a sus vecinos y orando por los que predican y enseñan la Palabra. Nadie queda excluido del llamado de Dios. Así como nadie es igual a otro, un llamado tampoco es igual a otro. Dios lo necesita a usted para que sea un obrero cristiano. Cuando sienta que el Espíritu le habla al corazón, préstele atención. Aplicación 3 Suponga que un amigo le pregunta cómo es que Dios llama a la gente a trabajar para Él. En su cuaderno haga una lista de por lo menos tres maneras en que Dios hace esto. Dios capacita Cuando la persona siente el llamado de Dios, podrá obedecer ese llamado porque Dios da a sus obreros los dones de ministerio. En la Lección 3 estudiamos estos dones. El primer don, el Espíritu Santo, fue dado el día de Pentecostés. Podemos hacer muchas cosas, pero para hacer una obra espiritual necesitamos la ayuda del Espíritu Santo. Por supuesto que un don no es algo que conseguimos por nuestros propios esfuerzos. Se nos da un don porque alguien tiene una necesidad. Dios da dones a los obreros cristianos porque tienen 44 Obreros cristianos necesidad de ellos. Pablo escribe: “a cada uno de nosotros fue dada la gracia conforme a la medida del don de Cristo” (Efesios 4:7). Aplicación 4 Dios capacita a los obreros para hacer su obra al a) ponerles una carga en el corazón. b) llamarlos a que trabajen para Él. c) darles los dones ministeriales que necesitan. C. Un don para usted Objetivo 3. Describir la parte que Dios tiene en darnos los dones de ministerio. Dios escoge nuestros dones Ya hemos dicho que Dios puede escoger a la persona correcta para el trabajo correcto. Esto indica varias cosas: 1. Dios sabe qué trabajo hemos de hacer. 2. Dios sabe qué dones necesitamos. 3. Dios nos dará esos dones. Suponga que cierta iglesia en su pueblo necesita pastor. Dios sabe de esta necesidad. En un pueblo cercano un creyente llamado Eduardo ora respecto al trabajo que él debe hacer. Él sabe de la necesidad de esa iglesia y siente que Dios quiere que se ofrezca para ser el pastor. ¿Cómo ayudaría Dios a Eduardo para cumplir con el trabajo de pastorear? Dios le daría los dones de ministerio según los necesite, pero Eduardo también debe hacer lo que pueda para prepararse para su trabajo y desarrollar sus dones. Quizás haya un instituto bíblico al pueda asistir para recibir preparación. O podría estudiar por correspondencia. Y así es con nosotros. Dios nos llama a trabajar para Él y escoge los dones que necesitamos. Los dones se adaptan tanto a la obra como al obrero. Dios sabe qué dones son importantes en nuestro trabajo. Él sabe cuáles se adaptan mejor a nosotros. Yo p u e d o s e r o b r e r o 45 Él escoge mejor que nosotros, así que podemos confiar en que Él escogerá lo correcto. Cuando Él nos dé un don, será exactamente lo que necesitemos para hacer el trabajo al que nos ha llamado. Dios usa nuestros dones Dios nos da capacidades especiales para servirle. Dios también puede usar cualquier capacidad o talento que dediquemos a Él. Por ejemplo, suponga que un hombre que sabe pintar acepta a Cristo. Si este hombre entrega a Dios su talento, Dios puede usarlo para bendecir a la iglesia. El hombre podría pintar un cuadro para adornar la iglesia. Podría pintar cuadros para ayudar a su maestro de escuela dominical a enseñar la lección. De esta manera, su talento podría ser un don para la iglesia. Cualquiera que sean sus dones o talentos, Dios los puede usar. En Romanos 16:1–2 se menciona a Febe, una sierva de la iglesia. No sabemos qué era lo que ella hacía. Pero seguramente Dios usó su vida porque el apóstol Pablo dice que “ella ha ayudado a muchos, y a mí mismo” (Romanos 16:2). No importa qué dones tenga el obrero cristiano, Dios puede usarlos para bendecir y ministrar a los demás. Aplicación 5 Encierre en un círculo la letra frente a cada declaración CORRECTA. a) Porque sabemos que es necesario trabajar para Dios, nos toca a nosotros escoger los dones que necesitamos. b) Siendo que Dios es quien decide a qué trabajo llamarnos, Él también decide qué dones darnos. c) Dios le dará al creyente tantos dones como necesite para hacer el trabajo al que lo ha llamado. d) Porque Dios nos da dones para servirle a Él, no necesitamos prepararnos. 46 Obreros cristianos Al recibir su don El apóstol Pablo escribió a los creyentes de Roma que una parte de la adoración es ofrecernos a Dios (Romanos 12:1). En las ofrendas de sacrificio del Antiguo Testamento, se apartaban animales para usarlos en la adoración. De una manera más figurativa, los cristianos se ofrecen para el servicio de Dios. El cristiano debe ofrecerse a Dios primero antes de poder recibir dones de Él. Piense en los dones cuando estudie el Nuevo Testamento. Familiarícese con la manera en que se usaban y cómo fortalecían al cuerpo. Fíjese cómo se usan los dones en su iglesia. Piense en cómo estos dones le ayudarían a usted como obrero cristiano. La razón por la que usted quiere recibir dones es importante también. No se da ningún don para engrandecer a la persona. Es algo malo desear un don para que la gente crea que uno es espiritual. Ore por la obra que usted hace. Desee los dones que dan poder para ministrar y ayudar a los demás. Comience con los dones que más le atraen. Piense en los dones que el Espíritu Santo pone en la mente. No olvide que Dios es quien da el don (1 Corintios 12:28, Efesios 4:11). Ore por y desee los dones, pero deje que Dios los escoja. Aplicación 6 Suponga que un amigo le pregunta qué puede hacer para recibir del Señor los dones de ministerio. En su cuaderno haga una lista de tres cosas que usted podría decirle que haga. 48 5Cómo ser obrero LECCIÓN Luciano está lleno de gozo. A medida que ha estudiado la Biblia y que ha pasado horas en oración buscando al Señor, el Espíritu Santo le ha mostrando cómo puede ministrar a otros. Se le pidió que fuera a la casa de un enfermo y que orara por él. Mientras oraba sintió la maravillosa unción y presencia del Espíritu Santo. Una semana después oró por un niño que tenía una fiebre muy alta. El niño fue sanado. Un domingo acompañó a otro creyente que predicaba todos los domingos en un pueblo cercano. Luciano dirigía los himnos y un culto de testimonios. También enseñaba una clase para niños varones. Luciano está entusiasmado al pensar en cómo Dios da a cada uno de nosotros dones para trabajar en la obra del Señor. Ahora que Luciano se ha dado cuenta de que puede ser obrero, quiere saber más acerca de qué clase de obrero debe ser y cómo puede desarrollar sus dones. Quizá también usted quiera saber más acerca de estas cosas. A medida que estudia esta lección, vea qué es lo que la Biblia dice acerca de ser un obrero cristiano. Y así aprenderá más a desarrollar sus dones de ministerio. Cómo ser obrero 49 El plan A. Siga el ejemplo de Cristo B. Desarrolle sus dones Los objetivos 1. Describir las cualidades del obrero cristiano. 2. Mencionar varias maneras de desarrollar sus dones de ministerio. A. Siga el ejemplo de Cristo Objetivo 1. Describir las cualidades del obrero cristiano. Sea siervo ¿Qué clase de persona era Jesús cuando vivía en la tierra? La Biblia lo muestra como alguien que se interesaba mucho por la gente y sus necesidades. No era egoísta. En Mateo 14:13–14 leemos que Jesús se entristeció cuando supo que Juan el Bautista había muerto. Jesús quería estar solo, pero la multitud lo siguió. ¿Él los rechazó cuando lo encontraron? No. Él tuvo compasión de ellos y atendió a las necesidades de ellos. Él hizo la voluntad de su Padre aunque estaba triste y quizás cansado. De la misma manera, el obrero cristiano no siempre podrá hacer lo que quiere hacer. Es siervo del Señor; el siervo hace lo que su amo quiere. En Juan 13:1–17 leemos que Jesús sirvió a sus discípulos lavándoles los pies. Al terminar les dijo: “Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros” (v. 14). Para lograr éxito como obreros cristianos debemos imitar a Jesús, quien “no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos” (Mateo 20:28). 50 Obreros cristianos Aplicación 1 Lea Juan 13:1-17. En su cuaderno, escriba una o dos oraciones explicando qué lección Jesús trataba de enseñarles a sus discípulos en el versículo 16. Tenga el fruto del Espíritu Cuando seguimos el ejemplo de Cristo, sus cualidades se ven en nosotros. La Biblia llama estas cualidades fruto. La persona llena del Espíritu Santo tiene la responsabilidad de cerciorarse de que el fruto del Espíritu Santo se vea en su vida. Dios no solamente nos da dones para el ministerio sino que también nos da poder para controlarnos y poder dar un buen testimonio. La gente puede recibir ayuda por nuestros dones, pero nuestra personalidad podría ser un obstáculo. Debemos tener cuidado de no permitir que ni el orgullo ni ningún otro vicio nos descalifique. Para este estudio vamos a considerar el fruto del Espíritu que se encuentra en Romanos 12:9–21. Se ha escogido esta porción para ayudarnos a entender más cómo trabajar para el Señor. Nos muestra cómo debe ser la persona que ministra. Usted puede ayudarse al estudiar la lista, orar por su propia vida y pedir la ayuda del Espíritu Santo. No se desanime. Ningún obrero es perfecto, pero podemos llegar a ser como Cristo cuando lo amamos y le servimos. Cómo ser obrero 51 El obrero cristiano debe… tener amor. aborrecer lo malo. seguir lo bueno. amar a otros creyentes. demostrar honor y respeto. no ser perezoso. ser de espíritu diligente. servir al Señor. ser gozoso. ser paciente en las dificultades. orar siempre. compartir lo que tiene. abrir su casa a los necesitados. bendecir a los que persiguen a los creyentes. llorar con los que lloran. mostrar el mismo interés por todos. no ser orgulloso ni arrogante. aceptar trabajos humildes. no pagar mal por mal. procurar hacer lo bueno delante de todos los hombres. tratar de vivir en paz con todos. dar de comer al enemigo. vencer el mal con el bien. 52 Obreros cristianos Aplicación 2 Lea los versículos bíblicos a continuación. Luego empareje cada uno de ellos (lado izquierdo) con la cualidad o requisito que dé el mejor ejemplo de él (lado derecho). a Juan 11:32-36 1) Ser paciente en las dificultades b Hechos 16:22-25 2) Compartir lo que tiene c Filipenses 4:14-16 3) Llorar con los que lloran d Apocalipsis 1:9 3 ¿Las cualidades o requisitos de la lista anterior son parte de su vida? Subraye todas las que lo son. B. Desarrolle sus dones Objetivo 2. Mencionar varias maneras de desarrollar sus dones de ministerio. Quizá no siempre estemos conscientes de todos los dones que Dios nos da, pero podemos estar conscientes de la direc- ción de Dios. Ya sabemos que nuestro don será el don correcto para nosotros. Todos pueden hacer mejor su trabajo cuando creen que lo pueden hacer bien. También sepa que Dios puede darnos un don que no tiene nada que ver con nuestros talentos naturales. ¿Qué clase de ministerios son posibles para nosotros? Descubra sus dones El Espíritu Santo puede hacer que hasta las personas tímidas sean intrépidas. Entregue a Dios su vida y sus talentos y disfrutará de su ministerio. No tema probar nuevas clases de trabajo, especialmente si siente que Dios lo atrae hacia esas cosas. No se obligue a hacer cosas nuevas, pero sí permita que el Espíritu Santo lo dirija. Usted podría recibir palabra de uno de los ancianos o de un líder de la iglesia, que le podría ayudar para saber cuál es su ministerio. Con frecuencia los que han servido al Señor Cómo ser obrero 53 como líderes pueden intuir cuando alguien tiene un don de ministerio. Ya sea que usted reciba un don definitivo o sólo sienta el impulso del Espíritu a medida que sirve a Dios, sepa que también tiene un ministerio y que hay ayuda para usted en el uso de ese ministerio. Aplicación 4 En el proceso de descubrir sus dones es mejor a) concentrarse en hacer lo que ya sabe hacer. b) procurar hacer lo que no ha hecho nunca. c) procurar hacer las cosas hacia las que se siente dirigido por el Espíritu Santo. Aprecie sus dones Su ministerio es un don de Dios para usted. Hónrelo siempre. Esto no quiere decir que usted debe sentirse orgulloso. Ser orgulloso es creerse ser demasiado. Honrar su don es estar consciente de que Dios se lo dio y que le debe dar a Dios la gloria. A las personas que trabajan en la iglesia las alaban con frecuencia aquellos para quienes trabajan. La alabanza hace que uno se sienta bien. Pero el diablo quizá procure derrotarnos por medio de ella. No podemos atribuirnos gloria por nuestro ministerio. Es el don de Dios para nosotros. Honramos el don, pero no nos alabamos a nosotros mismos por ese don. Debemos recordar siempre que Dios nos ha dado todo lo que tenemos (1 Corintios 4:7). Use sus dones Romanos 12:6 enseña que debemos usar la fe que tengamos para manifestar nuestro don. Si ese don es anunciar el mensaje de Dios, debemos hacer precisamente eso. Parece que se nos dice que busquemos nuestro ministerio o don y que luego lo usemos. 54 Obreros cristianos Ya hemos visto que hay dos maneras de desarrollar nuestro ministerio una vez que hayamos descubierto cuál es. Ejercemos nuestra fe y estudiamos. ¿Qué debemos estudiar? Piense en su don. Si usted es un ministro de la Palabra de Dios, su primera responsabilidad será saber lo que ésta dice. Este conocimiento llegará al leer y estudiar la Palabra de Dios en oración. Aplicación 5 Según 1 Corintios 4:7 a) todos los dones son iguales. b) nuestros dones vienen de Dios. c) podemos ganarnos los dones de Dios. El Espíritu de Dios es nuestro ayudador (Juan 16:13). Pídale que le enseñe el verdadero significado de la Palabra para que usted pueda enseñar la verdad. Usted también puede usar libros acerca de la Biblia, pero recuerde que no todos los libros escritos acerca de la Biblia dan la verdad. Si algún libro no enseña la misma verdad que la Biblia, no lo use. Todo trabajo en la iglesia debe ser un ministerio espiritual. Recuerde que los primeros diáconos eran hombres llenos del Espíritu Santo aunque su trabajo era encargarse del dinero que se les daba a las viudas. Es aconsejable que todo obrero sea lleno del Espíritu Santo. De modo que estas son las maneras en que usted puede desarrollar sus dones: ejercite la fe, estudie, ore y use sus dones. Esto es lo que quiso decir Pablo cuando dijo que usted debe enseñar, si es que enseñar es su don. Y que debe servir, si es que servir es su don. Y que debe dar, si es que dar es su don (Romanos 12:6–8). Use su don, de otra manera el cuerpo padecerá. Para ejercer su tendrá que dedicar su tiempo y energía, pero eso bendecirá a todo el cuerpo y lo hará más fuerte a usted. Cómo ser obrero 55 El apóstol Pablo le escribió a Timoteo animándolo a que usara su don: “Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti” (2 Timoteo 1:6). ¡Nosotros también debemos mantener vivos nuestros dones! Aplicación 6 Empareje cada descripción (lado izquierdo) con el paso para desarrollar dones del que es un ejemplo (lado derecho). a Mabel tiene la habilidad de mostrar 1) Descubrirlo bondad a los demás. Así que busca a 2) Apreciarlo personas necesitadas y les ayuda de 3) Usarlo maneras prácticas. b Arturo está interesado en enseñar la Biblia, aunque nunca ha enseñado. De modo que se prepara y trata de enseñar una clase en su iglesia. c Juanita alaba y da gracias al Señor por que puede animar a otros en su andar con el Señor. d Ronaldo tiene el don de compartir. Así que con frecuencia comparte con los que necesitan la clase de ayuda que él puede darles. Ahora que usted ha completado la primera unidad, usted está preparado para contestar las preguntas de la Evaluación de Unidad uno. Repase las lecciones anteriores, luego siga las instrucciones que están en la hoja de respuestas. Envíe su hoja de respuestas a la dirección de su oficina de inscripción. 60 6Trabajo en equipo LECCIÓN Luciano ha seguido enseñando su clase para niños. Un domingo cuando iba a casa después enseñar su clase se encontró con su amigo Juan. Juan notó que Luciano parecía desanimado. — ¡Cómo va todo, Luciano! —le preguntó Juan. —No muy bien hoy —contestó Luciano. —Sólo cuatro niños vinieron a la clase. Quizás yo no soy quien debe enseñar la clase. —Pero Luciano —le dijo Juan—. No te des por vencido. La Palabra de Dios es como una semilla. Si sigues sembrándola, habrás cosecha. Dale tiempo. Riégala con oración y Dios te dará la cosecha. Luciano sonrió. —Tus palabras son oportunas, Juan. Gracias. ¡Me has animado tanto! Necesito depender más de Dios. Fue Juan quien sonrió ahora. Ya hacía algún tiempo que experimentaba la sensación de que Dios le había dado el ministerio de animar a los demás. Oír lo que Luciano había dicho le dio más certidumbre. Se sintió contento de haber podido animar a Luciano. En esta lección aprenderemos que Dios da diferentes habilidades a diferentes personas. Tr a b a j o e n e q u i p o 61 El plan A. Nuestras relaciones B. Nuestro trabajo juntos C. Nuestras actitudes Los objetivos 1. Describir las relaciones que los obreros cristianos deben tener unos con otro. 2. Decir por qué los creyentes deben trabajar juntos. 3. Demostrar qué actitudes los obreros cristianos deben tener hacia sí mismos y hacia otros. A. Nuestras relaciones Objetivo 1. Describir las relaciones que los obreros cristianos deben tener unos con otros. Un recién nacido necesita sentirse cerca de su madre y de los que lo aman. Lo mismo es verdad para la familia de la iglesia. Cuando un visitante entra a nuestra iglesia debe sentirse apreciado y atesorado. La familia es el lugar donde los hijos crecen y se desarrollan. Lo mismo es verdad en la familia de los creyentes, pues los creyentes se desarrollan cuando están con otros creyentes. No es necesario un grupo grande para que esto suceda. Mateo 18:20 nos dice que cuando dos o tres se reúnen en su nombre, Jesús está allí con ellos. ¿Dónde puede el obrero cristiano recibir más ayuda para su ministerio que cuando está con Jesús y sus obreros? En la iglesia primitiva, los creyentes se reunían con frecuencia. Se unían en comunión y compartían sus necesidades. Venían de un mundo hostil y se congregaban para recibir ánimo, luego salían a testificar y a trabajar. 62 Obreros cristianos Además de ser miembros de la misma familia, los obreros del cuerpo de Cristo son socios. Los socios comparten los mismos intereses y las mismas cargas. Primera Corintios 3:9 indica que somos socios junto con Dios. Piense en usted mismo como socio de los de su iglesia. Usted compartirá el mismo objetivo y el mismo trabajo. Para llevar a cabo ese trabajo, cada persona debe cooperar. Cada persona es útil cuando trabaja en cooperación con los demás. Pero para cooperar necesitamos tener la misma actitud correcta. Un pastor podría tener talentos y ser llamado por Dios, pero si no puede controlar su espíritu fracasará como líder. Dios no espera que todos sean puedan hacer las mismas cosas. Pero sí espera que tengamos el espíritu correcto―el espíritu de Cristo. Aplicación 1 Para cooperar, la persona debe a) trabajar con otros. b) tener muchos talentos. c) hacer su trabajo sola. 2 Empareje cada ejemplo (lado izquierdo) con la clase de relación que representa (lado derecho). a Arturo y Roberto trabajan juntos 1) Miembros de para testificar en su vecindad. una familia b Cuando Guillermo se reúne con 2) Socios en una otros creyentes, él madura como tarea cristiano. c Juanita se siente amada y apreciada por sus hermanos en el Señor. d Felipe y Federico oran juntos acerca de comenzar una clase bíblica para los jóvenes. Tr a b a j o e n e q u i p o 63 B. Nuestro trabajo juntos Objetivo 2. Decir por qué los creyentes deben trabajar juntos. Si alguien le atara las muñecas con una cuerda delgada, usted podría dar romperla de un tirón. Pero si fueran una o más cerdas, no sería tan fácil romperlas. De la misma manera los creyentes pueden hacer juntos lo que no podrían hacer solos. El cuerpo es irrompible cuando todos trabajan juntos. En el Antiguo Testamento leemos que Nehemías quería reconstruir el muro de Jerusalén. Sabía desde antes de comenzar que habría enemigos y que no podría lograr éxito él solo. Mucha gente diferente trabajó―sacerdotes, plateros, gobernantes, mercaderes y hasta un perfumista. Se hizo un gran trabajo que una sola persona no pudo haber hecho. Con la ayuda de todos los otros judíos, se reconstruyeron todos los muros (Nehemías 3). El Nuevo Testamento dice que Jesús escogió a doce discípulos para que lo acompañaran (Marcos 3:13-15). Él también los envió a ministrar de dos en dos (Marcos 6:7). También leemos que en la iglesia primitiva el Espíritu Santo dirigió a dos personas para trabajar juntas (Hechos 13:2). Este es el plan de Dios para el cuerpo. El trabajo que no se puede hacer por una sola persona se puede hacer cuando muchas personas trabajan juntas. Ni el pastor ni el evangelista podrían predicar a todo el mundo. Todo creyente debe colaborar para llevar el mensaje de Jesús a los demás. Todos tienen un lugar en la edificación del reino de Dios; nadie está excluido. Algunos predican, algunos enseñan, algunos cantan, todos oran y la obra sigue adelante. Esto es trabajar juntos. Aplicación 3 Los creyentes deben trabajar juntos porque a) el Espíritu Santo guía y dirige a los creyentes. b) algunas tareas se pueden hacer solamente si los creyentes trabajan juntos. c) los que trabajan para el Señor tienen gran gozo y felicidad. 64 Obreros cristianos C. Nuestras actitudes Objetivo 3. Demostrar qué actitudes deben tener los obreros cristianos hacia sí mismos y hacia otros. Un dicho dice: “Una mano lava la otra”. Primera Corintios 12:14-26 enseña una idea parecida. Aplicación 4 Lea 1 Corintios 12:14-16 y conteste las siguientes preguntas: a) ¿Cuántos miembros se mencionan? b) ¿Qué no dice cada miembro de sí mismo? c) ¿Qué no puede decir cada miembro de otro miembro? En los versículos mencionados el apóstol Pablo está enseñando acerca del cuerpo. Apliquemos esta enseñanza a los obreros de la iglesia. Una “miembro” podría ser un maestro. En la misma iglesia, otro “miembro” podría ser un hermano que saluda a los que entran a la iglesia para adorar. El que saluda a la gente podría creer que su trabajo no es importante para la iglesia. Pablo le diría: “Eso no te evita ser parte de la iglesia. ¿Quién recibiría a los visitantes en la puerta si tú no lo hicieras? El maestro tiene que estar con su clase. No puede estar a la puerta. El cuerpo te necesita”. Dios ha puesto a cada uno en la iglesia. Él hizo a uno para enseñar y a otro para aliviar las cargas y hacer que la gente se sienta bienvenida. Él también ha puesto otra clase de obreros en la iglesia. La iglesia nos necesita a todos. Cuando piense en el trabajo que usted tiene en la iglesia y en el de los otros creyentes, acoja la actitud y la enseñanza de Pablo. Efesios 5:29–30 dice: Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia, porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos. Tr a b a j o e n e q u i p o 65 El mensaje es sencillo. Nadie odia a su propio cuerpo ni a ninguna parte de él. Tampoco los miembros de la iglesia deben odiarse los unos a los otros, puesto que todos son parte del mismo cuerpo. Todos nosotros debemos servir donde Dios nos ponga. Si para hacer nuestro trabajo primero tenemos que estar en el lugar importante, Dios no puede usarnos. Si estamos dispuestos a dejar que Dios use a cualquiera y que lo ponga donde Él crea conveniente, veremos que la iglesia crecerá. Debemos apoyarnos los unos a los otros al orar, compartir cargas, ayudar, amar e interesarnos, ser fieles en reunirnos y dar gracias a Dios los unos por los otros. ¡Cuán maravilloso es el ministerio del obrero cristiano! Aplicación 5 Suponga que sus amigos no entienden lo que significa que los obreros sean parte del cuerpo. Lo que ellos dicen le sigue a la columna de citas bíblicas. Empareje cada cosa que dicen con la cita bíblica que ayudará a corregirla. 1) 1 Corintios 12:15 2) 1 Corintios 12:18 3) 1 Corintios 12:19 4) 1 Corintios 12:21 a Trabajaré en la iglesia si me dan el cargo que yo escoja. b Los pastores son los únicos obreros que la iglesia necesita. c Puesto que tengo el don de profecía, no necesito aprender de los que son maestros. d El cuerpo no me necesita porque no soy apóstol ni profeta. e Puesto que no tengo el don de enseñar, no soy parte del cuerpo. 68 7 Trabajemos en LECCIÓN amor A Luciano se le hacía difícil enseñar, aunque tenía varios niños en su clase bíblica. Preparaba cuidadosamente la lección para sus alumnos y les enseñaba lo mejor que podía. Se le ocurrían cosas interesantes para incorporarlas en lo que estaban aprendiendo, pero había veces cuando no ponían atención. Con frecuencia los chicos decían cosas irrespetuosas. Esto perturbaba a Luciano. Pero sabía que Dios lo había dirigido a este ministerio. Un día durante la semana Luciano estaba leyendo la Biblia y pensando en los niños de la clase. Cuando llegó al capítulo 13 de Juan, Luciano leyó que Jesús les lavó los pies a sus discípulos. Luego en el versículo 34 leyó un nuevo mandamiento que Jesús les dio a sus discípulos, que debían amarse los unos a los otros como Jesús los había amado a ellos. Aunque Luciano había leído estos versículos antes, pero ahora los veía de una nueva manera. Se dio cuenta de que había algo más en trabajar para el Señor que solamente usar su don de ministerio. Él debía aprender a amar a las personas a quienes ayudaba y con las que trabajaba, y eso incluía a los niños de su clase. A medida que usted estudia esta lección, aprenderá más acerca de la clase de amor que necesita para ser un obrero cristiano. Aprenderá acerca del origen de ese amor y el impacto que puede tener en su vida. Tr a b a j e m o s e n a m o r 69 El plan A. El amor viene de Dios B. El amor es necesario C. El amor produce resultados Los objetivos 1. Describir el amor que debe tener el obrero cristiano. 2. Decir por qué los obreros cristianos necesitan demostrar amor. 3. Demostrar a otros el amor de Dios. A. El amor viene de Dios Objetivo 1. Describir el amor que debe tener el obrero cristiano. Cuando leemos la Biblia no tenemos que investigar mucho para ver que Dios nos ha mostrado su amor. Juan escribe: “En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados” (1 Juan 4:10). No hay amor más grande que el amor de Dios. El Padre nos ama tanto que dio a su propio Hijo. El Hijo nos amó tanto que dio su propia vida. Jesús murió por sus amigos y por sus enemigos. ¿Puede algún amor ser más grande? Pablo escribe: “Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8). Lucas 15:11–24 contiene la historia que Jesús contó acerca de un joven que se fue de casa y desperdició su vida y su dinero. En casa su padre esperaba con paciencia el regreso de su hijo. El día en que el hijo regresó a casa, el ansioso padre vio a su hijo a la distancia. Lleno de gozo, lo abrazó y se regocijó, porque su hijo descarriado por fin estaba en casa. 70 Obreros cristianos ¿Por qué contó Jesús esta historia? Él quería que nosotros supiéramos lo que Dios siente hacia todos. Dios no ama solamente a los bien parecidos o a los limpios o a los que han tratado de ser buenos. Su amor es mucho más grande que el amor humano. Dios es amor, y Él ama a toda la gente―de todas razas, culturas y grupos sociales. Se cuenta la historia de un pastor que discriminaba contra los que asistían a su iglesia. Él no podía aceptar la manera en que se vestían. Aunque los dejaba entrar a la iglesia, en realidad no los amaba porque eran muy diferentes. Un día mientras el pastor oraba, el Espíritu Santo le dijo: “Juan, tú no amas a estos jóvenes. Amas solamente a los que piensan como tú. Amas solamente a los que son como tú”. Esto sorprendió al pastor. Se arrodilló y oró por largo tiempo. No quería admitir su pecado. Con el tiempo, él permitió que Dios le cambiara el corazón y comenzó a dar la bienvenida a los jóvenes. Él les enseñaba la Palabra de Dios, y los jóvenes llevaban a sus amigos. El amor de Dios les llegó porque el pastor permitió que Dios le cambiara el corazón y los amara a través de él. Aplicación 1 En una o dos oraciones, escriba en su cuaderno cuál aspecto del amor se demuestra con más claridad en cada uno de los siguientes: a) Jesús como lo describe Romanos 5:8 b) El Padre en Lucas 15:11–24 c) El pastor en la historia anterior 2 En su cuaderno, conteste las siguientes preguntas: a) ¿Quiénes son los enemigos a quienes necesito amar? b) ¿Quiénes son las personas que no son como yo a quienes necesito amar? c) ¿Quiénes son las personas que han desperdiciado su vida en el pecado a quienes necesito amar? Tr a b a j e m o s e n a m o r 71 B. El amor es necesario Objetivo 2. Decir por qué los obreros cristianos necesitan demostrar amor. Dios ha dado a los creyentes una gran responsabilidad. Mateo 5 dice: Vosotros sois la sal de la tierra…Vosotros sois la luz del mundo…Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos. (vv. 13–14, 16) A menos que la vida de los obreros cristianos sea distinta de la de los que no son salvos, ¿cómo podrá el mundo ver a Jesús? Cuando la gente vea su luz se sentirá atraída hacia Jesús, quien es la Luz del mundo. Cuando la gente vea su amor, se sentirá atraída hacia a Dios, quien es amor. Cuando la gente vea las cosas buenas que usted hace, sabrá que Dios está en usted y lo alabará (Mateo 5:16). No siempre será fácil ser como Dios. A Jesús no le fue fácil cuando estaba en la tierra. Su amor será probado. Usted no siempre querrá ir “dos millas” (Mateo 5:41). Pero si lo hace, habrá demostrado el amor del Padre. Nuestro ministerio cambiará la vida de la gente cuando el Espíritu Santo nos cambie a nosotros. El verdadero amor se manifestará. Seremos atraídos hacia los necesitados cuando estemos listos para ministrar a sus necesidades. El amor fluye hacia la necesidad. Juan lo resume: “Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad” (l Juan 3:18). Aplicación 3 ¿Cuáles declaraciones dan las razones más importantes por las que los obreros cristianos necesitan demostrar amor? a) Es muy difícil amar a toda la gente. b) El amor del obrero cristiano será probado c) El verdadero amor atraerá a la gente hacia Dios. 72 Obreros cristianos C. El amor produce resultados Objetivo 3. Demostrar a otros el amor de Dios. Si Cristo está en nosotros, su amor está en nosotros. Él vive en lo que hacemos y estará en nosotros cuando le permitamos expresarse a sí mismo. El amor de Dios llega hasta donde solamente su amor no puede llegar. Siendo que Dios nos amó cuando éramos aún pecadores, el amor de Dios en nosotros amará a los pecadores. Porque Dios amó a sus enemigos, El amor de Dios en nosotros amará a nuestros enemigos. Y siendo que Dios amó a los que lo rechazaron (Lucas 23:34), el amor de Dios en nosotros amará a los que nos maltratan (Mateo 5:11–12). Por lo tanto, solamente es posible amar a toda la gente cuando permitimos que el amor de Dios fluya de nosotros hacia ellos. Este amor es para usted. Hará muchas cosas que su propio amor no hará. Aplicación 4 Necesitamos especialmente el amor de Dios para poder amar a los que a) nos aman. b) son pecadores. c) son nuestros enemigos. d) nos odian. e) son bondadosos con nosotros. f) nos rechazan. g) nos comprenden. h) nos maltratan. ¡Cuán maravilloso es el don del Espíritu Santo para nosotros! El Espíritu Santo no desciende solamente una vez sobre usted. El Espíritu Santo vive en usted. Jesús dijo: “Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre” (Juan 14:16). Tr a b a j e m o s e n a m o r 73 Cuando el Espíritu vive en usted, Él obra en usted para producir el fruto del Espíritu. Este fruto no es una bondad natural que la persona podría poseer. Lea Gálatas 5:19–21 y mire cómo es la persona natural. ¡Cuán opuesto es el fruto que el Espíritu Santo hace que el creyente produzca! Aplicación 5 Lea Gálatas 5:22-23 y 1 Corintios 13:4-7 y conteste las siguientes preguntas en su cuaderno: a) ¿Cuál pasaje bíblico menciona un total de nueve cualidades que el Espíritu Santo produce? b) ¿Cuál pasaje bíblico describe por lo menos quince maneras diferentes en las que el amor opera? ¿Usted ve que en 1 Corintios 13:4-7 se nos dice cómo el amor demuestra cada una de las cualidades mencionadas en Gálatas 5:22-23? Cuán importante es que el obrero cristiano demuestre el amor de Dios. Como leemos en 1 Corintios 13:2: Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy. Cuando Dios hizo el mundo Él hizo que todo produjera fruto según su género (Génesis 1). Así también es la obra del Espíritu Santo en nosotros. Al producir fruto según su género, Él nos hace posible amar. Aplicación 6 Según 1 Corintios 13:2, los dones de ministerio a) son inútiles sin el amor. b) no se relacionan con el amor. c) no son importantes. 74 Obreros cristianos 7 Encierre en un círculo la letra que corresponda a cada declaración CORRECTA. a) Los dones de ministerio se encuentran en Gálatas 5:22–23. b) Si nos esforzamos, nuestra bondad nos hará amar como Dios ama. c) Es el Espíritu Santo en nosotros quien nos hace posible amar como Dios ama. 76 8 Trabajemos con los LECCIÓN líderes Hacía ya más de un año que Luciano se había hecho miem- bro de la iglesia. ¡Había aprendido tanto! Pensó en los líderes de la iglesia que le habían ayudado, los que lo habían animado a desarrollar y usar sus dones, los que le habían enseñado la Palabra de Dios y los que lo habían dirigido para cantar alaban- zas y adorar a Dios junto con los otros creyentes. ¡Cuán buenos ejemplos eran de obreros del Señor! Al reflexiona en estos logros, quería saber más acerca de las clases de líderes que había en la iglesia. Quería saber el propósito de Dios para cada uno y quería saber cuáles eran sus responsabilidades hacia sus líderes. Ellos le habían dado tanto de sí mismos a él. Esta lección le ayudará a descubrir más acerca del por qué la iglesia necesita líderes. Lo ayudará a entender las diversas clases de líderes y cómo puede usted trabajar con ellos, a fin de que los propósitos maravillosos de Dios para la iglesia puedan llevarse a cabo. Tr a b a j e m o s c o n l o s l í d e r e s 77 El plan A. El trabajo del líder B. Nuestra responsabilidad C. Los beneficios recibidos Los objetivos 1. Identificar ejemplos de las clases de trabajo que desempeñan los líderes. 2. Hablar de las responsabilidades que tenemos ante los líderes de nuestra iglesia. 3. Identificar los resultados cuando los creyentes trabajan con sus líderes. A. El trabajo del líder Objetivo 1. Identificar ejemplos de las clases de trabajo que desempeñan los líderes. Donde hay trabajo que hacer es necesario que haya un líder, de modo que Dios ha nombrado a algunos en la iglesia para que sean líderes (Efesios 4:11). El deber del líder es ver que se cumplen las tareas y que los objetivos se logren. Es una gran responsabilidad ser un líder en la iglesia, ya que los líderes tendrán que rendir cuentas a Dios por sus servicios (Hebreos 13:17). El pastor Bajo Dios, el líder de la iglesia es el pastor. El pastor dirige alimenta, enseña y observa. Dirigir. El pastor dirige con su ejemplo. Pablo instruye: “Sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza” (1 Timoteo 4:12). Una de las mejores maneras de aprender es observar a alguien que sabe cómo hacer algo. Es muy importante que el pastor viva trabaje correctamente. La iglesia entera podría descarriarse si el pastor no da buen ejemplo. 78 Obreros cristianos Alimentar. El pastor pasa tiempo en oración y en estudiar la Biblia para preparar el alimento espiritual que la iglesia necesita. De la Palabra de Dios él alimenta a los creyentes maduros y a los nuevos creyentes. Él debe predicar todas las verdades de la Biblia, no puede predicar solamente lo que la gente quiere oír, pues algunos no quieren oír la verdad. Aplicación 1 El versículo que nos dice que el líder tendrá que rendir cuentas de su servicio es a) Efesios 3:11. b) 1 Timoteo 4:12. c) Hebreos 13:17. Enseñar. En 2 Timoteo 2:24 leemos que el que es siervo del Señor debe ser “amable para con todos, apto para enseñar, sufrido”. Cuando el pastor enseña, explica la verdad a sus oyentes y aclara lo que Dios dice en su Palabra. Los que han sido enseñados pueden enseñar a otros y trabajar junto con el pastor (2 Timoteo 2:2). El enseñar es una gran responsabilidad (Santiago 3:1). Vigilar. El trabajo del pastor con frecuencia se compara con la del pastor de ovejas. Un buen pastor de ovejas se preocupa por cada una de sus ovejas, pero el asalariado huye cuando hay peligro. Asimismo, al pastor que trabaja solamente porque le pagan no le importa lo que les suceda a sus ovejas. Sin embargo, el pastor que es como un buen pastor de ovejas, vigila para que nada destruya a los creyentes. Aplicación 2 En la próxima página, empareje cada frase (lado izquierdo) con el deber del pastor (lado derecho). Tr a b a j e m o s c o n l o s l í d e r e s 79 a Dirigir a la gente en el 1) Dirigir cumplimiento de sus ministerios 2) Alimentar 3) Enseñar la b Decir todas las verdades de la Palabra de Dios Palabra de Dios 4) Vigilar c Ver que nada destruya a la iglesia d Ayudar a otros a entender las verdades de la Biblia e Vivir correctamente ante los creyentes f Explicar lo que significan las verdades de la Biblia Ancianos y diáconos La Biblia también dice que los ancianos y diáconos son líderes en la iglesia. En la iglesia primitiva, los ancianos minis- traban la Palabra y los diáconos servían las necesidades de la iglesia. Hoy, los ancianos ayudan al pastor. Algunos son como exhortadores. Santiago 5:14 enseña que los enfermos deben llamar a los ancianos de la iglesia para que oren por ellos. Los ancianos deben ser líderes espirituales maduros. El trabajo de los diáconos puede ser distinto del de los an- cianos, pero ellos también son ayudantes del pastor. Podrían tener la responsabilidad del mantenimiento del edificio de la iglesia o de ayudar a los necesitados dentro del cuerpo. El tra- bajo es diferente en cada iglesia, de manera que se necesitan personas con muchas clases de habilidades. Un diácono podría tener mucha habilidad natural. Es su disposición para servir y la unción de Dios en su vida lo que hacen que su ministerio sea valioso para la iglesia. 80 Obreros cristianos Aplicación 3 Encierre un círculo la letra que corresponda a cada declaración CORRECTA. a) Para ser útil en a la iglesia, el diácono necesita más que habilidad. b) Todos los líderes en una iglesia necesitan la habilidad de hacer la misma clase de cosas. c) Es importante que los diáconos y los ancianos sean personas espirituales. B. Nuestra responsabilidad Objetivo 2. Hablar de las responsabilidades que tenemos ante los líderes de nuestra iglesia. Hay cuatro maneras de ser responsables ante nuestros líderes: 1. Obedecer la Palabra que ellos predican. 2. Honrarlos. 3. Apoyarlos. 4. Trabajar con ellos. Obedecer la Palabra que ellos predican. El pastor tiene el sagrado trabajo de predicar la Palabra de Dios. Como miembros de la iglesia, nosotros hemos de recibirla en nuestro corazón y obedecerla (Romanos 6:17; 1 Pedro 1:22). La Palabra nos beneficia solamente si la recibimos, la creemos y la obedecemos (Santiago 1:22-25). Honrarlos. La Biblia nos exhorta a honrar a nuestros líderes. Primera Tesalonicenses 5:12-13 dice: Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, y os presiden en el Señor, y os amonestan; y que los tengáis en mucha estima y amor por causa de su obra. Tr a b a j e m o s c o n l o s l í d e r e s 81 Una manera de honrar a los pastores o líderes es negarnos a buscar faltas en ellos. Si hay algún problema respecto a un líder, nuestro deber es ir a él directamente. No hemos de volvernos contra el líder ni hablar mal de él. Recuerde que es Dios quien nombra a los líderes y que son don de Dios para la iglesia. Honramos a Dios cuando honramos a nuestros líderes. Apoyarlos. Una manera de apoyar a nuestros líderes es orar por ellos. Ellos necesitan la ayuda de Dios para ir contra el poder de Satanás y para predicar con eficacia. Otra manera de apoyarlos es dar dinero y regalos. Esta es la manera en que Dios ha provee para sus obreros. En el Antiguo Testamento, los hombres que prestaban servicios en el templo (que eran llamados levitas) eran apoyados cuando todo el pueblo de Dios participaba para proveerles su salario (Números 18:21; Deuteronomio 18:1–5). Aplicación 4 Un pasaje bíblico que tiene que ver con respetar a nuestros líderes es a) Números 18:21. b) Romanos 6:17. c) 1 Tesalonicenses 5:12–13. d) Santiago 1:22–25. También apoyamos a nuestros líderes al asistir fielmente a la iglesia. Cuando el pastor se esfuerza para predicar la Palabra, orar y ministrar, depende del apoyo del cuerpo de la iglesia. Hebreos 10:25 nos dice que no debemos dejar de reunirnos: No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuando veis que aquel día se acerca. Trabajar con ellos. Tenemos la responsabilidad de seguir las órdenes de nuestros líderes y obedecerles (Hebreos 13:17). Cuando lo hacemos, la obra de Dios sigue adelante. No debemos ser como los israelitas, que se quejaron contra sus 82 Obreros cristianos líderes, Moisés y Aarón (Números 14:1–4). En vez de eso, debemos ser como el pueblo que siguió las órdenes de Josué y ganó grandes victorias (Josué 6:1–21; 8:1–23). Aplicación 5 Empareje la responsabilidad (lado derecho) con cada descripción que dé un buen ejemplo de ella (lado izquierdo). a Carlos ora todos los días por su 1) Obedecer la pastor. Palabra que ellos predican b Juanita sigue las instrucciones de su 2) Honrarlos pastor para decidir qué enseñar en su 3) Apoyarlos clase bíblica para niños. 4) Trabajar con c Tomás habla de su pastor con ellos respeto. d Andrés procura vivir según los mensajes que su pastor predica de la Biblia. e Roberto y su familia dan de su para ayudar a pagar el salario del pastor. C. Los beneficios recibidos Objetivo 3. Identificar los resultados cuando los creyentes trabajan con sus líderes. Dios es glorificado Cuando el pueblo de Dios trabaja en cooperación con sus líderes, Dios es glorificado. La unidad del cuerpo que resulta cuando todos están en armonía es un testimonio al mundo de que Jesús fue enviado de Dios (Juan 17:21). En el Salmo 133 Dios manda su bendición a los que viven en armonía. Es una marca de santidad cuando la gente vive y trabaja junta, sin Tr a b a j e m o s c o n l o s l í d e r e s 83 conflictos ni divisiones. Cuando Dios está en control, hay paz y armonía―y Dios es glorificado. La iglesia es edificada La armonía entre los creyentes hace posible que se haga la voluntad de Dios en el cuerpo. Es necesario que la iglesia entera trabaje junta para hacer lo que se necesita hacer. Efesios 4:16 dice: Todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas la coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor. Cada miembro del cuerpo de Cristo debe compartir su ministerio con el cuerpo entero. Cuando Cristo está en control “todo el cuerpo, nutriéndose y uniéndose por las coyunturas y ligamentos, crece con el crecimiento que da Dios” (Colosenses 2:19). Los obreros son fortalecidos La habilidad de trabajar en armonía con el cuerpo es una señal de humildad. La persona humilde no se enoja con rapidez, es paciente y se somete a otros. Esta humildad es una señal de fortaleza, no de debilidad, porque el creyente que puede trabajar con líderes se hace más fuerte. Dios dio a la iglesia líderes para hacerla fuerte y para preparar a cada miembro para su trabajo (Efesios 4:11–12). Los obreros que son de mayor bendición a la iglesia son los que se someten primero a Dios, luego a sus líderes y después los unos a los otros. Cuando los obreros de la iglesia hacen esto, llegan a ser la clase de personas maduras que describe Efesios 4:13–14. 84 Obreros cristianos Aplicación 6 ¿Cual pasaje bíblico dice que la unidad entre los creyentes muestra al mundo que Jesús vino de Dios? a) Juan 17:21 b) Efesios 4:11–12 c) Efesios 4:13–14 d) Colosenses 2:19 86 9 Terminemos con LECCIÓN gozo La iglesia estaba llena de gente. Era el tiempo de la cosecha. Todos llevaban a la iglesia los diezmos y ofrendas de su cosecha. Cantaban con regocijo alabanzas a Dios. Luciano le dio gracias a Dios por las muchas bendiciones que había recibido. Hacía pocos años que era salvo. Ahora su familia entera era parte del cuerpo de creyentes. Y Dios también lo estaba usando en la obra de la iglesia luego que se entregó al Espíritu Santo. Había orado por los enfermos, había enseñado la Palabra de Dios y había aprendido a trabajar con los líderes de su iglesia. Mientras Luciano escuchaba los cantos pensaba en otro tiempo de cosecha―el tiempo cuando su trabajo terminara y se encontrara con Jesús cara a cara. ¿Cómo será ese día? Quizás usted también se ha preguntado cuál será el futuro para el obrero cristiano. Esta lección le ayudará a contestar esa pregunta. Permita que las verdades que presenta lo inspiren en su trabajo para el Señor y le llenen el corazón de gozo. Te r m i n e m o s c o n g o z o 87 El plan A. El trabajo acabado B. El gozo experimentado Los objeticos 1. Describir el trabajo de los cristianos. 2. Identificar las recompensas que recibirá el obrero cristiano fiel. A. El trabajo acabado Objetivo 1. Describir el trabajo de los cristianos. La carrera acabada El Nuevo Testamento compara la vida del obrero cristiano con la carrera de un atleta. El apóstol Pablo dijo: “Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús” (Filipenses 3:14). En la carrera cristiana, ¡todos los corredores fieles pueden ser ganadores! El Señor Jesús dijo: “He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra” (Apocalipsis 22:12). ¡Qué gozo le espera al obrero cristiano! Para terminar la carrera usted debe vencer pruebas y tentaciones. Quizás no siempre logre éxito en sus planes, pero por el poder del Espíritu Santo usted puede afrontar cada situación y ser victorioso. Mateo escribió: “Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo” (Mateo 24:13). Por lo tanto, se nos insta a los creyentes que vivamos y trabajemos de manera que podamos decir con el apóstol Pablo: “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe” (2 Timoteo 4:7). La tarea acabada El Nuevo Testamento también compara el ministerio del obrero cristiano con una tarea con la que se debe cumplir. 88 Obreros cristianos Jesús se daba cuenta de que tenía que cumplir con un trabajo importante. Al ver la urgencia de la tarea, Jesús dijo: “Me es necesario hacer las obras del que me envió, entre tanto que el día dura; la noche viene, cuando nadie puede trabajar” (Juan 9:4). Cuando su trabajo estaba cumplido, Jesús dijo a su Padre: “Yo te he glorificado en la tierra; he acabado la obra que me diste que hiciese” (Juan 17:4). Jesús describió nuestra tarea en Mateo 28:19–20. Un día nuestras oportunidades para ser obreros del Señor acabarán. Pero todo obrero cristiano puede tener la satisfacción de saber que se puede y se debe cumplir con la tarea que Dios le ha dado. Aplicación 1 En su cuaderno, complete la siguiente frase, usando sus propias palabras: La comparación que hace la Biblia de la vida o del trabajo cristiano con la carrera de un atleta me enseña que................................................... La cosecha recogida El Nuevo Testamento dice que el trabajo del cristiano es como el de recoger una cosecha (Mateo 9:37–38). La cosecha sugiere la semilla que siembra, el grano que madura, el fruto que se recoge. El tiempo de la cosecha es siempre una temporada de gran gozo. También habrá gozo en el cielo, en el tiempo de esa cosecha final. El gozo de esa cosecha vendrá cuando los obreros cristianos vean a las multitudes que tienen vida eterna, porque los miembros del cuerpo de Cristo trabajaron juntos para demostrarles el amor de Cristo. Como obrero de Dios, usted compartirá ese gozo. Usted verá el fruto de sus labores―los que han creído en Jesús, los enfermos que han sido sanados, los que recibieron ánimo. ¡Qué tiempo maravilloso será ese! Te r m i n e m o s c o n g o z o 89 Aplicación 2 La cita bíblica que habla de la vida cristiana como una carrera es a) Mateo 9:37–38. b) Mateo 24:13. c) Filipenses 3:14. d) Apocalipsis 22:12. 3 En su cuaderno escriba tres comparaciones para describir el trabajo del cristiano y por lo menos una cita bíblica para cada una. 4 Empareje cada descripción del trabajo del cristiano (lado derecho) con lo que nos enseña (lado izquierdo). a Acabar el trabajo que fue asignado 1) La carrera acabada b Acabar fielmente la carrera y alcanzar 2) La tarea la meta acabada c Compartir del gozo de ver a los que 3) La cosecha han creído en Cristo recogida B. El gozo experimentado Objetivo 2. Identificar las recompensas que recibirá el obrero cristiano fiel. Hay un día de pago para el obrero. Dios nos ha dado el privilegio de trabajar para Él, y Él ha fijado un momento en su plan futuro para reunir a todos los obreros cristianos. Cada persona será recompensada según su labor (1 Corintios 3:8; 2 Corintios 5:10). Habrá diferentes clases de recompensas. Primero, los que han sido fieles serán recibidos por el mismo Señor, quien dirá: “¡Bien, buen siervo y fiel!” (Mateo 25:21). Esta aprobación del Maestro será más preciosa que cualquier otra cosa que podamos imaginarnos. 90 Obreros cristianos Luego, también recibiremos todo lo que Dios nos ha prometido―nuestra herencia. En Romanos 8:16–17 Pablo nos recuerda que somos hijos y “herederos de Dios y coherederos con Cristo, sí es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados”. Otra recompensa será el gozo de ver a los hemos ayudado espiritualmente. El apóstol Pablo ansiaba este gozo: “Porque ¿cuál es nuestra esperanza, o gozo, o corona de que me gloríe? ¿No lo sois vosotros, delante de nuestro Señor Jesucristo, en su venida?” (1 Tesalonicenses 2:19). La Biblia también dice que los obreros recibirán coronas. Durante los tiempos en que fue escrito el Nuevo Testamento, la corona que recibía un atleta triunfante era simplemente una corona de flores o de ramas. No duraba mucho, pero aún así tenía mucho valor; el atleta había trabajado duramente por mucho tiempo para ganarla. En 1 Corintios 9:25 leemos que nuestra corona, a diferencia de las coronas de flores o de ramas, durará para siempre. Será una corona gloriosa (1 Pedro 5:4). Pero la mejor recompensa de todas será experimentar el pleno gozo de estar en la presencia del Señor para siempre (1 Tesalonicenses 4:17). ¡Este gozo jamás se acabará! Aplicación 5 Suponga que usted quiere hablarle a un amigo de las recompensas que recibirá el obrero cristiano. En su cuaderno, escriba cinco de esas recompensas y una cita bíblica para cada una. Sea un obrero cristiano fiel. Recuerde estas palabras que el apóstol Pablo les escribió a los obreros de la iglesia primitiva; son tan ciertas hoy como lo eran entonces: Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano. (1 Corintios 15:58) Te r m i n e m o s c o n g o z o 91 Usted ha terminado de estudiar Obreros cristianos. Que el Señor lo bendiga a usted en su servicio a la iglesia y al usar los dones que Dios le dé para bendecir y fortalecer al cuerpo. Al seguir trabajando con otros creyentes, repase algunas de las lecciones para recordarse a usted mismo de los dones de ministerio que Dios ha dado o de los deberes de los líderes. Nunca olvide que el cuerpo de creyentes es la iglesia de Cristo. Él es quien edificará un cuerpo fuerte y quien le ayudará a usted en su trabajo de obrero cristiano. Ahora que usted ha completado la segunda unidad, usted está preparado para contestar las preguntas de la Evaluación de Unidad dos. Repase las lecciones anteriores, luego siga las instrucciones que están en la hoja de respuestas. Cuando le envíe la hoja de respuestas a su oficina de inscripción, pregúntele acerca de otro curso de estudio.