Historia de América I - I Parcial - Universidad de Guayaquil
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Universidad de Guayaquil
MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez
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Este documento presenta el contenido del primer parcial de la asignatura \"Historia de América I\" de la Universidad de Guayaquil. Se enfoca en el poblamiento del continente americano, con diversas hipótesis y teorías. También incluye una sección sobre las comunidades indígenas americanas y sus actividades económicas y organización social.
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Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodr...
Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Poblamiento de América Cuándo llegaron y quiénes fueron los primeros pobladores del continente americano han sido cuestiones de discusión y motivos de conjeturas tan antiguas como la incorporación del continente a la geografía mundial, lo que ha dado lugar a diferentes interpretaciones. Son muchos aún los puntos oscuros, las hipótesis se apoyan en datos verificados por métodos científicos como en suposiciones y especulaciones. Poblamiento de América América en su conjunto es un continente de poblamiento relativamente reciente. El hombre no aparece en el Nuevo Mundo antes del fin del cuaternario, después del retroceso de los grandes glaciales, hace unos 40 000 a 20 000 años. Con respecto al tiempo, también las opiniones de los científicos están divididas. Se ofrecen diferentes datas en correspondencia con los estudios e investigaciones realizadas por los especialistas. Los primeros hombres pasaron de Asia a América a través del estrecho de Bering. La anchura del estrecho no llega a los mil kilómetros y las islas Diomedes facilitan el cruce. Se pudo hacer en canoa o balsa del tipo más rudimentario. Se admite que lo hicieron a pie, porque como consecuencia de la última glaciación pleistocénica, el nivel de los océanos sufrió un gran descenso, de unos cien metros, por lo que el estrecho se convirtió en una ruta intercontinental. Otro dato que apoya esa teoría es que los restos humanos más antiguos fueron hallados en América del Norte, mientras que los restos encontrados en Suramérica son de data más reciente. Quiere esto decir que los primeros pobladores se dispersaron de norte a sur. Se considera que el sitio más antiguo es Tule Springs en el actual Estado de Nevada en los Estados Unidos, que marca una antigüedad de 22 000 años; lo cual ratifica que los testimonios más antiguos se hallan en Norteamérica, entre 15 000 y 7 000 años, en Sudamérica entre los 12 000 y 6 000 años. Hipótesis sobre el origen asiático Teoría monorracial que encabezó el sabio de origen checo Alex Hrdlicka (1869-1943), basada en que el indio americano es un asiático. Esta impresión está determinada por un conjunto de caracteres exteriores: identidad de pigmentación de la piel y de los ojos, identidad de color y de forma de los cabellos, rareza de pilosidad en la cara, frecuencia del llamado ojo mongólico y de la proyección y ensanchamiento de los pómulos. Paul Rivet y otros científicos cuestionaron esa teoría, puesto que la unidad racial no es tan evidente. Existen notables diferencias, lo cual dio lugar a las hipótesis polirraciales que explican el origen múltiple del hombre americano. Las investigaciones de Rivet en la década del 40 del siglo pasado revelan que la población indígena de América fue el resultado de diversas inmigraciones en las que intervinieron cuatro tipos raciales diferentes: una efectuada a través del estrecho de Bering (mongoles y esquimales) y otros a través del Pacífico (australoides y malayo-polinesios). Basadas en pruebas antropológicas, etnográficas y lingüísticas. Con el apoyo de las ciencias auxiliares de la historia que permitieron al científico francés fundamentar su tesis. Hipótesis sobre el origen asiático El portugués Méndez Correa realizó pruebas antropológicas (análisis de los cráneos), probó que en los indígenas del extremo sur del continente (onas, alcalufes y yaganes) hay semejanzas con australianos y melanésicos. Los antepasados de esas culturas americanas llegaron a América desde Australia. ¿Cómo? Para el sabio portu- gués la corriente migratoria cruzó el Continente Antártico proveniente de Australia y Tasmania. En los años 50 del siglo pasado, J. Birdsell teorizó que América se pobló gracias a una aportación dihíbrida a base de mongoles y amurianos o caucasoides arcaicos, pro- cedentes del noreste asiático. Este autor fundamentó su hipótesis al encontrar rasgos amurianos en amerindios contemporáneos. De acuerdo con los resultados de los trabajos antes mencionados, es muy posible que la población inicial de América haya sido de origen amuriano y que los siguientes grupos humanos fueron de carácter cada vez más mongoloide, todos provenientes de un mismo tronco, con lo cual se explican muchos de los problemas motivados por la presencia de elementos australoides y melanosoides en el Nuevo Mundo. El aventurero y científico noruego Thor Heyerhhal trató de probar que el hombre primitivo llegó a América utilizando la vía marítima, atravesando el océano Pacífico o el Atlántico con sus rudimentarias embarcaciones. En 1947 construyó la Kon Tiki y zarpó del puerto del Callao en Perú hacia Oceanía. En el libro del sabio noruego, La Kon Tiki, se manifiesta el arribo del hombre hace miles de años a las costas de nuestro continente utilizando la vía marítima, en este caso atravesando el océano Pacífico. Poblamiento de América El uso del Ácido Desoxirribonucleico (ADN) ha revolucionado las investigaciones para identificar individuos y familiares consanguíneos. Con la utilización de la biología computarizada se han podido separar las diversas etnias en el espacio y en el tiempo. En los análisis del ADN de huesos y coprolitos (heces) hallados en todas las excavaciones arqueológicas de nuestro continente, resultó que los genomas de los aborígenes americanos poseen virtualmente el mismo color. Por tanto, tienen el mismo origen, así quedó confirmado el origen asiático del hombre americano. El tiempo aproximado de la llegada al continente americano del hombre es otra de las incógnitas. Se ha determinado que ocurrió hace no menos de 16 500 años, a través del Estrecho de Bering. La dispersión de los primitivos pobladores se produjo de norte a sur a través de dos corredores: uno en la costa del Pacífico y el otro tras las Montañas Rocosas. El sitio arqueológico de Monte Verde en Chile, según el carbono catorce, posee una antigüedad de 14 600 años. Esa data prueba que la migración hacia el sur y el este le tomó al hombre no menos de dos mil años. Estos constituyen los últimos resultados de las investigaciones sobre tan fascinante tema. Las investigaciones no han concluido mientras queden enigmas por esclarecer, como por ejemplo: se desconoce con exactitud cuándo se inició el poblamiento y en cuanto al avance hacia el sur y el este se mantienen las incógnitas, que están por aclarar. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Comunidades indígenas americanas Los seres humanos que habitaban América antes de la invasión del continente por los europeos, se encontraban en muy diversos estadios de su evolución social. En su mayoría, pudieran definirse según las siguientes características generales: Se agrupaban en infinidad de comunidades aborígenes y se encontraban en diversas fases de la sociedad primitiva. Sus actividades fundamentales eran la caza, la pesca, la recolección y/o a una agricultura extensiva; esta última complementada por las tres actividades anteriormente mencionadas. En su mayoría transitaban del nomadismo al sedentarismo. Eran sociedades «de subsistencia», de escasa producción material y bajo nivel de consumo. Desconocían cualquier forma de propiedad y no poseían estructuras clasistas. Comunidades indígenas americanas En cambio, otras poblaciones contemporáneas se encontraban en un grado de avance superior a las mencionadas, las que consiguieron vertebrar sociedades con estructuras políticas y religiosas más complejas. Entre las más antiguas de este tipo figuran los denominados olmecas de Mesoamérica y los habitantes de Chavín, en el área andina. También los aztecas, mayas e incas, que les sucedieron en el tiempo, se encontraban en un estadio superior de desarrollo, respecto a los grupos humanos anteriormente caracterizados. Para el especialista norteamericano Charles S. Mann (2006), ello se relaciona con la llamada revolución neolítica: Los investigadores saben desde hace mucho que en Mesoamérica se produjo una segunda Revolución Neolítica, independiente de la primera. El momento exacto en que tuvo lugar es incierto —los arqueólogos la sitúan cada vez más y más atrás—, pero ahora se cree que se produjo hace más o menos diez mil años, esto es, no mucho después de la Revolución Neolítica de Oriente Próximo. No obstante, en 2003, los arqueólogos descubrieron antiguas semillas de calabazas cultivadas en la zona costera de Ecuador, al pie de los Andes, que bien podrían ser más antiguas que cualquier otro resto agrícola de toda Mesoamérica, lo cual entrañaría que tuvo lugar una tercera Revolución Neolítica. Estas culturas, desarrollaron una agricultura más productiva, con capacidad para satisfacer las necesidades alimentarias de sus pobladores. Además, poseían estructuras sociales estratificadas, basada en la propiedad, lo que conllevó a una clara definición clasista y a la conformación del Estado. Actividades económicas y organización social Desde el punto de vista de la actividad económica desarrollada por los pueblos indígenas americanos, el continente puede ser dividido en ocho grandes zonas básicas en el momento de la irrupción europea a fines del siglo XV y principios del XVI. ❑ La del caribú, ubicada al norte de los Grandes Lagos, desde Alaska hasta la península del Labrador, a cuya caza se dedicaba la tribu nómada de los atapascos. ❑ La del salmón, en la costa occidental norteamericana, de cuya pesca vivían los algonquinos. ❑ La de los frutos silvestres, ubicada en los actuales estados de California (Estados Unidos) y Baja California (México), cuya recolección alimentaba, entre otros pueblos, a los yuma, apaches y yuquis. ❑ La de los bisontes, enmarcada en las praderas centrales de la América del Norte, a su caza para alimentación y abrigo, se dedicaban los sioux o dakotas. ❑ La del maíz, en la costa este de Norteamérica, limitada al norte por los Grandes Lagos y al sur por el golfo de México, cuyo cultivo era realizado por los iroqueses y hurones. ❑ La zona de la mandioca, al norte y centro de Suramérica, y en las Antillas, fue la base alimenticia de tupís, caribes, arahuacos, taínos y guaraníes. ❑ La del guanaco, ubicada en las verdes praderas de las pampas suramericanas, cuya caza sostenía a los charrúas, pampas, araucanos, puelches, tehuelches y onas. ❑ Economía agrícola diversificada que incluía gran parte del territorio actual de México, casi toda Centroamérica y la faja suramericana, situada desde la sierra de los Andes hasta la costa este, limitada al sur por el río Maule. Actividades económicas y organización social El desarrollo de la agricultura en este último grupo, constituyó un componente fundamental en la transformación socioeconómica de las sociedades aborígenes americanas. Su perfeccionamiento requirió de la construcción de complicados sistemas de regadío, obligó al sedentarismo y posibilitó la organización de verdaderos centros citadinos. El conocimiento y uso intensivo de la tierra se efectuó, al parecer en forma paralela, en dos o tres espacios geográficos del continente entre el 7 mil y el 1 500 años antes de nuestra era. Entre sus centros más notables se destacaron las zonas altas de Mesoamérica, así como la costa y sierra del área andina, donde se crearon condiciones favorables para el desarrollo de la llamada revolución neolítica. Precondición para el posterior surgimiento en estos territorios de sociedades de clase y deslumbrantes centros de civilización. En estas áreas medulares la sociedad se caracterizó, desde cientos de años antes de nuestra era, por la existencia de comunidades aldeanas, organizadas en clanes familiares en torno a la propiedad común del suelo y el trabajo colectivo. No obstante, se encontraban sometidas a un grupo humano (teocracia) apartado del trabajo agrícola, que impuso al resto de la población fuertes tributos en productos y servicios. Este poder despótico centralizado ejercía funciones de utilidad social, como la dirección de las labores agrícolas, la organización de la defensa y la construcción de caminos, puentes, almacenes, observatorios astronómicos, sistemas de regadíos, palacios, templos y otras obras ceremoniales. Actividades económicas y organización social El sistema socioeconómico y político de estas sociedades indígenas más avanzadas, descansaba en la explotación del conjunto de la población por la casta dominante y sus rasgos se asemejan al tipo de sociedad existentes en la India y China antiguas. Se trataba de un régimen de lenta transición de la comunidad primitiva a la sociedad de clases. En su interior coexistían formas arcaicas de organización comunitaria (ayllú entre los incas y calpulli para los aztecas) con un estado jerarquizado dominado por una teocracia que exigía tributos y prestaciones personales, como la mita de los incas y cuatequil de los aztecas. Las primeras culturas que alcanzaron este estadio de desarrollo fueron los llamados olmecas del golfo de México y los habitantes de Chavín y Tiahuanaco en la región andina. La dinámica de estas ciudades-estado les permitió expandirse hacia los territorios colindantes, a las que irradiaron su influencia y marcaron con una misma tradición social, cultural, religiosa y científica. A estas características, habría que añadir la existencia de otros elementos similares: cultivo del maíz y frijol, instrumentos de trabajo (coa o taclla), técnicas agrícolas, el riego, las construcciones de piedra y barro, algunos tipos de cerámica y de textiles, los sacrificios humanos y otros. Se considera que los núcleos más importantes de estas civilizaciones clasistas, alcanzaron su primer período de auge entre los años 200 y 900, cuando desarrollaron una serie de patrones culturales y de civilización considerados clásicos. Entre los años 700 y 1000, estas complejas sociedades americanas sufrieron una serie de sacudidas y crisis que pusieron fin al llamado período clásico. Situación que propició el florecimiento de nuevas culturas, entre ellas la Azteca y la Inca, que alcanzaron junto a los Mayas el punto más alto de desarrollo político y socioeconómico de los pueblos indígenas antes de la llegada de los europeos. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Desigual desarrollo de las comunidades aborígenes americanas A la llegada de los europeos a América, hallaron comunidades indígenas que presentaban diferentes niveles de desarrollo económico-social. Eran comunidades recolectoras-cazadoras- pescadoras o practicaban una agricultura rudimentaria, otras comunidades ya transitaban hacia la sociedad dividida en clases y las sociedades más avanzadas: mayas, aztecas e incas, que ya constituían Estados que explotaban a la comuna campesina, la cual tenía que pagar tributos en especie y en trabajo, como ocurría en las sociedades del Oriente Antiguo. En la América del Norte, en los actuales territorios de los Estados Unidos y Canadá, vivían aproximadamente 600 o más sociedades diferentes que nunca llegaron a formar Estados, vivían de la caza, la pesca, la recolección y ya conocían la agricultura, pero de manera rudimentaria. Por ejemplo, los inuit o esquimales, grupo nómada, que se movió por las regiones gélidas costeras de Alaska y Canadá, las islas Árticas, por la península del Labrador y por el extremo sur de Groenlandia; su principal actividad económica era la caza, también pescaban y recolectaban. Los siux o dakotas, dueños de las praderas, expertos cazadores de bisontes y excelentes jinetes, cuan- do se hicieron de caballos, eran nómadas y vivían en tiendas. Los siux eran la más numerosa y poderosa de las tribus del Oeste. Desigual desarrollo de las comunidades aborígenes americanas Los iroqueses y los algonquinos ya practicaban una agricultura, sin abandonar la caza y la pesca. Los algonquinos ocuparon una gran extensión del actual territorio de los Estados Unidos, Se dedicaron al cultivo del maíz y del tabaco, sin abandonar la actividad de la caza del búfalo. Los algonquinos se encontraban organizados en tribus. El consejo de la tribu (powwow), era el gobierno supremo. Fueron hábiles guerreros. Los iroqueses se destacaron por su carácter guerrero que se manifestó en su rivalidad con los algonquinos, puesto que compartían el mismo territorio. Los colonizadores franceses e ingleses aprovecharon esa rivalidad para aliarse a ellos; los algonquinos se aliaron a los franceses y los iroqueses a los ingleses. Otro importante grupo que pobló Norteamérica fueron los pueblos indios, ya eran sedentarios, puesto que se dedicaron a la agricultura y a la alfarería, fueron excelentes agrónomos, pues alcanzaron altos rendimientos de una tierra extremadamente árida, gracias a sus obras de riego y a sus reservorios de agua. Otros grupos que poblaron la parte septentrional fueron: las más conocidas y difamadas tribus de los navajos y los apaches, así como los comanches y los kiowas. Desigual desarrollo de las comunidades aborígenes americanas La América Media, que comprende Yucatán, el sudeste de México y el istmo centroamericano, se conoce también como Mesoamérica, es una unidad cultural definida, con caracteres peculiares, ya que, los territorios comprendidos en el área geográfica presentan un conjunto de pueblos con rasgos culturales comunes, para integrar una zona cultural, fue un corredor cultural. Aquí florecieron civilizaciones que alcanzaron un importante desarrollo en la agricultura y transitaban hacia formas superiores de organización social y estatal, son los casos: de los olmecas, cultura madre, los zapotecas, los totonacas, los mixtecas, los huastecas, los teotihuacanos y los toltecas, entre otros. Los mayas y aztecas como dos sociedades que alcanzaron un imponente desarrollo económico, político y cultural. Los olmecas es considerada la civilización más antigua de Mesoamérica, expandieron su influencia cultural por toda la región, por esa razón se le considera como madre de otras culturas. Fueron grandes maestros en el arte lapidario, elaboraron obras colosales y enigmáticas, como las grandes cabezas de piedra con acusados rasgos negroides. En la América insular todos los grupos aborígenes se encontraban en la comunidad primitiva, los más avanzados practicaban una agricultura rudimentaria, como las tribus de origen arauaco, que poblaron estas islas, un ejemplo que lo ilustra son los taínos de Cuba, La Española y Puerto Rico. Desigual desarrollo de las comunidades aborígenes americanas En Suramérica también es evidente el desarrollo desigual de las sociedades que poblaron ese territorio. Los pueblos del cono Sur eran cazadores, recolectores y pescadores, como los onas y puelches. Otros grupos ya practicaban una incipiente agricultura, sin abandonar la caza, la recolección y la pesca. Los onas habitaron la Isla Grande de la Tierra del Fuego, eran nómadas, pues su principal actividad era la caza del guanaco, muy abundante en la región; sus instrumentos: el arco y la flecha. En la primavera recolectaban frutos silvestres y huevos de las aves marinas. La pesca la realizaban cuando bajaba la marea, pescaban con una red confeccionada con tendones de guanaco. Los tehuelches, son los llamados patagones, envueltos en la leyenda fabulosa de la existencia de gigantes en la Patagonia, pues en el siglo XVI los navegantes desde lejos observaban a los indígenas de la región, envueltos en mantos de piel de guanaco, oteando el horizonte desde lo alto de las rocas, semejaban gigantes de más de tres metros y medio de altura. Los mapuches, bautizados por los españoles como araucanos, supieron defender su independencia frente a todos los invasores. Primero enfrentaron la expansión incaica y resistieron bravamente a los conquistadores españoles. En el siglo XIV ya eran agroalfareros y ganaderos. Presentaban una organización social y militar en forma de pirámide. Desigual desarrollo de las comunidades aborígenes americanas Los arauacos son originarios de Suramérica, desde su probable habitad en la región brasileño-venezolana del Orinoco y del río Negro, se desplazaron por grandes extensiones de la región, hay presencia de esta familia en los actuales países de Venezuela, Colombia, Brasil, Perú, Bolivia y Paraguay. Practicaron una agricultura rudimentaria, la base de la alimentación era la yuca, fueron alfareros y cazaban y pescaban. Los arauacos “eslabón entre dos continentes”, criterio que no solo está relacionado con su carácter de infatigables caminantes, sino relacionado por la difusión de elementos culturales en los ámbitos meso, sudamericano y antillano, como fuente de una cultura primigenia. Por ejemplo: la lengua arauaca para algunos investigadores es la más difundida de todas las de América e incluso se admite la posibilidad de que el maya sea una rama del arauaco o al menos contenga elementos de esa lengua. Desigual desarrollo de las comunidades aborígenes americanas Los caribes como los arauacos, y tal vez primos, tuvieron también una capacidad expansiva y móvil, desde su posible origen en un punto lejano y perdido del Matto Grosso, hasta las islas de las Antillas. Fueron pueblos cazadores y pescadores y ya practicaban una agricultura rudimentaria, el complejo yuca. Los caribes defendieron bravamente su libertad, por esa razón pasaron a la historia como pueblos bárbaros, feroces, antropófagos, así se fue formando una imagen distorsionada de ese pueblo. Fueron portadores de cultura y la difundieron por el inmenso territorio por donde se desplazaron. La aplicación de las técnicas metalúrgicas relacionadas con la aleación del oro y el cobre, llamada tumbaya, técnica que tuvo una gran difusión que los arauacos y los caribes dieron al arte de los metales. Es bueno destacar el desarrollo que alcanzaron en la orfebrería del oro, en especial los pueblos que poblaron el territorio colombiano, representados por los quimbayas. También se encontraban grupos que practicaron una agricultura más avanzada, con sociedades más organizadas como los chibchas o muiscas en la actual Colombia. Como los incas, practicaron la agricultura, con el empleo de un extenso sistema de regadíos y la construcción de terrazas. Confeccionaron tejidos de algodón y fueron expertos orfebres, sus artesanos trabajaron el oro. El comercio alcanzó cierto desarrollo, que enlazaba con regiones bien alejadas de Suramérica y también con el istmo, he aquí un posible vínculo con el mundo mesoamericano. Constituyeron Estados, sometidos al férreo control del poder personal de los caciques. Desigual desarrollo de las comunidades aborígenes americanas Por último en el área andina descolló la civilización incaica, la más desarrollada de la América indígena, heredera del bagaje cultural de esa región, representada por chavín, paracas, nazca, mochica, chimú, tiahuanaco-huari, entre otras. La cultura chavín de Huantar, fue una cultura madre, su influencia se extendió por toda la región, desde Cajamarca hasta el Ecuador por el norte y por el sur, a Bolivia y parte de Chile y Argentina. Esta cultura está asociada al felino, difundió el cultivo del maíz, además de construir canales de riego y drenaje. La cultura paracas se distinguió por la elaboración de tejidos de algodón de gran colorido y belleza y algunos de ellos se conservan, a pesar del tiempo transcurrido. Además realizaron operaciones quirúrgicas complejas y practicaron la momificación de sus muertos. La cultura nazca impresiona por la existencia de gigantescas figuras trazadas sobre el suelo desértico. Se trata de un gigantesco calendario, solo visible desde las alturas. Las figuras representan una especie de registro de observaciones astronómicas. Esta cultura se desarrolló mil años antes que la incaica. Los mochicas habitaron la región costeña, esta cultura alcanzó avances extraordinarios en la agricultura al incorporar adelantos técnicos como, las obras de riego: canales y acueductos, aún se conservan el canal de La Cumbre y el acueducto de Ascope. La sociedad mochica se caracterizó por una pronunciada estratificación social que se manifestó en las grandes construcciones en Huaca del Sol y en Huaca de la Luna. Se presupone la existencia de un Estado despótico. El llamado reino Chimú fue contemporáneo del imperio inca en el momento de su máximo esplendor. Su capital fue Chanchán con sus monumentales construcciones como la pirámide del Sol. Fue una sociedad estratificada en clases bajo un poder central fuerte. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Copyright © 2012. Editorial Universitaria. All rights reserved Muro Saínz, E. R. Massón Hernández, L. A. & Licea Milán, D. V. (2012). Historia de América. T omo 1.. Editorial Universitaria. https://elibro.net/es/ereader/uguayaquil/172228?page=27 Copyright © 2012. Editorial Universitaria. All rights reserved Muro Saínz, E. R. Massón Hernández, L. A. & Licea Milán, D. V. (2012). Historia de América. T omo 1.. Editorial Universitaria. https://elibro.net/es/ereader/uguayaquil/172228?page=27 Copyright © 2012. Editorial Universitaria. All rights reserved Muro Saínz, E. R. Massón Hernández, L. A. & Licea Milán, D. V. (2012). Historia de América. T omo 1.. Editorial Universitaria. https://elibro.net/es/ereader/uguayaquil/172228?page=27 Copyright © 2012. Editorial Universitaria. All rights reserved Muro Saínz, E. R. Massón Hernández, L. A. & Licea Milán, D. V. (2012). Historia de América. T omo 1.. Editorial Universitaria. https://elibro.net/es/ereader/uguayaquil/172228?page=27 Copyright © 2012. Editorial Universitaria. All rights reserved Muro Saínz, E. R. Massón Hernández, L. A. & Licea Milán, D. V. (2012). Historia de América. T omo 1.. Editorial Universitaria. https://elibro.net/es/ereader/uguayaquil/172228?page=27 Copyright © 2012. Editorial Universitaria. All rights reserved Muro Saínz, E. R. Massón Hernández, L. A. & Licea Milán, D. V. (2012). Historia de América. T omo 1.. Editorial Universitaria. https://elibro.net/es/ereader/uguayaquil/172228?page=27 Copyright © 2012. Editorial Universitaria. All rights reserved Muro Saínz, E. R. Massón Hernández, L. A. & Licea Milán, D. V. (2012). Historia de América. T omo 1.. Editorial Universitaria. https://elibro.net/es/ereader/uguayaquil/172228?page=27 Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Las Altas Culturas Mesoamericanas En la región de Mesoamérica así como en la región Andina, a lo largo de un espacio de tiempo que se extiende desde el 2000 antes de nuestra era hasta el momento de la irrupción de los españoles en el continente, florecieron culturas que aunque separadas y distantes por su ubicación geográfica no dejan de brindar paralelismos en sus desarrollos y en los rasgos generales que las caracterizaron en los distintos períodos históricos. Este fenómeno ha provocado que importantes arqueólogos y antropólogos americanos se planteen la siguiente interrogante: ¿Es acaso posible que se realizaran contactos e intercambios permanentes entre las comunidades que poblaron las regiones de Meso y Suramérica? Y en caso negativo, ¿cómo explicarnos esas similitudes existentes entre las culturas de una y otra región? Las respuestas a estas interrogantes han sido dispares y contradictorias. Algunos autores se apresuran en afirmar la existencia de esas zonas de contacto y otras la niegan rotundamente. Las Altas Culturas Mesoamericanas Por su parte, Alberto Ruz Lhuillier sostiene que: “El contacto cultural era obviamente posible, puesto que ningún obstáculo geográfico decisivo separaba ambas partes; podemos decir también que tal contacto es además probable, según lo sugieren los numerosos rasgos básicos comunes, sin embargo, debe reconocerse que hasta la fecha tal contacto no ha sido definitivamente probado”. A partir de esos “rasgos básicos comunes” aludidos por Ruz Lhuillier, se ha podido elaborar una periodización que muestra tres grandes momentos evolutivos válidos para las dos regiones del continente. Estos tres grandes períodos son: 1. El formativo o pre-clásico — 2000 (a.n.e.) — siglo IV (d.n.e.) 2. El clásico — siglo IV al X 3. El post-clásico — siglo X al XVI Las Altas Culturas Mesoamericanas Características generales del formativo o preclásico: La agricultura se va imponiendo progresivamente a la caza y a la pesca como la principal actividad productiva de las culturas que se desarrollaron en este período. Las sociedades en esta etapa no muestran grandes diferencias entre los individuos que la integran, ni por el modo de repartir las riquezas, ni por el rango, ni por la presencia de una especialización de trabajo. En lo religioso este período se destaca por una fuerte presencia en la región (Meso y Suramericana) de manifestaciones de culto a la fertilidad. Las aldeas muestran mejores sistemas urbanísticos y edificios de culto de mayor importancia. Durante el período formativo se desarrollaron las culturas de Chavín (en Perú), la Olmeca (en la costa del golfo de México) consideradas culturas madres. Las Altas Culturas Mesoamericanas Características generales del clásico: En este período la producción agrícola, artesanal y el comercio aumentan considerablemente. Es mucho mayor la población reunida en torno a las ciudades y centros ceremoniales. Aparecen ciudades y centros ceremoniales con un impresionante desarrollo urbanístico. Ejemplo de lo dicho son las ciudades mayas Tikal, Uaxactun, Copán, Bonampac y Palenque. En este período se da un marcado predominio de las castas sacerdotales sobre las castas guerreras; existen por lo tanto verdaderas teocracias. Se desarrollan las matemáticas, la astronomía, los calendarios, las artes y la escritura. Las sociedades se encuentran mucho más diferenciadas, dando origen en algunos casos a verdaderas castas privilegiadas. No emergen formas imperiales de dominación. Predominio de ciudades con gobiernos autónomos independientes. Al clásico pertenecen la cultura maya clásica, la teotihuacana (en el valle de México), la zapoteca (en Oaxaca) la de Tiahuanaco (en Perú). Las Altas Culturas Mesoamericanas Características generales del postclásico: Lo más relevante en el aspecto urbanístico en este período es el desarrollo alcanzado por los sistemas de comunicaciones o intercambios (caminos, carreteras, etcétera). La diferenciación entre los individuos en la sociedad por su riqueza, diferencias étnicas, privilegios, etc., llega a su punto más alto. Predominio de los estados y castas guerreras. Aparición de imperios o estados que unifican o subordinan amplios territorios a su administración. Aparición y multiplicación de los sacrificios humanos. Ejemplos de culturas que alcanzaron su apogeo: la maya-tolteca (en la parte norte de la península de Yucatán, la azteca (en el valle de México) y la inca (en la región andina). Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Los Aztecas La historia del pueblo azteca representa la última y más elevada etapa del desarrollo cultural de los numerosos pueblos que se asentaron en el altiplano mexicano. Por lo tanto, fue el resultado de una larga herencia posiblemente enriquecida por ellos; baste recordar los nombres de: olmecas, teotihuacanos, toltecas, zapotecas, mixtecas, totonacas y huaxtecas, entre otros. El origen de los aztecas y el lugar preciso de su ciudad, así como la fecha en que iniciaron la peregrinación, son dudosos y están envueltos en leyendas de carácter religioso. Los mexicas provenientes del norte penetraron en el valle de México en el siglo XIII y se asentaron en la orilla oeste del lago Texcoco. Allí fueron obligados a pagar impuestos por los habitantes de ese territorio, de origen tolteca. Un siglo estuvieron en esa región, hasta que, conducidos por su guía Tenoch, decidieron buscar refugio en la mayor y más inhóspita de las islas del lago. Los Aztecas En esa isla tuvo su nacimiento el gran mito erigido en símbolo de la nación mexicana: los peregrinos vieron el águila sobre la serpiente en un nopal. Fue la revelación de Tláloc. Escena recogida en el escudo de la nación mexicana. Así se fundó en 1325 Tenochtitlán Con el tiempo alcanzaría un extraordinario desarrollo, sobresaliendo por la construcción de calzadas, acueductos, canales, templos, centros administrativos, escuelas. Su trazado, orden y limpieza dejó perplejos a los españoles. ¿Cómo fue posible ese desarrollo, si la isla en la que se asentaron definitivamente, era inhóspita? Lo primero que hicieron fue dar solución a la escasez de tierra para el sostenimiento de su población, y además pagarle tributo a los toltecas. Esta situación los obligó a inventar una forma de cultivo: las chinampas. ¿En qué consistían? Eran como unas balsas cubiertas de una capa de tierra, las cuales se fijaban al fondo del lago por medio de estacas. Eran sus jardines flotantes o sementeras. De esa manera tan ingeniosa, los aztecas, resolvieron la escasez de tierra y agrandaron el territorio insuficiente de la isla. Los Aztecas En las chinampas se cultivaba, fundamentalmente, maíz, su principal alimento, pero al igual que los mayas, sembraban tomate, ají, calabaza, aguacate y otros cultivos como: cacao, algodón y tabaco, por lo que puede inferirse que la principal actividad económica de los aztecas era la agricultura. Los instrumentos de trabajo eran rudimentarios: la coa o estaca para perforar la tierra, el metate para convertir los granos de maíz en harina, cuchillos de piedra para cortar, entre otros. Como el agua del lago era salada tuvieron que traerla de tierra firme, por lo que construyeron un acueducto en Chapultepec y a través de canales llevar el agua potable a la isla. La sociedad azteca presentó una marcada estratificación social. Existían dos clases sociales por nacimiento: los pillis ––la nobleza–– hijos del señor, y los macehuales ––gente común–– eran los campesinos, organizados en la comuna campesina (calpulli), que como en los mayas, no se disolvió para enfrentar el medio tan adverso y poder transformarlo. Las tierras de cultivo pertenecían al calpulli y eran distribuidas a los jefes de familias con carácter hereditario. La estructura comunitaria se bastaba a sí misma, pero estaba dominada por un poder despótico que se encargaba de percibir tributos en especie, y en servicio personal en la construcción de caminos, de fortificaciones, de esclusas para la irrigación, entre otras. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Los Mayas La vida del pueblo maya se desenvolvió, en lo fundamental, en el Petén y la península de Yucatán. Debieron proceder de las tierras altas de la actual Guatemala y su arribo ha sido fijado a partir de los años 200 o 300, en correspondencia con sus fechados más antiguos. La estela 29 de Tikal, la placa de Leyden y la estela 9 de Uaxactún, registros de las hazañas y nombres de gobernantes (ahauob o halach uinic), fueron fechadas en los años 292, 320 y 328, respectivamente. Solo en estos dos sitios (Tikal y Uaxactún), separados por unos 50 kilómetros, se han hallado más de ochenta estelas y más de cincuenta altares repartidos en varias plazas. Los mayas de este período denominado clásico se distribuían en un sinnúmero de ciudades- estado que pugnaban constantemente entre sí. Entre los centros hoy conocidos se encuentran Sayil, Tikal, Uaxactún, Copán, Quiriguá, Piedras Negras, Xultun, Yaxha, Caracol, Calakmul, Yaxchilán, Uxmal, Labná, Kabah, Itsimté, Ucanal, Toniná, Chichén Itzá, Tzimin Katz, Bonampak, Dzibanché, Uxul, Nakun, Balkbal, La Milpa, Naranjo, La Honradez y Palenque. (Guerra, 2015a) Las ciudades-estado eran gobernadas por dinastías hereditarias de guerreros y sacerdotes, cohesionadas en torno a la figura divinizada del ahau. En Copan, por ejemplo, se encontró un enorme bloque cuadrangular de piedra con 16 hombres esculpidos sentados, que se considera representan los miembros de una misma familia que gobernó esa ciudad entre el 426 y el 820. El friso de estuco encontrado en la antigua ciudad maya de Holmul, al norte de la actual capital guatemalteca, corresponde al año 590. Mide ocho metros de largo y dos de ancho y muestra lo que ha sido interpretado como el ascenso al gobierno de Och Chan Yopat, cuyos ancestros se desprenden de la boca de un animal mitológico, junto a dos serpientes emplumadas. Los Mayas En otro sitio maya, Palenque, en 1952 se encontró la primera pirámide mesoamericana, destinada a mausoleo de un importante personaje, a la manera egipcia. En esta ciudad se han hallado relatos en estuco, sobre las paredes de las edificaciones y en algunos objetos de piedra, que se refieren a las hazañas militares de Pakal y su hijo Kan Balam, así como a sus monumentales construcciones. (Galich, 1981, p. 129) En su época de mayor auge, los mayas consiguieron un apreciable avance de la arquitectura, distinguida por el falso arco o arco maya. A su vez, sus conocimientos de matemática y astronomía, les permitió elaborar un complicado calendario más preciso que el gregoriano. En el desarrollo de esta ciencia se valieron de un sistema de numeración vigesimal que incluía el cero, un logro solo compartido con los pueblos de la antigua India, de quienes los europeos obtuvieron la idea. La más antigua y grande ciudad maya fue probablemente Tikal, situada en el centro del Petén, con más de tres mil construcciones, entre templos, observatorios astronómicos, edificios ceremoniales, palacios y pirámides. Estas últimas tenían la particularidad de tener su escalinata al medio y su templo encima, el mayor de los cuales alcanzaba los 60 metros de altura. Las Mayas Las culturas mayas del período clásico entraron en una abrupta decadencia de poco más de un siglo (889-1007), cuando las ciudades fueron abandonadas y la selva se apoderó de ellas. La estela 11 de Tikal registra su última inscripción en el año 889, Yaxchilán quedó desierta en el 808, Palenque poco después y Calakmul en el 909. Las causas de esta catástrofe no son conocidas y entre las explicaciones que se aducen figuran la militar, sublevaciones campesinas y problemas ecológicos. No obstante, parece plausible que este desplome estuvo asociado a los cambios que entonces estremecían a toda Mesoamérica, crisis iniciada con la destrucción de Teotihuacán, pues fuera del área maya también fueron abandonados casi al mismo tiempo los centros urbanos de Tajín, Xochicalco y Cacaxtla. El renacimiento de la portentosa cultura maya, ahora limitada al área norte de la península de Yucatán, fue favorecido por nuevas migraciones toltecas procedentes del valle de México (Tula), origen de un intenso sincretismo. Los invasores no destruyeron las antiguas formas de vida, costumbres, creencias y el arte de los mayas, sino que los asimilaron, generando una civilización mestiza. Ello ocurrió después que los toltecas fundaron la ciudad de Mayapán en el año 987, mientras otros grupos conquistadores se apoderaban de Uxmal y Chichén Itzá (964), esta última establecida desde el 432 cerca de dos enormes cenotes. Las Mayas En esta etapa, el poder estatal se estructura sin los viejos ahauob, mediante una alianza de jefes, como el establecido por las familias invasoras de los cocomes, xius e itzáes. También se vertebró una alianza de centros urbanos, de la que fue exponente la poderosa Liga de Mayapán, conformada por las ciudades-estado de Chichén Itzá, Uxmal y Mayapán y que tuvo como símbolo el predominio de la mítica serpiente emplumada (Kukulkán). Mayapán, después de vencer a los itzáes de Chichén entre los años 1194 y 1250, mantuvo la hegemonía durante dos siglos, aunque fue totalmente arrasada por sus enemigos en 1461. Después la cultura maya-tolteca casi se extinguió, como su antecesora clásica. Las grandes ciudades volvieron a ser abandonadas y la exuberante vegetación tropical pronto cubrió sus ruinas, mientras las poblaciones se dispersaron en pequeños poblados y se registraba cierto retroceso socio-económico. Galich (1981) lo resume así: De la segunda y definitiva decadencia hay testimonios arquitectónicos, pero hay, también, memoria escrita, con nombres de personas y fechas muy precisas, de las calamidades que abatieron a los pueblos mayas en los siglos XV y XVI: guerras entre sí, luchas por el poder, asesinatos, epidemias y finalmente, la conquista de Yucatán por los españoles, en 1546, en el katún Ahau de la cronología maya. El centro maya más sobresaliente de esta etapa, desde el punto de vista cultural, fue Chichén Itzá, una ciudad-estado amurallada, con impresionantes construcciones como el Patio de las Mil Columnas, la imponente pirámide de nueve pisos del Castillo y el llamado Templo de los Guerreros. En particular, este último reproduce muchos de los elementos toltecas de la ciudad de Tula: pórtico con columnatas, frisos de tigres y águilas comiendo corazones, chamoles y atlantes, columnas en forma de serpientes emplumadas, etc. Otras ciudades mayas significativas de este período fueron Champoton y Tulum, esta última situada en el litoral caribeño, ambas protegidas por murallas. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Las culturas andinas Se conoce como culturas andinas o civilizaciones andinas al conjunto de las naciones precolombinas desarrolladas en la región occidental de Sudamérica, específicamente en las inmediaciones de la cordillera de los Andes, a lo largo de veinte siglos de historia, hasta la llegada de los conquistadores españoles a mediados del siglo XVI. La andina fue un área cultural fértil y diversa, y una de las cunas de la civilización humana, es decir, un área en la que surgió una sociedad compleja de manera autónoma e independiente al resto del mundo, como fue el caso también de Mesoamérica o Mesopotamia. Se estima que las primeras culturas andinas surgieron alrededor del período paleolítico, entre los años 5.000 y 9.000 a. C., pero es difícil estudiar la tradición andina debido a la falta de relatos escritos previos a la conquista española. Por ende, cada hallazgo arqueológico impulsa una reconfiguración y reinterpretación de la historia de los antiguos pueblos andinos. Las culturas andinas se extendieron a lo largo de la cordillera de los Andes, en el actual territorio de Argentina, Chile, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia y en menor medida en la región oeste de Venezuela. Características generales Se trató de culturas fundamentalmente agrícolas, que domesticaron diferentes variantes de maíz, papa, quinua, yuca, maní, coca, cacao, camote, frijoles, ajíes, algodón y zapallos, principalmente. También fue común el pastoreo de camélidos. Desarrollaron grandes complejos de irrigación, así como andenes y terraplenes en las regiones montañosas, e inventaron el arado de pie andino (taclla). También compartieron técnicas de deshidratación y almacenamiento de alimentos. Se vestían con túnicas atadas con faja a la cintura, turbantes y bolsas para la recolección, aunque conforme el tiempo pasó adaptaron sus vestimentas a la geografía circundante. Compartieron un imaginario religioso panteísta, en el que eran comunes los tótems de animales (cabezas de felinos, peces, águilas y cóndores), y un vocabulario más o menos común para nombrarlos. Conocieron la cerámica, el tejido, el arte plumario, la arquitectura y en menor medida, la metalurgia. La civilización más conocida y estudiada es la civilización inca. Culturas Andinas Civilización Mayo-Chipipe- Civilización Caral Marañón Surgida alrededor del 3.000 a. C. y Otra de las primeras culturas andinas desarrollada hasta el 1.800 a. C., esta es la cultura andina de la cual existe más y y de las que más sólida evidencia más nítida evidencia arqueológica, permanece, fue nativa del sureste de especialmente en la Ciudad Sagrada de Ecuador y el norte de Perú, en la Caral-Supe, ubicada a 182 km de Lima, y considerada la ciudad más antigua de cuenca del río Amazonas. Existió América. Los estudiosos comparan la entre los años 5.000 y 2.500 a. C. y se antigüedad y originalidad de esta cultura con las ancestrales civilizaciones egipcia, caracterizó por su reconocible estilo mesopotámica, india y china, pero a de arquitectura en espiral, así como diferencia de éstas, la caral se desarrolló por sus yacimientos arqueológicos en en el más completo aislamiento. Hay también quienes piensan que se trata de los que hay presencia de conchas la civilización matriz del Perú. marinas de la costa del pacífico. Culturas Andinas Cultura Chavín Cultura Tihuanaco Descubierta por el arqueólogo Julio Esta es una importante cultura César Trello en 1919, se supuso precolombina que floreció entre Bolivia, inicialmente que era la cultura matriz Perú y el norte de Chile entre 1500 a. C. y del Perú, dado que sus yacimientos 1187 d. C., cuya región central en su área de influencia era el lago Titicaca. Desde datan de entre el 1200 y 400 a. C., en allí se expandieron hacia los valles la cuenca alta del río Marañón, cercanos y hacia la costa del Pacífico, y especialmente en la antigua ciudad hasta San Pedro de Atacama en el Sur. de Chavín de Huántar, ubicada a 462 Se trata de la cultura más longeva de la km de Lima y a 3177 msnm. De los región, sobresaliente en la cerámica y los Chavín sobreviven importantes textiles, cuya ciudad principal, Tiwanaku, obeliscos y estelas, así como bustos fue abandonada misteriosamente hacia escultóricos y restos arquitectónicos. el año 1200 d. C. Culturas Andinas Cultura Paracas Cultura Nazca Otro de los importantes hallazgos del Desarrollada principalmente en los arqueólogo Julio César Trello, esta valles del Ica, en el actual Perú, entre cultura precolombina existió entre los los siglos I y IV d. C., son célebres por años 700 a. C. y 200 d. C., sus trazos sobre la pampa de caracterizados por una avanzada Jumana, conocidos como las “líneas textilería, cerámica y cestería. Se la de Nazca”, con figuras de animales a considera antecesora de la cultura una escala extraordinariamente nazca, con la cual guarda evidentes grande y precisa. También fueron semejanzas culturales, tanto así que aptos en la cerámica y en la muchos consideran a los Paracas ingeniería, como lo evidencia el como la etapa inicial de Nazca. hallazgo de grandes acueductos Fueron descubiertos en 1925 frente a destinados al riego agrícola. Son una la bahía de Paracas y al sur de Pisco. cultura clave para el surgimiento de los Huari. Culturas Andinas Cultura Huari Cultura Timoto-Cuica Surgidos entre los siglos VIII y XIII d. C., Propia de los Andes venezolanos (los fue una civilización imperial cuya estados Mérida, Táchira y Trujillo) y vinculada con la cultura chibcha o ciudad capital, Wari, se hallaba a muisca colombiana, esta cultura unos 20 km de la actual Ayacucho, abarcaba una diversa cantidad de tribus por encima de los 2900 msnm. Junto locales, como los timotos, carachis, al Imperio incaico fue la gran betijoqueyes, guaraques, cuicas, guitas, chachopos y licuipos, que compartieron potencia imperial suramericana, rasgos como su cultivo agrícola en ejerciendo su influencia sobre la sierra terrazas montañosas, su domesticación y la costa del actual territorio del pavo y la guacharaca, y su peruano. Eran, por lo tanto, una dedicación guerrera. Se estima que tuvieron contacto cultural con otras cultura mayormente guerrera y culturas precolombinas como la Caribe o religiosa. con los arawacos. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Los Incas Los incas fueron los pobladores de la región andina donde fundaron una sociedad altamente desarrollada, basada en la agricultura, lograron establecer un estado centralizado y dominaron un vasto territorio, con lo cual crearon un imperio, el único de la América antigua. El área andina es una región de grandes contrastes; desde el nivel del mar hasta las más altas regiones habitables; desde desiertos totalmente áridos hasta las selvas tropicales más lujuriantes; desde regiones invariablemente calurosas hasta zonas en las que el hielo y la nieve son eternos. Los Incas La agricultura constituyó la actividad económica principal de los incas, lo cual tuvo una gran significación, si tenemos en cuenta lo abrupto de su territorio y el crecimiento ascendente de su población. ¿Cómo lo lograron? Ejecutando grandes obras de irrigación y sobre todo resolviendo la escasez de terreno mediante la construcción de terrazas o andenes que iban serpenteando las laderas de las montañas. Estas terrazas eran regadas gracias a un complejo sistema de canales, y además empleaban abonos orgánicos, todo lo cual les permitía obtener buenas cosechas. Aplicaron métodos de barbecho, es decir, dejar descansar la tierra por uno o dos años. Su principal cultivo y base de la alimentación, como en los pueblos mesoamericanos, fue el maíz, pero también cosecharon: tomates, algodón, coca y papa, la cual junto al maíz no solo era el alimento fundamental, sino uno de los aportes de los pueblos americanos al resto de la humanidad. Entre los incas no existió el comercio a distancia, solo existía un comercio local, entre agricultores. Esto se debió a que los productos que podían servir para el comercio: lana, algodón, metales preciosos, fueron monopolizados por el Estado. Todas las regiones productoras de mercancías estaban sujetas a un estricto control del Estado inca. También se encontraban bajo el control del Estado, la actividad artesanal y la caza. Los Incas Los incas estaban divididos en clases sociales; de un lado los campesinos, organizados en comunas llamadas ayllú, que estaban obligados a trabajar para mantenerse así mismos y a la nobleza incaica, esta estaba constituida por el Inca o jefe máximo, sus parientes y protegidos, los sacerdotes, y los funcionarios del Estado. Los incas dividían la tierra en tres partes: las tierras del ayllú, las tierras del inca y las tierras del sol. Las tierras pertenecientes al ayllú, eran distribuidas a los jefes de familias, el tamaño de la parcela —tupu— dependía del número de miembros y sexo de la familia. Las tierras del inca eran para el sostenimiento del Estado —el Inca, su familia y el séquito—, del ejército, como reserva en caso de emergencia, para sostener a los trabajadores del Inca —ceramistas, orfebres, etc.—; eran trabajadas obligatoriamente por los miembros del ayllú. Las tierras del sol eran para el sostenimiento del sacerdocio, como ofrenda y sacrificios. El trabajo tuvo un carácter obligatorio: el ayni, que consistía en que cada familia realizaba el trabajo en su tupu; la minca, que era el trabajo en las tierras del inca y del sol y la mita, la prestación de servicio por un tiempo, casi siempre durante tres meses, en la realización de obras públicas, en las minas, en el servicio militar, como chasquis, entre otros. El imperio Inca Según las tradiciones, el primer Inca, Manco Capac, fundó la ciudad del Cuzco, es considerado un personaje mitológico. Sin embargo, la historia inca comienza realmente con el emperador Pachacutec, el noveno en la sucesión, quien reinó entre 1438 y 1471, es el período más conocido de los incas, el de mayor esplendor. La expansión inca combinó el uso de la violencia con otros métodos para con los pueblos conquistados. Después de conquistado un territorio según el comportamiento del pueblo sometido, se adoptaban diversas formas de control. Una de estas consistía en trasladar a toda la población a otro lugar distante y mezclarla con un pueblo ya sometido. Otros métodos fueron: el de tomar como rehén a miembros del grupo gobernante del pueblo conquistado, o colocar como gobernador del territorio a un hijo o pariente próximo del Inca; además obligaban a la población conquistada a hablar el quechua, lengua de los incas y a adorar a sus dioses, en primer lugar al Inca, quien era considerado hijo del sol. Estos métodos llevaron a que el imperio creciese, hasta alcanzar más de 900 000 km2. La administración del Estado incaico estaba estrictamente centralizada. Al frente se hallaba el Inca o Sapa Inca. El Inca era un soberano absoluto, se tenía como descendiente directo del sol. Los súbditos lo adoraban como tal, nadie podía acercársele sino descalzo y en actitud de sumisión, ni siquiera mirarle directamente a la cara. El imperio recibió el nombre de Tahuantinsuyu, dividido en cuatro partes y en cada una de ellas, había un funcionario que respondía directamente al Inca. Los incas construyeron un poderoso Estado: centralizado, teocrático y despótico, que explotaba a la comuna campesina, exigiendo el pago de tributos en especie y en trabajo. Es por tanto, una sociedad tributaria. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Viajes de Exploración para el Descubrimiento de América Cuando se habla del “descubrimiento de América”, se hace referencia a la primera vez que exploradores europeos llegaron a las costas del continente americano, que hasta entonces desconocían. Este evento histórico tuvo lugar el 12 de octubre de 1492, cuando una expedición de los Reyes Católicos de España, liderada por el navegante genovés Cristóbal Colón (1451-1506), cruzó por primera vez el océano Atlántico y pisó suelo americano. La llegada de Colón y otros exploradores europeos inició un proceso de profunda transformación política, económica, social y cultural tanto en las sociedades americanas como en las europeas. Por eso, algunos historiadores marcan con este hecho el fin de la Edad Media y el comienzo de la Edad Moderna. Los viajes de Cristóbal Colón Durante el siglo XV, las diferentes potencias europeas competían entre sí tanto por el acceso a nuevos recursos naturales como a bienes producidos en otras partes del mundo. En ese contexto, la exploración del mundo desconocido, tanto para la conquista de territorios como para la creación de nuevas rutas comerciales, cobró especial importancia. Hasta mediados de siglo, desde Oriente (China e India) se traían especias, sedas y otros bienes de lujo, a través de la conocida “ruta de la seda”; sin embargo, este camino quedó inhabilitado cuando en 1453 el Imperio Otomano conquistó el Imperio Romano de Oriente. El navegante Cristóbal Colón quiso buscar una ruta nueva hacia China y la India. En ese entonces, algunos cálculos estimaban que el diámetro terrestre era lo suficientemente pequeño como para navegarlo. Colón creyó que si navegaba de manera sostenida hacia el oeste, podría dar la vuelta al mundo y llegar a Oriente. Los viajes de Cristóbal Colón Para poder llevar a cabo su expedición, acudió a los Reyes Católicos de España, quienes decidieron financiar su viaje y otorgarle tres barcos: la carabela Niña, la carabela Pinta y la nao Santa María. El 3 de agosto de 1492, la expedición de Colón partió desde el Puerto de Palos, al sur de España. Atravesó el océano Atlántico y, luego de dos meses, se encontró en territorio americano. El 12 de octubre los navegantes llegaron a la isla de Guanahani, a la que posteriormente bautizaron como San Salvador. A partir de allí, continuaron explorando la región caribeña, llegando a Cuba y más tarde a isla La Española (que, actualmente conforma los países de Haití y República Dominicana). El 24 de diciembre, la carabela Santa María encalló en sus costas, y los exploradores utilizaron sus restos para realizar la primera construcción en suelo americano, a la que llamaron Fuerte Navidad. En este primer asentamiento quedaron los primeros españoles cristianos viviendo en suelo americano. En enero de 1493, la tropa emprendió el regreso a España, creyendo que en su travesía habían llegado a Oriente y sin saber que, en realidad, se trataba de otro continente. Los viajes de Cristóbal Colón El éxito de su primer viaje le aseguró a Colón que los Reyes Católicos financiaran otra travesía, con el objetivo de asentar el dominio español sobre los territorios descubiertos y continuar camino hacia China e India. La segunda expedición partió el 24 de septiembre de 1493 y, luego de dos meses, llegó a las islas americanas. Sus tripulantes recorrieron el archipiélago de las Antillas Menores y nombraron algunas de sus islas “La Deseada”, “Dominica”, “Guadalupe” y “Antigua”. Al desembarcar en la isla Santa Cruz, los españoles fueron atacados por guerreros caribes. Al llegar a La Española, los navegantes se encontraron con que el Fuerte Navidad había sido incendiado y los españoles cristianos habían sido ejecutados, bajo el mando del cacique caribe Caonabo. Colón ordenó una nueva fundación, a la que llamó La Isabela y la construcción de otro fuerte que también fue destruido por los indios caribes. Luego, recorrieron las islas de Juana (hoy Cuba) y Santiago (hoy Jamaica) y se dirigieron al sur. En marzo de 1496, tras algunos problemas con sus tripulantes y saqueos de poblaciones americanas, la expedición finalmente emprendió el regreso a Europa. Los viajes de Cristóbal Colón En 1498 Colón emprendió un tercer viaje, esta vez llegó a la isla de Trinidad alrededor del mes de julio. Visitó el Golfo de Paria y la desembocadura del río Orinoco (hoy en Venezuela), paisajes que describió en su diario con enorme sorpresa por su belleza. Más tarde, recorrió las islas venezolanas del Estado Nueva Esparta (hoy Margarita, Coche y Cubagua), donde fundó el asentamiento perlífero de lo que fue luego la ciudad de Nueva Cádiz. A su retorno a La Española, Colón fue arrestado y devuelto a España en cadenas, por los navegantes descontentos con su mando. El cuarto y último viaje de Colón a América se realizó entre 1502 y 1504, con prohibición de pisar La Española y la misión de hallar un estrecho en aquellas nuevas costas que permitiera el camino hacia China y la India. Para ese entonces, los españoles aún creían que estos territorios eran parte de Asia. Colón exploró en esta oportunidad las costas de Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá, territorios en los que estableció contacto con los pueblos mayas, quienes le dieron a conocer el cacao. Las expediciones colombinas estuvieron muchas veces marcadas por el conflicto entre sus tripulantes y la escasez de recursos. Eran, además, expediciones de conquista de territorios que se hallaban poblados y que muchas veces ofrecieron resistencia. Otros viajes complementarios Américo Vespucio (1454-1512) Viajes de 1499-1502: Américo Vespucio, de origen italiano, participó en varios viajes a la costa de América del Sur. Sus relatos y observaciones contribuyeron a la comprensión de que las tierras descubiertas no eran Asia, sino un "Nuevo Mundo". El continente americano lleva su nombre en su honor. Juan Ponce de León (1460-1521) Viaje de 1513: Este explorador español es conocido por haber sido el primer europeo en llegar a la península de Florida. Estaba en búsqueda de la legendaria Fuente de la Juventud. Vasco Núñez de Balboa (1475-1519) Viaje de 1513: Balboa cruzó el istmo de Panamá y se convirtió en el primer europeo en avistar el océano Pacífico desde el continente americano. Otros viajes complementarios Américo Vespucio (1454-1512) Viajes de 1499-1502: Américo Vespucio, de origen italiano, participó en varios viajes a la costa de América del Sur. Sus relatos y observaciones contribuyeron a la comprensión de que las tierras descubiertas no eran Asia, sino un "Nuevo Mundo". El continente americano lleva su nombre en su honor. Juan Ponce de León (1460-1521) Viaje de 1513: Este explorador español es conocido por haber sido el primer europeo en llegar a la península de Florida. Estaba en búsqueda de la legendaria Fuente de la Juventud. Vasco Núñez de Balboa (1475-1519) Viaje de 1513: Balboa cruzó el istmo de Panamá y se convirtió en el primer europeo en avistar el océano Pacífico desde el continente americano. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Expansión Colonial Española La expansión colonial española, que se inició a finales del siglo XV y se prolongó hasta el siglo XIX, marcó un capítulo crucial en la historia mundial. Este proceso, impulsado por la búsqueda de nuevas rutas comerciales, riquezas, y la evangelización cristiana, transformó profundamente los territorios de América, Asia y África. Esta expansión colonial se desarrolló principalmente en dos fases: la exploración y conquista iniciales, seguidas de la consolidación y administración de los territorios conquistados. Contexto y Causas Motivos Económicos: La búsqueda de nuevas rutas comerciales hacia Asia, la obtención de riquezas como el oro y la plata, y el establecimiento de nuevas oportunidades comerciales fueron impulsos clave. España, al igual que otras potencias europeas, estaba interesada en acceder a los recursos y productos de lujo de Asia sin tener que depender de intermediarios como los otomanos. Motivos Religiosos: La propagación del cristianismo fue otro factor importante. Tras la Reconquista, el espíritu cruzado seguía vivo en España, y convertir a los habitantes de las nuevas tierras al cristianismo era una prioridad. Motivos Políticos y Sociales: La expansión ofreció oportunidades para la nobleza y los aventureros, además de ser una válvula de escape para la presión social y económica interna. Territorios La expansión colonial española abarcó vastas regiones en América, Asia y África. A continuación, se detallan los principales territorios conquistados durante este período: América El Caribe Isla La Española (Haití y República Dominicana): Descubierta por Cristóbal Colón en 1492, fue la primera colonia española en el Nuevo Mundo. Cuba: Conquistada y colonizada a partir de 1511. Puerto Rico: Conquistada por Juan Ponce de León en 1508. Jamaica: Conquistada en 1509. Territorios México y América Central México: Hernán Cortés conquistó el Imperio Azteca entre 1519 y 1521. Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica: Conquistadas y colonizadas entre 1524 y 1540 por diferentes expediciones españolas. América del Sur Perú: Francisco Pizarro conquistó el Imperio Inca en 1533. Chile: Conquistada por Pedro de Valdivia a partir de 1540. Argentina: Colonización iniciada en la década de 1530, con la fundación de Buenos Aires en 1536. Colombia: Conquistada por Gonzalo Jiménez de Quesada en la década de 1530. Venezuela: Exploración y colonización desde principios del siglo XVI. Territorios América del Norte Florida: Explorada y colonizada por Juan Ponce de León en 1513 y posteriormente por Pedro Menéndez de Avilés en 1565 con la fundación de San Agustín. California: Colonización iniciada a finales del siglo XVIII con la fundación de misiones como San Diego en 1769. Territorios Asia Filipinas Conquistadas por Miguel López de Legazpi en 1565, las Filipinas fueron una importante colonia española en Asia, administradas desde Manila. África Presidios y Fortalezas Ceuta y Melilla: Conquistadas en 1415 (Ceuta) y 1497 (Melilla), estas ciudades siguen siendo territorios españoles. Islas Canarias: Conquistadas entre 1402 y 1496, fueron una base importante para las expediciones hacia América. Sáhara Occidental: Diversas partes fueron controladas por España desde el siglo XIX hasta la descolonización en 1975. Consecuencias Económicos: La explotación de minas de oro y plata, especialmente en Potosí (Bolivia) y Zacatecas (México), y la introducción de cultivos como el azúcar y el tabaco, integraron las economías coloniales en un sistema mundial. Sociales y Demográficos: La población indígena sufrió un drástico descenso debido a enfermedades, guerras y trabajos forzados. La llegada de esclavos africanos alteró aún más la composición demográfica. Culturales: La lengua española y la religión católica se convirtieron en elementos dominantes en las colonias. El arte, la arquitectura y la literatura reflejaron una mezcla de influencias europeas e indígenas. Políticos: El control español sobre vastos territorios fomentó el surgimiento de movimientos independentistas en el siglo XIX, que eventualmente llevaron a la formación de naciones soberanas en América Latina. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Expansión Colonial Portuguesa El Imperio portugués fue creado en el siglo XV y llegó a extenderse desde América hasta Japón. Los europeos blancos dominaron el comercio, la política y la sociedad. Los portugueses comenzaron su imperio como una exploración para acceder al oro de África occidental y después al comercio de especias de Oriente. Las carracas crearon una red marítima que conectaba Lisboa con todas sus colonias al oeste y el Estado da India al este, tal como era conocido el imperio al este del cabo de Buena Esperanza. Factores de la Expansión Sociales Económicos -La nueva dinastía la Casa de - La sed de oro. La búsqueda de los yacimientos al sur del Sahara estaría Avis creó una nueva nobleza entre los mayores acicates de las deseosa de conseguir expediciones portuguesas. rápidamente honores. – La escasez de artículos alimenticios de primera necesidad. Para – La expansión en Marruecos irá Magalhâes Godinho la agricultura fue unida pues no solo al deseo de la principal razón de la colonización cruzada sino al afianzamiento de los archipiélagos atlánticos del espíritu nobiliaria – La creciente construcción naval: La carencia de madera es otra de las razones que impulsa la colonización de las islas Primera expansión del reino de Portugal Alfonso I, llamado el conquistador, dejó un reino con el doble del tamaño del condado que había recibido. En 1249, Portugal ya había terminado su Reconquista. En 1415 se conquista Ceuta, y este hecho es el que marca la época de expansión del reino de Portugal. Se tomó la decisión de explorar la costa africana, hacia el sur y, en menor medida, ir hacia el oeste. En 1418/19 se llega a Madeira y en 1427 a las Azores. En 1471 se estableció una factoría en el golfo de Guinea. El objetivo era llegar a las Indias para dominar el comercio de las especias, y en 1488 se cruza el cabo de Buena Esperanza, Sudáfrica. Motivaciones Europa y en particular los reinos de la región Occidental se hallaban aislados y sin recursos por las crecientes campañas musulmanas del Imperio Otomano que intentaba tomar el mundo cristiano a través del reino de Hungría. De esta manera, las motivaciones para las empresas de descubrimientos fueron principalmente, aunque no únicamente, de carácter económico: buscar acceso directo a las fuentes de abastecimiento de trigo, oro y de esclavos y más tarde a las de especias orientales. Además de la necesidad de alcanzar las fuentes de bienes escasos o caros en Europa, había intención política de atacar o debilitar la retaguardia del gran poderío islámico, adversario de la Cristiandad (es aquí donde se observa la estrategia militar y diplomática unida al espíritu de evangelización heredado de las Cruzadas). Primera Etapa del Imperio Portugués Segunda Etapa del Imperio Portugués Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Expansión Colonial Inglesa La expansión británica por fuera de Europa comenzó en el siglo XVI y tomó un gran impulso durante el reinado de Isabel I de Inglaterra (1558-1603). Se llevó a cabo en un contexto de competencia entre las diferentes potencias europeas por el control de territorios, recursos y redes mercantiles. En esta primera etapa, los principales adversarios británicos eran el Imperio español y el Imperio francés. El objetivo era controlar las rutas comerciales que unían diferentes partes del mundo, especialmente aquellas que conectaban Europa con el oriente de Asia. La Corona fomentó que distintas empresas privadas iniciaran expediciones y apoyó el establecimiento de asentamientos coloniales británicos con fines comerciales. El navegante y mercader John Hawkins dirigió expediciones en la costa occidental de África y sentó las bases del comercio británico de esclavos africanos. Además, la East India Company (Compañía Británica de las Indias Orientales) guio la colonización hacia el este y estableció diferentes asentamientos comerciales en India. Expansión Colonial Inglesa En América del Norte, los primeros intentos de colonización comandados por Humphrey Gilbert (en Terranova) y Walter Raleigh (en Virginia) fracasaron. En 1607, luego de detener las hostilidades con el Imperio español, el Imperio británico logró fundar de manera permanente el asentamiento de Jamestown, en Virginia. Esto dio inicio a la colonización del norte del continente y algunas de las islas del Caribe. Las nuevas colonias se pudieron mantener bajo el amparo de la gran armada naval británica y en ellas se impusieron fuertes restricciones comerciales. Causas Mercantilismo. Entre los siglos XV y XVI, se difundieron las ideas del mercantilismo, una ideología económica que sostiene que la riqueza de un Estado se mide por la acumulación de bienes materiales (especialmente de metales preciosos). En consecuencia, los gobiernos monárquicos comenzaron a intervenir cada vez más en la economía nacional con el objetivo de conseguir riquezas y fomentar las empresas comerciales. Búsqueda de nuevas tierras. En el siglo XV, todas las tierras de Europa estaban bajo el control de algún Estado. Por eso, los diferentes reinos buscaron expandir sus territorios en otros continentes. Esto fomentó las inversiones en campañas de exploración y en el desarrollo de la navegación y de la tecnología militar. Los principales objetivos eran obtener recursos naturales y controlar rutas comerciales. Causas Competencia. La competencia por el control de territorios, rutas comerciales y recursos naturales llevó al enfrentamiento entre los diferentes Estados europeos. También buscaban fortalecer el dominio de posesiones de interés estratégico y económico, lo que dio origen a diferentes formas de control y gobierno (por ejemplo, colonias y protectorados). Organización Política El Imperio británico estaba gobernado por la Corona británica, asentada en Inglaterra. Dominaba a todas las Coronas locales, como la escocesa o los sultanatos y reinos asiáticos. Esto continuó así hasta 1926, cuando se les concedió a algunos dominios británicos el estatuto de comunidades autónomas bajo la Mancomunidad de las Naciones o Commonwealth, una organización británica que establece lazos entre el Reino Unido y sus antiguas posesiones coloniales. La Corona británica es producto de la unión de los reinos de Inglaterra, Irlanda y Escocia a inicios del siglo XVII, durante el reinado de Jacobo VI, tras la muerte de Isabel I de Inglaterra, última del linaje de los Tudor. Dichos países permanecieron como entidades separadas que compartían monarca hasta que el Acta de Unión de 1707 formalizó la unificación. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez Expansión Colonial Francesa La expansión colonial francesa fue un proceso prolongado que llevó a Francia a construir uno de los imperios coloniales más grandes del mundo, influyendo en diversos territorios desde el siglo XVII hasta el siglo XX. Este proceso se puede dividir en tres grandes etapas: la colonización temprana, la expansión moderna y el declive imperial. Primera fase: Siglos XVII-XVIII Colonización en América: Francia estableció colonias en Canadá (Nueva Francia), Luisiana, las Antillas (Guadalupe, Martinica, Haití) y Guyana. El comercio de pieles, azúcar y esclavos desempeñó un papel clave en esta expansión. Sin embargo, Francia perdió muchos de estos territorios tras la Guerra de los Siete Años (1756-1763), cediendo Canadá y otras posesiones a los británicos por el Tratado de París (1763). África y Asia: Durante esta etapa, la presencia francesa fue limitada, con algunas bases comerciales como Senegal en África Occidental y enclaves en la India. Segunda fase: Siglo XIX Renacimiento colonial bajo Napoleón III (1850-1870): Se impulsó una política expansionista que condujo a conquistas clave, como Argelia (1830) y más tarde Túnez.Francia también comenzó a establecerse en Indochina (Vietnam, Laos y Camboya) y expandió su influencia en África. Conferencia de Berlín (1884-1885): Este evento marcó el inicio de la "carrera por África". Francia obtuvo grandes territorios en el norte, el oeste y el centro del continente, creando uno de los imperios africanos más extensos. Indochina francesa: Entre 1858 y 1887, Francia consolidó su control en el sudeste asiático, especialmente en Vietnam, Camboya y Laos. Tercera fase: Siglo XX Pico del Imperio Colonial Francés: Después de la Primera Guerra Mundial, Francia controlaba aproximadamente 12 millones de km² y 100 millones de habitantes en sus colonias.Territorios clave incluían Argelia, Túnez, Marruecos, Senegal, Madagascar, y amplias áreas en el sudeste asiático. Decolonización (1945-1970): Tras la Segunda Guerra Mundial, comenzó un proceso de descolonización impulsado por movimientos nacionalistas y la presión internacional. Eventos destacados: Guerra de Indochina (1946-1954): Francia perdió el control de Vietnam, Laos y Camboya. Guerra de Argelia (1954-1962): Una de las descolonizaciones más violentas, que resultó en la independencia de Argelia. Independencia de las colonias africanas: Entre 1958 y 1960, países como Senegal, Costa de Marfil y Mali se independizaron. Legado El colonialismo francés dejó profundas huellas en las antiguas colonias, incluyendo: Cultural: Influencia del idioma francés, religión católica y sistemas educativos. Económica: Estructuras económicas orientadas a la exportación de recursos. Política: Relaciones poscoloniales enmarcadas en la "Françafrique", una red de influencia que mantiene lazos políticos y económicos. A pesar de su declive, Francia sigue siendo una potencia mundial con territorios de ultramar (como Guadalupe, Martinica, Guayana Francesa y Nueva Caledonia) que son herencia directa de su pasado colonial. Universidad de Guayaquil Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación Carrera de Pedagogía de la Historia y las Ciencias Sociales I Parcial – Ciclo II ASIGNATURA: Historia de América I DOCENTE: MSc. Jorge Wilson Flores Rodríguez