Reinado de Isabel II y Sexenio Democrático PDF
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Summary
This document details the political history of Spain during the reign of Isabella II and the subsequent democratic sexennium. It covers the various political parties, including the Carlists and the moderates, and outlines the major events of that time, like the Carlist wars and the revolution of 1868.
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TEMA 5: LA CONFLICTIVA CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO LIBERAL (1833-1874). 1º) El período de regencias durante el reinado de Isabel II: revolución liberal y Primera Guerra Carlista (1833-1843). A) Las Guerras Carlistas: El Reinado de Isabel II (1833-1868) supuso la consolidación del sis...
TEMA 5: LA CONFLICTIVA CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO LIBERAL (1833-1874). 1º) El período de regencias durante el reinado de Isabel II: revolución liberal y Primera Guerra Carlista (1833-1843). A) Las Guerras Carlistas: El Reinado de Isabel II (1833-1868) supuso la consolidación del sistema liberal, a pesar de los obstáculos puestos por los elementos conservadores del país, que provocaron las Guerras Carlistas, que fueron tres: Primera (1833-1839); Los partidarios del Antiguo Regimen, basándose en la Ley Sálica iniciaron una guerra civil contra Isabel II y su regente María Cristina de Borbón. Los carlistas eran los partidarios del Infante Carlos María Isidro, hermano de Fernando VII, que reunían distintos intereses: ultracatólicos, defensores de los fueros medievales, medianos y pequeños propietarios agrarios y el clero en casi su totalidad. Las zonas donde más influencia tuvieron fueron en el Norte y Este del país (País Vasco, Navarra, Norte de Aragón, Cataluña y el Maestrazgo). Sus militares más importantes fueron Zumalacárregui, Cabrera y Maroto. Don Carlos era el rey para los carlistas con el nombre de Carlos V. Por el contrario los elementos liberales que buscan cambios políticos, económicos y sociales apoyaron a la niña-reina Isabel viendo en ello la posibilidad de modernizar el país. Los liberales estuvieron integrados por los grupos sociales de la burguesía urbana, funcionarios y parte del ejercito. A ellos se les denominó isabelinos. Los principales militares fueron Espartero, Narváez y O´Donnell. Las consecuencias de esta guerra fueron importantes, ya que supuso la victoria política de los liberales y su entrada al gobierno. Segunda (1846-1849): Se desarrolló casi exclusivamente en Cataluña y no tuvo la importancia de la primera. Tercera (1872-1876): Se desarrolló en la zona vasconavarra y finalizó también con la derrota de los carlistas. B) Las bases políticas del Estado Liberal: B.1) Partidos políticos; Constituye una novedad del período, aunque no hay que verlos en un sentido moderno ya que estaban formados por minorías de la élite social; los partidos políticos liberales defendían la división de poderes, la existencia de un sistema representativo basado en la soberanía nacional y la igualdad ante la ley de todos los ciudadanos. Defendían el sistema económico del capitalismo basado en la libertad de la iniciativa económica y que todo estuviese presidido por la ley de la oferta y la demanda. Ésta es una ideología de la burguesía que va a ser asumida por la antigua nobleza terrateniente. A partir de 1834, con el Estatuto Real, se produjo la primera escisión entre los liberales en moderados y progresistas, y después surgirán más partidos: 1. Partido Moderado. Partidario de un poder central fuerte y de una soberanía compartida entre el Rey y Las Cortes; éstas tendrían un Congreso elegido por un sistema censitario y un Senado elegido por el Rey. Defienden que los municipios estén gobernados por alcaldes designados por el gobierno y apoyan el proteccionismo económico. Socialmente eran apoyados por la antigua nobleza, terratenientes, grandes industriales vascos y catalanes, y el alto clero. Su principal líder fue Ramón Mª Narváez. 2. Partido Progresista. Eran partidarios de un sistema representativo puro: soberanía nacional en las Cortes, con un Congreso y Senado elegidos por un sistema censitario más ámplio, con municipios dirigidos por cargos electos y librecambismo económico. Socialmente eran apoyados por burgueses de profesiones liberales y clases medias urbanas. Su líder más importante fue Baldomero Espartero. 3. Partido Demócrata. Fue fundado en 1849, de una escisión del Partido Progresista que reivindicaba el sufragio universal. 4. Partido Republicano. Se funda 1856, cuando algunos demócratas y progresistas radicalizaron sus planteamientos; en este partido se incluían a intelectuales y al incipiente movimiento obrero y campesino. 5. Unión Liberal. Creado en 1856 por Leopoldo O´Donnell, pretendía ser un `partido de centro` pues recogía los elementos más moderados de los progresistas y los más progresistas de los moderados. 6. Partido Carlista. Se situaba fuera de los partidos liberales, y era contrarrevolucionario y partidario de una vuela al absolutismo. Su base social la componían los campesinos y el clero en la zona Norte. B.2) Corona: Lejos de actuar como árbitro, participó en política apoyando a los moderados. B.3) Militares: Influyeron en la política a través de pronunciamientos, hasta el punto de que los cambios de gobierno se efectuaban por su intervención. 2º) Regencias en el Reinado de Isabel II: A) Regencia de María Cristina de Borbón (1833-1840). Tiene dos períodos: a) Período Moderado (1833-1836). Fueron gobiernos moderados dirigidos por Martínez de la Rosa. Elaboraron una carta otorgada, el Estatuto Real 1834 que reconocía la igualdad ante la ley pero que concentraba todo el poder en el Rey-Reina. b) Período Progresista (1836-1840), Tras el golpe de Estado de los Sargentos de la Granja, se elaboró la Constitución de 1837 que reconocía los derechos individuales, y unas Cortes bicamerales, con un Senado de designación real y un Congreso elegido por voto censitario. Se terminó con la Primera Guerra Carlista (Abrazo de Vergara entre Maroto y Espartero) y se llevó a cabo la Desamortización Eclesiástica de Mendizábal. Los casos de corrupción y el autoritarismo de la regente originaron unas revueltas en 1840. Para sofocarlo ésta recurrió a Espartero, para después renunciar a la Regencia y marcharse al exilio una vez que tuvo conocimiento del programa político del general. B) Regencia de Espartero (1840-43). Esta se caracterizó por la represión y el autoriarismo, a pesar de ser un general progresista; llevó a cabo una política centralista y librecambista que originó levantamientos sociales especialmente en Cataluña donde bombardeó Barcelona en 1842 para reprimir la revuelta. Ésta acción le supuso la pérdida de los pocos apoyos que le quedaban, y un golpe de Estado de militares moderados dirigidos por el General Narvaez lo derribó. 3º) Construcción y evolución del Estado liberal durante el reinado efectivo de Isabel II (1843-1868). A) Década moderada (1843-53). Para acabar con los problemas que acarreaba el gobierno de regencias se acordó otorgar la mayoría de edad a Isabel II con 13 años. El gobierno de esta etapa contó con el apoyo de los sectores más conservadores, sobre todo después de aprobar la moderada Constitución de 1845, que establecía un sufragio censitario muy restringido (1% de la población). Otra característica de esta constitución fueron: soberanía compartida Cortes-Rey, Cortes bicamerales y un gobierno con amplios poderes. Las leyes orgánicas que desarrollaron la constitución aseguraban el control político de la oligarquía terrateniente burguesa; así se reforzó el centralismo con la Ley de Ayuntamientos de 1845 por la que los alcaldes de las ciudades de más de 2000 habitantes eran nombrados por la Corona. Otras medidas importantes de este período fueron: Reforma de la Hacienda (1844) Con la creación de un sistema tributario unido, con la excepción de los territorios de vasconavarros. Creación de la Guardia Civil (1844) Como un cuerpo policial rural para velar los intereses de los terratenientes. Establecimiento de la censura previa con la Ley de Imprenta 1845. Creación de un sistema jurídico común con el Código Penal de 1848. Se firmó un Concordato con la Santa Sede en 1851 con el fin de tranquilizar a los sectores más reaccionarios del país e integrar a los carlistas en el juego político. Entre otras consecuencias se frenó la Desamortización Eclesiástica y se pagó el sueldo a los clérigos con cargo al presupuesto del Estado. A cambio el Papado reconocía las propiedades desamortizadas en 1836. Se inició la construcción del ferrocarril y de nuevas carreteras. El malestar social y político a partir de 1850 dieron lugar a un pronunciamiento militar dirigido por Leopoldo O´Donnell (Vicalvarada) apoyado por los progresistas y la acción popular. B) Bienio Progresista (1854-56). El gobierno estuvo formado por una coalición progresista-moderada donde el presidente de gobierno fue Espartero y O´Donnell Ministro del Ejército. Se elaboró la Constitución de 1856 de carácter progresista, pero fue llamada la `Non Nata` porque nunca fue promulgada. Hechos importantes de este período son: el ministro de economía Pascual Madoz llevó a cabo la Desamortización General que afectaba a los ayuntamientos (1855). Este mismo ministro sentó las bases para la modernización económica a través de varias leyes: Ley de Ferrocarriles, Ley de Banca y Crédito, y Ley de Minería. Se produce la primera huelga general en la Historia de España en 1855 provocada por la aplicación del librecambismo; esta crisis fue una de las causas de la caída del gobierno junto con el desacuerdo de progresistas y moderados. Tras estos hechos la Reina encargó al General O´Donnell a formar gobierno con un nuevo partido que él había formado: La Unión Liberal, un partido de centro. C) Los gobiernos moderados y de la Unión Liberal (1856-68). Se alternaron en el gobierno los generales O`Donnell y Narváez. Este periodo se caracterizó por la inestabilidad y los cambios de gobierno. Solo durante el `gobierno largo` de O`Donnell hubo cierta estabilidad, crecimiento económico y una activa política exterior que pretendía reforzar las imagen del régimen y recuperar algo de prestigio internacional para España (intervenciones en República Dominicana, Indochina y Marruecos). Durante esta etapa el texto constitucional fue el de 1845 con un Acta Adicional que recogía algunos principios progresistas. A partir de 1863 se produjo una crisis generalizada. En lo económico, la crisis internacional del capitalismo supuso una reducción de las inversiones, y las malas cosechas originaron crisis de subsistencia, con los consiguientes motines populares. En lo político, la sucesión de gobiernos cada vez más conservadores y de tendencia autoritaria condujeron a una crisis universitaria (Noche de San Daniel, 1865) y al intento de pronunciamiento progresista en el Cuartel de San Gil (1866). El gobierno ultraconservador de González Bravo hizo que todos los partidos políticos se uniesen contra él y contra la reina Isabel II en el llamado Pacto de Ostende (1866). Los objetivos de este pacto eran muy limitados: supresión del régimen isabelino, creación de un gobierno provisional y creación de unas Cortes Constituyentes. Toda esta degradación política, desembocó en 1868 en una revolución llamada `La Gloriosa`. El golpe se dió en septiembre de 1868 se inició con el levantamiento del Almirante Topete en Cádiz. Tras un enfrentamiento entre tropas a favor de la revuelta y las isabelinas en Alcolea (Córdoba), éstas últimas son derrotadas e Isabel II salió de España. 4º) El Sexenio Democrático: Revolución, Constitución de 1869 y la monarquía de Amadeo de Saboya. A) La Revolución 'Gloriosa' (Septiembre de 1868). Un grupo de políticos demócratas y progresistas firmaron un pacto en la ciudad belga de Ostende (1866) que incluía un acuerdo para destronar a Isabel II, al que se fueron sumando políticos de todo el espectro político español excepto del Partido Moderado, que permanecía en el poder. La degradación política en 1868 era tal que dió paso a la definitiva revolución llamada `La Gloriosa`. El golpe se dió en septiembre de 1868, cuando la Armada española, dirigida por el Almirante Topete se sublevó contra la monarquía de Isabel II. Lo que inicialmente era un pronunciamiento militar más se convirtió en un movimiento revolucionario, en el que los sectores populares ocuparon las plazas de sus localidades al grito de “Mueran los Borbones” y “Viva España con honra”. La revolución se extendió por toda Andalucía y el ejército de la reina fue derrotado en la Batalla de Alcolea (Córdoba). Isabel II que se encontraba veraneando en San Sebastián, cruzó la frontera y se exilió en París. Fue un momento de auténtica esperanza democrática. B) Gobierno provisional (1868-1870). Como primera medida, los revolucionarios, encabezados por los generales Francisco Serrano y Juan Prim, convocaron elecciones para que las nuevas Cortes redactaran una Constitución que sustituyera a la de 1845. Se creo un Gobierno Provisional presidido por Serrano (que será Presidente del Gobierno desde octubre de 1868 hasta junio de 1869, fecha en la que se convertirá en Regente del Reino hasta la llegada de Amadeo de Saboya en enero de 1871) que aprobó algunas de las propuestas de las Juntas Revolucionarias como: la implantación del sufragio universal masculino; libertades de prensa, educación y culto; librecambismo económico. Sin embargo, paralelamente se produjo la exclusión de los demócratas en el gobierno. Pero el verdadero artífice de la revolución será Prim (Presidente del Gobierno desde junio de 1869) quien contará con el favor del pueblo. Tras las elecciones libres y democráticas ganaron los monárquicos progresistas y los demócratas. Se aprobó en junio la Constitución de 1869 que estipulaba entre otras cosas: - Se proclama que España se constituye en una monarquía parlamentaria con soberanía nacional. - Sistema Bicameral (Congreso de los Diputados y Senado). - Elección de ambas cámaras por sufragio universal masculino. - El poder ejecutivo recaía en el rey pero lo ejercía a través de sus ministros. - El rey solo sancionaba las leyes puesto que el poder legislativo recaía en las Cámaras. - Se reconoce el Derecho a la Libertad de Culto aunque el Estado seguía dando una dotación a la Iglesia Católica. - La nueva Constitución recogía una amplia declaración de derechos: de expresión, de asociación, de reunión, por primera vez se recogía el derecho a la inviolabilidad de correspondencia y a la libertad de trabajo para los extranjeros. Como reconocía que España era un reino, había que buscar un rey en Europa cátolico y liberal. Los ministros tenían varios presidentes: destacaban Antonio de Orleans (que tras mancharse las manos tras el Duelo de Carabanchel, perdió sus opciones al trono); un principe alemán, Leopoldo de Hohenzollern, que tuvo que declinarse porque Napoleón III de Francia no lo veía con buenos ojos por la enemistad en esa época entre Francia y Alemania; finalmente, gracias al impulso de Prim, terminó haciéndose con el trono a Amadeo I de Saboya (hijo menor del rey de Italia) que aceptó el ofrecimiento y que fue nombrado rey de España (noviembre 1870). C) Reinado de Amadeo I de Saboya (1871- febrero 1873). Amadeo I reinó poco más de dos años y asumió el papel de monarca constitucional, que reina pero no gobierna. Se encontró un país con graves problemas políticos. La mayoría de los partidos le ignoraban y se disputaban el poder en el Congreso. Además, su principal defensor, el general Prim, fue asesinado poco antes de su llegada a Madrid. Por otra parte no fue admitido por la mayoría de la sociedad española por ser extranjero. El nuevo rey tuvo que hacer frente a una fuerte oposición: por un lado estaban los republicanos y gran parte de los sectores populares, reticentes al sistema monárquico; por otra parte, los carlistas iniciaron nuevas insurrecciones que desembocaron en la IIIª Guerra Carlista (1872-1876); mientras tanto, en Cuba, se sucedieron los levantamientos contra el Gobierno (Guerra Grande, entre 1868 y 1878). También hubo una sublevación de los republicanos federalistas; por último, la división entre los partidos que habían traido la revolución hicieron que el nuevo rey no aguantase más y abdicó en su nombre y en el de sus descendientes, dejando un escrito con los motivos de su renuncia (10 de febrero de 1873),y se volvió a Italia. 5. El Sexenio Democrático: El primer ensayo republicano y su fracaso. (febrero 1873- enero 1874). Tras la abdicación del rey Amadeo I, las Cortes votaron por gran mayoría la constitución de una experiencia política nueva: la República. La falta de políticos convencidos del republicanismo y la desconfianza que la nueva forma de gobierno suscitaba entre las clases populares (obreros y campesinos), que no obtuvieron una respuesta clara a sus demandas de supresión de impuestos y del injusto sistema de reclutamiento (las quintas) fueron los principales problemas con los que tropezó la joven república. Además, la republica tenía en contra a grupos claramente hostiles, como los políticos autoritarios y conservadores de la década anterior, buena parte de la jerarquía eclesiástica y los carlistas. El corto periodo que duró estuvo lleno de dificultades. Los jornaleros del sur pedían el reparto de los numerosos latifundios, cuestión que los gobernantes ni siquiera se habían planteado. En Cataluña se intentó crear un Estado dentro de la República Federal Española. Uno de los principales problemas fue la proclamación de cantones, pequeños territorios que se proclamaban soberanos frente al Estado Central. Fueron momentos de gran inestabilidad ya que en 11 meses hubo 4 presidentes: 1º) Estanislao Figueras, fue el primer Presidente de la República. Su primera tarea fue elaborar una Constitución en la que se definiese la nueva forma de Estado (la del 69 era monárquica). Un grupo de republicanos intentan imponer una República Federal y Figueras dimite. 2º) Francisco Pi y Margall fue el segundo Presidente (defensor de una República Federal). Durante su gobierno se elaboró una Constitución que no llegó a aprobarse en la que se decía que el país quedaba formado por 17 Estados Federales. El problema fue que muchos pueblos y ciudades se proclamaron cantones independientes. A este proceso se le llamó Revolución Cantonal. Los cantones llegaron a tener o lo intentaron su propio himno, bandera, moneda, etc. Pi y Margall es incapaz de resolver el problema y dimite. 3º) Nicolás Salmerón es elegido como tercer Presidente de la República, le toca acabar con las sublevaciones cantonales, con el ejército, pero al negarse a firmar las condenas a muerte de los sublevados, acabó dimitiendo por problemas de conciencia. 4º) Emilio Castelar. Tuvo que imponer el orden de los cantones (Cádiz, Sevilla, Cartagena…) aplicó la pena de muerte en los rebeldes y suprimió por la fuerza todo federalismo, por eso, a esta última etapa se llama la República del Orden. A pesar de todo, los conflictos y la inestabilidad continúan. Un golpe de Estado del General Pavía obliga a Castelar a dimitir y así pone fin a la Primera República (enero 1874). En general, los cuatro presidentes eran personas de gran talla intelectual, pero sin la fuerza política para dominar el caos político ocasionado por: La disensión política entre los partidos. La presión del partido alfonsino, encabezado por Canovas del Castillo, que quería una restauración borbónica en la figura de Alfonso XII. El recrudecimiento de la IIIª Guerra Carlista (1872-1876). La Guerra Grande de Cuba (1868-1878). La revolución cantonal (federalismo desde abajo). La protesta social. Finalmente, un nuevo pronunciamiento puso fin a esta situación. En enero de 1874, el General Manuel Pavía entró con las tropas en el Congreso, lo disolvió y le entregó el poder al general Francisco Serrano, quien decidió autoproclamarse presidente vitalicio de la República y gobernó dictatorialmente durante doce meses. Mientras tanto, el político liberal conservador Cánovas del Castillo preparaba la Restauración de la monarquía borbónica. Durante su exilio en París, Isabel II había abdicado en su joven hijo Alfonso XII que estudiaba en la academia inglesa de Sandhurst. El futuro rey prometía un gobierno constitucional y la ausencia de represarías contra los opositores de la monarquía borbónica en un documento que fue llamado el “Manifiesto de Sandhurst”. El General Martínez Campos con el apoyo del ejército se pronunció en Sagunto y proclamó rey a Alfonso XII (diciembre 1874), lo que produjo la restauración monárquica. Comienza así una nueva etapa más estable: la Restauración.