Summary

This document discusses the factors that fostered contemporary thought, including the Enlightenment, historical events, and the French Revolution. It examines the Enlightenment's impact on societal views and the sequence of events leading up to the French Revolution. The document also addresses the motivations and struggles involved.

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Para poder adentrarnos en la Edad Contemporánea, debemos primero mencionar algunos factores que fomentarán el pensamiento contemporáneo. La Ilustración como un movimiento de pensamiento que irá cogiendo fuerza a lo largo de los años. Este cambio de pensamiento junto a acontecimientos históricos como...

Para poder adentrarnos en la Edad Contemporánea, debemos primero mencionar algunos factores que fomentarán el pensamiento contemporáneo. La Ilustración como un movimiento de pensamiento que irá cogiendo fuerza a lo largo de los años. Este cambio de pensamiento junto a acontecimientos históricos como: la unión del parlamento escoces e inglés para dar los primeros indicios del Reino Unido, el nacimiento del imperio pruso en el 1701, las guerras de sucesión española y austriaca (del 1701-14 y del 1740-48 respectivamente), la Guerra de los Siete años, la misión geodésica al Ecuador en el 1735, y por último el comienzo del fin del antiguo régimen, con la revolución americana (1773-83) y la revolución francesa (1787-99). La Ilustración supuso un cambio importante en la mentalidad del pueblo. Por un lado, surgen las grandes monarquías europeas absolutistas comenzando con el Borbón Luis XIV en Francia, resumiendo su absolutismo con su frase: “El Estado soy yo (L'État, c'est moi)”. Los pensadores burgueses más importantes de esta corriente (Kant, Hume y Rousseau) serán inspirados por las ideas políticas de Locke y su liberalismo político, buscando la clara división de los poderes del Estado (el legislativo, el ejecutivo y el judicial) y fundamentando una clara idea de soberanía popular. Por otro lado, Rousseau propondrá su contrato social en el que argumentará que la emanación de leyes ha de venir del pueblo y no de Dios (el pueblo debe decidir y aprobar sus leyes, estas no deberían de ser impuestas sobre él). A la vez que hacemos una mención a la ilustración, debemos resaltar la revolución y subsecuente independencia de las colonias inglesas en las américas, que darán lugar a un cambio de mentalidad del pueblo francés iniciando la llama de la revolución. Este conflicto entre los ingleses y los americanos comenzó el 16 de diciembre de 1773 con el motín del té de Boston, en el que los americanos comenzarán una revuelta por la subida de impuestos a los productos procedentes de la India y exportados a América. Este suceso, junto con el creciente descontento con el reinado de Jorge III y su administración de las colonias, se une a una filtración del pensamiento ilustrado europeo, que llevará al motín del té de Boston y la subsecuente búsqueda de separación de las colonias de la corona inglesa. El conflicto armado comenzará en el 1775, terminando en el 1781 con la batalla de Yorktown, en la que los ingleses se rendirán y firmarán el Tratado de Paris en 1783, concediéndole la independencia a las colonias americanas finalizando así con el conflicto armado. Durante esta guerra los revolucionarios americanos recibirán en el apoyo francés en el 1778, y el español un año más tarde. Los franceses apoyarán a la causa con ayuda militar, enviando asesores como El Marqués de LaFayette y Rochambeau; armamento y un surtido de tropas terrestres y navales. Este apoyo, creará una deuda masiva en las arcas francesas y reforzará la idea de revolución en el pueblo francés. Por último, una burguesía muy adinerada en busca de poder político en un sistema en el que es prácticamente imposible ascender socialmente, siendo las dos únicas formas posibles unirse al clero o tener descendientes con un noble para que tengan un título nobiliario. Esto, sumado al descontento de muchos gremios de las grandes ciudades francesas por el intento de retirada de poder que tenían sobre el mercado, dará lugar a que la alta burguesía busque reemplazar socialmente a la nobleza. Estas causas, sumadas a las propuestas del ministro de hacienda Jaques Necker de varias reformas para intentar liberalizar el mercado con la abolición de los gremios y la eliminación de los poderes de los privilegiados, dando lugar a que los dos grupos más poderosos e influyentes del imperio (la alta burguesía y la nobleza) estén en descontento, desembocarán en la convocatoria de los Estados Generales Franceses, para replantear los impuestos del reino por el mismo Luis XVI el 5 de mayo de 1789 por consejo de Necker en la ciudad de Versalles, su lugar de residencia. Será un enorme fracaso ya que el tercer estamento (burgueses y campesinos) pedirán, en un primer lugar, igualar al número de miembros representantes de los otros dos estamentos, argumentando que al ellos ser la mayor parte de la población sería lo más equitativo. Aunque esta primera propuesta si se aceptase, la segunda propuesta de romper con el voto estamental, estableciendo así el voto personal, sería mal visto debido a que esto diluiría el poder de los estamentos privilegiados en el Estado. A pesar de que la mayoría de los nobles estuvieran en desacuerdo, otros como el Conde de Mirabeau serán partidarios de la eliminación de los poderes estamentales, argumentando que son injustos y que por ello han de ser abolidos, formando así la Asamblea Nacional en junio del 1798 con estos nobles y los burgueses a favor de la eliminación de los poderes estamentales. Ante la conmoción Luis XVI decide cerrar los Estados Generales hasta nuevo aviso, pero este acto dará lugar a la creación de los clubes (predecesores de los partidos políticos modernos), en los que la gente se reunirá de forma ilegal con gente afín a su ideología política. Mientras tanto, la Asamblea Nacional se reunirá de forma ilegal proponiéndose no separarse hasta la creación de una Constitución, haciéndose así llamar La Constituyente. Paralelamente a lo que estaba sucediendo en Versalles, en París, surgen varios grupos de burgueses descontentos debido a la subida de precios de la comida, consecuencia las malas cosechas en los últimos años. Con la influencia de las ideas ilustradas europeas y motivados por un descontento general ante una de las mayores crisis económicas. Dará lugar a una serie de revoluciones y protestas en Paris que culminarán con la decapitación del alcaide Launay el 14 de julio de 1789 en la guillotina durante la Toma de la Bastilla, siendo considerada la primera gran “Journeés” (Jornada), de una serán una serie de eventos que durarán una jornada laboral entera en la que el pueblo se alzará y terminarán con la llegada de Napoleón al poder en el 1799. Esta serie de Journeés darán lugar a lo que los historiadores conocen como el gran miedo, que durará todo el verano del 1789, en el que los estamentos privilegiados temen a los revolucionarios y por sus vidas, siendo hasta tal nivel de preocupación que muchos nobles huirán por miedo a que ellos sean perseguidos y en busca de apoyo de otras monarquías absolutistas para formar una resistencia ante el pueblo; mientras, que por otro lado, los no privilegiados temerán por sus vidas debido a las posibles represalias que los actos del resto de los sublevados pueden tener. Estos dos eventos convergen en octubre del 1789, fecha en la que se le exige a la familia real a retornar a Paris con el objetivo de tenerla más controlada y poder unir el movimiento revolucionario con el pensamiento revolucionario. Mientras que esto sucede la constituyente se propone 5 grandes propósitos los cuales lograrán entre el 1789 y el 1791, y que serán: 1. La supresión del feudalismo y del antiguo régimen. Esto lo harán argumentando que no tiene sentido que una persona sea superior a otra por el simple hecho de en qué familia nace. Esta propuesta buscaba la eliminación de los 3 estamentos que había habido durante todo el Medievo y Renacimiento hasta este punto. Buscaban no solo la ausencia de privilegios, sino la igualdad jurídica, argumentando que todos los hombres deberían ser igual ante los ojos de la ley. 2. Una declaración de los derechos del hombre y ciudadano. Haciendo referencia a lo previamente dicho de que todo hombre (hombre entendido como varón) ha de ser igual ante los ojos de la ley, la constituyente, decide escribir un manuscrito el cual irá al principio de la Constitución y que servirá de base de esta misma. Sus puntos más importantes serán: a. Todos los hombres nacen iguales ante la ley. b. La soberanía ha de ser depositada en la nación, es decir, reside en el pueblo. c. La ley ha de ser una expresión de la voluntad general (votada por la mayoría). d. Todos los ciudadanos han de contribuir con el Estado y la Administración Pública, esto se hará por medio de recaudaciones obligatorias (impuestos) y por medio de un servicio militar obligatorio a través de las llamadas levas. 3. Aprobación de la primera Constitución francesa en el 1791 promulgada por el rey y haciendo oficial la separación de poderes, dejándole al rey la posibilidad de vetar leyes aprobadas por el parlamento. En principio la Constitución dictaba que Francia sería una monarquía parlamentaria, pero esto cambiaría en unos pocos meses. 4. Aprobación de la Constitución civil del clero. Aunque se encuentre dentro de la propia Constitución de 1791 se menciona como un apartado de esta misma por lo controvertida e impactante que esta medida fue. Este apartado hizo dos grandes cambios a la vida religiosa. En primer lugar, se obliga a todo el clero a jurar fidelidad a la Constitución. Una parte del clero se negó a esta medida ya que ellos argumentaban que solo le podían jurar fidelidad al Papa, este grupo será conocido como los refractarios, mientras que la otra parte que sí le jura fidelidad a la Constitución serán conocidos como los juramentados. Por otro lado, el Estado comenzará con el proceso conocido como exclaustración que buscará eliminar las órdenes religiosas para luego poder expropiar todas sus tierras. 5. Por último, se encuentra una fuerte reforma administrativa que se podrá dividir en tres grandes reformas: una territorial, en la que se busca eliminar las delimitaciones de regiones históricas; una jurídica, en la que se eliminarán los cargos históricos; y una estatal, en la que se buscará eliminar a todos los intermediarios (centralismo francés). Durante todo este periodo de adaptación surgen cuatro grandes clubes los cuales serán muy influyentes durante este periodo. Estos clubes serán: El Club de los Fulienses, El Club de los Jacobinos, El Club de los Cordelos y El Club de los Girondinos. De entre todos estos clubes los más destacados serán los jacobinos y los girondinos, perteneciendo Robespierre a este último grupo. Tras aprobarse la Constitución y ser aceptada por el rey el primer gran acto fue una votación a favor por entrar a la guerra con la Corona austriaca ya que los revolucionarios consideraban que esto evitaría que en un futuro los Austrias intentasen devolver el absolutismo a Francia. Ante la noticia de la inminente guerra Luis XVI decide aplicar su derecho al veto, derecho que es inmediatamente revocado por la Asamblea Nacional invalidando su único poder como actual monarca. Este intento de veto empezará a sembrar la idea del republicanismo en el Estado francés. Pasada la declaración oficial de guerra de los franceses hacia los Austrias comienzan las levas en masa para comenzar a reclutar unos ejércitos más afines con la ideología ilustrada ya que los ejércitos antiguos estaban formados por nobles, de los cuales la gran mayoría huyó del territorio viendo la situación, y mercenarios, los cuales no eran bien vistos por la ideología ilustrada. Debido a todas las levas organizadas en esta época por el Estado francés el ejército se convertirá en una de las mayores potencias militares del continente debido a sus enormes números de tropas, ofreciendo este mismo ejército la primera victoria ante los Austrias en territorio francés en la batalla de Valmy el 20 de septiembre de 1792 dando así una gran subida de moral al pueblo y consolidando a los revolucionarios en el poder debido a que esta victoria sería la primera de muchas en la batalla contra el absolutismo. Luis XVI viendo como su imagen pública va decayendo ante los ojos de sus subordinados y de que se le está acusando de traidor a la patria (debido a no querer apoyar la guerra contra Austria) decide intentar huir a territorio austriaco en junio de 1791 en la conocida como Fuga de Varennes, pero, al final, esta fuga no sería fructífera y la familia real sería encarcelada y formalmente declarados como traidores a la patria ante el pueblo francés. Todo esto culminaría en enero de 1793 donde la familia real sería decapitada a manos de la guillotina acabando así con la monarquía en Francia y requiriendo la redacción de una nueva Constitución (ya no es una monarquía parlamentaria, sino una república). Tras la muerte de Luis XVI en 1793 comenzará en Francia el gobierno de la convección, pero mejor conocido como El Terror, con Robespierre prácticamente a cargo del Estado. Esta etapa será conocida por su sangriento trasfondo en el que la política francesa se basará en un exterminio por guillotina ante todo contrario al régimen y ante cualquier posible enemigo del “liberalismo” francés. Como añadido a esto se intentará acabar con todo relacionado al antiguo régimen, llegando a un extremo de intentar cambiar los nombres a los días y meses y considerar que la historia comienza con la escritura de la primera Constitución francesa y el “triunfo” del liberalismo sobre el absolutismo (se considera que el 1791 sería el año 0, haciendo que Luis XVI fuera ejecutado en su año 2). Se comenzarán a realizar levas anuales para poder combatir contra el apoyo británico a los focos antirrevolucionarios que surgirán por el territorio, destacando de entre todos estos conflictos la batalla de Tolón. En ella veremos un ejército inglés asediando el puerto de Tolón situado en el sur de Francia por vía naval y resultando en un total fracaso gracias a un capitán francés llamado Napoleón Bonaparte. A parte de esta política internacional se proponen varias reformas internas aprovechando el hecho de que la Constitución ya no estaba en vigor y que tenían carta libre para hacer lo que quisieran. Todas estas reformas serán realizadas con la visión de cumplir los ideales de libertad de la convención. Se comienza con una reforma del Estado en la que, aunque los 3 poderes (administrativo, legislativo y judicial) estén claramente separados todos terminaron “dependiendo” de la Asamblea y su poder legislativo. Se impone la convención revolucionaria como representante del poder judicial con el apoyo de el comité de seguridad nacional. Por otro lado, el poder ejecutivo estará representado por el comité de salvación pública, del cual el mismo Robespierre será el presidente. Y por último el poder legislativo residirá en las manos de la misma Asamblea. Añadiendo a la reforma interna del Estado se promulgaron varias leyes controversiales como la abolición de la esclavitud; que causará dos corrientes que se alzaran en protesta de esta ley, una que estará en contra y estará formada por esa alta burguesía con plantaciones de esclavos y, por el otro lado, de los esclavos a los cuales no se les quería liberar; y la imposición de un sufragio universal masculino. Pero, de todas las nuevas leyes promulgadas, la más controversial fue la llamada “Ley de los sospechosos”. Esta ley le daba carta blanca al Estado a condenar, encarcelar y ejecutar a cualquiera que se oponga a la idea de libertad del Estado. Esta ley dio lugar a un encarcelamiento masivo y una persecución a todo el mundo que no tuviera los mismos ideales radicales, desembocando en la expulsión de los girondinos en el 1794 de la Asamblea y la subsecuente encarcelación de estos. Toda esta paranoia de Robespierre culminará con la visión de enemigos dentro de la misma Asamblea y en su mismo partido, intentando llegar a la cima de “La Montaña” que será constituida por los más extremistas de la Asamblea y comenzará siendo encabeza por Danton y Hébert y siendo sustituidos por el mismo Robespierre y siendo este el que los acuse de manera formal, por la misma ley de los sospechosos, sentenciándolos a ejecución por la guillotina en marzo y abril respectivamente del 1796. Esto generará una fracción en “La Montaña” y generará terror en el interior de la propia Asamblea. Debido al Estado de inestabilidad en el que se encontraba la política francesa se le acusó a Robespierre de tirano, acusación que 24 horas más tarde lo tendrá pasando por la guillotina en la Journeé del 10 de Termidor del año II (28 de julio de 1794). Tras la muerte de Robespierre se instaurará una nueva convención que no durará más de dos años, a esta convención se le conoce La Convención Termidoriana (1794-1795). La nueva convención buscará separarse lo más posible del terror, llegando a la elaboración de una nueva constitución. Se encarga la escritura de esta nueva Constitución a Enmanuel Sieyès, que para el 5 de Fructidor del año III (22 de agosto de 1795) será terminada. Esta misma generaba un importante cambio en la división de poderes, eliminando los cargos creados por el terror y cambiando estos por nuevos cargos que estuviesen elegidos por el pueblo. En primer lugar, el poder judicial residiría en los jueces que serían elegidos por el pueblo. Luego, el poder legislativo será dividido en dos, generando el primer sistema bicameral en Francia y estando claramente inspirado por el sistema inglés y americano. Por un lado, se encontrará el consejo de los 500 que será la cámara baja del poder legislativo francés, mientras que, por otro lado, se encontrará el consejo de los ancianos que será la cámara más alta del poder legislativo francés. Por último, el poder ejecutivo residirá en un grupo de 5 personas llamado los directores. Los directores serán cambiados cada año y siendo estos elegidos, a partir de una lista proporcionada por el consejo de los 500, por el consejo de los ancianos. A partir de este punto en la historia veremos un progresivo incremento en el poder administrativo que se hará más evidente a lo largo de los años Debido al reducido tiempo que estará la convención termidoriana en el poder, le dará poco tiempo a hacer cambios en el sistema, con el único acto notable de esta siendo la eliminación de la ley de sospechosos de la anterior convención. No llegará a hacer nada más debido a que el 13 de Vendimiario del año 4 (5 de octubre de 1795) sucedería una rebelión realista que será aprovechado por los revolucionarios. Buscará la eliminación de la convención en su totalidad. Este golpe de Estado estará apoyado por los girondinos, los esclavistas y una gran mayoría del cuerpo militar, cumpliendo su objetivo de eliminar a la convención estableciendo en su lugar el directorio en 1795 llegando a su fin en el 1799 con la llegada del Napoleón al poder en el consulado.. A parte de la reforma de Estado, la Constitución revirtió muchas medidas que se aprobaron durante el terror. Una de estas primeras medidas fue la revocación de la libertad de los esclavos, llegando a mandar ejércitos a Haití y a otras colonias franceses con el fin de acabar con las revueltas de los esclavos y ganarse el favor de los esclavistas que les ayudaron a acabar con la convección termidoriana. Por otro lado, se vuelve al sufragio censitario masculino y a moderar la política, pero esta vez se perseguirán a los jacobinos y liberando a todo el mundo encarcelado falsamente por la ley de sospechosos. Mientras que en el frente político el Estado no destacaba por su brillantez, en el ámbito militar era una historia totalmente diferente. Por el frente sur, el ejército revolucionario logrará traspasar los pirineos y llegar hasta san Sebastián donde se firmará la paz con el ministro Manuel Godoy en la Paz de Basilea el 22 de julio de 1795. Por otro lado, en el lado nacional, volverán a surgir los alzamientos y la guerra de La Vendé como foco del movimiento antirrevolucionario. A parte de este altercado con los españoles y del conflicto interno, la política internacional seguirá siendo la misma que la del terror (guerra contra ingleses y absolutismo) pero, con la clara distinción, de que sí se permitirían coger prisioneros. Se reutilizarán los militares que destacaron en el Terror y desradicalizan su punto de vista. Entre los conflictos más destacados de esta época tenemos la incesante guerra contra los Austrias. En esta guerra se dividirá el ejército en dos partes, un batallón mas grande que tendrá como objetivo el combate directo contra el ejército Austria con destino Viena que terminará siendo un total desastre, y otro más reducido al cargo de un militar que iba ganando renombre poco a poco a lo largo de esta serie de conflictos, Napoleón Bonaparte. Este segundo batallón se dirigirá hacia el norte de Italia con el objetivo de ser un cuerpo de diversión para el ejercito principal Austria. Pero, lo que nadie se esperaba, era el que ese ejercito reducido tuviera ese éxito militar que tuvo en la batalla del puente de Arcole en 1796, ganada por la genialidad táctica del propio Napoleón, que decidirá llevar solo los recursos necesarios para la supervivencia, auto suministrándose en el terreno ganado. Debito al éxito de la anterior campaña en el norte de Italia, Napoleón será encargado una segunda campaña por el directorio, la denominada como “Campaña de Egipto” en julio de 1798. Esta campaña tendrá como objetivo el asentar un control geopolítico de la entrada al mar rojo, conocido actualmente como el canal de Suez. El control de esta entrada serviría como una forma de llegar a la india más rápida de la usada por los franceses anteriormente (dar la vuelta a toda África) y como una forma de indirectamente impedirle el uso de esta ruta a los ingleses ya que, aunque el territorio era perteneciente al imperio Otomano, estos tenían un tratado con los ingleses permitiéndoles el uso del canal. La totalidad de la campaña duró menos de un mes, y consistió en la derrota del ejercito mameluco en la batalla de las pirámides. La campaña no tuvo solo una intención puramente bélica, sino que también dio lugar a una “fiebre arqueológica” tras el descubrimiento de la piedra rosetta. Pero, en respuesta a esta agresión al “territorio” inglés”, William Pitt el joven (primer ministro británico) enviaría a la Royal Navy al mando de Horatio Nelson. Este evento desembocará en la batalla de las bocas del Nilo, que terminará con la derrota del ejercito napoleónico y la quema de todos los barcos franceses. Mientras que Napoleón se encontraba en la campaña de Egipto en Francia se empezaba a encontrar un ambiente de radicalización en el poder legislativo. La cámara de los 500 volverá a ser “infectada” por pensamientos jacobinos y comenzaría a expandirse hasta la cámara de los ancianos. Este suceso era algo que los directores no se podrían permitir y tomarían la decisión de llamar a Napoleón de vuelta a París para llevar a cabo un golpe de Estado en su nombre, ocurriendo así el 18 de Brumario del año VII (10 de noviembre de 1799). Este golpe de Estado será un éxito y acabará al fin con el periodo revolucionario en Francia, terminando oficialmente la Revolución Francesa con la creación del Consulado en 1799. Como toda nueva etapa política, el Consulado comenzará con la escritura de una nueva Constitución por el Sieyès en el año VIII (1800). Aunque esta Constitución tomará la Constitución del año III, en ella habrá dos grandes cambios a resaltar: 1. Un mayor poder ejecutivo con la eliminación de dos directores y el cambio de nombre de directores a cónsules. Estos cónsules tendrán una jerarquía por orden de antigüedad y Napoleón será el primer cónsul (1er cónsul > 2ndo cónsul > 3er cónsul). El proceso de elección de los cónsules será el mismo que era en el directorio para los directores. 2. El poder judicial será ahora ayudado por los tribunales, que servirán como un apoyo para los jueces. Mientras que había cambios en el ámbito político, en el ámbito bélico las políticas eran las mismas, el enemigo de Francia es Austria e Inglaterra. El conflicto contra los Austrias culminará en la Batalla de Marengo el 14 de junio de 1800. En esta batalla veremos a un Napoleón inigualable a nivel estratégico-militar. Esta victoria será el detonante de que el imperio Austria le ofrezca la paz a Francia y a su vez asentará las bases de la expansión continental de la Francia napoleónica. A parte de estas ramificaciones bélicas, esta victoria aportará legitimidad y credibilidad a las decisiones políticas del general, hasta tal punto que en el año X (1802) Enmanuel Sieyès reescribirá la Constitución haciendo que el cargo de primer cónsul sea vitalicio mientras que los otros dos seguirán siendo rotativos. Tras asentarse en su cargo vitalicio, Napoleón buscara mejorar sus relaciones internacionales para mejorar la imagen de la república francesa y demostrar que la Francia de ahora no es nada comparada con la Francia revolucionaria. Esta búsqueda de mejora de imagen comenzará con la petición de paz a los ingleses por el mismo Napoleón. Para sorpresa de todos estos aceptarían y se liberalizaría el mercado permitiendo que el producto inglés entrara en Francia gracias al Tratado de Amiens (1802). Lo que Francia no tomó en cuenta fue el poder de exportación que tenían los ingleses y su monopolio en todos los productos provenientes de las industrias. Esto causará que muchas de las emergentes industrias francesas empiecen a quebrar y que el Estado entre en una situación de caos. Ante esta creciente crisis económica dentro del país, Napoleón buscará una forma de deshacerse del Tratado de Amiens buscando mantener su apariencia de líder pacífico. Esto lo logrará atacando al reino de Hannover, que aunque fuera propiedad privada de la familia real no era parte del territorio inglés. Esto lo hará con el objetivo de dividir los intereses del parlamento inglés, que buscará evitar la guerra con Francia debido a que a ellos les beneficiará mantener la paz con Francia por razones económicas y del rey, que buscará defender su territorio de cualquier forma. Jorge III, ignorando el consejo del parlamento, le declarará oficialmente la guerra de nuevo a Francia acabando así finalizando con el Tratado de Amiens. En respuesta a esta declaración, Napoleón buscará echar a los ingleses del comercio dentro del continente creando su sistema continental que prohibirá el comercio de cualquier nación aliada a Francia con Gran bretaña. Por otro lado, fuera de las políticas de guerra se buscará la reconciliación con la iglesia católica. Esto se hará mencionando en la Constitución que aunque el territorio sea laico la gran mayoría de los franceses son católicos, pero a su vez exigiendo que el papado no podrá elegir a los obispos en el territorio, sino que será el estado. Esto volverá a causar revueltas en La Vendé, pero al contrario que las otras veces, el problema será cortado de raíz. Se desplegará a la Grande Armée para que ejecutara a todos los que se levantaron en contra del estado, usando este evento como un aviso para el resto del territorio de que pasará si se oponen al estado. En 1804 el sistema de 3 cónsules será eliminado, dejando como la única persona al mando a Napoleón que se convierte en emperador del Imperio Francés, siendo este coronado por el mismo Papa. Este acto se consolidará en la Constitución del año XII (1804). Pero, este acto no echará en falta la oposición, sufriendo el emperador (Napoleón) diversos atentados contra su vida por los realistas, pero ninguno de estos será efectivo y a todos los realistas se les condenará a muerte. La Constitución del año XII trajo al nuevo Imperio Francés una pequeña cantidad de cambios comparados con los de las anteriores. Entre estos cambios destacan:  Napoleón es el emperador vitalicio con derecho a nombrar un heredero.  Se realizará una reforma legal, educativa y religiosa Durante este periodo Napoleón (Como buen “rey”) ofrecerá la mano en matrimonio de sus familiares y grandes generales a otras casas reales y dejará la separación de poderes del consulado, pero él llevará el control de todos los poderes de forma indirecta. En el lado bélico, Napoleón se propone un dominio de Europa, comenzando por Inglaterra. El plan para invadir Inglaterra estaría poniéndose en marcha desde el 1803 y junto con España consistiría en un despliegue de tropas en el Puerto de Boulogne para hacer que los ingleses desplieguen a la Royal Navy, cosa que harán. Después de esto, se buscará que la marina inglesa persiga a la coalición franco-española hacia las indias, momento en el que esta misma buscará despistar a la marina por Las Bermudas y navegar hasta Europa de nuevo para entrar en Gran Bretaña con la marina todavía buscándolos en las Américas. Lo que la coalición franco-española no se podría imaginar era que su plan fallara y que el ejército francés fuera dividido cerca de la zona española. Por un lado, una parte fue hacia el sur, mientras que la otra parte separada intentará retornar a Francia. La parte del ejército que fue al sur sufriría la mayor derrota vista por el ejército napoleónico hasta la fecha. Esta derrota ocurrirá el 21 de octubre de 1805 en la Batalla de Trafalgar donde todos los barcos de la coalición franco-española serán destruidos, solidificando el mar como terreno predilecto británico al la segunda y tercera fuerza continental haber perdido su flota. Tras la horrible derrota ante manos de los ingleses, Napoleón pondrá sus ojos en el resto de Europa, comenzando por el territorio austriaco. Entrará en Austria y la tomará en la Batalla de Austerlitz el 2 de diciembre de 1805. La victoria de esta batalla daría fin al Sacro Imperio Romano Germánico, dejando a Napoleón como el único emperador europeo, invalidando a este en el 1806, haciendo lo mismo en Prusia el mismo año. Para mantener estos territorios controlados creará la confederación del Rin en la que pondrá al poder a diferente gente de confianza y a la población que se aliaba con los ideales franceses. Creará también el ducado de Varsovia, devolviéndole a los polacos el terreno que se les había ido quitando a lo largo de los años por los rusos, prusos y austriacos y, a su vez, ganándose el favor de los polacos. Con un par de victorias a sus espaldas, Napoleón buscaba el confrontamiento con Portugal, aliados de los ingleses. Para poder llegar hasta Portugal le pide al primer ministro de España, Manuel Godoy (con el que ya había firmado la paz de Basilea), pasar por el territorio para una invasión en Portugal, petición que será aceptada. Pero, a el general ver la situación política española decide tomar el control de algunas de las ciudades en las que se estaba estacionando para poder llegar a Portugal, haciendo así una “ocupación del país”. Tras asentarse en el territorio, obligará a Carlos IV a abdicar en su hijo Fernando VII la corona, evento que aprovechará para que Fernando abdique la corona en el hermano del general, José Bonaparte, convirtiéndolo así en rey de España y siendo llamado José I. Todo este proceso será conocido como las abdicaciones de Bayona y ocurrirán en mayo del 1808. Las abdicaciones de los monarcas españoles y la repentina ocupación del ejército francés en la península darán lugar a una serie de levantamientos en diferentes zonas del territorio, destacando las de Madrid y Móstoles, en donde una parte del ejército que estará en contra de este cambio se levantará junto al pueblo buscando la salida de los franceses del territorio y la vuelta de los monarcas españoles, pero serán rápidamente sofocadas por la armada francesa (Le Armeè) y los lealistas a José I. Estos levantamientos continuarán por todo el 1808 culminando en verano con la victoria por parte española en la Batalla de Bailén, evento que forzará a Napoleón a enviar más tropas hacia la península para sofocar los fuegos de la rebelión española. Los refuerzos franceses llegarán en septiembre del 1808, pero a partir del 1809 se crea el movimiento guerrillero español que consistirá en antiguos militares combatiendo contra el ejército francés al margen de la ley. Estas guerrillas resultaran en miles de fusilamientos por toda la península. De entre los grupos de guerrilleros más importantes cabe destacar: el de Navarra con Espoz y Mina al mando, el de la meseta norte con el Cura Merino al mando, el de la meseta sur con Julián Sánchez el Charro al mando, el de Levante con el Maestrado al mando y las guerrillas andaluzas concentradas en Sierra Morena. Esta serie de conflictos en la península darán lugar a las juntas en el 1809. Tendrán la función de representar al pueblo español y ser una corriente contraria al poder francés en el gobierno. El gobierno británico mandará ayuda a los españoles en el 1810 enviando a militares, de los que destacará Arthur Wellesley (El duque de Wellington), haciendo así que la fuerza anglo-lusa apoye a la guerrilla española. Cambiarán las tornas en la Batalla de Salamanca o también conocida como la Batalla de los Arapiles en Julio del 1812, donde se verá una victoria ante la armada francesa dando los primeros indicios de que esa armada no es tan invencible como se creía. El avance de la coalición anglo- luso-española logrará llegar hasta Vitoria antes de ser detenidos por el ejército francés. En la otra parte de Europa, se verá a un Napoleón preparando la futura invasión del territorio ruso, todo esto debido a un sentimiento de traición a manos del zar. El emperador comenzará a acumular tropas en la ciudad de Varsovia en 1812, preparándose para una inminente invasión. La invasión comenzará formalmente a finales de junio de 1812 y durará hasta finales de noviembre de 1812. Se enfrentará a una coalición entre los rusos, ingleses y suecos durante la totalidad de la campaña. El zar Alejandro I enviará a Nihail Kutuzov y al príncipe Bagratión para defender el territorio durante la campaña. La primera batalla de la campaña será del bando francés en la ciudad de Smolensk a principios de agosto. Toda la campaña se basó en una retirada constante por parte de los rusos, debido a una mala preparación ante la repentina guerra, y un ejercito francés cada vez más exhausto, debido a el largo trayecto y duración de la campaña y al contante deterioro de la salud de Napoleón. La siguiente gran batalla de la campaña será la Batalla de Borodino a principios de septiembre del 1812. En esta batalla, al contrario de en la Batalla de Smolensk, los rusos decidieron tomar la iniciativa y atacar a la armada francesa por sorpresa. El ataque sorpresa de los rusos añadido a la lentitud de dar ordenes del general darán lugar a una enorme cantidad de bajas, hasta tal punto de que la misma guardia real tendrá que combatir asegurando así la victoria en la batalla, pero con una gran cantidad de bajas en los números franceses. El ejército ruso retrocederá hacia la ciudad de Moscú en la que el zar tomará la decisión de destruir todas las provisiones en la ciudad y huir de esta misma dejándola vacía para la llegada de los franceses. Napoleón llegará un 14 de septiembre a un Moscú vacío y bajo en provisiones. Viendo el estado del ejército, la falta de provisiones, la mala salud de Napoleón y los primeros indicios del invierno ruso el ejercito francés tomará la decisión de retirase del terreno conquistado y dar por finalizada la campaña. La retirada francesa será caracterizada por su dureza, esto será en parte al incesante frio, que con el paso de los días irá creciendo, y el ataque de un ejercito ruso con la moral reavivada tras ver que la supuesta armada invencible se retiraba del territorio. En octubre del 1812 los franceses pondrán marcha de nuevo hacia Varsovia, pero será durante este proceso donde la inmensa mayoría de bajas francesas ocurrirán. Muchos de los soldados terminarán sucumbiendo al frio debido a la mala planificación y a uno de los inviernos más fríos hasta la fecha. Los que sobrevivirán a las bajas temperaturas lidiaron con un incesante movimiento guerrillero ruso que tomará miles de vidas. Napoleón logrará escapar de la tundra rusa en diciembre del 1812, entrando al territorio con más de 600.000 hombres y regresando con menos de 100.000 hombres, teniendo esta campaña más de 1.000.000 de bajas totales. Ante el desastroso estado de la armada francesa, y los éxitos militares de los rusos y españoles respectivamente, los ingleses propondrán una coalición contra los franceses para poder acabar con el poder continental de estos. La sexta coalición en contra de napoleón será formada a principios de 1813 y tendrá como miembros principales a los rusos, los ingleses, los austriacos y los prusos, pero contará con un apoyo, aunque menor, de países como España y Portugal, que por esta época habrán logrado echar a los franceses de la península con la toma de Vitoria. Esta coalición será conocida como la Coalición de las Naciones, teniendo su gran enfrentamiento contra los franceses en la conocida como Batalla de las Naciones en Leipzig recuperando el territorio y rematando a una moribunda armada francesa. La coalición se detendrá a las puertas de Paris en abril del 1814, momento en el que los generales más cercanos al emperador le aconsejarán que abdique, consejo que el emperador tomará. La vida de Napoleón será perdonada, siendo autoexiliado con su guardia real a la isla de Elba en mayo de 1814. A su vez, Inglaterra buscar una forma de reorganizar el territorio europeo, objetivo que logrará juntando a diferentes diplomáticos de cada territorio. Este evento será conocido como el Congreso de Viena y su primera medida será imponer en Francia una monarquía de vuelta llevando al trono al Duque de Artois, hermano de Luis XVI, que abdicaría en su hermano Luis XVIII (Conde de Provenza). El nuevo monarca llegará con una carta otorgada con el objetivo de intentar simular una monarquía parlamentaria, pero, gran parte del pueblo francés tras dos décadas de república y revueltas se negará a aceptar estos términos. Napoleón viendo estas revueltas y que gran parte del ejercito y la población todavía le apoya decidirá volver al territorio de su autoexilio. En febrero de 1815 el general huirá junto a su guardia real de la isla de Elba con rumbo a Paris. Ante las noticias de la vuelta de Napoleón al territorio, Luis XVIII enviará al general Ney a detenerlo, pero este fracasará. Viendo el fracaso de su general y que la marcha de Napoleón no cesa, Luis XVIII decidirá escapar de la ciudad de Paris en marzo de 1815, siendo la ciudad tomada un día más tarde por el general que volverá a establecer el imperio en un periodo conocido como el Gobierno de los 100 Días. El gobierno de los 100 días volverá a poner a Napoleón como emperador, pero, a su vez volverá a atraer la ira de los otros países europeos, creando así la séptima coalición y estando constituida por los mismos países q los de la sexta. La primera y única gran medida del gobierno de los 100 días será el intento de reconquista de Europa. La reconquista tendría su inicio en los Países Bajos Meridionales (la Bélgica y Luxemburgo actuales), pero será detenida en la Batalla de Waterloo. La batalla de Waterloo tuvo lugar en junio de 1815. Las lluvias torrenciales de la noche anterior crearon un terreno de batalla inestable y poco predecible, debido a los encharcamientos y al barro, en el que el defensor tendría la ventaja táctica, en este caso los ingleses. A las malas condiciones del terreno se le añadieron las malas condiciones de salud física de Napoleón, que para estos momentos de su vida cargaba con una fuerte enfermedad y con un cansancio acumulado por su incesante conflicto con el resto de los poderes europeos. El ejército británico será liderado por Wellington que sabrá manejar el terreno de batalla de forma excelente. Aprovechará que debido al barro la caballería francesa será poco eficaz usará cuadros de infantería que acabarán con cualquier militar francés que se acerque. Esta batalla terminará con la total derrota de los restos de la armada francesa de Napoleón. Las consecuencias de la Batalla de Waterloo serán mucho más severas que las de la expansión continental francesa, pero aquí destacaremos únicamente el exilio forzado de Napoleón a la isla de Santa Helena el 17 de octubre de 1815, isla en la que morirá en 1821.

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