PDF: Higiene del Medio Hospitalario y Limpieza del Material
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Este documento, proveniente de MEDAC, explora la higiene del medio hospitalario y la limpieza del material, con enfoque en los residuos clínicos. Se presentan la clasificación, el tratamiento de residuos y las medidas para minimizar los riesgos, abordando también la normativa española en este ámbito.
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HIGIENE DEL MEDIO HOSPITALARIO Y LIMPIEZA DEL MATERIAL TÉCNICO EN CUIDADOS AUXILIARES DE ENFERMERÍA Residuos clínicos 12 / 1. Introducción y contextualización práctica 3 / 2. Re...
HIGIENE DEL MEDIO HOSPITALARIO Y LIMPIEZA DEL MATERIAL TÉCNICO EN CUIDADOS AUXILIARES DE ENFERMERÍA Residuos clínicos 12 / 1. Introducción y contextualización práctica 3 / 2. Regulación del tratamiento de los residuos clínicos 4 / 3. Clasificación de los residuos 4 / 4. Caso práctico 1: “Residuos de material de curas” 5 / 5. Residuos químicos 6 / 6. Residuos radioactivos 7 6.1. Criterios de clasificación de los residuos radioactivos 7 / 7. Caso práctico 2: “Uso de Formol” 8 / 8. Medidas preventivas en la manipulación de radiofármacos, fuentes emisoras de radioactividad y objetos contaminados 8 / 9. La eliminación de residuos clínicos: procedimiento de actuación y normativa 9 / 10. Resumen y resolución del caso práctico de la unidad 10 / 11. Bibliografía 10 © MEDAC 978-84-18864-60-5 Reservados todos los derechos. Queda rigurosamente prohibida, sin la autorización escrita de los titulares del copyright, bajo las sanciones establecidas en las leyes, la reproducción, transmisión y distribución total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, incluidos la reprografía y el tratamiento informático. Explicar los procesos de recogida de muestras, precisando los medios y técnicas precisas en función del tipo de muestra a recoger. Definir los diferentes tipos de residuos clínicos explicando los procedimientos de eliminación. Describir los riesgos sanitarios asociados a los residuos clínicos en el medio hospitalario. / 1. Introducción y contextualización práctica Durante la actividad clínica y asistencial se generan innumerables residuos que pueden suponer un riesgo para la salud si no se gestionan de manera competente y eficaz. Para evitarlo es de gran importancia que estos residuos sean clasificados y tratados atendiendo a su tipología y características principales. Podemos definir como residuo clínico o sanitario a aquellos productos de desecho, sustancias o medios materiales derivados de la atención sanitaria o procesos asistenciales de la salud humana, veterinaria o laboratorios clínicos. Estos empiezan a ser considerados residuos a partir del momento en el que son desechados. En cuanto a la naturaleza del residuo clínico este puede ser un producto sólido, líquido o gaseoso, pero siempre derivado de la actividad asistencial sanitaria (en el caso que nos ocupa a nosotros: humana). Planteamiento del caso práctico inicial A continuación, vamos a plantear un caso práctico a través del cual podremos aproximarnos de forma práctica a la teoría de este tema. Escucha el siguiente audio donde planteamos la contextualización práctica de este tema, encontrarás su resolución en el apartado Resumen y Resolución del caso práctico. Fig. 1. Contenedor de residuos clínicos cortopunzantes. Audio Intro. “Paracentesis evacuadora programada” https://bit.ly/3ny3gSy TEMA 12. RESIDUOS CLÍNICOS Higiene del medio hospitalario y limpieza del material /4 / 2. Regulación del tratamiento de los residuos clínicos El proceso de generación de un importante volumen de residuos, tanto urbanos como biopeligrosos, es inherente a la propia actividad de los centros sanitarios. La gestión de los residuos clínicos en cuanto a su tratamiento, categorización, transporte y eliminación atendiendo a unas medidas que garanticen el menor de los riesgos para la salud pública y medioambiental en España es competencia de las autonomías. En Andalucía, el marco legal se asienta entorno al Decreto 283/1995 por el que se aprueba el Reglamento de Residuos de la Comunidad Autónoma de Andalucía1. Periódicamente se revisa y actualiza el Plan de Gestión de Residuos del Servicio Andaluz de Salud en el que se atienden los puntos estratégicos fundamentales en cuanto a: Categorización y separación de los residuos atendiendo a su naturaleza peligrosidad. Retirada de los residuos, manipulación y traslado interno (en el propio centro generador del residuo). Transporte externo, tratamiento y su eliminación. Fig. 2. Contenedor residuos clínicos. / 3. Clasificación de los residuos Según se recoge en la guía de buena práctica NTP 372 proporcionada por el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT) los residuos clínicos se clasifican en cuatro categorías bien diferenciadas: a. Tipo I: Asimilables a residuos urbanos Aquellos residuos sanitarios asimilables a residuos municipales y que, por tanto, no entrañan un especial riesgo potencial para la salud pública. Este tipo de residuo no plantea exigencias especiales para su gestión. Algunos ejemplos de residuos de tipo I podrían ser: Cartón. Papel. Material de oficina. Residuos procedentes de pacientes no infecciosos, etc. b. Tipo II: Residuos sanitarios no específicos Categorizamos en este grupo a aquellos productos de desecho con los que debemos de contemplar medidas de prevención en la manipulación, retirada, almacenamiento y transporte, únicamente en el ámbito del centro sanitario. 1. Web oficial Junta de Andalucía. Recuperado de: https://www.juntadeandalucia.es/boja/2008/69/18 TÉCNICO EN CUIDADOS AUXILIARES DE ENFERMERÍA /5 MEDAC · Instituto Oficial de Formación Profesional Los residuos de tipo II son también asimilables a urbanos, sin embargo, son aquellos desechos generados de la propia actividad asistencial sanitaria. Ejemplos que podemos incluir en este grupo: Material fungible contaminado con fluidos biológicos no infecciosos. Yesos. Material de curas. Ropa, etc. Fig. 3. Residuos sanitarios no específicos. Tipo II. c. Tipo III: Residuos sanitarios específicos: Al igual que en los residuos clínicos de tipo II, implican medidas de prevención en la manipulación, retirada, almacenamiento y transporte, pero, además, se añaden las medidas preventivas en su tratamiento y eliminación tanto en el ámbito hospitalario (o entorno dónde se generan los residuos) como fuera de él, por el riesgo que pueden representar para la salud pública. Dentro de este grupo, diferenciamos: Residuos sanitarios o infecciosos: Aquellos que han estado en contacto con fluidos corporales con capacidad infecciosa. Residuos anatómicos: Cualquier resto anatómico humano reconocible. Sangre y hemoderivados en forma líquida. Vacunas vivas y atenuadas. Fig. 4. Residuos con contenido en Agujas y material cortopunzante. hemoderivados. Tipo III. d. Tipo IV: Residuos tipificados en normativas singulares: En este grupo están comprendidos aquellos residuos que por su naturaleza están sujetos a requerimientos especiales desde el punto de vista medioambiental y de biopeligrosidad, en cualquier entorno (dentro o fuera del centro generador del residuo). Citostáticos. Sustancias químicas. Residuos radioactivos. Aceites minerales o sintéticos. Medicamentos caducados. / 4. Caso práctico 1: “Residuos de material de curas” Planteamiento: Jorge es un chico de 15 años que ha sufrido múltiples heridas abrasivas tras sufrir una caída cuando paseaba en bicicleta. Su padre lo ha traído al centro de salud en el que trabajamos y se le han realizado las curas de las heridas. TEMA 12. RESIDUOS CLÍNICOS Higiene del medio hospitalario y limpieza del material /6 Somos conocedores de que Jorge no sufre ninguna enfermedad infectocontagiosa que pueda suponer un problema potencial de salud pública o medio ambiental. Nudo: Al finalizar las curas de Jorge ¿cómo deberemos gestionar los residuos derivados de esta actividad? Desenlace: Dado que Jorge no sufre ninguna enfermedad infectocontagiosa y no se indica que se haya empleado material cortopunzante los residuos generados han de contemplarse como de tipo II o residuos sanitarios no específicos. Debemos tomar en consideración medidas de prevención en la manipulación, retirada, almacenamiento y transporte únicamente en el ámbito del centro sanitario ya que este tipo de residuo es también asimilable a urbano. No llevan asociados riesgos potenciales para la salud humana o medioambiental de manera intrínseca. / 5. Residuos químicos El uso de agentes químicos en el entorno asistencial sanitario humano está completamente normalizado por los requerimientos cada vez más técnicos de estos procesos. Sin embargo, una vez finalizada la vida útil de estos compuestos químicos la correcta categorización, manipulación, transporte y eliminación de estos compuestos es de gran importancia dada la potencial biopeligrosidad para la salud humana, animal y medioambiental de estos desechos. Es por este motivo que este tipo de productos y materiales químicos han de cumplir con un estricto etiquetado que advierta al personal encargado de su manipulación de sus peligros y características particulares. Nombre del producto y composición Normas de Uso Frase H* y Frase P** Pictogramas que alertan acerca de los riesgos asociados *Frase H: Alerta de peligro para la salud física o medioambiental. **Frase P: Indicador de medidas preventivas. Audio 1. “Citostáticos” https://bit.ly/3nBKTMz Estos pueden presentarse en estado: Sólido: Sustancias reactivas empleadas en laboratorio, medicación sólida (a excepción de citostáticos o con actividad radioactiva). Líquido: Alcoholes, antisépticos, formaldehídos, etc. Gaseoso: Gases anestésicos, oxígeno, aerosoles, etc. Fig. 5. Agente químico: Formaldehído. Sabías que... Es obligatorio el registro de todas las sustancias y preparados químicos que se comercialicen dentro de los territorios de la Unión Europea. TÉCNICO EN CUIDADOS AUXILIARES DE ENFERMERÍA /7 MEDAC · Instituto Oficial de Formación Profesional / 6. Residuos radioactivos Podemos definir como radioactividad, como el proceso por el cual el núcleo de un átomo inestable libera energía por medio de la emisión de radiación en forma partículas atómicas. Desde hace más de medio siglo en el mundo desarrollado la radioactividad se ha empleado para el diagnóstico y tratamiento de una multitud de enfermedades. Fig. 6. Uso de radiofármacos. El desarrollo, almacenamiento, transporte y uso de los fármacos radioactivos está amparado bajo una estrictísima legislación de ámbito multinacional por el riesgo biológico y medioambiental que llevan asociado. Además, su efectividad es tempo dependiente, lo que significa que sus propiedades pueden verse alteradas de manera significativa desde su fabricación hasta su uso en cuestión de horas. Un buen ejemplo de esto es el Yodo 131. Se trata de un radioisótopo del Yodo que se emplea para el tratamiento del hipertiroidismo y algunos tipos de cáncer de tiroides tras intervención quirúrgica de la glándula tiroides. La dosis de este radiofármaco se calcula de forma individualizada y su producción ha de realizarse de manera simultánea a la citación del paciente para tratar de reducir el tiempo entre su fabricación y la administración al paciente. Fig. 7. Radiofármaco Yodo 131. Sabías que... Las áreas donde se usa radiación ionizante con fin diagnóstico o terapéutico deben tener el símbolo internacional de radioactividad. 6.1. Criterios de clasificación de los residuos radioactivos Todos los productos de desecho resultantes del uso de los radiofármacos o aquellos materiales que han estado expuestos a su radiación de manera que supere los niveles de concentración tolerables para la seguridad individual y medioambiental son considerados residuos radioactivos. Atendiendo al estado físico de la materia radioactiva o al grado de toxicidad de esta podemos clasificarlos: Material empleado en la preparación de radiofármacos, Sólidos generadores de radioisótopos, contenedores de vidrio, etc. ESTADO FÍSICO Generalmente solución o suspensiones medicamentosas con actividad Líquidos radioactiva empleadas para tratamiento o diagnóstico o fluidos de desecho de pacientes sometidos a tratamiento con radiofármacos. Tabla 1. Clasificación residuos radioactivos estado físico. Residuos de Alta Contienen concentraciones de radionucleidos de vida Actividad (RAA) larga (semivida mayor de 30 años). Puede emitir calor. GRADO DE Residuos de baja y media Contienen concentraciones de radionucleidos de vida bajo o TOXICIDAD actividad (RBMA). media (semivida igual o inferior a 30 años). No emiten calor. RADIOACTIVA Por su bajo contenido radioactivo precisan de menores Residuos de muy baja requisitos para su gestión. Generalmente material inerte actividad (RBBA). que ha estado expuesto a radiación controlada. Tabla 2. Clasificación residuos radioactivos grado de toxicidad radioactiva. TEMA 12. RESIDUOS CLÍNICOS Higiene del medio hospitalario y limpieza del material /8 / 7. Caso práctico 2: “Uso de Formol” Planteamiento: María ha comenzado a trabajar como TCAE en el servicio de consultas externas de dermatología en un Centro de Alta Resolución. Le indican que a diario se realizan biopsias cutáneas y que muchas de las muestras han de sumergirse en formaldehído para ser remitidas para estudio anatomopatológico. En la etiqueta de cada bote podemos observar lo siguiente: Fig. 8. Agente químico: Formaldehído. Nudo: ¿Sabrías identificar cada una de las partes numeradas en la imagen del planteamiento? Desenlace: 1. Se indica el nombre del producto y su composición química. 2. Frase H: Alerta de peligro para la salud física o medioambiental. 3. Frase P: Indicador de medidas preventivas. 4. Pictogramas químicos. De arriba abajo: Corrosivo: puede afectar a metales y provocar quemaduras graves al contacto con la piel o mucosas. Tóxico: en caso de ingestión. Peligro por aspiración: Efectos cancerígenos, mutagénicos, teratogénicos o tóxicos. / 8. Medidas preventivas en la manipulación de radiofármacos, fuentes emisoras de radioactividad y objetos contaminados El Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT) a través de sus Notas Técnicas de Prevención (NTP) establece una serie de recomendaciones o pautas que han de seguir los trabajadores expuestos a radiación ionizante en base a su exposición acumulada anual. TÉCNICO EN CUIDADOS AUXILIARES DE ENFERMERÍA /9 MEDAC · Instituto Oficial de Formación Profesional Además, estas medidas están recogidas en el RD 783/2001. Las medidas genéricas recomendadas son: Limitar o reducir al mínimo necesario el tiempo de exposición del trabajador al material o fuente radioactiva. Aumentar la distancia a la fuente. La dosis disminuye de manera inversamente proporcional al cuadrado de la distancia. Uso de EPI para la manipulación de radiofármacos o su preparación (guantes, mascarilla, protección ocular, bata impermeable y calzas). Apantallamiento de los equipos y la instalación. Uso de dosímetros personales que midan la exposición personal a la radiación. (Dosimetría personal). Detectores de radiación ambiental. (Dosimetría de área). Fig. 9. Dosímetro personal de muñeca. / 9. La eliminación de residuos clínicos: procedimiento de actuación y normativa Los residuos clínicos incluyen todos los desechos generados durante el diagnóstico, tratamiento o inmunización de humanos o animales, en la investigación en estos campos, o en la producción y prueba de productos biológicos. Para la gestión, recolección y eliminación de los residuos clínicos se emplean diferentes materiales y objetos como: Contenedores de residuos: Para objetos cortantes o punzantes: suelen ser de color amarillo. Para residuos biológicos: suelen ser de color rojo o amarillo. Para productos químicos: suelen ser de color rojo o azul. Equipos de protección individual (EPI): como guantes, mascarillas, batas, gafas, etc., empleados para la correcta manipulación de los mismos. Fig.10 Contenedor amarillo El protocolo de actuación a seguir para una correcta eliminación de los residuos es: 1. Separar y clasificar los residuos en el punto de generación (sala de operaciones, laboratorios, etc.) según su tipo: biológico, químico, radiactivo, punzocortante, etc. 2. Almacenamiento temporal de residuos, con medidas de seguridad adecuadas para evitar accesos no autorizados y minimizar riesgos de contaminación. 3. Uso de carros específicos y etiquetados para el transporte interno de desechos desde los puntos de generación hasta las áreas de almacenamiento temporales. 4. Para tratar y eliminar los residuos se emplearán autoclaves ( para eliminar microorganismos patógenos y otros agentes infecciosos presentes en los desechos), incineraciones, desactivación química, etc. TEMA 12. RESIDUOS CLÍNICOS Higiene del medio hospitalario y limpieza del material / 10 En la actualidad existen diversas normativas a nivel europeo, estatal y autonómico que regulan el tratamiento y eliminación de residuos clínicos son: Nivel estatal: Ley 22/2011, de 28 de julio, de residuos y suelos contaminados. Nivel autonómico (CCAA Cataluña):Decreto 27/1999, de la gestión de los residuos sanitarios. DOGC de 16 de febrero de 1999, núm. 2828. / 10. Resumen y resolución del caso práctico de la unidad En esta unidad didáctica hemos dado un primer paso hacia el conocimiento de los residuos generados en la actividad clínica asistencial, su clasificación y tratamiento específico. Además, hemos citado alguna de las leyes y normas que regulan su gestión y tratamiento. Por último, nos hemos detenido en las particularidades de los residuos químicos y radioactivos por las peculiaridades que comprometen. Resolución del caso práctico de la unidad Dado que se trata de material cortopunzante que ha sido empleado en pacientes portadores de enfermedades infectocontagiosas por vía parenteral, en este caso el virus de la hepatitis C, los residuos generados en el momento en que se desechan han de ser considerados como residuos sanitarios específicos o de tipo III. Han de contemplarse medidas de prevención en la manipulación, retirada, almacenamiento y transporte, sin perder de vista las medidas preventivas en su tratamiento y eliminación tanto en el ámbito hospitalario como fuera de él, por el riesgo que pueden representar para la salud pública. Por supuesto, el personal encargado de su manipulación ha de utilizar EPI apropiado y evitar conductas de riesgo (como re-encapuchar material cortopunzante ya utilizado) con el objetivo de reducir al mínimo posible el riesgo de sufrir cualquier tipo de accidente biológico. / 11. Bibliografía Espinosa, A. M. F., de la Plaza, E. P., & Padrón, M. R. (2013). Higiene del medio hospitalario y limpieza de material. McGraw-Hill. Consejo de Seguridad Nuclear. Gobierno de España. Consultado el: 07/09/2020. Residuos radioactivos. Consultado en: https://www.csn.es/residuos-radiactivos Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales España. Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo. (2001). NTP 614: Radiaciones ionizantes: normas de protección. Descargado de: https://www.insst.es/documents/94886/326775/ntp_614.pdf/ef28c36c-66d4-4bc9-a5cb-451c705927a9 Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales España. Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo. (1993). NTP 372: Tratamiento de residuos sanitarios. Descargado de: https://www.insst.es/documents/94886/326827/ntp_372.pdf/e756793c-413f-450a-88a8-24c9d3cae076 Servicio Andaluz de Salud. Consejería de Salud. (2007). Plan de gestión de residuos Servicio Andaluz de Salud. Descargado de: http://www.sspa.juntadeandalucia. es/servicioandaluzdesalud/hinmaculada/web/gambiental/material/planes_guias/Plan_Gestion_Residuos.pdf