Principios del Trabajo Social Relacional

El trabajo social relacional prioriza la autonomía de la persona, reconociendo su derecho a tomar decisiones y expresar sus ideas. Incluso en situaciones de dificultad, la persona es considerada un sujeto activo y capaz.

El foco está en el cambio social, no solo en la intervención individual. Se busca fortalecer las relaciones y el capital social en la comunidad, generando un impacto positivo en el bienestar de más personas.

Este principio busca que la ayuda se proporcione en el nivel más cercano a la persona y a la comunidad. Se promueve la participación activa de la comunidad en la búsqueda de soluciones.

Principio que afirma que las entidades superiores deben apoyar y guiar a las entidades inferiores sin dominarlas, respetando su autonomía y permitiendo que se expresen y desarrollen.

Se refiere a la acción de brindar apoyo y estimular a las entidades inferiores para que se fortalezcan y superen sus dificultades, sin otorgar soluciones o quitar los problemas.

Principio que destaca la importancia de la reciprocidad y el intercambio mutuo en las relaciones de ayuda.

La capacidad de las personas para implicarse en un apoyo mutuo con interés y sin otros fines, priorizando la intención y la voluntad sobre la intervención para producir cambios.

Se refiere a las fuerzas nuevas que se generan a partir de la relación e interacción entre personas, siendo esenciales para enfrentar los problemas de la vida.

Conjunto de normas, valores y relaciones que promueven la confianza, la cooperación, el respeto entre las personas y la acción conjunta para el beneficio de la comunidad.

Proceso que busca fortalecer el poder de las personas, incrementando su capacidad de tomar decisiones, actuar y alcanzar sus objetivos.

Proceso en el que el trabajor social disminuye su poder terapéutico, para generar mayor autonomía y autoeficacia en las personas.

La red de apoyo que existe entre las personas y las instituciones, y que facilita la acción colectiva y el desarrollo de proyectos comunitarios.

La capacidad de las personas para colaborar y enfrentar los problemas de manera conjunta, aprendiendo de las experiencias y el apoyo mutuo.

La acción de las personas para resolver sus propios problemas, utilizando sus propios recursos y habilidades, con el apoyo de la comunidad.

Acción que se enfoca en la mejora de las condiciones de vida de un grupo, involucrando a la comunidad en la identificación y resolución de problemas.

Proceso de aprendizaje bidireccional, en el que todas las partes participantes se benefician de la experiencia y el conocimiento compartido.

En la perspectiva relacional, el empoderamiento es un proceso que ocurre en la interacción entre las personas.

La red de personas, según la perspectiva relacional, es dinámica y adaptable al contexto y a la finalidad común.

La escucha activa busca entender el dolor, sufrimiento y capacidad de resistencia de la persona.

No se trata de juzgar, sino de comprender la situación de la persona sin emitir juicios.

El trabajo social relacional se enfoca en la colaboración y el apoyo mutuo.

El trabajo social relacional se basa en el respeto, la humildad y la confianza entre las personas.

En el trabajo social relacional, la curiosidad juega un papel crucial para comprender las perspectivas individuales.

Se cree en la capacidad de cambio y en la generación de nuevas posibilidades para las personas.

Empoderar significa ejercer el poder y la capacidad de decidir por uno mismo.

El enfoque narrativo considera que las historias que las personas construyen moldean su vida.

Generar condiciones para que las personas puedan tomar decisiones sobre su vida preferida.

La práctica del trabajo social relacional se caracteriza por un enfoque de colaboración, respeto y curiosidad, con el objetivo de empoderar a las personas.

La colaboración se refiere al trabajo en conjunto con las personas, donde el profesional social no se sitúa en una posición de superioridad.

La dimensión relacional del trabajo social reconoce la importancia de la interacción humana y la construcción de relaciones de confianza.

El trabajo social relacional busca brindar apoyo y herramientas para que las personas puedan construir una vida que les resulte significativa y satisfactoria.