Mediación en la Resolución de Conflictos

Es un proceso de comunicación entre las partes en conflicto con la ayuda de un mediador imparcial, buscando que las partes lleguen a un acuerdo para recomponer las relaciones y mitigar el conflicto.

Mediación es un proceso en el cual las partes en conflicto se comunican con la ayuda y guía de un mediador neutral con el objeto de finalizar su conflicto. El mediador orienta a las partes para que lleguen a un acuerdo conjunto.

Es el método alternativo de resolución de conflictos en presencia de un mediador neutral en un proceso psicosocial con el objetivo de llegar a un acuerdo. Se requiere el libre consentimiento de las partes y la confidencialidad de la información.

La mediación es la intervención en una disputa o negociación de un tercero aceptable, imparcial y neutral que carece de un poder de decisión. Su objetivo es ayudar a las partes en disputa a alcanzar voluntariamente su propio arreglo mutuamente aceptable.

La mediación es un método de resolución de conflictos en el que interviene una tercera persona imparcial, previamente solicitada y aceptada por las partes, ya sea a instancia propia o de una autoridad judicial o administrativa. Su objetivo es ayudar y facilitar a las partes en la obtención por sí mismas de un acuerdo.

Es un recurso al que recurren voluntariamente partes de un conflicto con el fin de superarlo. El protagonismo es de las partes, la persona mediadora solo conduce el proceso hacia una solución satisfactoria para ambas. Se preve la posibilidad de llegar o no a un acuerdo, la mediación permite la transformación de los conflictos. Incluso si no se encuentra una solución, el proceso promueve la asunción de responsabilidades y la recuperación de la comunicación.

La mediación se basa en un proceso estructurado de diálogo y comunicación entre las partes en conflicto, asistido por una tercera parte, el mediador o la mediadora, que es neutral e imparcial respeto de las distintas posiciones y del resultado final.

A diferencia de otros sistemas de resolución de conflictos, la mediación permite que la responsabilidad recaiga en las partes, quienes son las que finalmente gestionan el conflicto.

A principios del siglo XX, se crearon los comisionados de conciliación para atender a los conflictos entre el sector obrero y la patronal. La mediación surgió en EE. UU. en la década de 1930, para resolver conflictos laborales como alternativa a la justicia.

Se inició como disciplina en EE. UU. a partir de los años 70, buscando vías alternativas al Poder judicial. Movimientos como el de Libre Acceso a la justicia y el de lucha por los derechos civiles cuestionaron los métodos tradicionales del sistema judicial.

Los métodos alternativos de resolución de conflictos se han extendido por diversas razones, incluyendo: Resultados más rápidos, ahorro de tiempo y dinero, mayor satisfacción de las partes al tener un papel más activo, decisiones adaptadas a las necesidades particulares, modelo de ganar-ganar y mayor predisposición al cumplimiento de acuerdos.

El proceso de mediación se inicia a petición de las partes enfrentadas. En cualquier momento las partes pueden abandonar la mediación, y el mediador puede dar por finalizada la mediación si las circunstancias lo recomiendan.

El contenido de las sesiones y la información obtenida durante el proceso de mediación es confidencial y no puede ser divulgada fuera del proceso, a menos que las partes lo autoricen.

El profesional de la mediación debe ser imparcial, no tomar partido por ninguna de las partes y evitar que sus creencias lo conviertan en aliado de alguna de las partes. El resultado de la mediación debe ser fruto del trabajo y la colaboración de las partes.

Ninguna de las partes puede abusar de la situación de inferioridad de la otra para lograr un acuerdo desequilibrado o injusto. El mediador promueve el equilibrio entre las partes, sin decantarse por ninguna, facilitando la participación de ambas por igual.

Las personas que solicitan la mediación están en predisposición positiva hacia el proceso. El protagonismo durante el proceso mejora la satisfacción con la mediación y el cumplimiento de los acuerdos. La mediación se caracteriza por el respeto a las personas, que buscan un acuerdo satisfactorio para ambas partes.

Las partes que tienen un problema se responsabilizan directamente de su gestión y de la búsqueda de soluciones. Las partes deben estar dispuestas a asumir la responsabilidad de sus acciones y decisiones.

Únicamente las personas implicadas en el conflicto, participantes en la mediación, ostentan la capacidad de tomar decisiones que les comprometen. La persona mediadora no tiene ninguna legitimidad para obligar a las partes a decisiones.

El respeto es una constante del proceso de comunicación, entre las partes, entre estas y la persona mediadora, y al proceso en sí mismo. Se debe mantener un clima de respeto y consideración entre todos los participantes.

En el juicio, las partes ceden el poder a un juez, quién impone una solución que suele ser satisfactoria solo para una de las partes. El proceso es no voluntario y la comunicación se realiza a través de abogados.

En el arbitraje, las partes designan a un tercero (árbitro) para que establezca un dictamen de obligado cumplimiento. Las partes tienen un papel importante en el proceso, aunque no tengan el poder de decisión.

El consenso busca un acuerdo colectivo facilitado por una tercera persona neutral. No requiere que todas las partes estén completamente de acuerdo, se busca un nivel mínimo de acuerdo que permita que todas las partes consientan en la decisión.

La facilitación ayuda a un grupo a trabajar conjuntamente, la persona facilitadora utiliza procedimientos y metodologías diversas. A diferencia de otros métodos, la facilitación puede utilizarse para tomar decisiones, planificar o simplemente para promover la reflexión y el diálogo.

La conciliación es un proceso voluntario donde una tercera parte hace propuestas de acuerdo que las partes pueden aceptar o rechazar. Al no estar regulado, las partes tienen un papel mas activo, aunque la solución final venga propuesta por el conciliador.

En la mediación las partes trabajan de forma colaborativa para analizar el conflicto y consensuar acuerdos mutuamente satisfactorios. El mediador facilita el proceso, pero no propone soluciones.

La negociación es un sistema de construcción de la solución entre las dos partes, a partir de una negociación directa entre ambas. No hay presencia de ningún tercero. Es la forma mas sencilla para resolver un conflicto, pero aumenta la dificultad para llegar a un acuerdo.

La mediación laboral tiene ventajas como la mayor celeridad, menor costo, confidencialidad, mantenimiento de las relaciones, reducción del desgaste emocional, calidad de los acuerdos, mayor compromiso, alta satisfacción de las partes, y reducción del clima de hostilidad en los entornos de trabajo.

La mediación familiar es un proceso voluntario y estructurado donde el mediador, como tercera parte neutral, ayuda a resolver conflictos familiares de forma amigable, reduciendo la agresividad, restableciendo pretensiones, buscando soluciones aceptables para las dos partes y permitiendo que estas se apropien de sus propias decisiones.

La mediación en el ámbito escolar parte de la promoción de la cultura del diálogo y la educación para la paz. El alumnado es el principal actor implicado, con objetivos como la promoción y el aprendizaje de la cultura del diálogo, la responsabilidad individual en la resolución de conflictos, y la creación de grupos de mediadores entre iguales.

La mediación intercultural es un proceso que reconoce y valora las diferencias culturales de las personas en conflicto, y busca soluciones que respeten esas diferencias. Se utiliza en contextos de multi-culturalidad.

La mediación comunitaria busca difundir una nueva gestión de los conflictos en la comunidad. Implica que los agentes de la comunidad compartan los valores y las habilidades de la mediación, y apliquen esas habilidades en las relaciones interpersonales.

Los participantes en el proceso de mediación comunitaria son los agentes socioeducativos, el equipo profesional y los participantes de la comunidad. El equipo profesional diseña un proyecto que es implementado por el integrador social. Entre los objetivos están dinamizar a los participantes, crear vínculos positivos, mediar en conflictos, mejorar relaciones y concienciar sobre la importancia de cuidar los entornos vecinales.

La mediación comunitaria tiene ventajas como el ahorro de costes, la promoción de igualdad y cooperación, el fomento de la libertad, la construcción de nuevos aprendizajes, la reducción de hostilidades, la evitación de ganadores, la legitimación de las aportaciones de las personas, la construcción de comunidad, la reconciliación, la reconstrucción y la resolución de conflictos.

La mediación comunitaria tiene desventajas como la posibilidad de respuestas individuales a problemas colectivos, la limitación en casos de agresiones, la necesidad de la participación de todos, y la necesidad de conciencia social para mejorar.

La Ley 5/2012, de 6 de julio, de Mediación en asuntos civiles y mercantiles, define y regula la mediación en España. Los requisitos son: voluntariedad, libre disposición, igualdad de partes, imparcialidad y neutralidad de las personas mediadoras, y confidencialidad de todas las partes.

La Ley 60/2003, de 23 de diciembre, de arbitraje, establece un marco legal para el arbitraje interno e internacional en España. Sus principales logros incluyen la creación de un marco único para el arbitraje, el reconocimiento del arbitraje internacional, y el apoyo judicial al arbitraje.

La mediación familiar se ha legislado en las comunidades autónomas a través de leyes especificas. En Andalucía, la Ley 1/2009 y el Decreto 37/2012 regulan la mediación familiar.

La mediación laboral se ha desarrollado legislativamente en algunas comunidades autónomas desde 1990. La mediación comunitaria se está organizando en muchos municipios y comunidades autónomas.