Alergia y endocrino

Inflamación de la membrana mucosa de la nariz por alergia, puede ser estacional o perenne.

Reacción alérgica grave y potencialmente mortal.

Dermatosis crónica e inflamatoria que afecta la piel, común en niños.

Combinación de dermatitis atópica, asma y rinitis alérgica, común en personas atópicas.

Respuesta exagerada de los pulmones a estímulos, común en personas con rinitis alérgica.

Minimizar la exposición a alérgenos.

Problemas de rendimiento académico causados por enfermedades como rinitis o dermatitis.

Frecuente durante la lactancia, se alivia generalmente después de esta etapa.

Se utilizan para identificar sensibilizaciones a alérgenos y ayudan a diagnosticar alergias.

Se solicita para descartar anormalidades anatómicas en el primer episodio de asma o en episodios recurrentes.

Análisis para monitorear la inflamación en las vías respiratorias, se usa para evaluar la gravedad del asma.

Análisis del moco que se expulsa de los pulmones para determinar la presencia de eosinófilos, que indican inflamación.

Minimizar la exposición a alérgenos como el humo, polvo y animales para controlar el asma.

Es crucial para prevenir infecciones virales que pueden desencadenar episodios de asma.

Se utilizan de forma regular para controlar el asma y prevenir los síntomas.

Se usan durante los episodios agudos de asma para aliviar los síntomas de forma rápida.

Hinchazón de la dermis, comúnmente conocida como ronchas, causada por la liberación de mediadores inflamatorios.

Similar a la urticaria, pero la reacción se extiende por debajo de la dermis.

La rinitis alérgica puede ser estacional, perenne o episódica, dependiendo del alérgeno y la frecuencia de exposición.

La rinitis estacional es provocada por polen de árboles, pastos o malas hierbas, que se libera en diferentes estaciones.

La rinitis perenne es causada por alérgenos del interior como ácaros del polvo, caspa de mascotas, moho y cucarachas.

Un signo de rinitis alérgica es frotarse la nariz con la palma de la mano, creando un pliegue transverso.

Los síntomas característicos incluyen goteo nasal claro, congestión, estornudos y picazón en ojos, nariz, oídos y paladar.

Los bebés tienen niveles bajos de IgA en los primeros meses de vida, lo que los hace más susceptibles a infecciones.

En la fase aguda de la alergia, el cuerpo responde con una respuesta Th2, que produce ciertas citocinas (IL4, IL5, IL10, IL13, GM-CSF).

En la fase crónica de la alergia, el cuerpo pasa a una respuesta Th1, que produce diferentes citocinas (IL12, IFNγ).

La respuesta Th2 aumenta los niveles de IgE, mientras que Th1 los disminuye.

Cambios en la respuesta inmunitaria asociados con alergia afectan la maduración de las células B y su cambio funcional.

Mutaciones en la región promotora de RANTES (17q11) y en la subunidad α del receptor IL4 están asociadas a alergia.

Reacción a la acetilcolina que causa una línea blanca en la piel después de frotar.

Reacción a la acetilcolina que causa palidez en la piel.

La histamina desencadena exacerbación o prurito en personas alérgicas.

La deficiencia de ciertos minerales puede generar alteraciones electroencefalográficas en personas alérgicas.

Inflamación de los ojos, a menudo con enrojecimiento, hinchazón y picazón, provocada por una reacción alérgica.

Hinchazón de los párpados, a menudo asociada a alergias o problemas de circulación.

La presencia de otras enfermedades alérgicas como asma o eccema puede sugerir una tendencia a las alergias y facilitar el diagnóstico de rinitis alérgica.

Método para identificar alergias, consiste en colocar pequeñas cantidades de alérgenos en la piel para observar reacciones como enrojecimiento o picazón.

Análisis de sangre para detectar niveles de anticuerpos específicos que indican una alergia.

Congestión nasal causada por el uso excesivo de descongestionantes nasales.

Los tratamientos para la rinitis alérgica incluyen evitar los alérgenos, medicamentos como corticosteroides nasales, antihistamínicos y descongestionantes, y en casos severos, inmunoterapia.

Tratamiento que expone gradualmente al paciente al alérgeno para reducir la sensibilidad y los síntomas.