Deglución y Funciones Estomatognáticas

Etapa de la deglución donde se cierra la vía respiratoria y se abre el esfínter esofágico superior para permitir el paso del bolo alimenticio al esófago.

El proceso de obstrucción temporal de las vías respiratorias durante la deglución para evitar la entrada de alimento a los pulmones.

Relajación muscular que permite el paso del bolo alimenticio desde la faringe hacia el esófago.

Músculo que participa en la elevación del hioides y el ascenso de la laringe, crucial para la deglución.

Movimiento ondulatorio del esófago que impulsa el bolo alimenticio hacia el estómago.

Etapa final de la deglución, donde la peristalsis mueve el alimento a través del esófago hasta el estómago.

Interviene en el proceso de la deglución al regular la ventilación del oído medio, colaborando con los músculos dilatadores.

En lactantes, la epiglotis se encuentra baja, cubriendo la entrada de la tráquea durante la deglución, y el velo del paladar cubre la vaeculla.

Con el desarrollo y crecimiento, la deglución del niño cambia adaptándose a la maduración neuromuscular y cambios en la postura de la cabeza y la laringe.

En niños mayores, la epiglotis ya no bloquea la entrada de la tráquea durante la deglución, debido al crecimiento y elongación de la laringe.

El velo del paladar en lactantes cubre la vaeculla, por detrás de la epiglotis, durante la deglución, ayudando a la seguridad de que el alimento no vaya hacia la tráquea.

Estructura anatómica en la boca que juega un rol en la deglución de los lactantes.

Maduración de los músculos que controlan la deglución y la postura de la cabeza, que afecta la forma en que la epiglotis funciona durante la deglución

El esófago se ve afectado por el proceso de deglución debido a la posición de la laringe y de la epiglotis.

Un músculo que controla la entrada al esófago, trabajando en colaboración con otros para la deglución.

Es una deglución refleja incondicionada, adaptándose a la alimentación líquida con poca implicación de la dentición.

Es un reflejo condicionado, íntimamente ligada a la masticación y formación del bolo alimenticio, empleando la dentición.

Las piezas dentarias entran en contacto durante la deglución.

La lengua se posiciona entre los rebordes gingivales estabilizando la mandíbula.

Estabiliza la mandíbula contra el maxilar superior a través de la oclusión dentaria.

Actúa elevando el hioides, usando la mandíbula como punto de inserción.

Cuando no todas las piezas dentarias entran en contacto, la lengua llena el espacio.

Es iniciada por un intercambio sensorial entre los labios y la lengua.

La primera fase de la deglución, donde el bolo alimenticio se mueve hacia el istmo de las fauces.

Músculo involucrado en el inicio de la fase oral de la deglución en muchas especies.

El ascenso del velo del paladar, que finaliza la fase oral y comienza la fase faríngea siguiente.

Fase involuntaria de la deglución que implica la suspensión de la respiración y el paso del alimento por la orofaringe y nasofaringe.

El sellado del paladar blando contra la pared de la faringe, impidiendo que los alimentos entren en la nasofaringe.

Receptores en la mucosa del paladar blando que detectan la presión del bolo alimenticio, iniciando la fase faríngea.

Centro de control de la deglución, procesa la información sensorial y desencadena la apertura de la compuerta buco-faríngea.

Describe la actividad motora de la fase faríngea, donde se activa o desactiva una cantidad significativa de músculos y reflejos a la vez.

En los lactantes, la epiglotis se encuentra baja, cubriendo la entrada de la tráquea durante la deglución, y el velo del paladar cubre la vaeculla para impedir que la comida vaya hacia la tráquea.

A medida que el niño crece, su epiglotis ya no queda bloqueada contra el paladar blando, debido a que la laringe se elonga, permitiendo una deglución más segura.

En los lactantes, la vaeculla es un área crucial en la deglución, donde el velo del paladar se aplica para impedir que el alimento ingrese en las vías respiratorias.

El desarrollo neuromuscular permite que la cabeza del niño se mantenga erguida, lo que influye positivamente en la anatomía de la laringe, que se elonga por lo tanto la epiglotis pueda moverse de forma adecuada.

La maduración neuromuscular afecta la postura de la cabeza del niño, lo que, a su vez, determina el correcto movimiento de la laringe y la epiglotis, adaptando la forma segura de deglución.

La alimentación pasa de líquida a semisólida y sólida, coincidiendo con la erupción dentaria.

Los movimientos de la mandíbula cambian de horizontales a verticales, debido a la nueva información sensorial de los mecanorreceptores periodontales.

La punta de la lengua se mueve de una posición protrusiva a una posición en la papila retroincisiva.

Cerca de los 18 meses, se observa la transición a la deglución madura.

Un patrón de deglución infantil que persiste después de los cuatro años se considera inusual.

La deglución madura, relacionada con la alimentación sólida y el desarrollo anatómico.

Tipo de deglución asociada con la lactancia y la transición a la alimentación sólida.

Es un reflejo incondicionado, adaptándose a la alimentación líquida con poca implicación de la dentición.

Es un reflejo condicionado, íntimamente ligada a la masticación y formación del bolo alimenticio, empleando la dentición.

Las piezas dentarias entran en contacto durante la deglución.

La lengua se posiciona entre los rebordes gingivales estabilizando la mandíbula.

Estabiliza la mandíbula contra el maxilar superior a través de la oclusión dentaria.

Actúa elevando el hioides, usando la mandíbula como punto de inserción.

Cuando no todas las piezas dentarias entran en contacto, la lengua llena el espacio.

Es iniciada por un intercambio sensorial entre los labios y la lengua.

Fase voluntaria y consciente del proceso de deglución. El alimento sólido requiere masticación, mientras que el líquido se deglute inmediatamente.

Masa de alimento, líquido o semisólido, listo para ser deglutido.

Aproximadamente 8ml, cantidad óptima para deglutir sin complicaciones.

Fase del proceso de deglución, moviendo el alimento al istmo de fauces.

Formación del estuche óseo muscular (lengua, paladar duro y blando) para contener el bolo.

Sello formado por la presión de la lengua contra el paladar, evitando derrame de alimento.

Comienza de manera voluntaria en el caso del liquido y después de la masticación del solido.