Tema 6 Variables de personalidad en el proceso de enseñanza-aprendizaje PDF
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This document covers the topic of personality variables in the teaching-learning process. It discusses the concept of personality, relevant factors in the teaching-learning process, and intervention strategies.
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Tema 6 Psicología de la Educación Tema 6. Variables de personalidad en el proceso de enseñanza-aprendizaje Índice Esquema Ideas clave 6.1. Introducción y objetivos 6.2. Concepto de personalidad y abordajes teóricos 6.3. Factores personales más relevantes implicados en el proceso de enseñanza-apr...
Tema 6 Psicología de la Educación Tema 6. Variables de personalidad en el proceso de enseñanza-aprendizaje Índice Esquema Ideas clave 6.1. Introducción y objetivos 6.2. Concepto de personalidad y abordajes teóricos 6.3. Factores personales más relevantes implicados en el proceso de enseñanza-aprendizaje 6.4. Intervención en el aula 6.5. Instrumentos para la valoración de la personalidad 6.6. Referencias bibliográficas A fondo Diferencia entre personalidad, temperamento y carácter Actividades para el trabajo en el aula Introversión y extroversión: implicaciones en el pensamiento y el comportamiento Los cinco grandes rasgos de personalidad Test Esquema Psicología de la Educación Tema 6. Esquema © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 3 Ideas clave 6.1. Introducción y objetivos Hemos profundizado en el conocimiento del desarrollo humano. Sabemos que es un proceso muy complejo y global como resultado de la integración de diferentes dimensiones interrelacionadas entre sí. Además, es un proceso que se inicia desde la misma concepción y dura toda la vida, y supone el crecimiento integral de la persona en su sociedad, por lo tanto, necesita desarrollar y aprender todas aquellas herramientas que le posibiliten la vida autónoma y en su comunidad. Este proceso ocurre en diferentes contextos con sus características y funciones propias. Entre el individuo y su medio se da una relación mutuamente influyente debido a que la experiencia con el ambiente nutre al sujeto para enriquecer su desarrollo y, fruto de esta experiencia, la persona también aporta cambios a su entorno. En este intercambio participan numerosas variables personales, que son influidas por el contexto en el cual el individuo crece. Estas variables forman parte de la identidad de la persona y le otorgan un sello único de existir dentro de su grupo familiar, escolar, social y cultural. Las características de personalidad con las que nace van madurando junto con su desarrollo y son sensibles a modificaciones por la experiencia con el ambiente, determinando en gran medida cómo será la experiencia vital. En este tema conoceremos cómo las características de personalidad influyen en el proceso de enseñanza-aprendizaje, pero también cómo este mismo proceso influye sobre la persona, facilitando el desarrollo de su identidad personal y social, lo cual, a su vez, favorece aquellas características que facilitan una adaptación, una autonomía y una calidad de vida. Los objetivos que se pretenden conseguir son: Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 4 Ideas clave ▸ Conocer y definir la personalidad y sus características. ▸ Identificar las variables más significativas que influyen en el proceso de enseñanzaaprendizaje. ▸ Conocer algunos instrumentos que miden estas variables. ▸ Conocer planes y actividades que promuevan las variables de personalidad implicadas en la optimización del proceso de enseñanza-aprendizaje. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 5 Ideas clave 6.2. Concepto de personalidad y abordajes teóricos La personalidad es un constructo muy estudiado en numerosos ámbitos de la psicología. Freud definió la personalidad en función de una serie de mecanismos que llevan a la persona a buscar el placer a través de pulsiones inconscientes. Para este autor, las primeras relaciones del bebé con su madre eran fundamentales para la construcción de su identidad y personalidad, por lo que experiencias traumáticas o carentes de afecto conllevarían a graves consecuencias en el desarrollo personal y, por extensión, afectaría a todos sus ámbitos. Según los psicoanalistas Freud y Erikson, la personalidad se iría configurando al ir atravesando y superando las diferentes fases (oral, anal, fálica, latente y genital) en las que las pulsiones libidinales guiarían a la persona hacia la satisfacción de los deseos y necesidades. Esto, sumado a las expectativas externas y a la regulación social, favorecerían la aparición y mantenimiento de ciertos rasgos de personalidad. Además, Freud (1938) describió cómo al comienzo de la etapa primaria el descubrimiento genital produce placer y genera curiosidad exploratoria. En este momento, se descubre la diferencia entre la genitalidad femenina y masculina, describiendo la angustia ante la posible castración del niño y de la niña, surgiendo los complejos de Edipo y Electra, respectivamente. En ambos casos, surgiría un deseo hacia el progenitor del otro sexo buscando una vinculación privilegiada con él/ella, emergiendo hostilidades hacia el progenitor del mismo sexo. Sin embargo, el miedo al castigo y la propia identificación con el miembro del mismo sexo ponen fin a este conflicto, adoptando los valores propios del género correspondiente. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 6 Ideas clave Para que este proceso culmine, la estructura súper yoica favorece la interiorización de normas y valores sociales para que se equilibren las relaciones entre las estructuras del ello, yo y superyó, lo cual determinará la personalidad del niño. Figura 1. Etapas del desarrollo psicosexual. Fuente: elaboración propia. Erikson (1963; 1980), por su parte, recoge estos supuestos freudianos y amplía el desarrollo de la personalidad en su teoría psicosocial. Para este autor, las experiencias sociales vividas a lo largo del ciclo vital tienen más peso que los factores biológicos y se basa en la resolución del conflicto psicosocial. Si el resultado de la resolución de cada conflicto es positivo, se irán adquiriendo las competencias que le facilitarán su integración al grupo social. Describió la existencia de ocho etapas psicosociales que se irían atravesando a medida que el individuo se desarrolla y en las que el yo se iría fortaleciendo hacia una tendencia. Cada etapa supone una crisis y la superación de un conflicto, y de cada una se obtendría una fortaleza: ▸ Confianza vs desconfianza (se daría en la infancia y la fortaleza sería la esperanza). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 7 Ideas clave ▸ Autonomía vs vergüenza y duda (se produce en la niñez temprana, siendo su fortaleza la voluntad). ▸ Iniciativa vs culpa (es el momento de la edad del juego y la fortaleza sería el propósito). ▸ Laboriosidad vs inferioridad (se da en la edad escolar y su fortaleza sería la competencia). ▸ Identidad vs difusión de la identidad (sucede durante la adolescencia con la fortaleza de la fidelidad). ▸ Intimidad vs aislamiento (es la etapa correspondiente a la adultez joven con la fortaleza del amor). ▸ Generatividad vs autoabsorción (se produciría en la adultez y su fortaleza sería el cuidado). ▸ Integridad vs desesperanza (es la última etapa y la correspondiente a la edad avanzada, siendo su fortaleza la sabiduría). Figura 2. Etapas del desarrollo psicosocial. Fuente: elaboración propia. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 8 Ideas clave Las experiencias, la superación de las crisis y la superación de estos conflictos estarían sobre la base de la formación de la personalidad, ampliándose a lo largo de todo el ciclo vital. L a autonomía que va adquiriendo en sus primeras experiencias motivará que en torno a los tres y los seis años genere deseos de explorar el entorno, produciéndose una tensión evolutiva. Por una parte, dispondrá de una iniciativa que le invitará a esta exploración, buscando sus propios límites y los de su entorno, lo cual favorecerá su sentimiento de autonomía, pero en la medida en que estos movimientos y descubrimientos son restringidos o excesivamente controlados por su ambiente, el sentimiento de culpa será mayor por no corresponder con la norma. Alterará su sentir y sus pautas de actuación, modificando sus expectativas, sus creencias y su propia personalidad. También es importante considerar las aportaciones de Wallon (1984) en la construcción de la personalidad. Este autor describe la importancia de ciertos estadios del desarrollo, siendo el estadio del personalismo determinante en la autoconstrucción. Entre los dos y los tres años se produce en el niño una crisis de oposición como una manera de autoafirmarse en su recientemente descubierta identidad, de manera que intenta salirse con la suya haciendo prevalecer su voluntad. La búsqueda de aceptación del grupo y su cariño es fundamental, pero este conflicto de intereses los dirige hacia la búsqueda de otras estrategias que faciliten hallar estos pilares de manera más positiva. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 9 Ideas clave Es entonces cuando Wallon describe el período de gracia (se da en torno a los cuatro años), en el que el niño realiza un despliegue de todas sus habilidades para ganarse la atención, el reconocimiento y la admiración de los otros. Dado que esta fase consigue resultados a corto plazo, alrededor de los cuatro o cinco años comprenden que hay otra estrategia más eficaz para continuar grajeándose esa atención mediante la imitación de los demás. Vistiéndose y comportándose como sus adultos referentes, facilitará que estos se vean reflejados en los pequeños, admitiendo su deseabilidad y sintiendo la admiración que los niños les profesan como un orgullo. Este proceso genera en el niño un sentimiento de identificación con sus referentes. Estos autores destacan la importancia de la etapa que va desde los tres a los seis años en la formación de la personalidad infantil. En esta etapa, los niños se encuentran con numerosos conflictos interpersonales que afectarán a la construcción de la propia identidad por sus deseos de definir su propio ser y de mantener su recién adquirida autonomía. Además, el afecto y la imitación de sus adultos referentes, la vinculación e identificación con los miembros de su grupo y la progresiva interiorización de las normas sociales y valores favorecerán la resolución de conflictos y tensiones de esta etapa (Hidalgo y Palacios, 2014). Por otra parte, Jung se disgregó de la teoría psicosexual de Freud por sus discrepancias y elaboró otro enfoque desde su teoría analítica. Para este autor, la mente se constituye del yo, la consciencia; del inconsciente personal, recuerdos reprimidos e inconscientes, y del inconsciente colectivo, que es la herencia cultural y filogenética que recibe cada individuo a través de las generaciones y que se constituye a través de arquetipos o modelos inconscientes de representación y conocimiento de la realidad. Estos arquetipos predisponen a ciertas conductas. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 10 Ideas clave Para Jung (1923) la personalidad se estructura en torno a dos dimensiones básicas que son dependientes del contexto y de la situación, como son la introversión (la persona se guía hacia su interior, guardando sus afectos, pensamientos y bienestar en su fuero interno) y la extroversión (la persona se guía hacia el exterior y se abre a las relaciones sociales y hacia la experimentación en el mundo). Ambas dimensiones podían ser combinables con cuatro funciones básicas (sentimiento, pensamiento, intuición y sensación), dando lugar a ocho tipologías de personalidad. Consulta el apartado A fondo para profundizar en ellas Esta teoría dota de una gran importancia a la educación para construir la conciencia. El niño es una continuación de su sistema familiar y la entrada en la escuela facilita que se desarrolle su individualidad, abriéndole el mundo y completando la educación que recibe de sus progenitores. El educador es alguien inmerso en su cultura que comprende sus normas y valores y las acerca al niño (Bustamante-Zamudio, 2017). Figura 3. Dimensiones básicas de la personalidad de Jung. Fuente: elaboración propia. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 11 Ideas clave Por otra parte, otros autores abordaron el estudio del desarrollo de la personalidad. Es el caso de Rogers y de Allport, quienes posicionaron sus criterios bajo la teoría fenomenológica de la personalidad. Rogers (1961) concebía que el niño nace con una tendencia a la realización, cuyas capacidades y potenciales innatos serán desarrollados, por lo que adquirirá nuevas destrezas. Cuando este potencial no es correctamente atendido, la tendencia se torna en el desarrollo de rigidez, patrones defensivos y sentimientos de ansiedad y amenaza. Desde esta perspectiva, Allport (1940) entendía la personalidad como una organización dinámica formada por factores individuales integrados entre sí a través de las dimensiones psicofísicas. Estos factores se englobarían en unos rasgos personales que se distinguirían en: ▸ Rasgos comunes: son las características generales observables en las personas, que son analizables y permiten la comparación entre individuos de su cultura y de otras diferentes. ▸ Rasgos individuales: son las características de configuración única en cada individuo. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 12 Ideas clave Analizando esta teoría, Feist et al. (2014) destacan que el peso de estos rasgos sobre la configuración de cada personalidad se fundamentaría en: ▸ Rasgos fundamentales: son las características más destacadas que conforman el eje de la personalidad e identifican a la persona y en torno a las cuales se articula el resto de los rasgos. ▸ Rasgos principales: existen entre cinco y diez rasgos que definen a la persona y son fácilmente identificables entre los miembros de su entorno. ▸ Rasgos secundarios: existen en la personalidad del individuo y se activan ante situaciones específicas, generando comportamientos concretos. Para Allport, la personalidad es un constructo dinámico, puesto que guía el inicio y la forma del comportamiento del individuo hacia la adaptación a su entorno, las relaciones con su medio, los pensamientos y la emisión de conductas. Los rasgos más adaptativos buscan la satisfacción de necesidades y la supervivencia, y se identifican como rasgos de motivación, mientras que los rasgos de estilo son aquellos que guían el comportamiento aportando la impronta personal cualitativa. L a motivación es una pieza clave de esta teoría porque sería el impulso que favorece la actuación y la adaptación al entorno de manera autónoma y consciente. La conducta puede ser explicada si se entiende el motivo autónomo que la originó. En educación es fundamental comprender que la motivación es funcional y básica para la satisfacción. Los niños pueden sentir mayor curiosidad y bienestar en la búsqueda de respuestas que en las respuestas en sí, por lo que es importante invitarlos a la investigación de sus propios intereses. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 13 Ideas clave Figura 4. Tipos de rasgos de la personalidad de Allport. Fuente: elaboración propia. Por su parte, Cattell (1967) comprendió la complejidad de la estructura de la personalidad, así que ofreció un enfoque multivariado en el cual, mediante un análisis factorial de las características de la persona, podrían predecirse los rasgos fundamentales de la personalidad y, por lo tanto, sus conductas. Describió la existencia de dieciséis factores determinantes de la personalidad medidos a través de los diferentes rasgos. Estos podían ser temperamentales (innatos y heredados, con base en el comportamiento), aptitudinales (habilidades y destrezas, también susceptibles de ser heredadas) y dinámicos (factores motivacionales de la conducta que fluctúan y que son dinámicos y contingentes). Los factores fueron identificados por una letra y cada uno describía una serie de características: ▸ A (afectividad). ▸ B (razonamiento). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 14 Ideas clave ▸ C (estabilidad). ▸ E (dominancia). ▸ F (impulsividad). ▸ G (conformidad grupal). ▸ H (atrevimiento). ▸ I (sensibilidad). ▸ L (suspicacia). ▸ M (imaginación). ▸ N (astucia). ▸ O (culpabilidad). De la combinación de los anteriores obtiene unos factores Q, siendo: ▸ Q1 (rebeldía). ▸ Q2 (autosuficiencia). ▸ Q3 (autocontrol). ▸ Q4 (tensión). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 15 Ideas clave Con estos factores, Cattell creó el cuestionario 16PF para la medida de la personalidad, que ha sido muy utilizado por instituciones sociosanitarias, educativas, equipos psicopedagógicos, etc., con fines diagnósticos y de orientación laboral (Cloninger, 2003). De estas aportaciones Costa y McCrae (1988) identificaron cinco grandes dimensiones de la personalidad, cada una de las cuales se extendía a través de un continuo con un polo opuesto: ▸ Estabilidad emocional vs neuroticismo. ▸ Extraversión vs introversión. ▸ Apertura a la experiencia vs cerrazón a la experiencia. ▸ Amabilidad vs desagrado. ▸ Responsabilidad vs desorganización. Consulta el apartado A fondo para profundizar en ellos. Por su parte, Eysenck (1967) y, posteriormente junto con su esposa (1985), analizó las diferencias biológicas halladas en las personas, obteniendo 3 factores: extroversión (E), neuroticismo (N) y psicoticismo (P). Para este autor, las elevadas puntuaciones en estas dimensiones se relacionaban con mayores riesgos de desarrollar trastornos de conducta. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 16 Ideas clave Figura 5. Teorías de rasgos, dimensiones y factores de la personalidad. Fuente: elaboración propia. Ambas aproximaciones basaron sus estudios en la población adulta, pero posteriormente centraron su atención en la personalidad infantil y adolescente, fundamentalmente por sus problemas de comportamiento y dificultades académicas, creando así adaptaciones de los cuestionarios a estos colectivos. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 17 Ideas clave Estos han sido utilizados en la escuela para saber cómo algunos factores de personalidad se relacionan con dificultades en el proceso de enseñanzaaprendizaje que afectan al rendimiento académico y al éxito escolar (Abella y Bárcena, 2014; Abella et al., 2016). El conocimiento de estas dificultades ha favorecido la creación de programas y espacios destinados al trabajo personalizado con estos estudiantes. Además, se ha comprobado la estabilidad de la conducta antisocial a lo largo del tiempo (Sampson y Laub, 1990), por lo que es importante establecer una detección y atención temprana a estas dificultades tan disruptivas. Otros autores se basaron en el estudio de la personalidad humana desde la perspectiva del aprendizaje caracterizada por el abordaje conductista. A través de la lectura de las diferentes obras de Skinner y de Staats, Cloninger (2003) resume que estos autores indicaron la existencia de predisposiciones biológicas, pero la diferencia entre las personas radica en sus reforzamientos. Igualmente, es importante tener en cuenta otras teorías basadas en las aproximaciones de Adler y el desarrollo holístico, que influyeron a humanistas como Rogers y Maslow en su consideración de la personalidad en términos de satisfacción de necesidades básicas y jerarquizadas en función de su importancia en la supervivencia, encaminadas hacia la autorrealización de la persona (Cloninger, 2003). Por lo tanto, existen numerosos abordajes sobre el estudio de la personalidad que han sido de gran utilidad para comprender el desarrollo humano y la conducta. Pese a las numerosas definiciones existentes, tras una exhaustiva revisión entenderemos que la personalidad es el conjunto de características que definen la forma de ser de una persona y que indican la tendencia de su comportamiento. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 18 Ideas clave La personalidad se configura en torno a unos rasgos, que son las formas estables que adquiere la conjugación de estas características y que identifican a la persona. Estos rasgos son heredables, pero también se hallan muy influidos por el ambiente y pueden posicionarse en un continuo dicotómico. Un niño puede ser introvertido en su grupo-aula, pero muy extrovertido en su hogar. Es posible hallar un perfil de personalidad midiendo estos rasgos mediante pruebas estandarizadas. Muchas de estas pruebas agrupan estos rasgos por factores. Esto permite obtener una totalidad cuantificada de cada rasgo y la representación de ese perfil. No obstante, distinguiremos entre este y otros constructos que, si bien están directamente relacionados con la personalidad, son diferentes y tienden a solaparse. Por ejemplo, Cloninger (2003) concibe el temperamento como un estilo de comportamiento que es consistente, además de un grupo de reacciones emocionales que se hallan presentes desde el nacimiento y son de naturaleza, a priori, biológica y heredada. El temperamento se inclina a elegir actividades, relaciones y entornos (un temperamento sociable anima a la búsqueda de los otros). Por otra parte, este temperamento genera reacciones en los demás devolviendo respuestas en sus interacciones. Las reacciones son muy específicas del entorno que les rodea, por lo que, en función del temperamento, estas mismas respuestas pueden actuar como un refuerzo o como un revulsivo. Por ejemplo, un niño tímido puede agravar su introversión si es castigado duramente, pero puede desencadenar el efecto de rebeldía en niños activos (Martínez-Izquierdo, 2002). A pesar de que es relativamente estable, la educación favorece la autorregulación y capacidad de modulación. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 19 Ideas clave Por otra parte, el carácter, según Kretchmer (1947), supone la fusión entre el temperamento heredado y el instinto que se desarrolla en el medio, actuando de manera permanente en la expresión individual de esos rasgos, siendo aquella forma habitual de reaccionar ante un estímulo o situación. El carácter también mantiene una estabilidad en la medida en que supone una tendencia a reaccionar ante determinadas situaciones, e incluye no solo instintos y emociones, sino también estados de ánimo, sentimientos, percepciones, pensamientos y determinaciones, generando una impronta o marca que puede ser predictiva de reacciones y comportamientos (Martínez-Izquierdo, 2002). Consulta el apartado A fondo para profundizar en estos constructos. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 20 Ideas clave 6.3. Factores personales más relevantes implicados en el proceso de enseñanzaaprendizaje En muchos estudios se ha hallado que los rasgos de personalidad indican una tendencia de comportamiento, implicando algunos hábitos que inciden directamente en el rendimiento académico. Además, algunos autores han hallado la capacidad predictiva de estos rasgos sobre dicho rendimiento (Ackerman et al., 2001), siendo una de las variables más destacadas la responsabilidad, fundamentalmente en alumnos de estudios superiores (Cuadra-Peralta et al., 2015; De Feyter et al., 2012; O’Connor y Paunonen, 2007). Esta define a la persona como organizada y con capacidad de planificación, de esfuerzo y perseverancia hacia la consecución de las metas planteadas. A lo largo del desarrollo, el niño va forjando su personalidad y tomando conciencia de sí mismo. Muchos autores defienden que esta conciencia se configura en el autoconcepto y se forma entre los dos y los seis años, aunque es un proceso activo cuya construcción se da a lo largo de todo el ciclo vital, por lo que va variando en función de la etapa del desarrollo en la que se encuentre. Autoconcepto y autoestima El autoconcepto supone aquellas características y atributos personales con los que el individuo se identifica y utiliza para definirse a sí mismo y para diferenciarse de los demás (Hidalgo y Palacios, 2014). El autoconcepto aglutina lo que pensamos sobre nosotros mismos, quiénes somos, cómo somos y lo que somos capaces de hacer (Paz-Guerra y Bernardo-Peña, 2021). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 21 Ideas clave Algunos autores defienden que es una variable que se sitúa dentro del campo motivacional por su capacidad de dirigir intereses y comportamientos, especialmente en el contexto educativo (González-Pienda y Núñez, 1997). Durante la etapa preescolar, la identificación se produce sobre conceptos globales, simples y en términos absolutos sin matices ni comparaciones, basados en su imagen corporal, tendencias personales, experiencias vividas… Pero, acercándose a los seis años, las descripciones comienzan a ser más diferenciadas, integrando otras dimensiones cualitativas. Este autoconocimiento se complementa con la autoestima. Es la valoración de la propia persona sobre sí misma con base en sus características, capacidades, logros y forma de ser (Hidalgo y Palacios, 2014), es decir, supone la valía que una persona se concede a sí misma por ese concepto que tiene y el grado de estima que se tiene por ello (Paz-Guerra y Bernardo-Peña, 2021). Para Palacios (1999a), la autoestima es valorable desde las metas propuestas y los logros alcanzados, por lo que, en función del momento vital, también es muy cambiante. Una autoestima puede ser positiva cuando la distancia entre la propuesta y el logro es corta, mientras que es negativa cuando sucede lo contrario. No obstante, Harter (1998) y Schaffer (1996) sostienen que la autoestima es una variable multidimensional, basándose en estudios previos de Harter y Pike (1984) quienes hallaron que en niños de entre cuatro y siete años se podían describir cuatro dimensiones de la autoestima: ▸ Física. ▸ Cognitivo-académica. ▸ Aceptación de los iguales. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 22 Ideas clave ▸ Aceptación de los progenitores. En este período, la valoración aún tiende a ser idealizada, existiendo un sesgo positivo con el que el yo ideal solapa al yo real (Hidalgo y Palacios, 2014). Existe una vasta literatura que relaciona la autoestima con una gran cantidad de aspectos relacionados con la vida cotidiana. Coopersmith (1967), indicaba que un buen desarrollo de la autoestima requiere que haya aceptación y calidad de las relaciones con las personas más significativas para el niño. En esta línea, Simkin et al. (2014) observaron que la autoestima es muy sensible a estas experiencias, por lo que el acoso escolar puede minarla. En consecuencia, las relaciones establecidas con los iguales son muy importantes de cara a la socialización, al sentimiento de pertenencia al grupo y a la aceptación, por lo que el bullying puede afectar gravemente a la autoestima y, por extensión, al rendimiento académico y al proceso de aprendizaje. El estudiante acosado disminuye su capacidad de respuesta, genera sentimientos de indefensión, incrementa su ansiedad y se muestra ausente tratando de evitar acudir al centro con manifestaciones psicosomáticas (Gerenni y Fridman, 2015). Los autores hallaron que los adolescentes con mayores puntuaciones en neuroticismo recibían mayores conductas de acoso, retroalimentándose esta relación (cuanto mayor era el acoso, más se incrementaba el neuroticismo). Por su parte, las personas acosadoras mostraban comportamientos intimidatorios y elevados conflictos intrafamiliares. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 23 Ideas clave Con respecto a las investigaciones más destacadas llevadas a cabo en estudiantes de primaria, Fueyo et al. (2010) hallaron que las elevadas puntuaciones en la personalidad eficaz correlacionaban positivamente con un buen rendimiento académico y actitudes hacia el aprendizaje. Una personalidad eficaz se constituye de cinco factores, que son medidos con un instrumento específicamente creado para ello (cuestionario de personalidad eficaz de Fueyo, 2010). Los factores recogidos en este constructo son: ▸ Autoestima académica (autoaceptación, autoconfianza y sentimientos de capacidad). ▸ Autorrealización social (habilidades sociales y de relación con iguales). ▸ Autoestima personal (autoaceptación física y creencia de aceptación de los demás). ▸ Autonomía social (percepción para establecer relaciones óptimas, pero con autonomía para la propia toma de decisiones). ▸ Autonomía resolutiva (afrontamiento y resolución de problemas). Este estudio confirmaba que la autoestima académica (articulada en torno a la autoaceptación, el interés intrínseco por el aprendizaje y la autoeficacia resolutiva) y la autoestima personal eran los factores que más correlacionaban con la implicación en el aprendizaje y el éxito académico (Fueyo, 2010). Por lo tanto, existe una clara evidencia de que la relación del autoconcepto y la autoestima en el ámbito educativo es vital para un posicionamiento activo en el proceso de aprendizaje. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 24 Ideas clave Cuando un niño se siente competente y confía en sus habilidades, percibe autoeficacia y capacidad de manejo de las tareas, haciendo propios los objetivos del aprendizaje (Miller et al., 1993). Esas expectativas sobre sus capacidades influyen en el desarrollo de estrategias cognitivas y metacognitivas. Estas estrategias facilitan la implicación e incrementan la motivación, elevando el esfuerzo y el rendimiento, favoreciendo, así, un aprendizaje significativo (Boekaerts, 1996; González-Pienda et al., 1997). Figura 6. Recomendaciones para trabajar la personalidad eficaz. Fuente: elaboración propia. González y Tourón (1992) y Núñez y González Pienda (1994) hallaron una correlación positiva y significativa entre el autoconcepto y la autoestima, además de que el resultado de esta relación también se vinculaba con la selección de estrategias de aprendizaje. Por el contrario, si el autoconcepto es negativo, se anticiparían fracasos en los logros académicos y el esfuerzo dejaría de realizarse, pudiendo, así, atribuir estos resultados a la falta de trabajo y no a su habilidad. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 25 Ideas clave Si se elimina la ansiedad anticipatoria de esta ecuación y se apuesta por el incremento del esfuerzo, es muy posible que los resultados sean mejores de lo esperado, por lo que es importante enfatizar las dimensiones positivas de autoafirmación y tratar de desvincular la autoimagen negativa a consecuencia de bajos resultados (Núñez-Pérez et al., 1998). En el vídeo Variables de personalidad asociadas al éxito académico, se presentan aquellas características personales presentes en alumnado con buen rendimiento y calidad en los aprendizajes para destacar la importancia de fomentar estas habilidades en la escuela. Variables de personalidad asociadas al éxito académico Accede al vídeo: https://unir.cloud.panopto.eu/Panopto/Pages/Embed.aspx?id=e03b91d5-bc574c5b-846a-b0b901223241 Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 26 Ideas clave García y Pintich (1994) propusieron la existencia de una relación entre el autoconcepto y cuatro estrategias de aprendizaje autorregulado. Un elevado nivel de esfuerzo y la motivación intrínseca se relacionaban con un autoconcepto sólido y estrategias metacognitivas para el aprendizaje autorregulado. Igualmente, se ha identificado que los estudiantes con dificultades en la autorregulación de sus estrategias de aprendizaje tienden a la utilización de patrones atribucionales externos y causas ajenas a ellos (por ejemplo, mediante afirmaciones como «el examen ha sido para ir a pillar» o «la profesora me tiene manía». Esta medida se toma en defensa de su autoconcepto y se desecha la idea de que se deba a una falla en la ejecución o de las capacidades del estudiante. De esta manera, se protege y puede disfrutar de una autoimagen positiva como estudiante (Núñez-Pérez et al., 1998). Núñez Pérez et al. (1998) concluyen en su estudio que existe una relación directamente proporcional entre un autoconcepto positivo y el uso de estrategias de aprendizaje. A su vez, el conocimiento sobre el manejo de estas estrategias incrementa la propia autoestima y la motivación intrínseca. Por lo tanto, afirman que la instrucción en el conocimiento de las estrategias de aprendizaje favorece que sea posible la autorregulación en el proceso, así como el conocimiento de las propias limitaciones y capacidades, siendo posible actuar en consecuencia sobre las mismas. De esta manera, permite al estudiante poder reflexionar, autorregularse y tomar decisiones sobre sus propias habilidades. Estas acciones y la toma de conciencia mejoran el propio autoconcepto. Por todo ello, Paz Guerra y Bernardo Peña (2021) insisten en la importancia de desarrollar procedimientos en la escuela para el fomento de autoconcepto y autoestima. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 27 Ideas clave Motivación Igualmente, Paz Guerra y Bernardo Peña (2021) indican que existen otras variables que pueden afectar al autoconcepto y, por extensión, al propio proceso de aprendizaje, es decir, las experiencias negativas de logro no son los únicos influyentes. Estas variables pueden ser el propio interés por la tarea, la actitud, el nivel de exigencia del docente y de sus progenitores, sus logros previos alcanzados, la seguridad que tenga, su dependencia o la ansiedad. En esta línea, los autores describen la motivación como el impulso que dirige la conducta y que puede diferenciarse dos formas: ▸ Motivación intrínseca: se basa en factores internos y personales (necesidades, intereses o curiosidad), siendo la actividad en sí misma la recompensa, la autorrealización y el logro de una meta. El individuo es guiado por la curiosidad y el descubrimiento, sin necesidad de incentivos externos, por lo que el lugar de control es interno. Los éxitos se atribuyen a las propias competencias y al esfuerzo. Las metas que se establecen son de aprendizaje y lo importante es aprender y mejorar restando importancia a los errores. Los estudiantes con una elevada motivación intrínseca se interesan por desafíos, son más persistentes ante las dificultades y buscan el dominio de la tarea (Paz-Guerra y Bernardo-Peña, 2021). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 28 Ideas clave ▸ Motivación extrínseca: el impulso que guía la conducta se halla en factores externos y ambientales por recompensas, castigos o presión social, sin que la actividad en sí sea la razón, siendo el lugar de control externo. El rendimiento y el aprendizaje son el medio para obtener un beneficio en forma de calificación o como manera de evitar un castigo, siendo los resultados y sus consecuencias lo que impulsa al esfuerzo (Sole, 2001). Las metas son de desempeño y se orientan por la evaluación de su trabajo y de sus resultados y por mostrar apariencia de capacidad y no de incompetencia. La importancia de la motivación en el proceso de enseñanza-aprendizaje es fundamental, tanto que Ospina Rodríguez (2006) la identificaba como el motor del aprendizaje y atribuía su existencia no solo a las características personales del estudiante, sino también a las relaciones con los demás, con el profesorado y con la propia tarea. Para facilitar el interés, Solé (2001) se apoya en la teoría de Ausubel indicando que es fundamental que el alumno encuentre un sentido en lo que hace y que su profesor le presente los objetivos y los motivos, guiándole en esta tarea. En este proceso, el modelo pedagógico que sustenta el currículo tiene mucho peso, puesto que se ha demostrado que la motivación incrementa cuando el aprendizaje e s compartido. Se basa en la cooperación más que en la competición y no se penalizan los errores, sino que suponen oportunidades para aprender de los mismos. La exigencia debe ser igualmente moderada a las capacidades de los estudiantes y se deben favorecer ambientes distendidos para la comunicación (Solé, 2001) de manera que se incentive y se prime la motivación intrínseca sobre la extrínseca (Ospina, 2006). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 29 Ideas clave Tabla 1. Propuestas para incrementar la motivación intrínseca al aprendizaje. Fuente: elaboración propia. Atribuciones Weiner (1972) consideró que las atribuciones jugaban un papel importante en el proceso de aprendizaje. Definió tres dimensiones en torno a las cuales los estudiantes atribuyen sus éxitos y fracasos: ▸ Locus interno vs locus externo: se halla muy relacionado con la autoestima en la medida en que, si el éxito se atribuye a factores personales, el resultado producirá orgullo, pero disminuirá la autoestima ante los fracasos. ▸ Estabilidad: está muy relacionada con las expectativas de futuro. Cuando los resultados se atribuyen a factores estables, como la sencillez de una materia, se esperará tener éxito a futuro en esa área, mientras que, si se atribuyen a factores inestables como el ánimo o la suerte, la sensación será la posibilidad de obtener resultados diferentes en tareas similares. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 30 Ideas clave ▸ Responsabilidad: está asociada con emociones de ira, lástima, vergüenza o sentimiento de agradecimiento. Cuando se percibe sencillez y control en una tarea, el fracaso puede inducir vergüenza o culpa; cuando la tarea se percibe como incontrolable, puede emerger ira ante resultados negativos o fortuna y gratitud ante los positivos. Tabla 2. Propuestas para favorecer atribuciones positivas. Fuente: elaboración propia. De este análisis se desprende que los problemas más graves de motivación se dan cuando los fracasos son atribuidos a causas externas e incontrolables. Esa falta de control puede conllevar depresión, apatía, resignación al fracaso, indefensión aprendida, impotencia o carencia de motivación (Paz-Guerra y Bernardo-Peña, 2021). Las atribuciones también se pueden explicar desde una dimensión cognitiva por la Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 31 Ideas clave forma de elaborar el pensamiento, pero se hallan muy determinadas por la personalidad del individuo y por la tendencia al prejuicio, dadas por transmisión social. Ansiedad Esta variable de personalidad puede diferenciarse entre ansiedad estado (manifestación puntual ante determinadas situaciones y como factor emocional) o ansiedad rasgo (característica del individuo). La ley de Yerdes Dodson (Woolfolk, 1990) identifica una relación curvilínea entre ansiedad y rendimiento. A mayores niveles de ansiedad, peor rendimiento se espera; sin embargo, los niveles moderados de ansiedad incrementan el rendimiento. En general, puede decirse que la ansiedad elevada dificulta numerosas actividades de la vida cotidiana, especialmente en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Paz Guerra y Bernardo Peña (2021) describieron cómo estudiantes con elevados niveles de ansiedad rasgo mostraban más dificultad para atender a detalles significativos, tenían mayor tendencia a centrarse en pensamientos negativos y a manifestar conductas empobrecidas por el miedo a ser juzgados. Además, obtenían puntuaciones más bajas en exámenes de aptitud intelectual, en tareas complejas o en tareas que no se han practicado previamente. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 32 Ideas clave La ansiedad se puede manifestar en cualquier tarea, pero es más notoria ante la realización de exámenes. Los resultados pueden observarse desde dos dimensiones: ▸ La emocionalidad (reacciones fisiológicas ante la percepción de una amenaza, como la agitación cardíaca o la sudoración). ▸ La preocupación (anticipación negativa, falta de control y de creencia en la propia actuación). Tabla 3. Propuestas para disminuir la ansiedad. Fuente: elaboración propia. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 33 Ideas clave En el vídeo Variables de personalidad y orientación laboral, se profundiza en el desarrollo vocacional de una profesión en función de sus características de personalidad. Además, se destaca cómo desde algunas profesiones se demanda una serie de habilidades personales. Variables de personalidad y orientación laboral Accede al vídeo: https://unir.cloud.panopto.eu/Panopto/Pages/Embed.aspx?id=8f510645-4cde4832-8b2f-b0b90122eee9 Trastornos de la personalidad En este tipo de trastornos, es difícil delimitar los límites de sus alteraciones para determinar un diagnóstico debido a que la personalidad en el niño se halla en constante desarrollo y pueden existir conductas alteradas por factores personales o contextuales como respuesta a acontecimientos o situaciones vitales que se escapan de su control (Sánchez-Manzano, 2003). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 34 Ideas clave Desde la psicología, se incorpora un valor añadido a la educación al aportar sus conocimientos sobre los factores que inciden en los procesos de aprendizaje, por lo que la atención a la diversidad y la detección de necesidades se vuelve más precisa. Pese a que se ha hallado que los rasgos de personalidad y el temperamento son relativamente estables en la vida, en su desarrollo intervienen aspectos biológicos, ambientales y la interacción entre ambos (Chess y Thomas, 1996; Moffitt et al., 2005), por lo que las experiencias vitales pueden colaborar significativamente en la expresión de algunos rasgos y afectar a la vida adulta, especialmente cuando estas experiencias son traumáticas (Roberts et al., 2008; Ruiz-Castañeda y GómezBecerra, 2012). Estas experiencias son factores de riesgo, como el abuso físico, el abuso sexual, la deprivación del afecto, la negligencia, el abandono, una situación familiar adversa o riesgo de exclusión social. Se asocian con trastornos posteriores de estrés postraumático, trastornos de la personalidad antisocial o trastornos límite de la personalidad, entre otros (Oldham, 2007; Pereda et al., 2011). Estos acontecimientos intervienen de manera adversa en un adecuado desarrollo de la personalidad porque perturban el bienestar personal y la correcta socialización del niño y del adolescente (Johnson et al., 2001). Por el contrario, las experiencias positivas pueden actuar como factores protectores e impulsores de rasgos positivos. Por ejemplo, un apego seguro y el afecto y calidez parental se asocian a la promoción de rasgos adaptativos, de la confianza y del altruismo (Sroufe et al., 1999). Como profesionales tendremos siempre en cuenta los contextos vitales y la historia personal de nuestro alumnado para comprender mejor sus necesidades y entenderemos que sus conductas son los síntomas de factores que los aquejan. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 35 Ideas clave En resumen, puede constatarse que las experiencias negativas durante la infancia y la adolescencia pueden alterar el desarrollo de la personalidad, siendo estas etapas la cuna para su desarrollo. En el inicio de la adolescencia, puede datarse el inicio diagnóstico de estos trastornos como entidad (Ruiz-Castañeda y GómezBecerra, 2012). No obstante, Silk (2008) indica que no debe etiquetarse al adolescente con una patología que le acompañe a lo largo de su vida. La propia evolución personal y el tratamiento psicoterapéutico pueden favorecerle y, pese a permanecer remanentes o residuales algunos de estos comportamientos, muchos criterios para el diagnóstico pueden incumplirse. Es importante, por lo tanto, hacer valoraciones en diferentes momentos vitales, puesto que algunos estudios longitudinales han hallado que solo el 21 % de los trastornos de personalidad se mantienen o incrementan en la etapa adulta (Cohen et al., 2005). Entre las mayores dificultades que podemos encontrar en la escuela con relación a la personalidad, Olivares et al. (2002) destacaron cómo algunos rasgos de personalidad promueven ciertos comportamientos. Entre ellos, la timidez se asociaba con una alta ansiedad social, el retraimiento y las conductas evitativas (Compton et al., 2000), siendo la fobia social la expresión más elevada e incapacitante de este rasgo (Chavira et al., 2001). Ambas manifestaciones generan efectos adversos sobre las relaciones sociales, pero la fobia social amplía el abanico de deterioro funcional de todas las áreas del desarrollo e interfiere abruptamente en la vida escolar; se asocia con la depresión e incluso con el consumo de sustancias (DeWitt et al., 1999). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 36 Ideas clave Algunos autores han determinado que el inicio de la fobia social puede situarse a partir de los catorce años (Olivares et al., 2002). Estos hallaron la eficacia de la intervención psicológica combinada con técnicas de entrenamiento en habilidades sociales, técnicas cognitivas y técnicas de exposición con modelado. La importancia de la detección temprana radica en el tratamiento precoz de la timidez para favorecer el curso personal del desarrollo hacia formas más adaptativas de expresión de este rasgo. El mejor abordaje se realiza desde el respeto por la personalidad de cada individuo, la inducción a la participación, la facilitación de espacios y oportunidades de cooperación y el diseño de actividades exitosas para dar solidez al autoconcepto, a la autoestima y generar confianza en sí mismo. También se ha descrito el trastorno negativista desafiante en la infancia como uno de los trastornos del comportamiento más significativos en el deterioro académico y de las relaciones sociales y como base de la degeneración para el desarrollo de este tipo de patologías durante la adolescencia y la etapa adulta (Torales et al., 2018). Las dimensiones que describen este trastorno son la irritabilidad, la actitud desafiante y la conducta vengativa. Entre los factores biológicos, se puede describir un temperamento difícil, mientras que en los psicológicos se hallan dificultades asociadas a un apego inseguro y con negligencia en el cuidado parental con patrones rígidos, agresivos e inconsistentes (Vásquez et al., 2010). A nivel social se hallan factores relacionados con bajos niveles socioeconómicos y entornos violentos (de la Peña-Olvera y Palacios-Cruz, 2011). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 37 Ideas clave Estos niños manifiestan problemas de relación con iguales, poca tolerancia a la frustración, baja autoestima, humor deprimido, escasa participación en la vida escolar, bajo rendimiento y grandes dificultades en lecto-escritura y matemáticas (Blair et al., 2014). Muestran un comportamiento claramente disruptivo, tienen problemas para controlar el temperamento, agreden con facilidad y no respetan las normas ni las figuras de autoridad (Torales et al., 2018). Para estos autores es de rigurosa necesidad la detección y psicoterapia, contando con agentes sanitarios y sociales de apoyo. En función de la gravedad de las manifestaciones en el aula, es posible contar con la figura permanente de un educador. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 38 Ideas clave 6.4. Intervención en el aula Es importante que contribuyamos al manejo de la ansiedad, permitiendo a los estudiantes plantear metas realistas a corto plazo y comenzar con tareas de fácil consecución, lo cual ayudará a sumar una satisfacción que invite a continuar invirtiendo un progresivo esfuerzo. Igualmente, es necesario adaptar su ritmo a sus necesidades sin ser apremiados con tiempos. Anteriormente, hemos podido analizar la importancia del juego en el desarrollo infantil, especialmente porque es la herramienta más versátil, a través de la cual el niño socializa con sus iguales, interactúa con adultos, establece vínculos afectivos, experimenta en su entorno y simboliza modelos y acciones. Gracias al juego, los niños comparten espacios y objetos, comprenden reglas, siguen pautas, respetan prohibiciones, reparten roles, asumen personalidades y escenifican diferentes facetas, mediante las cuales adoptan valores y aprenden comportamientos socialmente aceptados, colaborando y compitiendo. Constituye un elemento fundamental para el desarrollo de su personalidad en la medida en que expresa su ser y ensaya otras manifestaciones. Estos intercambios colaboran en la reestructuración cognitiva constante, generando nuevos recursos cognitivos (Lacunza y Contini de González, 2009; López, 2010). El juego está presente a lo largo de toda la vida del ser humano y en cada etapa adquiere una forma, pero siempre tiene un significado adaptativo. Por todo ello, podemos considerar el juego como una herramienta más potente que la estructura del aprendizaje, fundamentalmente en los primeros años de vida. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 39 Ideas clave En la escuela es fundamental que los agentes educativos cuenten con formación para el diseño de herramientas lúdico-pedagógicas, por lo que se crean escenarios de formación para enriquecer los procesos de socialización y cognitivos, básicos en la forja de la personalidad. Garaigordobil (2005) elaboró una serie de programas adecuados a las diferentes etapas educativas a través de juegos cooperativos y creativos. El objetivo era incorporarlas a las aulas que pueden incluir elementos del currículo y favorecer, así, el interés por el aprendizaje, fomentando la motivación intrínseca. La gamificación del aprendizaje genera una participación dinámica, incrementando el esfuerzo de los estudiantes (Albán-Obando y Calero-Mieles, 2017). Consulta el apartado A fondo para conocer estos programas. Al igual que estas formas metodológicas, podemos citar otras herramientas que favorecen la optimización de variables personales implicadas en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Es el caso de las técnicas de relajación, que han resultado muy útiles en la percepción de autocontrol, en el manejo de la ansiedad y en la activación de los recursos internos de los estudiantes (Delgado et al., 2010; Schonert-Reich y Lawlor, 2010). Amutio-Kareaga et al. (2015) mostraron en un estudio que la técnica de mindfulness incrementaba los niveles de autoeficacia en el rendimiento y en el estrés percibido. Aplicando esta técnica, Beaucheim et al. (2008) hallaron un incremento en las habilidades sociales y una significativa mejora en el rendimiento y en el autoconcepto, así como una disminución en la ansiedad rasgo de estudiantes de bachillerato. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 40 Ideas clave También es interesante facilitar un ambiente distendido y participativo donde se fomenten relaciones de intercambio de opiniones, conversaciones, diálogos, escucha, respeto y aceptación, creando espacios para el debate donde practicar la modulación del tono para la expresión (Páez-Guzmán, 2012). Entre los estudiantes se generan afinidades y pequeñas complicidades que son importantes reforzar positivamente para favorecer la colaboración y el trabajo en grupo (Messetti et al., 2016). Esto es importante porque fomenta la identificación e incrementa la motivación hacia el trabajo compartido (Padilla-Herrada, 2016). Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 41 Ideas clave 6.5. Instrumentos para la valoración de la personalidad Existen numerosos cuestionarios que miden los rasgos de la personalidad y son de utilidad clínica-diagnóstica para el tratamiento de patologías, pero algunos tienen una gran validez educativa y serán expuestos en la siguiente tabla: Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 42 Ideas clave Tabla 4. Cuestionarios de personalidad. Fuente: elaboración propia. Psicología de la Educación Tema 6. Ideas clave © Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) 43 Ideas clave 6.6. Referencias bibliográficas Abella, V. y Bárcena, C. (2014). PEN, modelo de los Cinco Factores y problemas de conducta en la adolescencia. 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