Tema 9: La Inteligencia

La inteligencia es una capacidad cerebral que se encuentra en diferentes áreas del cerebro, con un foco en la corteza prefrontal.

La corteza prefrontal, ubicada en la parte frontal del cerebro, es responsable de la planificación, el control de los impulsos y la memoria a corto plazo.

La inteligencia se relaciona con la velocidad y eficiencia con la que procesamos la información. Las personas con agilidad mental suelen ser más rápidas.

La inteligencia no se limita a la velocidad de pensamiento, hay otros factores en juego.

Una medida sistemática que cuantifica las diferencias en la inteligencia entre las personas.

Wilhelm Stern creó el concepto del cociente intelectual (CI) en 1912.

La edad mental se refiere al rendimiento promedio de una persona en una prueba de inteligencia, asociado a su edad cronológica.

La Escala de Inteligencia de Wechsler para Adultos (WAIS-IV) es una de las pruebas de CI más empleadas para evaluar la inteligencia en adultos.

La WAIS-IV es una prueba que evalúa la inteligencia en cuatro áreas cognitivas: comprensión verbal, razonamiento perceptivo, memoria de trabajo y velocidad de procesamiento. También ofrece una puntuación general que representa la inteligencia general (CI).

La WISC es una prueba de inteligencia para niños y adolescentes que evalúa diferentes áreas como comprensión verbal, razonamiento perceptivo, memoria de trabajo y velocidad de procesamiento.

La WPPSI es una prueba de inteligencia para niños de preescolar y primaria que evalúa diferentes áreas como comprensión verbal, razonamiento perceptivo, memoria de trabajo y velocidad de procesamiento.

La prueba Stanford-Binet, una versión en inglés de la prueba de Binet y Simon, evalúa la inteligencia a través de varias tareas que incluyen vocabulario, memoria, denominación de objetos, repetición de frases and seguir instrucciones.

La prueba de Matrices Progresivas de Raven es un test de inteligencia que no se basa en el lenguaje. Evalúa la inteligencia a través de tareas visuales, midiendo la capacidad de razonamiento abstracto.

Las personas que no dominan el idioma en el que está escrita una prueba de inteligencia pueden obtener puntuaciones más bajas debido a dificultades para entender las instrucciones y preguntas.

La familiaridad con los materiales y el contexto cultural influye en el rendimiento en las pruebas de inteligencia.

Las pruebas de inteligencia que se basan demasiado en el lenguaje pueden ser injustas para las personas que no dominan el idioma de la prueba.

La puntuación del CI no permanece constante a lo largo del tiempo. Puede variar hasta 10 puntos en unos meses.

El CI generalmente se mantiene estable en la edad adulta. La excepción es antes de los 2 o 3 años, donde las pruebas no son confiables.

Las puntuaciones del CI antes de los 2 o 3 años no son un indicador confiable del desarrollo futuro, excepto en casos de puntuaciones inferiores a 50, que pueden sugerir un retraso cognitivo.

La validez predictiva de un test se refiere a su capacidad para predecir resultados futuros.

Las puntuaciones del CI generalmente predicen el éxito académico, con una correlación cercana al 0,5 en la escuela secundaria y la universidad.

El éxito escolar depende no solo del CI, sino también de otros factores como la motivación, la curiosidad intelectual y el esfuerzo.

El CI puede predecir el rendimiento en una amplia gama de profesiones, con una correlación promedio de 0,5.

El CI también se relaciona con eventos en la vida real, como los accidentes de tráfico y la salud. Una parte de la correlación entre CI y enfermedad puede explicarse por la falta de competencia en salud, es decir, la dificultad para comprender información relacionada con la salud.

Un puntaje de CI por debajo de 70, acompañado de dificultades para vestirse, comer, comunicarse u otras habilidades básicas para la vida diaria.

Tres criterios esenciales son: (1) aparición antes de la edad adulta, (2) CI inferior a 70, y (3) dificultades en el funcionamiento adaptativo.

Las personas con retraso cognitivo leve pueden integrarse en clases regulares con estudiantes con un desarrollo típico.

Un puntaje de CI por encima de 130, asociado con habilidades cognitivas excepcionales.

Los factores genéticos juegan un papel importante en la genialidad, pero el trabajo duro es fundamental para el éxito en un área específica.

Cantidad de tiempo dedicada a la práctica predice el éxito en áreas como violín, piano, ballet, ajedrez y deportes.

La práctica podría mejorar el talento, o el talento puede incentivar a la persona a practicar más.

La cantidad de tiempo dedicada a la práctica puede ser la causa del éxito, o el talento puede llevar a más tiempo de práctica.

Las personas con alfabetización funcional limitada pueden tener dificultades para mantener hábitos de salud como hacer ejercicio, comer bien o tomar medicamentos correctamente.

La inteligencia se ha asociado con una menor probabilidad de delincuencia. Los adolescentes delincuentes tienden a tener puntajes de CI alrededor de 7 puntos más bajos que otros adolescentes.

El CI se asocia negativamente con la clase social y económica. Las personas con menos recursos tienden a tener puntajes de CI más bajos. Esto sugiere que la pobreza, más que el CI, podría explicar algunos de los patrones observados.

Los investigadores han estudiado si la correlación entre el CI y otros factores persiste incluso después de considerar el ingreso.

La distribución de los puntajes de CI en una población sigue una curva normal o de campana. La mayoría de los puntajes se concentran en el centro y disminuyen gradualmente hacia los extremos de la curva.

Alrededor del 95% de las personas tiene puntajes de CI entre 70 y 130.

Los individuos con puntajes de CI muy bajos pueden experimentar dificultades o limitaciones cognitivas, mientras que aquellos con puntajes de CI extremadamente altos pueden tener habilidades cognitivas excepcionales.

La genialidad se define como un talento o habilidad intelectual extraordinarios.

Los estudios con gemelos idénticos y mellizos ayudan a comprender la influencia de la genética y el ambiente en la inteligencia. Al comparar las correlaciones en las puntuaciones de CI, se observa que los gemelos idénticos, que comparten el 100% de su material genético, tienen correlaciones más altas que los mellizos, que comparten el 50%. Esto sugiere que los genes juegan un papel importante en la inteligencia.

Aunque los estudios de gemelos indican un papel importante de los genes en la inteligencia, la correlación entre gemelos idénticos no llega a ser 1.0. Esto implica que el ambiente también influye en la inteligencia, aunque no se sabe exactamente cómo.

Los estudios de adopción muestran que el ambiente tiene un impacto importante en la inteligencia. Los niños adoptados de entornos desfavorecidos a hogares más enriquecidos muestran un aumento en su coeficiente intelectual.

Los niños adoptados tienden a tener CI más cercano al de sus padres biológicos, lo que refuerza la idea de una influencia genética importante en la inteligencia.

Los psicólogos buscan las variables que podrían explicar la influencia del ambiente en la inteligencia. La educación, la nutrición, las relaciones sociales y las experiencias tempranas son factores prometedores.

Los años de escolarización tienen una correlación significativa con la puntuación del CI, lo que sugiere que la educación puede influir en la inteligencia. Sin embargo, también es posible que las personas con CI más alto simplemente prefieran ir a la escuela por más tiempo.

Las intervenciones educativas tempranas, especialmente en entornos desfavorecidos, pueden tener un impacto positivo en la inteligencia de los niños. Estas intervenciones buscan estimular el desarrollo cognitivo y crear oportunidades de aprendizaje.

Aunque la influencia genética es un factor importante, los estudios de adopción y las correlaciones entre gemelos sugieren que el ambiente también plays a crucial role in shaping intelligence. Further research is necessary to determine the precise nature of this influence.