RRTO 1924_2006 PROPIEDADES SALUDABLES

El Reglamento armoniza las leyes de los países de la Unión Europea sobre declaraciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos.

El Reglamento se aplica a las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables que se hacen en las comunicaciones comerciales de los alimentos.

El Reglamento cubre las declaraciones de propiedades saludables de los alimentos envasados, ya sean vendidos al consumidor final o a servicios de restauración colectiva.

El Reglamento no se aplica a las declaraciones nutricionales de alimentos no envasados previamente (como frutas y verduras) si se venden directamente al consumidor o a servicios de restauración colectiva.

El Reglamento se aplica a los alimentos suministrados a restaurantes, hospitales, escuelas, etc.

Una marca registrada, un nombre comercial o una denominación de fantasía en un alimento puede interpretarse como una declaración nutricional o de propiedades saludables.

Si una marca es considerada una declaración nutricional, debe cumplir con las disposiciones del presente Reglamento.

El Reglamento se aplicará hasta que se adopten medidas comunitarias que lo modifiquen.

Un mensaje o representación que no es obligado por la ley, puede ser una imagen, gráfico o símbolo que indica una característica particular del alimento.

Proteínas, hidratos de carbono, grasas, fibras, sodio, vitaminas y sales minerales, así como sustancias que pertenecen a estas categorías.

Cualquier sustancia que no sea un nutriente, pero tiene un efecto en la nutrición o fisiología del cuerpo.

Afirma, sugiere o da a entender que un alimento tiene propiedades nutricionales beneficiosas relacionadas con el contenido de energía, nutrientes o otras sustancias.

Afirma que una relación existe entre un alimento o sus componentes y la salud.

Declaración de propiedades saludables que afirma que un alimento puede reducir significativamente un factor de riesgo para una enfermedad humana.

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria es la responsable de evaluar la seguridad y la eficacia de las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables.

Las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables deben ser ciertas y no engañosas en el etiquetado, presentación y publicidad de los alimentos.

Una declaración no debe dar lugar a dudas sobre la seguridad o la adecuación nutricional de otros alimentos.

Son declaraciones que afirman que un alimento tiene una característica nutricional específica, como ser bajo en grasa o alto en fibra.

Son declaraciones que afirman que un alimento tiene un efecto beneficioso para la salud, como ayudar a reducir el colesterol o fortalecer el sistema inmunológico.

Establece las reglas para las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos en la Unión Europea.

Se refiere a la cantidad de un nutriente específico que se encuentra en un alimento.

Es la cantidad de un nutriente que se debe consumir para satisfacer las necesidades diarias.

Se refiere a la situación donde una declaración nutricional o de propiedades saludables se permite a pesar de que no cumple con el perfil nutricional establecido.

Es un procedimiento que utiliza la Comisión Europea para modificar las regulaciones existentes. Requiere una votación por parte de los estados miembros y la aprobación de la Comisión.

Indica que el alimento contiene una cantidad alta de un nutriente específico.

Se refiere a la información que se presenta en el envase de un alimento, como la lista de ingredientes y la información nutricional.

Indica la presencia de una cantidad reducida de un nutriente específico en un alimento.

Indica que una determinada característica nutricional o efecto saludable solo es aplicable a una categoría específica de alimento.

Son las instituciones o los grupos que tienen un interés en la elaboración de una norma o regulación.

Son las empresas que producen alimentos.

Se refiere a la información sobre el contenido nutricional de un alimento, como la cantidad de grasa, azúcar y sal.

Se refiere a la capacidad de un alimento para causar un efecto beneficioso para la salud.

Es necesario indicar la importancia de una dieta variada y equilibrada, así como un estilo de vida saludable.

Se debe especificar la cantidad de alimento y el patrón de consumo necesarios para obtener el beneficio declarado por la propiedad saludable.

Se debe advertir si ciertos grupos de personas deben evitar el consumo del alimento.

Se debe incluir una advertencia adecuada para productos que pueden ser dañinos si se consumen en exceso.

Las referencias generales al bienestar pueden usarse si se acompañan de una declaración específica de propiedad saludable, como las incluidas en el artículo 13 o 14.

Las normas nacionales pueden aplicarse a las recomendaciones de asociaciones de profesionales de la salud, en ausencia de una normativa comunitaria específica.

Las declaraciones de propiedades saludables que sugieran que la salud se ve afectada al no consumir el alimento no están permitidas.

Las declaraciones que hacen referencia al ritmo o la magnitud de la pérdida de peso no están permitidas.

Las declaraciones que mencionan recomendaciones de médicos individuales u otros profesionales de la salud no mencionados en el artículo 11 no están permitidas.

Se pueden hacer declaraciones sobre la función de nutrientes en el crecimiento, desarrollo, funciones corporales, psicológicas y conductuales, sin necesidad de procedimientos especiales, siempre que se cumplan ciertos criterios.

Las declaraciones sobre funciones de nutrientes deben basarse en pruebas científicas generalmente aceptadas y ser fáciles de entender para el consumidor promedio.

La Comisión creará una lista comunitaria de declaraciones permitidas sobre funciones de nutrientes, basada en pruebas científicas y consultas.

Las declaraciones de reducción del riesgo de enfermedad y las relacionadas con el desarrollo y la salud de los niños deben ser autorizadas mediante un procedimiento específico antes de ser incluidas en una lista comunitaria.

Las declaraciones de reducción del riesgo de enfermedad y las relacionadas con el desarrollo y la salud de los niños requieren autorización para su inclusión en una lista comunitaria de declaraciones permitidas.

Para que una declaración nutricional o de propiedades saludables sea permitida, la presencia, ausencia o cantidad reducida de un nutriente u otra sustancia debe tener un beneficio nutricional o fisiológico demostrado científicamente.

El nutriente o sustancia involucrada en la declaración debe estar presente en el producto final en una cantidad significativa que produzca el efecto nutricional o fisiológico declarado. En otras palabras, la cantidad debe ser lo suficientemente alta para tener un impacto.

El nutriente o sustancia sujeto a la declaración debe ser fácilmente absorbido por el organismo. No basta con que esté presente, debe ser aprovechable por el cuerpo.

La cantidad de producto que una persona consumiría normalmente debe proporcionar una cantidad significativa del nutriente o sustancia para producir el efecto nutricional o fisiológico declarado.

Las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables deben estar respaldadas por pruebas científicas generalmente aceptadas. Esto significa que la evidencia debe ser confiable y proveniente de fuentes confiables.

Las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables deben ser fáciles de entender para el consumidor promedio. La información debe ser clara y precisa para que el consumidor pueda tomar decisiones informadas.

El etiquetado nutricional obligatorio debe incluir la información nutricional especificada para los alimentos que hacen una declaración nutricional o de propiedades saludables.

Las declaraciones nutricionales deben estar enumeradas en un anexo del Reglamento y cumplir con las condiciones específicas establecidas en el mismo.

Las declaraciones nutricionales comparativas permiten comparar un alimento con otros de la misma categoría. La comparación debe ser justa y referir a la misma cantidad de alimento.

Para que una declaración de propiedades saludables sea permitida, debe cumplir con los requisitos generales y específicos establecidos en el Reglamento y estar incluida en una lista de declaraciones autorizadas.

El explotador de una empresa alimentaria que utiliza una declaración nutricional o de propiedades saludables debe tener evidencia para respaldar su uso. Las autoridades pueden solicitar dicha evidencia.

El Reglamento armoniza las leyes de la Unión Europea sobre las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos para facilitar el comercio dentro de la UE.

Además de los requisitos generales, las declaraciones de reducción del riesgo de enfermedad deben mencionar que la enfermedad tiene múltiples factores de riesgo y que la alteración de uno de ellos puede o no tener un efecto positivo.

La solicitud de autorización de una declaración de propiedades saludables se envía a la autoridad nacional competente de un Estado miembro.

La autoridad competente acusa recibo de la solicitud en un plazo de 14 días y la envía a la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).

La solicitud debe incluir información como el nombre del solicitante, el alimento en cuestión, los estudios científicos realizados y la redacción propuesta de la declaración.

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) evalúa la solicitud y emite un dictamen en un plazo de cinco meses, que puede ampliarse a siete meses si se solicita información adicional.

La EFSA verifica que la declaración de propiedades saludables se basa en pruebas científicas y se ajusta a los criterios establecidos en el Reglamento.

En caso de dictamen favorable, la EFSA incluye la redacción propuesta de la declaración, las condiciones de uso y posibles restricciones.

La EFSA envía su dictamen a la Comisión Europea, a los Estados miembros y al solicitante, incluyendo un informe con su evaluación y motivación.

La Comisión Europea, tras recibir el dictamen de la EFSA, prepara un proyecto de decisión sobre la autorización de la declaración de propiedades saludables.

La Comisión presenta su proyecto de decisión al Comité Permanente de la Cadena Alimentaria y de la Salud Animal para su aprobación.

Si la Comisión aprueba la declaración, se autoriza su uso en los alimentos en la Unión Europea.

La Comisión establece normas para el desarrollo del procedimiento de solicitud de autorización, incluyendo la preparación y presentación de la solicitud.

La Comisión proporciona orientación técnica y herramientas para ayudar a los operadores de empresas alimentarias, especialmente a las PYME, en la elaboración y presentación de solicitudes de evaluación científica.

La Autoridad emite un dictamen que apoya la inclusión de la declaración en la lista, luego la Comisión debe tomar una decisión al respecto.

La Comisión tiene un plazo de dos meses para tomar una decisión sobre una solicitud, tras la recepción del dictamen de la Autoridad.

Si la Autoridad no apoya la inclusión de la declaración, la Comisión puede modificar el Reglamento para incluirla, pero con control.

Si el solicitante busca protección por derechos de propiedad industrial, la Comisión puede autorizar la declaración con una duración limitada.

La Comisión puede autorizar la declaración sin restricciones de uso, siempre que cumpla las condiciones del Reglamento.

Un usuario de una declaración puede solicitar modificar la lista a la que pertenece.

Los procedimientos para modificar una declaración siguen los mismos pasos que para incluir una nueva declaración

Cualquier empresa alimentaria puede usar una declaración de propiedades saludables, siempre que cumpla las condiciones establecidas.

La Comisión debe informar al solicitante sobre la decisión tomada en relación con una solicitud.

La información sobre la decisión debe hacerse pública en el Diario Oficial de la Unión Europea.

La Comisión transmitirá una explicación si el proyecto de decisión no concuerda con el dictamen de la Autoridad.

Si un proyecto de decisión modifica la lista de declaraciones de propiedades saludables, se debe incluir información específica.

Los solicitantes pueden pedir que se limite el uso de la declaración para proteger la propiedad industrial.

La concesión de una autorización no exime a la empresa alimentaria de su responsabilidad por el alimento.

Toda empresa puede solicitar la inclusión de una declaración en la lista de propiedades saludables.

La solicitud se presenta a la autoridad competente nacional, la cual la envía a la Autoridad para su evaluación.

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) emite un dictamen para verificar si una declaración de propiedades saludables cumple con los requisitos del Reglamento.

El dictamen de la EFSA se envía a la Comisión Europea, los Estados miembros y al solicitante de la declaración de propiedades saludables.

La EFSA publica su dictamen para que el público pueda acceder a él y ofrecer comentarios.

La Comisión Europea evalúa el dictamen de la EFSA y los comentarios recibidos del público.

Si fuese necesario, la Comisión puede modificar, suspender o revocar la autorización de una declaración de propiedades saludables.

La Comisión crea y mantiene un registro de declaraciones nutricionales y de propiedades saludables, donde se recopila información clave sobre su autorización.

El registro incluye las declaraciones nutricionales autorizadas, sus condiciones de uso y las declaraciones de propiedades saludables autorizadas, incluyendo las restricciones y rechazos.

El registro también incluye una lista de las declaraciones de propiedades saludables que fueron rechazadas, junto con los motivos de su rechazo.

Las declaraciones de propiedades saludables basadas en datos protegidos por derechos de propiedad industrial se incluyen en un anexo separado del Registro.

La Comisión autoriza las declaraciones de propiedades saludables que utilizan datos con protección industrial con ciertas restricciones de uso.

La Comisión puede autorizar una declaración de propiedades saludables por un período limitado, si se cumplen ciertas condiciones.

Los datos científicos y la información de una solicitud no pueden ser reutilizados por otros solicitantes durante un período de cinco años.

Excepto si el solicitante original da su consentimiento, o si otros solicitantes demostrarían que la declaración de propiedades saludables podría haberse autorizado sin los datos originales.

Los Estados miembros no pueden restringir el comercio o la publicidad de alimentos basados en un reglamento armonizado.

Un Estado miembro puede notificar a la Comisión y a los demás Estados miembros si considera necesario adoptar nueva legislación.

La Comisión puede consultar al Comité Permanente de la Cadena Alimentaria y de Sanidad Animal para obtener un dictamen sobre la nueva legislación propuesta.

Una etiqueta o frase que indica que un alimento tiene un contenido reducido en algún nutriente específico, por ejemplo, "bajo en grasas saturadas".

Un término usado para describir un producto que contiene menos del 30 % de ácidos grasos saturados y trans que un producto similar, siempre que el contenido de ácidos grasos trans sea igual o inferior.

Una declaración que solo se puede usar cuando el producto contiene al menos 0,3 g de ácido alfa-linolénico por 100 g y 100 kcal, o al menos 40 mg de la suma de ácido eicosapentanoico y ácido decosahexanoico por 100 g y 100 kcal.

Una declaración que se puede usar cuando el producto contiene al menos 0,6 g de ácido alfa-linolénico por 100 g y 100 kcal, o al menos 80 mg de la suma de ácido eicosapentanoico y ácido decosahexanoico por 100 g y 100 kcal.

Una declaración que indica que al menos el 45 % de los ácidos grasos presentes en el producto proceden de grasas monoinsaturadas y que estas grasas aportan más del 20 % del valor energético del producto.

Una declaración que indica que al menos el 45 % de los ácidos grasos presentes en el producto proceden de grasas poliinsaturadas y que estas grasas aportan más del 20 % del valor energético del producto.

Una declaración que se puede usar cuando al menos el 70 % de los ácidos grasos presentes en el producto proceden de grasas insaturadas y estas grasas aportan más del 20 % del valor energético del producto.

Una declaración que significa que un producto contiene una cantidad menor de un nutriente específico en comparación con un producto similar. Se debe indicar qué característica del alimento lo hace 'light' o 'lite'.

Una declaración que se puede usar cuando el contenido de azúcar en un alimento es igual o inferior al de un producto similar, sin importar la cantidad de contenido de azúcar.

Se puede usar antepuesto a cualquier otra declaración nutricional cuando el alimento cumple naturalmente con la condición o condiciones establecidas para el uso de dicha declaración.

Un Estado miembro puede suspender temporalmente la utilización de una declaración nutricional o de propiedades saludables en su territorio si tiene razones para creer que no cumple con el reglamento o si hay dudas sobre la evidencia científica que la respalda.

El estado miembro que suspendió la declaración debe informar a los demás estados miembros y a la Comisión sobre los motivos de la suspensión.

La Comisión puede iniciar el procedimiento para tomar una decisión sobre la suspensión de una declaración.

La decisión sobre la suspensión de una declaración se toma de acuerdo con el procedimiento establecido en el artículo 25 del reglamento.

El estado miembro puede mantener la suspensión hasta que se le notifique la decisión final.

El Comité asiste a la Comisión en la aplicación del reglamento.

El procedimiento para tomar decisiones basado en el artículo 25 del reglamento se aplica a las decisiones sobre las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables.

Para facilitar el seguimiento de los alimentos con declaraciones nutricionales o de propiedades saludables, los estados miembros pueden solicitar al fabricante que notifique la comercialización del producto.

La Comisión debe presentar un informe al Parlamento Europeo y al Consejo sobre la aplicación del reglamento a más tardar el 19 de enero de 2013.

El informe sobre la aplicación del reglamento debe incluir una evaluación del impacto en los hábitos dietéticos, la obesidad y las enfermedades no transmisibles.

Los productos que no cumplan con el reglamento pueden seguir comercializándose hasta su fecha de expiración, pero no más allá del 31 de julio de 2009.

Las marcas registradas o marcas existentes antes del 1 de enero de 2005 que no cumplan con el reglamento pueden seguir comercializándose hasta el 19 de enero de 2022.

Las declaraciones nutricionales que se utilizaban antes del 1 de enero de 2006 pueden seguir utilizándose hasta el 19 de enero de 2010.

Las declaraciones nutricionales en forma pictórica, gráfica o simbólica que cumplan con el reglamento pueden seguir usándose si se aprueban por un procedimiento específico.

Las declaraciones de propiedades saludables que cumplan con el reglamento pueden seguir utilizándose hasta la aprobación de una lista oficial.

Las declaraciones de propiedades saludables que se utilizaron antes de la entrada en vigor del reglamento, pero no están mencionadas en el artículo 13.1.a) o 14.1.a), están sujetas a este reglamento.

Un Estado miembro puede comunicar a la Comisión una declaración de propiedades saludables que ha sido evaluada y autorizada. Debe incluir un informe con evidencia científica.

La Comisión, después de consultar con la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, toma una decisión sobre cuáles declaraciones deben autorizarse, modificando el reglamento.

Las declaraciones de propiedades saludables que no fueron autorizadas por este procedimiento pueden seguir usándose durante un periodo de tiempo específico.

Las declaraciones de propiedades saludables que no fueron evaluadas en un Estado miembro pueden ser autorizadas si se solicita antes de una fecha límite.

Las declaraciones de propiedades saludables que no fueron autorizadas a través del procedimiento de solicitud pueden seguir usándose durante un tiempo limitado.

El Reglamento entrará en vigor 20 días después de ser publicado en el Diario Oficial de la Unión Europea.

Se aplicará a partir del 1 de julio de 2007.

El Reglamento es válido en todos sus elementos y aplicable en cada Estado miembro.

Las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables deben ser ciertas y no engañosas.

Las declaraciones no deben afectar a otros alimentos.

Un alimento puede ser considerado

Un alimento puede ser considerado

Un alimento puede ser considerado

Un alimento puede ser considerado

Un alimento puede ser considerado

Si un alimento contiene azúcares que están naturalmente presentes, el etiquetado debe indicar: "CONTIENE AZÚCARES NATURALMENTE PRESENTES".

Un alimento puede ser considerado "BAJO CONTENIDO DE SODIO/SAL" si no supera 0,12 g de sodio (o su equivalente en sal) por 100 g o 100 ml.

La declaración "MUY BAJO CONTENIDO DE SODIO/SAL" solo se puede utilizar si un alimento contiene un máximo de 0,04 g de sodio (o su equivalente en sal) por 100 g o 100 ml.

Un alimento puede ser etiquetado como "SIN SODIO o SIN SAL" solo si tiene una cantidad máxima de 0,005 g de sodio (o su equivalente en sal) por 100 g.

Para poder declararse "SIN SODIO O SIN SAL AÑADIDOS", un alimento no debe contener sodio/sal añadido. Además, la cantidad total de sodio debe ser menor a 0,12 g por 100 g o 100 ml.

Un alimento es considerado "FUENTE DE FIBRA" si contiene al menos 3 g de fibra por 100 g, o 1,5 g por 100 kcal.

Solo se puede declarar "ALTO CONTENIDO DE FIBRA" si el producto aporta 6 g o más de fibra por 100 g, o 3 g por 100 kcal.

Un alimento se considera "FUENTE DE PROTEÍNAS" si las proteínas aportan al menos el 12% del valor energético del alimento.

Un alimento puede ser considerado "ALTO CONTENIDO DE PROTEÍNAS" si las proteínas aportan al menos el 20% del valor energético del alimento.

Un alimento puede ser designado como "FUENTE DE [NOMBRE DE LAS VITAMINAS] Y/O [NOMBRE DE LOS MINERALES]" si aporta una cantidad significativa de estas sustancias.

Un alimento puede ser considerado "ALTO CONTENIDO DE [NOMBRE DE LAS VITAMINAS] Y/O [NOMBRE DE LOS MINERALES]" si contiene al menos el doble de la cantidad que se considera "fuente de" para esas vitaminas y/o minerales.

Se puede declarar que un alimento "CONTIENE [NOMBRE DEL NUTRIENTE U OTRA SUSTANCIA]" si cumple con los requisitos del reglamento, incluyendo el artículo 5.

Para poder usar la declaración "MAYOR CONTENIDO DE [NOMBRE DEL NUTRIENTE]", el alimento debe cumplir con los criterios de "fuente de" y adicionalmente, su contenido debe ser al menos un 30% mayor que un producto similar.

Se puede declarar "CONTENIDO REDUCIDO DE [NOMBRE DEL NUTRIENTE]" si la cantidad de ese nutriente se ha disminuido al menos un 30% en comparación con un producto similar.