Geografía e Historia de España

La influencia de la geografía en la historia de España

• La geografía es un factor fundamental que condiciona el desarrollo económico, cultural y demográfico de una sociedad.
• La Península Ibérica es la segunda península más grande de Europa, con una superficie de 583.000 km².
• La Península Ibérica tiene una forma maciza, con costas bastante rectas y sistemas montañosos que le dan un clima continentalizado.
• La Península Ibérica se divide en una periferia y una gran meseta central.
• La Meseta Central, rodeada de montañas y dividida por el Sistema Central, ocupa la mitad del territorio peninsular.
• La meseta central tiene un clima mediterráneo continentalizado con veranos cálidos, inviernos fríos y lluvias escasas.
• La orografía de la Península Ibérica dificulta el desarrollo económico debido a la falta de terrenos fértiles, complicando las comunicaciones y el comercio.
• Los Pirineos, en el noreste, crean una frontera natural con Francia dificultando el comercio y los intercambios, pero también actuando como barrera natural contra ataques extranjeros.
• La Cordillera Cantábrica en el norte, junto a los Montes Vascos y el Macizo Galaico-Leonés, permitió a los habitantes del lado litoral un desarrollo autónomo.
• Las cordilleras costeras catalanas, el Sistema Ibérico y la depresión del Ebro se encuentran en el noreste de la Península.
• La Cordillera Bética, que va desde el Estrecho de Gibraltar hasta la provincia de Alicante, alberga la montaña más alta de la península: el Mulhacén.

La hidrografía de la Península Ibérica

• Los ríos españoles, en general, son poco caudalosos e irregulares.
• La falta de caudal y de ríos navegables limita el transporte fluvial y el comercio.
• La escasa lluvia, la sobreexplotación de los acuíferos y la desertificación son problemas serios que se agravan con el cambio climático.
• La Meseta Central tiene una ligera inclinación al oeste, por lo que los ríos Duero, Tajo, Guadiana y Miño desembocan en el Atlántico.
• El río Duero fue una frontera natural entre los reinos cristianos y el Al-Andalus en el siglo X.
• El Valle del Guadalquivir, fértil y rico, ha sido históricamente una zona de gran importancia económica.
• El Ebro, el río más largo y caudaloso de España, nace en Cantabria y desemboca en la provincia de Tarragona.
• Los ríos de la vertiente mediterránea tienen un caudal más irregular.

Los recursos naturales de la Península Ibérica

• España carece de grandes recursos minerales y energéticos.
• La Península Ibérica era una importante fuente de plata y cobre para el Imperio Romano, pero la extracción de recursos no ha sido rentable.
• La falta de fuentes de energía baratas contribuyó a la tardía industrialización de España.
• La necesidad de importar energía exterior es alta, por lo que las energías renovables, especialmente la solar, representan una esperanza para la independencia energética.
• La energía hidroeléctrica aporta una cantidad importante de electricidad, pero con poco margen para crecer.
• La oposición popular a la energía nuclear ha impedido la construcción de nuevas centrales nucleares desde la década de 1980.

La diversidad natural de la Península Ibérica

• La orografía y la influencia del Mediterráneo, el Atlántico, Europa y África han dado lugar a una gran diversidad de paisajes, fauna y flora.
• La Península Ibérica posee desiertos, bosques densos, montañas nevadas y hermosas playas.
• Algunos ejemplos de la diversidad de la Península Ibérica son: la Selva de Irati en Navarra, Las Médulas en León, el Parque de Doñana, las Lagunas de Ruidera en Albacete, y el Salto del Nervión entre Burgos y Álava.