Evaluación de Agresores Sexuales

Evaluación del proceso de tratamiento

• La finalidad del proceso de evaluación es diversa, incluyendo la evaluación de la peligrosidad y la reincidencia, la clasificación penitenciaria y la programación del tratamiento más adecuado a cada caso.
• La evaluación se centra en la entrevista y la evaluación psicométrica, que incluye el análisis funcional de la conducta.

Análisis funcional de la conducta

• El análisis funcional de la conducta busca detectar los motivos que llevan a una persona a comportarse de forma violenta.
• También se busca identificar las situaciones en las que se produce la conducta violenta y qué elementos entran en juego en ella.
• Además, se analiza qué mantiene esa conducta violenta.

Entrevista

• La entrevista es una técnica de evaluación versátil que permite evaluar aspectos concretos del agresor y de la agresión sexual.
• La entrevista se utiliza para la determinación de la responsabilidad criminal y la planificación posterior de tratamientos dentro o fuera del ámbito penitenciario.
• El estado emocional del agresor en el primer contacto suele ser muy negativo, especialmente en casos de prisión preventiva.
• Es beneficioso comenzar la entrevista tratando cuestiones neutras para romper el hielo.

Proceso de evaluación de un agresor sexual

• El proceso de evaluación de un agresor sexual está condicionado por el contexto y el momento en el que se realiza, así como por las características del evaluado.
• El contexto en el que se realiza la evaluación es fundamental, ya que se produce casi siempre en un contexto forense o penitenciario.
• El momento en el que se realiza la evaluación también es importante, ya que en las fases iniciales de un procedimiento judicial la actitud del agresor suele ser muy defensiva.
• La negación de la responsabilidad en la agresión es un factor que condiciona la evaluación, ya que imposibilita comprender los factores que han conducido a la agresión sexual.

Objetivos de la evaluación del agresor sexual

• Establecer el alcance y la magnitud de la agresión sexual.
• Determinar si existe una amenaza social inmediata o a largo plazo (diagnóstico de peligrosidad y riesgo de reincidencia).
• Determinar si se puede modificar las cogniciones, actitudes, reacciones emocionales y conductas erróneas.