Estado Moderno y Liberal

Estado Moderno (Estado Liberal)

• El Estado Moderno, también conocido como Estado Liberal, se caracteriza por garantizar el cumplimiento de la ley y los derechos de los ciudadanos.
• Su función principal es garantizar el orden y la seguridad.
• La autoridad en este tipo de estado recae en funcionarios públicos, lo que despersonaliza el funcionamiento del estado.
• El Estado Moderno crea las condiciones para la ciudadanía.
• Los ciudadanos son considerados como sujetos con derechos, obligaciones y responsabilidades, lo que les otorga un papel importante en la sociedad.
• En comparación con el Estado Pre-Moderno, donde la autoridad recaía en el rey o el emperador y la población era considerada como súbditos o siervos, el Estado Moderno otorga mayor peso al ciudadano y la jerarquía del poder se redistribuye.

Bases valorativas para la construcción del Estado Moderno- Liberal: principio de legalidad

• Los valores que sustentan al Estado Moderno-Liberal son:
  • Naturalismo: "todos nacemos iguales", reconociendo la igualdad fundamental entre los individuos.
  • Racionalismo: promueve la capacidad de razonamiento y comunicación, así como la construcción de lo "Común".
  • Individualismo: enfatiza la libertad individual, que se reclama frente al Estado.
  • Contractualismo: la idea de que el poder del Estado proviene del consentimiento de los gobernados, lo que implica una limitación al poder y conduce a la soberanía popular y la igualdad originaria.

Pilar fundamental: Principio de Legalidad

• El principio de legalidad es crucial para el funcionamiento del Estado Moderno-Liberal.
• La autoridad del Estado está supeditada al cumplimiento de la ley, con la Constitución como norma máxima.
• El individuo tiene libertad para actuar siempre que la ley no lo prohíba.
• Los principios de igualdad y equidad complementan el principio de legalidad, garantizando que todos sean tratados por igual ante la ley.
• Es importante reconocer que, a pesar del principio de legalidad, es posible realizar actos injustos que sean legales.
• El principio de legalidad establece una separación entre la justicia y la ley.