Enfermedades Cardíacas: Endocarditis y Fiebre Reumática

Endocarditis infecciosa

La organización laxa de las lesiones permite que los organismos y los fragmentos de las lesiones se diseminen por la circulación sistémica.
Los estafilococos son la principal causa de endocarditis infecciosa.
El tratamiento de la endocarditis infecciosa se centra en la identificación y la eliminación del microorganismo causal.

Fiebre reumática

La fiebre reumática, relacionada con un antecedente de infección faríngea por estreptococos del grupo A, es una causa importante de cardiopatía.
Sus efectos más graves se deben al compromiso de las válvulas cardíacas.
No hay una prueba de laboratorio, signo o síntoma patognomónico de la fiebre reumática aguda.
Se utilizan los criterios de Jones para establecer el diagnóstico durante la fase aguda de la enfermedad.
Las estrategias de prevención primaria y secundaria se centran en el tratamiento antibiótico apropiado.

Cardiopatía valvular

Las válvulas cardíacas garantizan el flujo unidireccional de la sangre por las cámaras cardíacas.
La disfunción de las válvulas cardíacas puede ser consecuencia de defectos congénitos, traumatismos, daño isquémico, cambios degenerativos e inflamación.
Las válvulas mitral y aórtica son las más afectadas.
El prolapso de la válvula mitral es una causa frecuente de insuficiencia mitral.

Insuficiencia mitral aguda

La insuficiencia mitral aguda puede ocurrir de forma súbita, como en la disfunción del músculo papilar después de un infarto de miocardio, perforación valvular en la endocarditis infecciosa o rotura de las cuerdas tendinosas en el prolapso de la válvula mitral.
La sobrecarga de volumen aguda aumenta la precarga ventricular izquierda, lo que permite un aumento modesto en el volumen por latido del ventrículo izquierdo.
El volumen sistólico regurgitante produce un aumento rápido de la presión auricular izquierda, edema pulmonar y descenso del gasto cardíaco.
La insuficiencia mitral aguda casi siempre causa síntomas.
El reemplazo valvular suele ser necesario en casos graves.

Insuficiencia mitral crónica

Los cambios hemolíticos relacionados con la insuficiencia mitral crónica son más lentos, permitiendo la activación de mecanismos compensatorios.
El aumento en el volumen ventricular izquierdo al final de la diástole permite aumentar el volumen sistólico total, con restauración del flujo anterógrado hacia la aorta.
El aumento gradual en el tamaño del ventrículo izquierdo permite que se adapte al volumen regurgitante con una presión de llenado más baja.
El aumento en el trabajo por volumen relacionado con la insuficiencia mitral es relativamente bien tolerado.
Muchas personas con la alteración que permanecen asintomáticas durante muchos años desarrollan síntomas entre 6 y 10 años después del diagnóstico.
La cirugía debe realizarse antes de que aparezcan los síntomas.
Las manifestaciones características de la insuficiencia mitral son el crecimiento del ventrículo izquierdo, el impulso ventricular izquierdo hiperdinámico y un soplo pansistólico.
La insuficiencia mitral predispone a la fibrilación auricular.

Diagnóstico y tratamiento de la insuficiencia mitral

La ecocardiografía Doppler 2D es útil en la insuficiencia mitral para evaluar el tamaño del ventrículo y la aurícula izquierdos, medir la fracción de eyección y ayudar en la toma de decisiones sobre la cirugía mediante la valoración de la gravedad de la insuficiencia.
La reducción de la precarga puede ser beneficiosa y puede tratarse con inhibidores de la ECA y control del ritmo biventricular.
Las cirugías que se utilizan en el tratamiento de la insuficiencia mitral incluyen reparación y reemplazo valvulares, con o sin retiro del aparato mitral.
Se recomienda la cirugía valvular mitral en la insuficiencia mitral grave o en pacientes sintomáticos, cuando es posible subestimar la insuficiencia mitral.

Prolapso de la válvula mitral

En ocasiones denominado síndrome de válvula mitral floja, el prolapso mitral ocurre en el 1-2.5% de la población general.
La alteración es más frecuente en las mujeres que en los hombres y tiene una base familiar.
El prolapso mitral familiar se transmite como rasgo autosómico y se han identificado varios locus cromosómicos.
Aunque casi siempre se desconoce la causa de la alteración, se le asocia con síndrome de Marfan, osteogénesis imperfecta y otras alteraciones del tejido conjuntivo.

Patogenia del prolapso de la válvula mitral

Los hallazgos patológicos en las personas con prolapso de la válvula mitral incluyen la degeneración mixedema-tosa (mucinosa) de las valvas que aumenta su tamaño y las vuelve laxas, por lo que se prolapsan o regresan hacia la aurícula izquierda durante la sístole.
Los cambios fibróticos secundarios reflejan el estrés.
Ciertas formas de prolapso mitral pueden deberse a alteraciones miocárdicas que someten a la válvula mitral a un estrés excesivo por el movimiento anómalo de la pared ventricular o el músculo papilar.
El prolapso de la válvula mitral puede o no causar insuficiencia mitral.

Manifestaciones clínicas y diagnóstico del prolapso de la válvula mitral

La mayoría de las personas con prolapso de la válvula mitral permanecen asintomáticas.
Una minoría de los sujetos tienen dolor torácico semejante a angina, disnea, fatiga, ansiedad, palpitaciones y sensación de desmayo.
El dolor se atribuye a la isquemia causada por la tracción de las valvas prolapsadas.
La ansiedad, palpitaciones y arritmias pueden ser consecuencia de la función anómala del sistema nervioso autónomo que suele acompañar a la alteración.
La ecocardiografía Doppler y la 2D son estudios no invasivos valiosos para diagnosticar el prolapso de la válvula mitral.

Tratamiento del prolapso valvular mitral

El tratamiento del prolapso valvular mitral se enfoca en aliviar los síntomas y prevenir las complicaciones.
Las personas con palpitaciones y taquiarritmias leves o aumento de las manifestaciones adrenérgicas, así como aquellas con molestia torácica, ansiedad y fatiga, a menudo responden al tratamiento con bloqueadores ß-adrenérgicos.
Los accidentes isquémicos transitorios son más frecuentes en las personas con prolapso de la válvula mitral.
A la mayoría de los pacientes con prolapso mitral se les alienta a practicar ejercicio regular y llevar una vida normal.
Las personas que desarrollan disfunción valvular grave a veces requieren cirugía valvular.

Alteraciones valvulares aórticas

La válvula aórtica se localiza entre el ventrículo izquierdo y la aorta.
La válvula aórtica no tiene cuerdas tendinosas.
Un defecto valvular estenótico es el que causa una reducción de la circulación a través de la válvula.
La insuficiencia valvular permite que el flujo sanguíneo continúe cuando se cierra la válvula.
Las cardiopatías valvulares generan turbulencia en el flujo sanguíneo y, a menudo, se detectan en la auscultación cardíaca.

Insuficiencia cardíaca y choque circulatorio

La perfusión adecuada de los tejidos corporales depende de la capacidad de bombeo del corazón, de un sistema vascular que transporte la sangre a las células y de regreso al corazón, de sangre suficiente para llenar el sistema circulatorio y de los tejidos que son capaces de extraer y utilizar oxígeno y nutrientes de la sangre.
La insuficiencia cardíaca y el choque circulatorio son alteraciones independientes que reflejan una deficiencia del sistema circulatorio.
Ambas enfermedades exhiben mecanismos compensatorios comunes, a pesar de que difieren en términos de patogenia y causas.

Insuficiencia cardíaca en adultos

La insuficiencia cardíaca se define como un síndrome complejo debido a cualquier alteración funcional o estructural del corazón que provoca o incrementa el riesgo de desarrollar manifestaciones de gasto cardíaco bajo o congestión pulmonar o sistémica.
En los Estados Unidos, la insuficiencia cardíaca afecta a más de 5 millones de personas y tiene un costo de más de 30 mil millones de dólares cada año.
La insuficiencia cardíaca puede ocurrir a cualquier edad; sin embargo, afecta sobre todo a adultos mayores.