Compraventa Mercantil y sus Efectos

La compraventa es un contrato donde un vendedor se compromete a entregar una cosa a un comprador, a cambio de un pago.

La compraventa mercantil se aplica cuando la compra se realiza con el fin de lucrarse con la reventa de los bienes.

Las compraventas mercantiles se rigen por el Código de Comercio, mientras que las compraventas civiles se rigen por el Código Civil.

Los arts. 325 y 326 del Código de Comercio delimitan la compraventa mercantil.

La terminología en el C.de.c.es poco precisa, usando "compraventa", "compras" o "ventas" indistintamente.

Se considera mercantil la compra de bienes muebles con el objetivo de ganar dinero en la reventa.

Las compraventas internacionales de mercancías tienen reglas específicas, basadas en las Reglas de Viena.

Las compraventas con consumidores tienen normas adicionales para proteger los derechos del consumidor.

El Código de Comercio regula las compraventas mercantiles entre empresas.

Las ventas de empresas a consumidores o las ventas realizadas por artesanos, agricultores o ganaderos no se consideran compraventas mercantiles.

Las normas del Código de Comercio que regulan las compraventas mercantiles son de derecho dispositivo, lo que significa que las partes pueden modificarlas por acuerdo.

El Tribunal Supremo ha considerado algunos aspectos de la compraventa mercantil como de derecho imperativo, como los plazos de caducidad para reclamar defectos.

Las partes pueden usar normas internacionales para interpretar los términos comerciales, incluso en compraventas nacionales.

Los contratos de compraventa mercantil se perfeccionan con el consentimiento de las partes.

La exposición de productos en una tienda crea la obligación de venderlos al público que cumpla con las condiciones de compra.

Las partes pueden pactar una venta basada en una muestra o una calidad específica de mercancía, en este caso el vendedor se compromete a entregar mercancía similar a la muestra o de la calidad acordada.

En las ventas a ensayo, el comprador puede decidir si la mercancía cumple con sus necesidades.

El comprador tiene un derecho a desistir de la compra dentro de un plazo determinado en las ventas al detalle.

El vendedor tiene la obligación de entregar la cosa vendida en el lugar y tiempo acordados.

El vendedor está obligado a garantizar la cosa vendida contra vicios o defectos ocultos.

La obligación de garantía por evicción protege al comprador si pierde el derecho a la cosa vendida por un tercero que posee un derecho anterior.

El plazo para la entrega de las mercancías debe estar definido en el contrato o, en su defecto, se considera que el vendedor debe tener la mercancía a disposición del comprador dentro de las 24 horas siguientes al contrato.

El deber de notificar al vendedor cualquier vicio o defecto en la cosa adquirida dentro de un plazo determinado. Si no se cumple con esto, el comprador pierde el derecho a reclamar.

Se refiere a situaciones en las que la cosa entregada es igual a la acordada, pero tiene alteraciones inesperadas o no esperadas, como un vino que se agria tras el embotellado.

Se presenta cuando la cosa entregada no cumple con las características acordadas en el contrato. Ejemplo: recibir vino de 11 grados en lugar de 15.

Según el Código de Comercio, el comprador tiene un plazo corto (4 días para vicios aparentes y 30 días para vicios ocultos) para notificar al vendedor sobre cualquier vicio o defecto en la cosa adquirida.

Se refiere a vicios o defectos que son visibles y pueden ser detectados por el comprador en el momento de la entrega.

Se refiere a vicios o defectos que no son visibles en la entrega y solo se descubren con el uso o el paso del tiempo.

El comprador conserva el derecho a reclamar contra el vendedor si se ha notificado el vicio o defecto dentro del plazo establecido. Puede solicitar la resolución del contrato o su cumplimiento con la indemnización de daños y perjuicios.

El Código de Comercio flexibiliza las cláusulas de garantía, permitiendo que los plazos para notificar vicios se modifiquen por acuerdo entre las partes.

Se refiere a la garantía que se ofrece por escrito y que extiende la protección legal al consumidor. Debe especificar la duración, el alcance territorial y la naturaleza del bien.

La Ley de Consumidores impone una obligación más amplia al vendedor de entregar bienes conformes al contrato. Se trata de asegurar que el producto cumple con las expectativas del consumidor.

Fallas de conformidad con respecto a la descripción, uso o instalación del bien vendido, incluyendo la instalación incorrecta por parte del vendedor.

Se refiere a que el vendedor debe garantizar que el producto comprado tenga un buen funcionamiento por un cierto tiempo.

Las leyes que protegen a los consumidores establecen un régimen especial para las compraventas de productos. Las normas del Código de Comercio no se aplican en este caso, excepto en situaciones no cubiertas por la Ley de Consumidores.

Es un tipo de responsabilidad por la que el vendedor debe hacer frente a cualquier problema que surja del producto vendido al consumidor.

La Ley del Consumidor exige que el productor o importador del bien durable ofrezca servicio técnico y repuestos por al menos 5 años desde que deja de fabricarse.

El comprador está obligado a pagar el precio del bien, que debe ser verdadero, determinado y en dinero.

El pago del precio se realiza normalmente al contado o en plazos acordados por las partes.

A falta de acuerdo, el pago se realiza en el momento y lugar de la entrega.

En compraventas comerciales, el plazo de pago entre comerciante y proveedor, a falta de acuerdo, es de 30 días.

El comprador debe colaborar para la entrega de la mercancía.

Si el comprador se niega o retrasa la recepción sin justificación, el vendedor puede depositar judicialmente la mercancía.

La transmisión del riesgo es el momento en que el comprador asume la responsabilidad del bien, aunque no lo haya recibido.

En la compraventa de un bien determinado, el riesgo pasa al comprador cuando el vendedor pone el bien a su disposición.

En la compraventa de un bien genérico, el riesgo se transmite al comprador cuando se especifica la mercancía.

En una compraventa donde se permite examinar la mercancía, el riesgo no se transmite hasta que se examina.

El incumplimiento total consiste en la falta de entrega de la mercancía en el plazo acordado.

Si el vendedor solo entrega parte de la mercancía, el comprador tiene derecho a reclamar el cumplimiento total.

Si el vendedor entrega una cosa distinta a la pactada o con defectos graves, el comprador puede resolver el contrato.

El incumplimiento del comprador en el contrato puede incluir la falta de pago o la recepción de la mercancía.

Si el comprador no paga el precio en el momento debido, se considera en mora y debe pagar intereses al vendedor.

El vendedor tiene derecho a resolver el contrato y reclamar los daños y perjuicios si el comprador no paga el precio.

Si se acuerda el pago anticipado, el vendedor no está obligado a entregar la mercancía hasta que reciba el pago.

El vendedor tiene un derecho real sobre la mercancía en su posesión y puede venderla a un tercero para obtener el pago.

El vendedor tiene un crédito preferente por el importe del precio sobre la mercancía en poder del comprador.

El comprador se considera en mora si se niega a recibir la mercancía sin justa causa.

El vendedor puede depositar la mercancía judicialmente si el comprador se niega a recibirla.

El comprador debe pagar los gastos del depósito judicial si se niega a recibir la mercancía.