Comercio Electrónico: Conceptos Clave

Cualquier tipo de transacción comercial realizada a través de medios electrónicos, como ordenadores y redes de comunicación. Se caracteriza por la desmaterialización, la inmediatez, la sencillez y la universalidad.

Acuerdos legales realizados por medios electrónicos, donde la oferta y la aceptación se transmiten a través de dispositivos electrónicos conectados a redes.

Se refiere a la compraventa de bienes, servicios o contenidos digitales a través de sitios web interactivos.

Realización de contratos por medio de correo electrónico.

Contratos que se realizan en tiempo real a través de plataformas de chat, videoconferencia u otras herramientas digitales que permitan el almacenamiento de datos, o a través de dispositivos móviles (m-commerce).

El comercio electrónico ofrece numerosos beneficios en comparación con el comercio tradicional, incluyendo costos de implantación, intermediación y transacción más bajos.

El comercio electrónico fomenta la creación de nuevas empresas y mercados digitales, impulsando la innovación y el desarrollo de tecnologías.

El comercio electrónico ofrece a los consumidores una experiencia mejorada con acceso a una mayor variedad de productos y servicios, simplificando la compra.

Proveedores de espacio que alojan, almacenan y procesan información y contenidos a petición de los usuarios.

La LSSI no exige a los proveedores de hosting la obligación de supervisar el contenido almacenado.

Para que haya conocimiento efectivo de la ilicitud, la notificación debe identificar y ubicar claramente el contenido ilícito, y la ilicitud debe ser notoria.

El prestador de hosting debe actuar con prontitud para retirar el contenido ilícito o bloquear el acceso al mismo.

Estos son ejemplos de situaciones en las que el prestador de hosting no está exento de responsabilidad.

El prestador de hosting no es responsable del contenido almacenado a petición del usuario si no tiene conocimiento efectivo de su ilicitud o actúa con prontitud para retirarlo.

El prestador de hosting no es responsable si el usuario actúa bajo la autoridad o control del mismo.

Esto se refiere a la influencia del prestador de hosting sobre el usuario, como establecer precios, términos y condiciones, o tener trabajadores y bienes.

Cualquier servicio prestado a distancia, por vía electrónica y a petición del destinatario, normalmente a cambio de una remuneración. También incluye servicios no remunerados si constituyen actividades económicas para el prestador (por publicidad o por pago de visitas o cesión de datos).

En general, se permite el servicio de la Sociedad de la Información, pero existen excepciones como la protección de la salud, los derechos de propiedad intelectual, la infancia, entre otros.

La prestación del Servicio de la Sociedad de la Información no requiere una autorización previa.

La contratación de bienes o servicios por vía electrónica, la organización y gestión de subastas online, la gestión de compras grupales en línea, el envío de publicidad por internet y el suministro de información por vía telemática.

Servicios prestados por medio de telefonía vocal, fax o télex, el intercambio de información por email con fines no comerciales y los servicios de radiodifusión televisiva, sonora, teletexto, guías electrónicas de TV.

Un tipo específico de servicio de la Sociedad de la Información que facilita la prestación o utilización de otros servicios en línea o el acceso a información.

No se aplica a los contratos relacionados con el Derecho de Familia y Sucesiones.

Se aplican a los servicios de la sociedad de la información relacionados con los juegos de azar que impliquen apuestas de valor económico, con la excepción de lo dispuesto en el art. 7.1 LSSICE.

Se refiere a la responsabilidad legal que pueden tener los proveedores de servicios de intermediación en línea, como plataformas de alojamiento de contenido o servicios de almacenamiento en caché.

Los proveedores de contenido son responsables de los contenidos que suben o comparten en línea.

Los proveedores de servicios de intermediación son aquellos que facilitan la conexión entre usuarios, como por ejemplo plataformas de redes sociales, sitios web de comercio electrónico o plataformas de intercambio de archivos.

La responsabilidad civil de los prestadores de servicios de intermediación solo se extiende a las actividades de intermediación, no a los contenidos propios. Esto significa que no son responsables de los contenidos que los usuarios suben a sus plataformas.

Se refiere a la transmisión de datos a través de una red de telecomunicaciones, como internet, sin modificarlos o filtrarlos.

El almacenamiento automático, provisional y transitorio de datos, que permite una rápida entrega de contenido web a los usuarios.

La neutralidad del servicio implica que los proveedores de acceso a internet no están obligados a supervisar o filtrar el contenido que se transmite a través de sus redes.

Todos los medios de prueba aceptados en el ámbito jurídico son válidos para demostrar la existencia de un contrato, incluyendo los soportes electrónicos. Estos soportes electrónicos se consideran como prueba documental y tienen el mismo valor probatorio que un documento privado.

Para asegurar la autenticidad de un contrato electrónico, se debe verificar la manipulación del soporte electrónico. Esto se debe a la posibilidad de que el contenido del contrato electrónico pueda ser alterado.

Es la capacidad de un intermediario no infractor para ser parte de un proceso legal donde se le acusa de responsabilidad por el contenido de otros.

Cuando una parte en un contrato electrónico es un consumidor, se presume que el contrato se celebra en el lugar donde el consumidor tiene su residencia habitual. En el caso de contratos entre empresas, se presume que el contrato se celebra en el lugar donde está establecido el proveedor del servicio.

Las personas que firman un contrato electrónico deben tener la misma capacidad legal que si lo firmaran en papel. Sin embargo, es necesario considerar la vulnerabilidad de las personas que pueden estar en una situación de subordinación o desprotección.

El empresario debe proporcionar información mínima al consumidor antes, durante y después de la transacción electrónica, incluyendo características del producto, identidad del empresario, precio total, derecho de desistimiento, duración del contrato, condiciones de resolución, plataformas en línea y la información específica que se solicita. El incumplimiento de estas obligaciones es sancionable.

Para que un contrato electrónico sea válido, el consumidor debe dar su consentimiento expreso para la contratación. La falta de respuesta a una oferta de contratación no se considera aceptación.

La carga de la prueba recae en el empresario para demostrar que ha cumplido con las obligaciones de proporcionar información al consumidor antes, durante y después de la transacción electrónica.

Un modelo de negocio en el que se facilitan las actividades mediante plataformas colaborativas que crean un mercado abierto para el uso temporal de mercancías o servicios ofrecidos a menudo por particulares.

Un modelo de negocio sin ánimo de lucro, entre particulares, donde una plataforma intermedia la relación, pero con poca participación activa. Se intercambian recursos, como en Blablacar, pero sin ánimo de lucro.

Toda persona física o jurídica que utiliza un servicio intermediario, buscando información o servicios.

Servicio que facilita las transacciones entre usuarios, pero que es necesario para la relación.

Un usuario que actúa con un propósito ajeno a su actividad comercial o empresarial, contratando con un empresario.

Proveedor de bienes y servicios que no tiene una actividad comercial o empresarial habitual, pero puede tener ánimo de lucro si actúa como prosumer.

Proveedor de bienes y servicios que tiene una actividad comercial o empresarial habitual, con ánimo de lucro.

Un individuo que actúa como consumidor y proveedor a la vez, generalmente con fines de lucro.