Área 1: Crecimiento en Armonía

Área 1. Crecimiento en Armonía

• Se enfoca en el desarrollo personal y social del niño, inseparables y complementarios.
• Respeta los ritmos individuales de maduración.
• Promueve el bienestar mental, social y emocional.
• Se basa en la interacción con el entorno físico, natural y social.
• Incluye el desarrollo físico-motor, el autocontrol y la construcción de la identidad personal.
• Busca la progresiva autonomía del niño.
• Fomenta la participación en actividades que permitan la interacción social y el movimiento libre.
• Busca el dominio del propio cuerpo y la aceptación de limitaciones.

Competencias específicas

• Se centran en el desarrollo personal del niño, como la adquisición de autocontrol, la construcción de la identidad, el establecimiento de relaciones afectivas y la autonomía.
• Promueven la interacción social, enfatizando la importancia de relaciones sanas, sostenibles, igualitarias y respetuosas.

Saberes básicos

• Incluyen el desarrollo de la identidad personal en sus dimensiones física y afectiva.
• Priorizan el autocuidado y el cuidado del entorno.
• Fomentan la interacción con el medio cívico y social, trabajando las capacidades afectivas y emocionales para desarrollar una simbiosis entre pensamiento, emoción y acción.

El cuerpo como fuente de aprendizaje

• El cuerpo es un elemento fundamental para el aprendizaje, la relación y la expresión en las primeras etapas de desarrollo.
• El entorno escolar debe proporcionar un contexto adecuado y acompañamiento para que los niños descubran el placer de la actividad propia.
• Los educadores deben establecer un apego seguro con los niños, atendiendo a sus necesidades físicas, psicomotoras, de autonomía, socialización y afectivas.
• El control de esfínteres al final del primer ciclo representa un momento crucial en el desarrollo del niño, dado que contribuye a la autonomía corporal y emocional.
• La actividad motora evoluciona desde lo reflejo e involuntario hacia lo intencional, desarrollándose en paralelo al control del cuerpo.
• La adquisición de destrezas complejas se da a través de la utilización de instrumentos y herramientas en actividades cotidianas y juegos.

Desarrollo de la personalidad

• Se corresponde con la construcción de una identidad propia, diferenciada de la de los demás.
• La intervención educativa debe guiar y fomentar el desarrollo de una autoimagen positiva y ajustada.
• Es la edad del descubrimiento de la sexualidad y la construcción de género.
• Se debe acompañar al niño en su desarrollo personal, respetando la diversidad afectivo-sexual y eliminando cualquier discriminación.
• La interacción con la persona adulta orienta y modela al niño, por lo que es crucial identificar y erradicar cualquier mecanismo de discriminación oculta.
• La afectividad es fundamental para los aprendizajes y la personalidad infantil.
• Se debe fomentar el reconocimiento, la expresión y el control progresivo de emociones y sentimientos.
• La interacción con el entorno proporciona información sobre uno mismo y contribuye a la construcción de la imagen personal, ligada a la seguridad, autoconfianza y autoestima.

Cuidados y hábitos saludables

• Los cuidados deben ser de calidad y contribuir a la toma de conciencia de sí mismo y sus posibilidades.
• Las necesidades deben atenderse en un clima acogedor y tranquilo.
• La vida escolar se organiza en torno a rutinas estables, planificadas a partir de los ritmos biológicos y la adquisición de hábitos saludables de alimentación, higiene y descanso.
• La promoción de hábitos saludables se desarrolla a través de rutinas dentro de la jornada escolar, incluyendo actividades como el aseo diario, el cuidado del entorno, salidas por la localidad, talleres de cocina, huerto escolar, etc.
• Se fomenta la cultura alimentaria local y regional bajo los principios de un estilo de vida sostenible.

Interacción social

• El establecimiento de vínculos afectivos de calidad con las personas significativas potencia la interacción y la curiosidad por conocer la realidad.
• La escolarización debe ser una experiencia vital, emocionante y satisfactoria, ocurriendo en un entorno rico, seguro y estimulante.
• Es imprescindible la participación de los padres, madres, o tutores en la creación de un apego seguro en el entorno educativo.
• En el entorno escolar, los niños descubren su pertenencia al medio social, amplían sus relaciones interpersonales, generan nuevos vínculos y desarrollan actitudes como la confianza, la empatía y el apego seguro.
• El aula se convierte en una comunidad de convivencia donde se desarrollan las habilidades sociales y cada persona puede expresar sus necesidades con respeto, entendiendo que las pautas elementales de convivencia se derivan del respeto mutuo, aprendiendo a gestionar y resolver los conflictos de manera dialogada y evitando cualquier tipo de violencia y discriminación.
• La diversidad étnica y cultural posibilita el acceso de los niños a diversos usos y costumbres sociales, generando actitudes de aceptación, respeto y aprecio.

Orientaciones metodológicas

• Las aulas de Educación Infantil deben ser lugares que faciliten un aprendizaje de experiencias eficientes y emocionalmente positivas.
• Se fomenta el aprendizaje activo y participativo, que permita al niño construir su propio conocimiento.
• Se pueden llevar a cabo sesiones para trabajar la psicomotricidad bajo un enfoque globalizado.
• Se promueven entornos de movimiento variados y desafiantes, experiencias sensoriales, juegos físicos e interiores y exteriores.
• Se utilizan materiales específicos que favorecen el desarrollo de habilidades motrices.
• Se incorporan materiales específicos para fomentar el conocimiento del cuerpo, la imagen propia y las habilidades básicas.
• El juego permite expresar sentimientos, comprender normas, desarrollar la atención, la memoria y la imitación de conductas sociales.
• Las actividades cooperativas están encaminadas a la creación de normas del aula, claras, cortas, coherentes, positivas y flexibles.
• Deben trabajar la identificación de las emociones y la expresión de los sentimientos y vivencias, como dramatizaciones y juego simbólico.
• Los espacios deben fomentar el aprendizaje autónomo, la iniciativa, la originalidad, la capacidad creadora y el pensamiento crítico y divergente, mediante la creación de un aula creativa o rincón.
• Se promueve el planteamiento de problemas y situaciones que puedan resolver por ellos mismos, haciendo uso de técnicas creativas que estimulen el pensamiento lateral.
• Se fomenta la inclusión.
• Se crearán espacio flexibles de trabajo, donde se puedan combinar la educación presencial y online.
• Se recogerán las experiencias y vivencias del grupo, favoreciendo el diálogo, la reflexión y la conciencia emocional.
• El ambiente se caracterizará por unas relaciones abiertas, donde el niño se sienta libre, seguro y apreciado.
• El tiempo se entiende como una sucesión ordenada y estable de hechos y rutinas, flexible y de calidad, con especial atención a la individualidad de los niños.
• En los primeros años, se atenderá principalmente a sus necesidades biológicas.
• Se promueven hábitos saludables a través de rutinas dentro de la jornada escolar, incorporando el aseo diario, el cuidado de la clase y del entorno, las salidas por la localidad, las propuestas de tareas para investigar sobre temas de alimentación, consumo responsable, reciclado, prevención de accidentes, el vestido o el descanso, taller de cocina, libro de recetas, almuerzos saludables, el huerto escolar, situaciones de compra…
• En situaciones de comida compartida se fomenta la participación, las conversaciones y el sentido de comunidad.

Este cuestionario se centra en el desarrollo personal y social del niño, destacando la importancia de respetar los ritmos de maduración y promover el bienestar emocional. Se abordarán temas de interacción social, autonomía y construcción de la identidad personal. Ideal para padres, educadores y profesionales que trabajan con niños.