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Los Cordados (Chordata) forman un filo dentro del reino animal conocido por la presencia de una cuerda dorsal o notocorda.
Con casi 65,000 especies, son el tercer filo animal más numeroso.
La mayoría de las especies de Cordados pertenecen al subfilo Vertebrados, siendo los peces óseos el grupo más abundante con alrededor de 22,000 especies.
Los Cordados están emparentados con los filos Echinodermata y Hemichordata, aunque aparentemente son muy diferentes.
Los fósiles más antiguos de Cordados se remontan al Cámbrico inferior, con una edad aproximada de 525 millones de años.

Son un grupo con alrededor de 28 especies.
El cefalocordado más conocido es Branchiostoma, también llamado anfioxo.
Los anfioxos son pequeños y viven en aguas marinas poco profundas y cálidas.
Tienen una notocorda que se extiende por todo el cuerpo, actuando como eje.
Presentan un tubo nervioso dorsal hueco y una cola posterior al ano.
Los adultos son cavadores y sedentarios, mientras que las larvas son móviles y habitan el fondo marino.
Poseen una faringe perforada o tremada que filtra pequeñas partículas alimenticias.
El alimento atrapado en la faringe pasa luego al intestino.

Los urocordados adultos, conocidos como tunicados, se parecen poco a otros cordados.
La mayoría tiene forma de barril y se fija al sustrato por un extremo.
La larva (similar a Branchiostoma) presenta características de los cordados y tiene vida libre por un corto tiempo.
Existen alrededor de 1300 especies de urocordados, que se encuentran en el plancton y en el fondo de los océanos.

Son un grupo con alrededor de 43,000 especies.
Poseen simetría bilateral, cuerpo segmentado, tres capas germinales y celoma bien desarrollado.
Tienen un cordón nervioso en posición dorsal, que en animales más complejos se desarrolla en cerebro y espina neural.
Presentan una estructura de sostén en posición dorsal llamada notocorda.
La notocorda se extiende por todo el cuerpo y en algunos animales persiste durante toda la vida, mientras que en otros es reemplazada por la columna vertebral.
Poseen una faringe perforada con funciones digestivas y respiratorias.
En los vertebrados terrestres, estas perforaciones se pierden en el animal adulto.
Presentan un sistema digestivo completo con boca y ano.
Se reproducen sexualmente, la mayoría con sexos separados.
La fecundación puede ser externa (ovíparos) o interna (vivíparos).
Tienen corazón ventral, endoesqueleto cartilaginoso u óseo, musculatura segmentada y cola posnatal.

Tienen un esqueleto interno con una columna vertebral, extremidades articuladas con huesos (excepto en las serpientes) y un sistema nervioso muy desarrollado.
Habitan todos los medios: acuático, terrestre y aéreo.

La evolución del elefante es un ejemplo asombroso de cambio biológico.
Los elefantes actuales evolucionaron de ancestros del tamaño de un ratón.
El número de especies de animales vertebrados existentes en la Tierra es superior a 62,000.
La presencia de huesos en los vertebrados ha permitido estudiar su evolución a través de fósiles.
Los análisis clínicos de la embriología han desvelado características de los vertebrados como amniotas y anamniotas.

Todos los animales vertebrados tienen simetría bilateral y un esqueleto de huesos óseos o cartilaginosos.
Su cuerpo está dividido en cabeza, tronco y extremidades (anteriores y posteriores).
La mayoría tiene cola para mantener el equilibrio y desplazarse.
Poseen un sistema nervioso complejo con cerebro protegido por un cráneo óseo.
La mayoría se reproduce de forma sexual con individuos macho y hembra.
Tienen sexos diferenciados.
Presentan una variedad de extremidades (aletas, alas o patas).
La mayoría tiene mandíbula.
La piel puede ser de escamas, dentículos dérmicos, plumas, pelo o caparazón.

Evolución de las jirafas: el alargamiento del cuello como respuesta a la selección natural para alcanzar las hojas de las copas de los árboles, involucra 70 genes.
Evolución de los pinzones de Darwin: cambios en el tamaño corporal y la forma del pico como adaptación a diferentes alimentos en las islas Galápagos.
Evolución de los seres humanos: el bipedismo fue clave en el éxito evolutivo de Homo sapiens sapiens.
Evolución de los perros: adaptación y domesticación desde un ancestro común con los lobos salvajes.

Los animales vertebrados se clasifican taxonómicamente de menor a mayor escala:
- Superreino Eucaryota
- Reino Animalia
- Eumetazoa
- Deuterostomia
- Chordata
- Subfilo Vertebrata
Dentro del Subfilo Vertebrata se clasifican en:
- Superclase Agnatos (sin mandíbulas):
  - Clase Hiperoartios (lampreas)
  - clase Mixinos (peces bruja)
- Superclase Gnathostomados (con mandíbulas):
  - Clase Condrictios (peces cartilaginosos)
  - clase Osteictios (peces óseos)
- Superclase Tetrápodos (tienen 4 extremidades):
  - Clase Amphibia (anfibios)
  - clase Reptilia (reptiles)
  - clase Aves (aves)
  - clase Mammalia (mamíferos)
Los vertebrados también se clasifican en amniotas y anamniotas según la presencia o ausencia de amnios en el embrión durante su desarrollo.
- Anamniotas: peces, lampreas, mixinos y anfibios.
- Amniotas: mamíferos, reptiles y aves.

Lampreas: esqueleto blando y cartilaginoso, sin mandíbulas y sin escamas.
Condrictios: esqueleto cartilaginoso, con mandíbulas y escamas en forma de dentículo.
- Ejemplos: tiburones y rayas.
Osteictios: esqueleto óseo, con mandíbulas y escamas.

Tienen cuerpo desnudo o con piel muy fina.
Son poiquilotermos (de sangre fría).
Tienen corazón con tres cámaras.
Fueron los primeros vertebrados en colonizar el medio terrestre, aunque siguen dependiendo del agua.
Tienen doble vida: juveniles viven en el agua, sufren metamorfosis y de adultos viven en tierra, en zonas húmedas cerca del agua.
Se reproducen sexualmente con fecundación externa y son ovíparos con desarrollo externo.