Humanismo y Renacimiento PDF

Humanismo y Renacimiento Introducción. Las transformaciones que caracterizaron la Modernidad no se realizaron exclusivamente en los planos económicos-sociales o políticos: hubo una renovación literaria, artística, filosófica y científica. En las letras y el pensamiento filosófico, este movimiento r...

Humanismo y Renacimiento Introducción. Las transformaciones que caracterizaron la Modernidad no se realizaron exclusivamente en los planos económicos-sociales o políticos: hubo una renovación literaria, artística, filosófica y científica. En las letras y el pensamiento filosófico, este movimiento recibe el nombre de Humanismo. En el ámbito de las manifestaciones artísticas, el del Renacimiento. Las relaciones entre Humanismo y Renacimiento se presentan bajo el aspecto de una polémica: mientras que el humanismo se caracterizará por el retorno a la sabiduría clásica, en el marco de una preocupación fundamentalmente de signo filológico y teológico, el Renacimiento lo hará como impulsor del desarrollo de la ciencia. Así, el Renacimiento, sin renunciar a los temas básicos del humanismo, le superará, al desligar tales temas de la perspectiva teológica y enlazarlos con el pensamiento científico. El Humanismo, la valoración del hombre en el mundo. El término humanismo se usa con gran frecuencia para describir el movimiento literario y cultural que se extendió por Europa durante los siglos XIV y XV. Este renacer de los estudios griegos y romanos subrayaba el valor que tiene lo clásico por sí mismo, más que por su importancia en el marco del cristianismo. Entre 1440 y 1530 aproximadamente, en algunas de las ricas ciudades del norte de Italia comenzó a desarrollarse un movimiento cultural relacionado con la imagen del mundo que tenían los burgueses: el humanismo. Los humanistas eran intelectuales, eruditos, de formación universitaria, que comenzaron a rescatar obras filosóficas, históricas o literarias de la antigüedad grecorromana. Buscaron en los pensadores de la antigüedad, como Platón y Aristóteles. Pretendieron que el conocimiento le diera al hombre mayores posibilidades de felicidad y libertad. Uno de los rasgos distintivos más conocidos y destacados del humanismo es su interés por lo "antiguo", por lo clásico. Este interés provoca el desarrollo de la perspectiva histórica en el acercamiento a otra cultura, porque se puede afirmar que con el humanismo se consolida la historicidad como clave del pensamiento europeo. A diferencia de lo que ocurría en la edad media, donde el hombre era considerado fundamentalmente desde una perspectiva teológica, los humanistas valorarán el hombre desde una perspectiva mundana, no-divina, es decir, el hombre será visto como un ser natural e histórico. La religión, aparte de su función redentora, es considerada ante todo en su función civil. Así, tanto la religión como la tolerancia religiosa son instrumentos válidos para asegurar el ideal de la paz civil. La creencia en la unidad última de todas las religiones es afirmada, consecuentemente, desde esta caracterización. Los Humanistas lograron un rango social destacado. Estudiaban desde chicos o muy jóvenes. Algunos describían su existencia de este modo: "Durante el día trabajo para vivir, y durante la noche me visto con mis mejores galas, voy a la biblioteca y me uno con los pensadores antiguos". Entre los principales representantes del Humanismo se destacaron: En Italia: Nicolás Maquiavelo (1469-1527). Presentó su obra "El príncipe", donde relata el principio de la "razón de Estado". Según él, el objetivo de un monarca es alcanzar la felicidad de los súbditos. En los países bajos: Erasmo De Rótterdam (1467-1536), el más representativo del humanismo cristiano. Escribió "Elogio a la locura", donde criticó los abusos de poder de las autoridades eclesiásticas, osea de la Iglesia, en su época. En Inglatera: Tomás Moro (1478-1535) criticó la sociedad de su época. En su famosa obra "Utopía" imaginó un estado ideal, situado en una república imaginaria, con una organización comunitaria en la que los seres humanos vivirían con tranquilidad y felicidad. El arte del Renacimiento. El cambio de mentalidad que dejó el Humanismo, también se reflejó en el arte. Se desarrolló una nueva corriente artística, el estilo renacentista. El término renacimiento hace referencia a un renacer de las tradiciones del arte griego y romano (grecolatino), consideradas en esta época como la excelencia de las creaciones humanas. Los artistas tuvieron como fuente de inspiración las expresiones de la Antigüedad clásica, pero crearon nuevos modos de pintar y construir. De la preocupación por el hombre como centro de todas las cosas (antropocentrismo), surgió la necesidad de expresar la vida terrenal. Entonces se profundizó el estudio de la naturaleza, es decir el mundo del hombre que lo rodea. El Renacimiento se inició en Italia, en el siglo XV. Su primer centro de desarrollo artístico fue la ciudad de Florencia. Se difundió y se expandió por el resto de Europa a mediados del siglo XVI, principalmente en Francia, Alemania, Holanda y España. El renacimiento se divide en 2 períodos: Quatrocento y Cinquecento. El Quattrocento tuvo lugar en el siglo XV y tuvo como centro cultural a Florencia. Los temas de las obras fueron en gran parte religiosos, y luego se incorporaron los míticos. Las figuras divinas eran corpóreas, y normalmente eran representadas con aureolas pintadas con oro El Cinquecento ocurrió en el siglo XVI, y el foco fue la ciudad de Roma. En éste período comenzaron a tratarse temas no religiosos, y tuvieron en cuenta elementos de la geometría y la perspectiva, la proporción y el equilibrio. http://segundomekhihyr.pe/