Ecosistema PDF
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Universidad Mayor de San Simón
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Este documento describe los conceptos básicos de los ecosistemas, incluyendo la definición, los componentes (biótopo y biocenosis), los factores ambientales, y las relaciones tróficas entre los organismos.
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TEMA 3: EL ECOSISTEMA: UNIDAD BÁSICA DE ESTUDIO DE LA ECOLOGÍA 3.1. DEFINICIÓN DE ECOSISTEMA El concepto de ecosistema es especialmente interesante para comprender el funcionamiento de la naturaleza y multitud de cuestiones ambientales que se tratarán con detalle en...
TEMA 3: EL ECOSISTEMA: UNIDAD BÁSICA DE ESTUDIO DE LA ECOLOGÍA 3.1. DEFINICIÓN DE ECOSISTEMA El concepto de ecosistema es especialmente interesante para comprender el funcionamiento de la naturaleza y multitud de cuestiones ambientales que se tratarán con detalle en próximos capítulos. Hay que insistir en que la vida humana se desarrolla en estrecha relación con la naturaleza y que su funcionamiento nos afecta totalmente. Es un error considerar que nuestros avances tecnológicos: coches, grandes casas, industria, etc. nos permiten vivir al margen del resto de la biosfera y el estudio de los ecosistemas, de su estructura y de su funcionamiento, nos demuestra la profundidad de estas relaciones. En las ciencias de la naturaleza llamamos ecosistema al conjunto formado por los seres vivos que habitan en un determinado lugar y las relaciones que se establecen entre todos sus componentes y el medio en el que viven. También se puede definir ecosistema como el conjunto formado por un biótopo (el medio) y una biocenosis (los organismos) y las relaciones que se establecen entre ellos. 3.2. COMPONENTES DEL ECOSISTEMA a. El biótopo comprende el medio físico del ecosistema y sus propiedades físico-químicas, que condicionan el desarrollo de los seres vivos. Se llaman factores ambientales al conjunto de condiciones físicas y químicas que influyen en el biotopo y que influyen en la vida de los seres vivos del ecosistema. Los principales factores son: - La luz: es necesaria para los organismos fotosintéticos y condiciona su situación en el ecosistema. - El agua: su presencia es indispensable para el desarrollo de todos los organismos - La temperatura: condiciona el grado de calor o frío del entorno de los seres vivos - La salinidad del agua: es la cantidad de sales disueltas en el agua (agua dulce, salada, salobre) - El pH: determina el grado de acidez o basicidad del medio en el que viven los organismos El biotopo del medio terrestre se caracteriza por: · el tipo de suelo · los tipos de rocas (arenas, arcillas, calizas,…) · la temperatura del aire · el grado de humedad del suelo · el sustrato sobre el que se asienta el ser vivo, ya que podría ser otro organismo como es el caso de los hongos que viven sobre el tronco de un árbol” El biotopo del medio marino se caracteriza por: · las características del agua y su transparencia · su grado de salinidad (agua salada, dulce, salobre) · su temperatura · su luminosidad · la cantidad de gases y nutrientes disueltos,….” b) Biocenosis La biocenosis o comunidad de un ecosistema es el conjunto de todos los organismos vivos que viven en el biotopo, entre los que se establecen determinadas y complejas relaciones. 3.3. RELACIONES EN EL ECOSISTEMA Las relaciones que se producen entre los seres vivos del ecosistema pueden ser intraespecíficas e interespecíficas. Relaciones intraespecíficas. Se dan cuando interaccionan los organismos de una misma especie. Una población mantiene interacciones muy diversas, desde competir por los mismos recursos (alimento, espacio...) hasta colaborar para defenderse de sus enemigos. Relaciones interespecíficas. Son las que se establecen entre organismos de diferentes especies. 3. 4. LA ORGANIZACIÓN DEL ECOSISTEMA 3.4.1. La estructura trófica Todos los seres vivos de un ecosistema interaccionan entre sí de manera que cada uno de ellos desempeña funciones que complementan a los demás, dotando al ecosistema de una estructura y una organización complejas. Por tanto, cualquier cambio que se produzca en una determinada especie provocará cambios en las demás. Una de las relaciones más importantes entre los organismos de un ecosistema son las alimentarias, pues de ellas dependen tanto la supervivencia de los individuos de una especie como el equilibrio entre las diferentes especies que viven en su biotopo. Un nivel trófico es el conjunto de especies del ecosistema que compiten por los mismos recursos alimentarios. Todos los ecosistemas tienen tres niveles tróficos o alimentarios: productores, consumidores y descomponedores. Así son los niveles tróficos Los productores Son organismos autótrofos, como las plantas y las algas que, mediante la fotosíntesis producen su alimento (materia orgánica) a partir de la energía solar y de sustancias inorgánicas que toman del medio. La materia orgánica que fabrican contiene energía que utilizan para realizar sus funciones vitales. Los productores alimentan a otros seres del ecosistema (los consumidores y los descomponedores). Los consumidores Son organismos heterótrofos que consumen la materia orgánica producida por otros seres. Los cons99umidores primarios son organismos herbívoros, como los ciervos, que se alimentan de los productores. Los consumidores secundarios son seres carnívoros, como el lobo, que se comen a los herbívoros. Los consumidores terciarios se alimentan de consumidores secundarios y/o primarios (buitre). Algunos ecosistemas tienen más niveles de consumidores. Hay animales carnívoros que se alimentan de otros carnívoros por lo que se llaman consumidores terciarios. La energía que pasa de un nivel al siguiente se ha calculado en una media del 10%, por lo que el número de niveles trófico no suele pasar de cinco. A esta valoración se le llama regla del 10%. Hay otros tipos de consumidores: Los omnívoros. Tienen una dieta variada, como los osos o las hormigas, y pueden ocupar diferentes niveles tróficos dentro de los consumidores. Los detritívoros. Comen restos orgánicos más o menos descompuestos o excrementos. Las larvas de numerosos insectos y las lombrices de tierra son consumidores detritívoros. Los descomponedores Son seres heterótrofos que descomponen los organismos muertos y sus restos (como los excrementos o las hojas de los árboles de hoja ca-duca que caen en el otoño) y los transforman en sustancias minerales que se incorporan al medio. Estas sustancias minerales son aprovechadas de nuevo por los productores. Los descomponedores más importantes del ecosistema son las bacterias y los hongos. 3.4.2. Relaciones tróficas Productores, consumidores y descomponedores forman los diferentes niveles tróficos o alimenticios que se dan en un ecosistema. Cada nivel trófico agrupa a todas las especies que tienen el mismo tipo de alimentación y que tienen una dieta a base de especies de un nivel inferior. Las relaciones tróficas que se establecen en un ecosistema pueden diferenciarse en dos tipos: a. Cadenas tróficas Desde el punto de vista trófico, todos los ecosistemas funcionan igual: unos organismos se alimentan de otros, de forma que el alimento circula en una dirección determinada. Una cadena trófica es la representación lineal que muestra la dirección que sigue el alimento en el ecosistema. b. Redes tróficas Una red trófica es la interrelación compleja y real que se establece entre las distintas especies que forman los distintos niveles tróficos. Conclusión: Un organismo no se alimenta sólo de otra especie sino que se alimenta de más de una y un organismo puede servir de alimento a varias especies diferentes. 3.5. FUNCIONAMIENTO DE LOS ECOSISTEMAS Las redes tróficas constituyen la estructura del ecosistema, y nos permiten conocer y comprender cómo funcionan, es decir, como el paso de materia y energía de unos organismos a otros permiten que todos ellos se mantengan vivos en el ecosistema y que éste alcance un estado de equilibrio funcional, que permite su conservación, aunque sea con cambios, a lo largo del tiempo. El ecosistema se mantiene en funcionamiento gracias al flujo de energía que va pasando de un nivel al siguiente. La energía fluye a través de la cadena alimentaria sólo en una dirección: va siempre desde el sol, a través de los productores a los descomponedores. La energía entra en el ecosistema en forma de energía luminosa y sale en forma de energía calorífica que ya no puede reutilizarse para mantener otro ecosistema en funcionamiento. Por esto no es posible un ciclo de la energía similar al de los elementos químicos. La primera aproximación que hay que hacer para comprender cómo funciona un ecosistema es conocer cuánta materia y cuánta energía pasa de unos organismos a otros. En realidad, esas dos variables están muy relacionadas entre sí, hasta el punto de que se pueden considerar equivalentes, porque podemos calcular la cantidad de energía que está contenida en una cierta cantidad de materia orgánica sin más que multiplicar la masa por un valor numérico que ha sido calculado por los investigadores. La herramienta que permite la observación de ese paso de energía entre organismos es la pirámide trófica o pirámide ecológica. Se trata de un gráfico en que se representa la cantidad de materia (o de energía) que está contenido en cada uno de los niveles tróficos de un ecosistema dado mediante barras horizontales centradas y superpuestas, lo que permite comparar rápida y fácilmente la cantidad de materia o energía presentes en ellos. Se pueden elaborar diferentes tipos de pirámides ecológicas, representando en ellas distintas variables ecológicas que pueden ser interesantes para comprender el funcionamiento de diferentes ecosistemas: a. Pirámides de energía En estas pirámides se representa la producción neta de cada nivel trófico; es decir, la energía que queda disponible para el nivel trófico superior. La energía disponible varía mucho de unos niveles a otros. En general, la energía de cada nivel supone, aproximadamente, un 10 % de la del nivel inferior, del cual la toman. Por ello, las cadenas alimentarias no pueden ser muy largas, pues la energía disponible se agota con mucha rapidez. b. Pirámides de números Lo que se representa en este tipo de pirámides es el número de individuos de cada nivel trófico. No aportan demasiada información, porque no tienen en cuenta el tamaño de cada individuo, sino solo su número. Así, una encina contaría igual que una amapola. Estas pirámides pueden adoptar una forma invertida, como en un bosque, donde los productores son los árboles; pocos, pero con una gran biomasa. c. Pirámides de biomasa Pirámide normal en un ecosistema terrestre En ellas se representa la biomasa de cada nivel trófico en un momento dado o en un corto período de tiempo. Nos aportan información muy interesante sobre la estructura del ecosistema y sobre su funcionamiento. En general, su forma es similar a la de las pirámides de energía, aunque hay casos en los que la pirámide se puede invertir. Por ejemplo, esto sucede en algunas cadenas marinas. A veces, la biomasa del zooplancton es mayor que la del fitoplancton. Esto ocurre porque el fitoplancton se puede reproducir a gran velocidad y reponer rápidamente la biomasa perdida. 3.7. CICLOS DE LA MATERIA o CICLOS BIOGEOQUÍMICOS La materia circula desde el mundo vivo hacia el ambiente abiótico y de regreso, mediante una serie de procesos de producción y descomposición; esa circulación constituye los ciclos biogeoquímicos. Estos son procesos naturales que reciclan elementos en diferentes formas químicas desde el medio ambiente hacia los organismos, y luego a la inversa. Agua, carbono, oxígeno, nitrógeno, fósforo y otros elementos recorren estos ciclos, conectando los componentes vivos y no vivos de la Tierra. La tierra es un sistema cerrado donde no entra ni sale materia. Las sustancias utilizadas por los organismos no se "pierden" aunque pueden llegar a sitios donde resultan inaccesibles para los organismos por un largo período. Sin embargo, casi siempre la materia se reutiliza y a menudo circula varias veces, tanto dentro de los ecosistemas como fuera de ellos. Se conocen los siguientes ciclos biogeoquímicos: 3.7.1. Ciclo del carbono El carbono es parte fundamental y soporte de los organismos vivos, porque proteínas, ácidos nucleicos, carbohidratos, lípidos y otras moléculas esenciales para la vida contienen carbono. Se lo encuentra como dióxido de carbono en la atmósfera, en los océanos y en los combustibles fósiles almacenados bajo la superficie de la Tierra. El movimiento global del carbono entre el ambiente abiótico y los organismos se denomina ciclo del carbono. El CO2 se encuentra: en el océano y en el agua dulce como: en la atmósfera (gas) como: CO2 disuelto, CO2-3 (carbonato), CO2 (en un 0,03%) HCO3-(bicarbonato), Ca CO3(rocas calizas) El ciclo básico comienza cuando las plantas, a través de la fotosíntesis, hacen uso del dióxido de carbono (CO2) presente en la atmósfera o disuelto en el agua. El carbono (del CO2) pasa a formar parte de los tejidos vegetales en forma de hidratos de carbono, grasas y proteínas, y el oxígeno es devuelto a la atmósfera o al agua mediante la respiración. Así, el carbono pasa a los herbívoros que comen las plantas y de ese modo utilizan, reorganizan y degradan los compuestos de carbono. Gran parte de éste carbono es liberado: en forma de CO2 por la respiración, o como producto secundario del metabolismo, pero parte se almacena en los tejidos animales y pasa a los carnívoros, que se alimentan de los herbívoros. En última instancia, todos los compuestos del carbono se degradan por descomposición, y el carbono que es liberado en forma de CO2, es utilizado de nuevo por las plantas. En resumen, los pasos más importantes del ciclo del carbono son los siguientes: El dióxido de carbono de la atmósfera es absorbido por las plantas y convertido en azúcar, por el proceso de fotosíntesis Los animales comen plantas y al descomponer los azúcares dejan salir carbono a la atmósfera, los océanos o el suelo Bacterias y hongos descomponen las plantas muertas y la materia animal, devolviendo carbono al medio ambiente El carbono también se intercambia entre los océanos y la atmósfera. Esto sucede en ambos sentidos en la interacción entre el aire y el agua. Combustibles fósiles: En algunos casos el carbono presente en las moléculas biológicas no regresa inmediatamente al ambiente abiótico, por ejemplo el carbono presente en la madera de los árboles o el que formó parte de los depósitos de hulla a partir de restos de árboles antiguos que quedaron sepultados en condiciones anaerobias antes de descomponerse. Hulla (carbón mineral), petróleo y gas natural son llamados combustibles fósiles porque se formaron a partir de restos de organismos antiguos y contienen grandes cantidades de compuestos carbonados como resultado de la fotosíntesis ocurrida hace millones de años. Efecto invernadero: A través de las actividades humanas se liberan grandes cantidades de carbono a la atmósfera a un ritmo mayor de aquel con que los productores y el océano pueden absorberlo, éstas actividades han perturbado el presupuesto global del carbono, aumentando, en forma lenta pero continua el CO 2 en la atmósfera; propiciando cambios en el clima con consecuencias en el ascenso en el nivel del mar, cambios en las precipitaciones, desaparición de bosques , extinción de organismos y problemas para la agricultura. Gases como el CO2, ozono superficial (O3)4, óxido nitroso (N2O) y clorofluoralcanos se acumulan en la atmósfera como resultado de las actividades humanas, derivando en un aumento del calentamiento global, esto ocurre porque los gases acumulados frenan la pérdida de radiación infrarroja (calor) desde la atmósfera al espacio. Una parte del calor es transferida a los océanos, aumentando la temperatura de los mismos, lo que implica un aumento de la temperatura global del planeta. Como el CO2 y otros gases capturan la radiación solar de manera semejante al vidrio de un invernadero, el calentamiento global producido de este modo se conoce como efecto invernadero. 3.7.2. Ciclo del nitrógeno La atmósfera es el principal reservorio de nitrógeno, donde constituye hasta un 78 % de los gases. Sin embargo, como la mayoría de los seres vivos no pueden utilizar el nitrógeno atmosférico para elaborar aminoácidos y otros compuestos nitrogenados, dependen del nitrógeno presente en los minerales del suelo. Por lo tanto, a pesar de la gran cantidad de nitrógeno en la atmósfera, la escasez de nitrógeno en el suelo constituye un factor limitante para el crecimiento de los vegetales. El proceso a través del cual circula nitrógeno a través del mundo orgánico y el mundo físico se denomina ciclo del nitrógeno. Este ciclo consta de las siguientes etapas: 1. Fijación del nitrógeno: consiste e la conversión del nitrógeno gaseoso (N2) enamoníaco (NH3), forma utilizable para los organismos. En esta etapa intervienen bacterias (que actúan en ausencia de oxígeno), presentes en el suelo y en ambientes acuáticos, que emplean la enzima nitrogenasa para romper el nitrógeno molecular y combinarlo con hidrógeno. N2 --------------------> NH3 nitrogenasa Ejemplos de bacterias fijadoras de nitrógeno: Las bacterias del género Rhizobium, viven en nódulos de las raíces de leguminosas y de algunas plantas leñosas. Las cianobacterias, realizan la mayor parte de la fijación del nitrógeno. Algunos helechos acuáticos tienen cavidades donde viven las cianobacterias. 2. Nitrificación: proceso de oxidación del amoníaco o ion amonio, realizado por dos tipos de bacterias: Nitrosomonas y Nitrobacter (comunes del suelo). Este proceso genera energía que es liberada y utilizada por estas bacterias como fuente de energía primaria. Este proceso ocurre en dos etapas: a. Un grupo de bacterias, las Nitrosomonas y Nitrococcus, oxidan el amoníaco a nitrito (NO2-): 2 NH3 + 3 O2 g 2 NO2 - + 2 H+ + 2 H2O b. Otro grupo de bacterias, Nitrobacter, transforman el nitrito en nitrato, por este motivo no se encuentra nitrito en el suelo, que además es tóxico para las plantas. 2 NO2 - + O2 g 2 NO3 – 3. Asimilación: las raíces de las plantas absorben el amoníaco (NH3) o el nitrato (NO3 -), e incorporan el nitrógeno en proteínas, ácidos nucleicos y clorofila. Cuando los animales se alimentan de vegetales consumen compuestos nitrogenados vegetales y los transforman en compuestos nitrogenados animales. 4. Amonificación: consiste en la conversión de compuestos nitrogenados orgánicos en amoníaco, se inicia cuando los organismos producen desechos como urea (orina) y ácido úrico (excreta de las aves), sustancias que son degradadas para liberar como amoníaco el nitrógeno en el ambiente abiótico. El amoníaco queda disponible para los procesos de nitrificación y asimilación. El nitrógeno presente en el suelo es el resultado de la descomposición de materiales orgánicos y se encuentra en forma de compuestos orgánicos complejos, como proteínas, aminoácidos, ácidos nucleicos y nucleótidos, que son degradados a compuestos simples por microorganismos - bacterias y hongos - que se encuentran en el suelo. Estos microorganismos usan las proteínas y los aminoácidos para producir sus propias proteínas y liberan el exceso de nitrógeno en forma de amoníaco (NH3) o ion amonio (NH4+). 5. Desnitrificación: es el proceso que realizan algunas bacterias ante la ausencia de oxígeno, degradan nitratos (NO3 -) liberando nitrógeno (N2) a la atmósfera a fin de utilizar el oxígeno para su propia respiración. Ocurre en suelos mal drenados. A pesar de las pérdidas de nitrógeno, el ciclo se mantiene gracias a la actividad de las bacterias fijadoras de nitrógeno, capaces de incorporar el nitrógeno gaseoso del aire a compuestos orgánicos nitrogenados. 3.7.3. Ciclo del fósforo El fósforo es un componente esencial de los organismos. Forma parte de los ácidos nucleicos (ADN y ARN); del ATP y de otras moléculas que tienen PO43- y que almacenan la energía química; de los fosfolípidos que forman las membranas celulares; y de los huesos y dientes de los animales. Está en pequeñas cantidades en las plantas, en proporciones de un 0,2%, aproximadamente. En los animales hasta el 1% de su masa puede ser fósforo. Su reserva fundamental en la naturaleza es la corteza terrestre. Por meteorización de las rocas o sacado por las cenizas volcánicas, queda disponible para que lo puedan tomar las plantas. Con facilidad es arrastrado por las aguas y llega al mar. Parte del que es arrastrado sedimenta al fondo del mar y forma rocas que tardarán millones de años en volver a emerger y liberar de nuevo las sales de fósforo. Otra parte es absorbida por el plancton que, a su vez, es comido por organismos filtradores de plancton, como algunas especies de peces. Cuando estos peces son comidos por aves que tienen sus nidos en tierra, devuelven parte del fósforo en las heces (guano) a tierra. Es el principal factor limitante en los ecosistemas acuáticos y en los lugares en los que las corrientes marinas suben del fondo, arrastrando fósforo del que se ha ido sedimentando, el plancton prolifera en la superficie. Al haber tanto alimento se multiplican los bancos de peces, formándose las grandes pesquerías del Gran Sol, costas occidentales de África y América del Sur y otras. Con los compuestos de fósforo que se recogen directamente de los grandes depósitos acumulados en algunos lugares de la tierra se abonan los terrenos de cultivo, a veces en cantidades desmesuradas, originándose problemas de eutrofización. La mayor reserva de fósforo está en la corteza terrestre y en los depósitos de rocas marinas. El fósforo como abono es el recurso limitante de la agricultura. Ya que este recurso no tiene reserva en la atmósfera, su extracción se ve limitada a los yacimientos terrestres (la mayor en Marruecos) y la gráfica de su producción mundial se parece a la de una extracción petrolera, en forma de campana. Con el uso actual se proyecta que se estará agotando por el 2051. 3.7.4. Ciclo del oxígeno El ciclo del oxígeno es la cadena de reacciones y procesos que describen la circulación del oxígeno en la biosfera terrestre. Al respirar, los animales y los seres humanos tomamos del aire el oxígeno que las plantas producen y luego exhalamos gas carbónico. Las plantas, a su vez, toman el gas carbónico que los animales y los seres humanos exhalamos, para utilizarlo en el proceso de la fotosíntesis. Plantas, animales y seres humanos intercambian oxígeno y gas carbónico todo el tiempo, los vuelven a usar y los reciclan. A esto se le llama el ‘ciclo del oxígeno’. El O2 le confiere un carácter oxidante a la atmósfera. Se formó por fotólisis deH2O, formándose H2 y O2: H2O + hν → 1/2O2. El oxígeno molecular presente en la atmósfera y el disuelto en el agua interviene en muchas reacciones de los seres vivos. En la respiración celular se reduce oxígeno para la producción de energía y generándose dióxido de carbono, y en el proceso de fotosíntesis se origina oxígeno y glucosa a partir de agua, dióxido de carbono (CO2) y radiación solar. 3.7.5. Ciclo del agua El ciclo hidrológico o ciclo del agua es el proceso de circulación del agua entre los distintos compartimientos de la hidrósfera. Se trata de un ciclo biogeoquímico en el que hay una intervención mínima de reacciones químicas, y el agua solamente se traslada de unos lugares a otros o cambia de estado físico. El agua de la hidrósfera procede de la desgasificación del manto, donde tiene una presencia significativa, por los procesos del vulcanismo. Una parte del agua puede reincorporarse al manto con los sedimentos oceánicos de los que forma parte cuando éstos acompañan a la litosfera en subducción. La mayor parte de la masa del agua se encuentra en forma líquida, sobre todo en los océanos y mares y en menor medida en forma de agua subterránea o de agua superficial por ejemplo ríos y arroyos. El segundo compartimento por su importancia es el del agua acumulada como hielo sobre todo en los casquetes glaciares antártico y groenlandés, con una participación pequeña de los glaciares de montaña, sobre todo de las latitudes altas y medias, y de la banquisa. Por último, una fracción menor está presente en la atmósfera como vapor o, en estado gaseoso, como nubes. Esta fracción atmosférica es sin embargo muy importante para el intercambio entre compartimentos y para la circulación horizontal del agua, de manera que se asegura un suministro permanente a las regiones de la superficie continental alejadas de los depósitos principales. El ciclo hidrológico comienza con la evaporación del agua desde la superficie del océano. A medida que se eleva, el aire humedecido se enfría y el vapor se transforma en agua: es la condensación. Las gotas se juntan y forman una nube. Luego, caen por su propio peso: es la precipitación. Si en la atmósfera hace mucho frío, el agua cae como nieve o granizo. Si es más cálida, caerán gotas de lluvia. Una parte del agua que llega a la superficie terrestre será aprovechada por los seres vivos; otra escurrirá por el terreno hasta llegar a un río, un lago o el océano. A este fenómeno se le conoce como escorrentía. Otro porcentaje del agua se filtrará a través del suelo, formando capas de agua subterránea, conocidas como acuíferos. Este proceso es la percolación. Tarde o temprano, toda esta agua volverá nuevamente a la atmósfera, debido principalmente a la evaporación. 3.7.6. Ciclo del azufre El azufre forma parte de proteínas. Las plantas y otros productores primarios lo obtienen principalmente en su forma de ion sulfato (SO4-2). Los organismos que ingieren estas plantas lo incorporan a las moléculas de proteína, y de esta forma pasa a los organismos del nivel trófico superior. Al morir los organismos, el azufre derivado de sus proteínas entra en el ciclo del azufre y llega a transformarse para que las plantas puedan utilizarlos de nuevo como ion sulfato. Los intercambios de azufre, principalmente en su forma de dióxido de azufre (SO2), realizan entre las comunidades acuáticas y terrestres, de una manera y de otra en la atmósfera, en las rocas y en los sedimentos oceánicos, en donde el azufre se encuentra almacenado. El SO2 atmosférico se disuelve en el agua de lluvia o se deposita en forma de vapor seco. El reciclaje local del azufre, principalmente en forma de ion sulfato, se lleva a cabo en ambos casos. Una parte del sulfuro de hidrógeno (H2S), producido durante el reciclaje local del sulfuro, se oxida y se forma SO2. 3.8. TIPOS DE ECOSISTEMAS Los ecosistemas se clasifican de la siguiente manera: 1. ECOSISTEMAS NATURALES: ecosistemas que aparecen, más o menos, en su estado natural. Según el tipo de entorno dominante los ecosistemas naturales se pueden dividir en: Ecosistemas terrestres: asentados sobre el suelo y muy influido por las características climáticas de la atmósfera. Ej. Bosques, Matorrales, Herbazales, Tundra, Desierto, etc. Ecosistemas acuáticos: cuyo entorno esencial es el agua y su salinidad asi como los materiales que forman el fondo de las zonas húmedas. Estos a su vez se clasifican en ecosistemas acuáticos de aguas continentales (ríos y lagos) y ecosistemas marinos (mares y oceános). Ecosistema híbrido: Es el ecosistema inundable o humedal como el pantano o ciénaga, el cual es considerado según sea el caso, un ecosistema terrestre o acuático, o más cercanamente, un híbrido entre ellos. Son suelos cubiertos de agua dulce o salada, permanentemente o durante gran parte del año, encontrándose comúnmente en las llanuras aluviales. Dependiendo de sus características presentan plantas acuáticas, herbáceas, árboles, helechos, algas y una fauna adaptada a este hábitat. Algunos ecosistemas de este tipo: Sabana inundada: Llanura aluvial de sabana. Destaca el Pantanal en el centro sudamericano, como el mayor humedal del mundo, un ecosistema de gran biodiversidad. Selva inundable: Llanura aluvial selvática como lavárzea y agapós de Brasil, o los aguajales y bajiales del Perú. Pantano de coníferas: Formado en llanuras pobladas de árboles y arbustos. Manglar: Ecosistema costero tropical de mangles. Marisma: Humedal herbáceo en las proximidades del mar. Juncal: Ecosistema ribereño de juncos junto a lagos o ríos. Estero: Pantano formado en las proximidades de ríos o lagos, formado por plantas acuáticas o palmeras y diversa vegetación. Turbera: Humedal formado por turba en tundras y taigas, compuesto por musgos y acumulación de materia vegetal muerta. Bofedal: Humedal herbáceo de alta montaña. 2. ECOSISTEMAS HUMANIZADOS: Es el ecosistema no natural con control o intervención del ser humano. Ecosistemas naturales controlados: Ecosistemas que controla el hombre para uso recreativo, o bien, para la producción de recursos naturales, ejemplo: áreas de caza, parques, bosques controlados. Ecosistemas productivos: ecosistemas que emplea el hombre para la producción intensiva de alimentos, o de recursos naturales, ejemplo: granjas, minas, fincas ganaderas. Las áreas agrícolas son algunos de los ecosistemas productivos más intensamente controlados por el hombre. Se necesitan enormes cantidades de energía para obtener grandes cosechas de estos sistemas. Las mayores cosechas en el futuro próximo, requerirán aún más entradas energéticas. Debido a que los ecosistemas agrícolas son monocultivos, con esta práctica se hace más efectiva la siembra, el cuidado y la cosecha, también se crean ecosistemas más simplificados, y por lo tanto más inestables, los cuales están sujetos especialmente a las enfermedades y a las plagas de insectos. Las nuevas variedades de cultivos sólo producen altos rendimientos cuando se les prodigan cuidados adecuados; estos cuidados incluyen: el empleo de fertilizantes, control de plagas, irrigación, y la utilización de maquinaria apropiada para la cosecha y el transporte de los productos agrícolas. Se considera que la energía necesaria para la producción y el transporte de estos materiales están aumentando más que los rendimientos agrícolas. Otro problema con la introducción de variedades de alto rendimiento es la reducción de la diversidad genética de los cultivos mismos y que en su desarrollo se han sacrificado características benéficas de las plantas, tales como el contenido de proteínas, sabor, resistencia a enfermedades; con el fin de lograr características de elevado rendimiento. En la década de los treinta, los cultivadores de trigo desarrollaron un gene en el trigo, al que denominaron "esperanza", resistente a la roya. Toda la región triguera de Estados Unidos sembró monocultivos del trigo esperanza. Sin embargo, a finales de la década de los cuarenta apareció otro nuevo hongo de la roya y se dispersó por toda la zona triguera produciendo una pérdida casi total de la producción en todas las planicies norteamericanas. Las prácticas agrícolas avanzadas han contribuido enormemente al bienestar inmediato del género humano; no obstante, es necesario preocuparse de que los monocultivos distribuidos mundialmente no conduzcan a descuidos biológicos que comprometan las perspectivas futuras y la existencia misma del sistema. Ecosistemas urbanos: Ecosistemas en los que el hombre vive y trabaja, ejemplo: áreas industriales, ciudades, pueblos. Un ecosistema urbano constituye un ambiente donde el hombre ejerce un control más intenso. Requiere entradas constantes, produce salidas continuas y posee varios ciclos internos de retroalimentación. El hombre de la ciudad tiene necesidades tanto biológicas como culturales. Aproximadamente el 20 % de la población mundial vive en concentraciones urbanas de más de 100.000 habitantes. Las ciudades son ecosistemas complejos, donde el hombre ha creado sistemas muy elaborados para controlar la tierra, el aire, el agua y el flujo energético a través de ellos. Las ciudades son sistemas abiertos, los cuales para continuar existiendo deben recibir entradas de materiales y energía de los ecosistemas externos y deben contar con salidas de productos, desperdicios y calor. Los materiales que entran a las ciudades se concentran, se transforman, se almacenan y finalmente se exportan como: aire viciado, agua de alcantarilla, productos de desperdicio y productos de la tecnología, de la educación y la cultura. Por ejemplo un habitante urbano de un país desarrollado utiliza (directa e indirectamente) cada día, aproximadamente 13.248 litros de agua, 1.8 kilos de alimento, 8.6 kg de combustibles fósiles. Sus salidas diarias incluyen aproximadamente 454 litros de aguas negras, 1.8 kg de desperdicios y 865 gr de contaminantes atmosféricos. BIBLIOGRAFÏA BEGON, M., TOWNSEND, C.R. Y J.L. HARPER. 2006. Ecology: From individuals to ecosystems. Blackwell Pupbishing, UK. 759 pp. MARGALEF, R. 1992. Ecología. Madrid: Editorial Planeta. ODUM, P. E. 1985. Fundamentos d Ecología. Ed. Interamericana, México. TYLER MILLER G., JR. Ecología y Medio Ambiente. Grupo Editorial Iberoamérica. http://recursostic.educacion.es/secundaria/edad/4esobiologia/4quincena10/4quincena10_contenidos_5.htm http://portillobiogeo4.blogspot.com/2013_03_01_archive.html