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Artículos Papeles del Psicólogo / Psychologist Papers, 2018. Vol. 39(1), pp. 22-30 https://doi.org/10.23923/pap.psicol2018.2854...

Artículos Papeles del Psicólogo / Psychologist Papers, 2018. Vol. 39(1), pp. 22-30 https://doi.org/10.23923/pap.psicol2018.2854 http://www.papelesdelpsicologo.es http://www.psychologistpapers.com LOS SIETE SECRETOS MÁGICOS DE LA EFECTIVIDAD TERAPÉUTICA THE SEVEN MAGIC SECRETS OF THERAPEUTIC EFFECTIVENESS Jenny Moix y Victoria Carmona Universidad Autónoma de Barcelona Parecería que el avance de la Psicología nos debería aumentar la confianza respecto a nuestras prácticas, sin embargo la prolifera- ción de técnicas, protocolos, enfoques,… nos genera, más bien, una sensación de confusión; la duda sobre si quizás estamos en la opción correcta o nos estamos equivocando de paradigma terapéutico. Los metanálisis y revisiones sistemáticas procuran poner or- den intentando averiguar qué terapias psicológicas son más efectivas. Sin embargo, los resultados no son concluyentes y más bien parecen indicar que ningún enfoque psicológico predomina sobre otro. Ante esta situación la pregunta que emerge es: ¿qué factores comparten las distintas técnicas que las convierte en eficaces? Son muchas las categorizaciones sobre factores comunes. En este artí- culo desvelaremos los 7 secretos mágicos (factores comunes) que consideramos clave para explicar la efectividad terapéutica. Esta clasificación no tiene ninguna pretensión más que provocar la reflexión. Palabras clave: Factores comunes, Efectividad terapéutica, Psicoterapia. It would seem that the advancement of psychology should increase our confidence in our practices, however the proliferation of techniques, protocols, approaches, etc. gives us instead a sense of confusion. We have doubts as to whether we are in the correct therapeutic paradigm or not. Meta-analysis and systematic reviews attempt to create order, trying to determine which psychological therapies are most effective. Unfortunately, the results are inconclusive and seem to indicate that no one psychological approach prevails over the others. The question that emerges is: what factors do the different techniques share that make them effective? There are many categorizations concerning common factors. In this article we unveil the seven magic secrets (common factors) that we consider key in explaining therapeutic effectiveness. This classification has no claim other than to provoke reflection. Key words: Common factors, Therapeutic effectiveness, Psychotherapy er psicólogo implica tener que convivir con la terapia y los que no, las diferentes formas de psicoterapia S sensación de que no sabes nada. Esto en el mejor de los casos porque si crees que sabes mucho producen típicamente resultados relativamente similares”. Y las revisiones sobre el tema corroboran dicha conclusión significa que estás simplificando la realidad psicológica dado que, en general, ningún modelo psicoterapéutico a niveles infantiles. muestra ser más efectivo que los demás (Botella, Maestra, Esta sensación de ignorancia, de estar perdido, proviene, Feixas, Corbella, y Vall, 2015). en parte, del terreno que pisamos los psicólogos cada día. Así, si somos psicólogos cognitivos podemos empezar Un campo en el que proliferan una ingente cantidad de te- a pensar que nuestras teorías no son más explicativas orías, enfoques y prácticas diferentes. Los metaanálisis in- que las psicoanalíticas, o si pertenecemos a una corrien- tentan paliar esta sensación comparando la efectividad de te más humanista podemos llegar a la conclusión de que técnicas provenientes de distintas corrientes con la inten- nuestras terapias no son más efectivas que las sistémicas, ción de llegar a comprobar cuál es la práctica más apro- o si … en definitiva que nuestro camino no es el camino. piada. Sin embargo, la conclusión oficial de la APA O que todos los caminos son el camino. (2013) después de comparar diferentes modelos psicotera- Las resistencias ante las evidencias empíricas que no péuticos es que: “A diferencia de las marcadas diferencias muestran la superioridad de ningún enfoque son obvias en cuanto a mejoría entre los pacientes tratados con psico- porque, a pesar de que ya hace tiempo que se está em- pezando a observar la similitud entre las corrientes Recibido: 14 julio 2017 - Aceptado: 9 noviembre 2017 Correspondencia: Jenny Moix Queraltó. Universidad Autónoma (French, 1933; Rosenzweig, 1936), cada día alimenta- de Barcelona. Edifici B. Campus de la UAB. 08193 Bellaterra. mos más la multiplicidad. Y es que aceptar la realidad España. E-mail: [email protected] - Web: www.jennymoix.com significa cambiar nuestro sistema de creencias. Y eso no sólo resulta difícil a nuestros pacientes… 22 JENNY MOIX Y VICTORIA CARMONA Artículos Si nos desapegamos de la perspectiva teórica con la Está claro que escuchar es un factor común en todas las que nos sentimos identificados, y nos abrimos a la idea terapias. Los psicólogos escuchamos. Sin escucha no hay casi mística de que “todas las terapias son una”, o dicho terapia. A pesar de lo evidente de la afirmación, lo que de otro modo que existe una corriente subterránea que resulta curioso es que en la formación oficial de los psi- iguala a todas las técnicas, aparece la pregunta: ¿Cuá- cólogos, en el grado de psicología, no existe ni una sola les son los factores comunes entre las terapias responsa- asignatura troncal que se dirija a enseñar a escuchar. Se bles de su efectividad? da por descontado que sabemos hacerlo. Diversos autores han presentado distintas categoriza- Lo que sí se enseña son teorías y protocolos de actua- ciones (véase las revisiones de Botella y Maestre, 2016 y ción que quizás, en algunos casos, más bien pueden di- Laska, Gurman y Wampold, 2014). Los factores comu- ficultar la escucha. Para escuchar es necesario el nes o inespecíficos son invisibles, su insustancialidad silencio. En un ambiente ruidoso oír al otro resulta impo- conlleva que se pueden clasificar de innumerables for- sible. Pero el ruido que impide que nos lleguen las pala- mas. En estas páginas, presentamos nuestra propia for- bras del paciente no siempre es externo, de hecho el ma de categorizar estos factores subterráneos. No es más ensordecedor es el interno. Si cuando el otro expo- una categorización que pretenda suplantar a ninguna ne su problema buscamos en nuestras teorías donde en- otra, no tiene ninguna pretensión, simplemente llevar a cajar sus palabras, o pensamos en cuál es el siguiente cabo una reflexión sobre el tema que quizás pueda re- paso del protocolo, mientras nuestra mente anda rebus- sultar de utilidad al lector. cando, el paciente sigue hablando, y todas esas pala- La realidad es una, la naturaleza es una. Los humanos bras se pierden entre los dos. para entenderla la categorizamos, la dividimos en concep- En la meditación (elemento clave en la mayoría de tos. Es una estrategia muy útil para entender la realidad, el terapias de tercera generación) se busca el silencio único inconveniente se presenta cuando confundimos nues- interior. La mente habla y se debe simplemente obser- tros conceptos con la realidad misma y nos olvidamos de var y dejar pasar los pensamientos. Uno debe sentar- que las divisiones son artificiales. La realidad puede, por se y estar presente en el aquí y en el ahora. Desde tanto, ser “troceada” de distintas formas. Las autoras a esta perspectiva, escuchar sería como una meditación partir de nuestra experiencia investigadora y clínica hemos donde el foco de atención en lugar de ser la respira- llegado a una determinada visión de la realidad psicológi- ción serían las palabras del paciente, y en donde los ca. Esa realidad podía ser presentada en este artículo; esto pensamientos distractores sobre teorías o técnicas es, dividida de distintas formas, finalmente hemos decidido simplemente se dejarían pasar en lugar de quedarnos categorizarla en siete conceptos. enganchados en ellos. Sólo estar presentes. Estaría- La clasificación que presentamos no intenta que sus ca- mos en modo “metaenfoque” más allá de nuestra tegorías sean mutuamente excluyentes. Y el hecho de perspectiva teórica. que sean siete y no seis u ocho es meramente simbólico. Como ya decía Theodor Reik (1948), discípulo de Freud, Hemos querido utilizar el número mágico de la psicolo- para escuchar primero es necesario haber aprendido a gía el: 7. George Miller en su estudio ya clásico: “The escucharnos a nosotros mismos, y después poder prestar magical number seven...” (1956) demostró que los lími- una atención flotante. Escuchar al paciente sin privilegiar tes de nuestra capacidad de procesar información (me- ningún elemento de su discurso y dejando actuar nuestro moria a corto plazo) eran de 7 unidades con propio proceso inconsciente. A la que escuchamos a tra- significado. De ahí los 7 secretos mágicos de la efectivi- vés de nuestras teorías ya estamos atendiendo selectiva- dad terapéutica. mente elementos del discurso. Para escuchar es necesario ser valiente. Tener la valen- Secreto nº 1: Escucha/Presencia tía de no querer entender demasiado rápido. Tener va- El regalo más grande que le damos a quien lentía significa soltar la mano de nuestras creencias acompañamos es una presencia cuidadosa no- psicológicas que tanto nos protegen y simplemente escu- manipuladora. La técnica puede ser muy útil, char con presencia. pero a la larga no es significativa si falta esta Eckhart Tolle en su libro “Practicando el poder del aho- presencia. ra” (2004), desde una perspectiva más espiritual y meta- Edwin McMahon y Peter Campbell fórica nos recalca la misma idea: 23 Artículos EFECTIVIDAD TERAPÉUTICA “Si ponemos un tronco que está empezando a arder junto Por tanto, colocamos una etiqueta al tratamiento, pero a otro que ya está ardiendo intensamente, y después de un como afirman Laska, Smith, Wislocki, Minami, y Wam- rato volvemos a separarlos, el primero arderá con mucha pold (2013) hay evidencias de que en cada investiga- más intensidad. Después de todo es el mismo fuego el que ción se aplica de forma diferente. No es extraño pues arde en ambos. Una de las funciones del profesor espiri- que sea difícil encontrar los mismos resultados cuando se tual es ser ese fuego. Algunos terapeutas también pueden replican investigaciones dentro de la Psicología (Open realizar la misma función, siempre que hayan ido más allá Science Colaboration, 2015). del nivel de la mente y puedan crear y mantener una inten- Así que existen dos realidades paralelas lo que se descri- sa presencia mientras trabajan contigo.” be en los artículos científicos y lo que realmente se lleva a cabo. Lo cual es casi tranquilizante porque los psicólogos Secreto nº 2: Creatividad no somos robots que podamos dispensar los tratamientos La creatividad vive enterrada bajo el de forma idéntica cada vez. Sin embargo, cuando se lle- pensamiento: “que me salga bien por favor, que van a cabo investigaciones sobre la efectividad de un trata- no me salga de la raya”. miento, los terapeutas del estudio se suelen sentir culpables Sergi Torres. si su creatividad hace acto de presencia en las sesiones porque sienten que se están desviando del protocolo y que Todas las técnicas y terapias de cualquier corriente de- por lo tanto su investigación no es rigurosa. ben ser adaptadas al paciente, eso implica flexibilidad y Sasser y Puchalsky (2010), en su artículo titulado: “The creatividad por parte del terapeuta. Por eso lo conside- Humanistic Clinician: Traversing the Science and Art of ramos un factor común o inespecífico al igual que otros Health Care” acaban con una sabia conclusión final: “de- autores (Bulacio, 2006). bemos aprender las herramientas necesarias para vivir en Si en un examen del grado de Psicología preguntára- dos mundos: en el mundo de la ciencia clásica con sus al- mos a los alumnos: ¿la psicología es: a) un arte b) una goritmos, reglas, y tecnologías; y el mundo de la ciencia ciencia? Para aprobar deberían marcar la opción b: una romántica, llena de historias, misterios y significados”. ciencia. Es lo que les repetimos los profesores en casi to- das las asignaturas. Secreto nº 3: Intención Durante la época de la “caja negra” del conductismo El propósito es una fuerza que existe en el tuvimos relegado de la psicología académica todo lo no universo. Cuando los hechiceros (los que viven de observable (pensamientos, emociones, creencias,…) y la Fuente) llaman al propósito, él acude y señala nos ceñimos a la conducta. Creímos que solo de esa for- el camino de la realización, lo que significa que ma la psicología podría ser ciencia. Ese hándicap ya fue los hechiceros siempre consiguen lo que se superado, pero ahora tenemos otro asunto a resolver proponen. ¿Dónde ponemos la creatividad del terapeuta? Carlos Castañeda Una de las premisas básicas de la ciencia es que las in- vestigaciones deben ser replicables. Así, si queremos Durante muchos cursos, en la asignatura “Principios de considerarnos científicos, los estudios para comprobar la Psicología” en la Universidad Autónoma de Barcelona in- efectividad de cualquier terapia deben poder ser “copia- vitábamos a una mesa redonda a cuatro psicólogos de dos”. Esto significa que además de que la metodología y distintas corrientes: psicodinámica, cognitivo-conductual, el diseño se describan con rigurosidad en el artículo, el sistémica y humanista. Allí se debatían ideas nucleares de protocolo terapéutico también. Es decir, debe estar des- sus enfoques y de sus prácticas. Todos, por descontado, crito de manera tan pormenorizada que cualquier otro defendían sus puntos de vista, en algunos casos había psicólogo lo podría seguir de idéntica forma. Seamos puntos de conexión, pero no en todos. Una de las pregun- honestos, no es así. Las descripciones que se suelen in- tas que siempre les formulábamos era: “por vuestra expe- cluir en los artículos científicos e incluso en muchas tesis riencia parece que creéis totalmente en la efectividad de doctorales, son unos simples párrafos o algún esquema, las terapias que empleáis, así podríamos concluir que los donde se indica el número de sesiones, la duración, el distintos enfoques son efectivos ¿cuál sería el elemento en objetivo de cada uno de ellas, las temáticas tratadas y común que compartís entre vosotros?” Todos estaban de poco más (Johnsen y Friborg, 2015). acuerdo en la respuesta: “la intención”. 24 JENNY MOIX Y VICTORIA CARMONA Artículos Todos deseaban intensamente que el paciente mejorara tamiento es eficaz se originan efectos placebo... Los independientemente de cuál fuera la técnica que emple- efectos placebo actúan sinérgicamente con los efectos aran. ¿Cuánto tiempo empleamos para diseñar, investi- del tratamiento activo…”. gar protocolos terapéuticos y cuánto a cultivar esa El efecto placebo se ha tratado durante muchos años actitud hacia el otro? como una variable extraña, un especie de contaminante Johnsen y Friborg (2015) llevaron a cabo una revisión de los resultados. Algo que se debía controlar para po- sistemática de 70 ensayos aleatorizados sobre la efecti- der observar con claridad el efecto limpio del principio vidad de la terapia cognitivo-conductual para la depre- activo en el caso de un medicamento, o del constructo sión. Los estudios se habían realizado desde 1977 hasta supuestamente responsable del cambio si se trataba de el año 2014. Los resultados mostraron un tamaño del una psicoterapia. efecto elevado, es decir, se concluyó que era efectiva. Poco a poco el efecto placebo ha ido atrayendo la aten- Sin embargo, lo sorprendente es que se observó una dis- ción de los investigadores ya no como contaminante sino minución del tamaño del efecto. En otras palabras, a como principio activo. Irving Kirsch, incansable investiga- medida que pasan los años la terapia parece ser menos dor de este misterioso efecto, ha intentado demostrar que efectiva. Desde nuestro punto de vista, una de las expli- los antidepresivos funcionan simplemente por dicho efecto caciones de este decremento puede estar relacionada (Kirsch, 2010; 2016). Realizando una revisión tanto de con “la intención”. los ensayos publicados como no publicados se dio cuenta En el momento que se crea un nuevo enfoque o se dise- de que los antidepresivos solo mostraban un poco más de ña una nueva terapia, se encuentra cargada de las ideas efectividad que los placebos. De hecho, los placebos al- esenciales y de la intencionalidad de los padres del pa- canzaban un nivel de eficacia del 82%. La efectividad de radigma. A medida que pasa el tiempo y los protocolos los antidepresivos se suele comprobar comparando un van saltando de manual en manual, de pizarra en piza- grupo experimental al que se le administra el medicamen- rra, se van desprendiendo de esa parte tan primordial to y un grupo control que recibe un placebo. Los diseños como invisible. Así a los nuevas terapeutas solo les “lle- son a doble ciego; los sujetos no saben si están tomando ga” una receta desprendida de su halo inicial. Quizás, el antidepresivo o la pastilla de azúcar. Ante los datos que solo quizás, por eso se observó la eficacia menguante mostraban una leve superioridad de los antidepresivos, Ir- de estas técnicas. ving se cuestionó si se debía a que los sujetos del grupo experimental, es decir, los que recibían el principio activo Secreto nº 4: Placebo notaban sus efectos secundarios, lo cual les hacía suponer Cuando esperas que algo suceda, tu cerebro que estaban tomando antidepresivos. Para poner a prue- hace que suceda. ba su hipótesis, realizó nuevas investigaciones en que em- Dan Ariely pleó placebos (atropina) que producían efectos secundarios (boca seca) similares a los antidepresivos. En Una de las investigaciones más citadas respecto a los estos ensayos, donde los sujetos del grupo placebo creían factores comunes es la de Lambert (1986). En la misma estar recibiendo antidepresivos por los síntomas experi- se concluyó que un 15% de la efectividad psicoterapéuti- mentados, no se observó diferencias entre ambos grupos ca proviene del efecto placebo. Reducir el efecto de las (experimental y placebo). Esto es, el placebo es tan eficaz creencias a un porcentaje sea cuál sea parece un tanto como un antidepresivo. artificial dado que, como afirma Kirsch (2013), esta Este tipo de estudios nos llevan a la conclusión de que magnitud no puede ser determinada. ¿En qué medida se manipulando las expectativas del paciente, los beneficios puede desligar lo que una persona cree, sus expectati- pueden ser mayores. Y esa manipulación fue justamente vas, de todos los cambios cognitivos, emocionales, fisio- lo que llevó a cabo Dan Ariely y sus colaboradores (Wa- lógicos que provoca terapia? Como afirman Turner y ber, Shiv, Carmon, y Ariely, 2008). En su estudio los su- colaboradores en la revista JAMA (Cfr. Bayés, 2007) “la jetos recibían descargas eléctricas y para calmar su administración de cualquier tratamiento, incluida la ciru- dolor se les administraba pastillas placebo. A la mitad gía, tiene efectos fisiológicos y psicológicos en el pacien- de ellos se les indicó que tenían un elevado precio, a la te, y dichos efectos se encuentran interrelacionados. otra mitad se les informó que era un medicamento bara- Siempre que el paciente y el clínico perciben que el tra- to. Tal como Ariely hipotetizó, las “pastillas caras” fue- 25 Artículos EFECTIVIDAD TERAPÉUTICA ron más efectivas. Parece pues que un medicamento tie- Ramón Bayés en el día de su 86 cumpleaños escribió ne más probabilidades de ser eficaz si es caro y provoca un artículo titulado: “Las palabras oportunas en el mo- efectos secundarios. mento preciso” (2016a). En el mismo incluye una expe- Siguiendo en esta línea de pensamiento, podríamos lle- riencia del psiquiatra Allen Frances: gar a la conclusión de que lo que envuelve a nuestras te- “En mi práctica como psicoterapeuta traté a un pacien- rapias (precio, localización, fama del terapeuta, etc.) te durante catorce años dos veces por semana y no con- puede tener un claro efecto placebo; es decir, puede au- seguí influencia alguna sobre su vida. En cambio, en la mentar su efectividad. Y por tanto, podríamos concluir sala de urgencias hablé con algunas personas durante que sería interesante investigar todos estos factores y fo- quince minutos sin apenas conocerlas. Me ha sorprendi- mentarlos en la práctica. Pero ¿es a esta conclusión a la do agradablemente que una de ellas se me acercara dos que debemos llegar? años más tarde para decirme: ”. ba que con ellas podría volar. Timoteo, su amigo el ra- La mayoría de psicólogos nos podemos sentir identifi- tón, le entregó una pluma mágica con la que le aseguró cados con esta experiencia. Concentramos nuestros es- que podría hacerlo. Dumbo, efectivamente lo consiguió fuerzos para provocar un cambio sin lograr éxito alguno aunque siguió ignorando que eran sus orejas las respon- y un día, de repente, nuestras palabras obran un mila- sables de semejante hazaña. Al final del cuento Timoteo gro. Milagros que como se dan independientemente de le confiesa que la pluma no tenía magia alguna y que él nuestro paradigma psicológico los consideramos tam- podía volar solo. bién como factor común. La gran pregunta es: ¿a qué se A través de los diseños denominados “open label pla- deben estos milagros? cebo”, los sujetos experimentales que reciben placebo (a Una de las explicaciones que nos regala Ramón Bayés diferencia de los diseños doble ciego) saben que lo están (2016b) para entender el motivo por el que nuestras pa- recibiendo. En otras palabras, saben que la pastilla que labras a veces resultan tan oportunas es el método poéti- ingieren no posee ningún principio activo. Y sorprenden- co. Y ¿qué es el método poético? Así lo describe: temente, aun así provoca efectos beneficiosos (Carvalho, “El método poético es el que utilizamos espontáneamente Caetano, Cunha, Rebouta, Kaptchuk, y Kirsch, 2016; si queremos entender y disfrutar en profundidad una poe- Charlesworth et al., 2017). Les estamos diciendo a los sía de Machado, la salida del sol desde la cumbre, una pacientes que la pluma no es mágica, pero la pluma si- noche estrellada en pleno campo, la sonrisa de un niño, el gue teniendo efecto. brillo de los ojos de una hermosa muchacha o una sinfonía Nos falta un paso más, convencer no solo a los pacien- de Mahler. No tenemos más remedio que afrontar estos tes, sino a nosotros mismos como terapeutas, que quizás acontecimientos enteros, de golpe, con toda su compleji- las terapias tienen mucho de plumas y que el efecto cu- dad. Solo la experiencia individual, adquirida a través de rador se encuentra dentro de nosotros mismos. Una idea la participación o el conocimiento de casos anteriores, uni- resumida de forma excelente en el título del libro de Joe da a la intuición y la creatividad, pueden servirnos, y no Dispenza (2014) : “El placebo eres tú”. siempre, de alguna ayuda para comprenderlos. “ En algunos casos, como apunta Bayés, los métodos Secreto nº 5: Poesía científicos y clínicos se quedan cortos, son demasiado El don del poeta es aclarar sin simplificar. Es casi simplificadores y analíticos. Las emociones, sensaciones, exactamente opuesto al don de la ciencia, que es pensamientos del otro deben ser captados en su totali- buscar comprender mediante la simplificación. dad, sin análisis, deben ser sentidos. Y si escuchamos y Iona Heath sentimos su poesía, quizás nuestras palabras tendrán más posibilidades de ser oportunas. Nuestras palabras pueden resultar tranquilizadoras, es- “Sin darnos apenas cuenta, podemos, o no, facilitar a tresantes, clarificadoras, motivantes, analgésicas, decisi- otro ser humano la llave que abre la puerta de algo esen- vas,... Al pronunciarlas desconocemos su repercusión cial que le permanecía oculto y puede iluminar su camino. porque depende de quién las escucha, en qué momento, Depende de nosotros dar el primer paso. Y raras veces sa- los gestos que las acompañan, y de muchos otros sutiles, bremos si hemos acertado. Pero debemos intentarlo.” inconscientes e invisibles aspectos. Ramón Bayés 26 JENNY MOIX Y VICTORIA CARMONA Artículos Secreto nº 6: Latidos terapia que hace conjunto con lo expuesto en estas pági- Yo soy mi prójimo nas puesto que intenta ir más allá de los enfoques. Publio Terencio Africano La compasión requiere que una parte de nosotros tome Otro factor común que comparten todas las aproxima- una cierta distancia del propio sufrimiento para poder ciones terapéuticas es que el psicoterapeuta y el paciente observarlo y aceptarlo y desde esa parte, desde esa ata- son humanos. A ambos les late el corazón. Resulta ob- laya, también poder observar el sufrimiento del otro. Lle- vio, pero lo obvio es lo que más fácilmente se pierde de var a cabo la terapia desde allí, nos puede ayudar a no vista. quedarnos enganchados en la misma telaraña del pa- Ambos (terapeuta y paciente) tienen sus miedos, inse- ciente y a admitir (sin refugiarnos detrás de ningún pro- guridades, prejuicios, obsesiones, complejos,... El hecho tocolo) que nuestro sufrimiento también se encuentra allí. de que uno sea especialista en psicología y el otro no (o Desde ese lugar, podemos ver los dos sufrimientos a la quizás sí) es solo un detalle diferencial que encontramos vez con cierto desapego, aceptarlos y tratarlos. Aunque en la superficie. Solo los distingue el envoltorio. sería más preciso decir que lo que se acepta y trata es Quizás el factor común que en muchos estudios se deno- un único sufrimiento que presenta diferentes formas (la mina “alianza terapéutica” (Bordin, 1979; De Nadai et al., del terapeuta y la del paciente). Es por eso que nuestro 2017; McClintock, Perlman, McCarrick, Anderson, y Hi- crecimiento se convierte en el crecimiento del paciente, y mawan, 2017) se refiera más directa o indirectamente a el suyo en el nuestro. cómo los psicólogos manejamos el hecho de que en el fon- do nos estamos tratando a nosotros mismos. Secreto nº 7: Misterio No es fácil ser psicólogo porque podemos sentirnos iden- Todas las religiones, artes y ciencias son ramas tificados con los problemas del paciente y quedarnos pe- del mismo árbol. gados en su misma telaraña cognitiva-emocional; o bien, Albert Einstein para que ese enganche no ocurra, podemos acabar refu- giados tras nuestras teorías abstractas y protocolos siste- La naturaleza es una. Nuestro anhelo desde siempre ha máticos. Desde ambos lugares es difícil poder ayudarlo. sido entenderla. Comprender toda su grandeza y com- La empatía es una de las palabras insignia de los psicólo- plejidad. Sin embargo, abarcarla de forma global den- gos. Uno de los factores comunes más estudiados. Sin em- tro de nuestra comprensión nos resulta imposible. Por bargo, este concepto suele emplearse en un solo sentido: eso la hemos dividido en partes: la química, la física, la ser empático con el otro, entender su punto de vista, reco- biología, la psicología,… Ella, ajena a nuestra división, nocer su emoción,... Es decir, la empatía va del terapeuta sigue comportándose como un todo. al paciente, pero no del terapeuta hacia sí mismo. Se supo- Los humanos poco a poco hemos ido entendiendo al- ne que él se entiende, se perdona y se acepta. gunos de sus enigmas, pero muchos otros se nos resis- La compasión es otro concepto, más amplio, y que pue- ten. Nos hemos empezado a dar cuenta de que si de ir en los dos sentidos. Paul Gilbert (2009) define la queremos entender, tenemos que ir mucho más allá de compasión como la conciencia profunda del sufrimiento nuestros sentidos. El reloj marca las horas, siempre con propio y de los demás junto con el deseo y el esfuerzo un mismo ritmo pero Einstein fue capaz de saltarse un para aliviarlo. Es un concepto más global que la empa- hecho que nos parecía una premisa básica y nos sugirió tía porque no implica entender ningún punto de vista, ni que el tiempo se estira y arruga como un acordeón. Y siquiera reconocer qué tipo de emoción concreta experi- ahora los físicos cuánticos nos sugieren que las partícu- menta el otro, sino simplemente asumir en profundidad las ni están aquí ni están allí, están en todas partes a la el sufrimiento que conlleva la naturaleza humana (pa- vez y solo cuando las observamos se concretan las posi- cientes y terapeutas incluidos). ciones y propiedades. ¿Cómo vamos a entender algo tan La terapia centrada en la compasión (Gilbert, 2009) es poco intuitivo? una terapia integrativa basada en la psicología evoluti- Los psicólogos, desde nuestro cuadrado, escuchamos va, social, y budista y la neurociencia con un enfoque todas esas teorías físicas como quien mira una película multimodal. Su eje es la compasión. La compasión del de ciencia ficción, no va con nosotros. Nosotros estamos terapeuta hacia él mismo y hacia el paciente, y la com- dentro de una de las habitaciones en las que dividimos pasión como objetivo de aprendizaje del paciente. Una la naturaleza intentando entenderla y ya tenemos sufi- 27 Artículos EFECTIVIDAD TERAPÉUTICA ciente. Pero la naturaleza se empeña en ser una. La divi- “El enfoque de los factores comunes amplía la visión de sión es solo una ilusión de los científicos. Cuando los físi- la psicoterapia al poner el énfasis de la explicación del cos cuánticos hablan de partículas que se comportan de cambio en aspectos que van más allá de protocolo de una manera tan misteriosa ¿de qué partículas imagina- tratamiento y del modelo teórico que lo guía. Se supera mos que están hablando? ¿de las que tienen en sus labo- así un símil sobresimplificado de los ingredientes activos ratorios? Esas partículas se encuentran también en del modelo médico”. nuestros huesos, nuestra sangre, nuestras neuronas, for- Es extremadamente difícil saber lo que provoca cam- mando todo nuestro cerebro. El misterio está en noso- bios en el paciente. Eso no debería extrañarnos dado tros. que en muchas ocasiones ni él mismo es consciente de lo Existen fenómenos psicológicos para los que no tene- que lo ha provocado. Y aunque, pueda llegar a verbali- mos explicación, esos sobre los que Freud advertía a zar el porqué del cambio no podemos estar seguros de Jung que no los abordará si quería que se considerara si su explicación es una mera racionalización, una teoría el psicoanálisis como algo científico. Dentro del caos del que ha fabricado pero que no tiene nada que ver con lo misterio, tiene su lógica que los psicólogos nos encontre- que de forma inconsciente ha sucedido. Exactamente lo mos ante hechos inexplicables, lo que no sería lógico es mismo ocurre con nosotros, con nuestras teorías, en gran que el misterio se hallara sólo en las partículas de los fí- medida, son racionalizaciones con las que nos sentimos sicos cuánticos. satisfechos porque nos parece que ponemos orden en la Así que aunque los psicólogos al hablar de factores complejidad del mundo psicológico. inespecíficos para explicar la efectividad de nuestras te- El interruptor del cambio se halla flotando en algo que su- rapias demos explicaciones tan generalistas como el pla- cede entre nosotros y los pacientes. Algo volátil, inaprensi- cebo, la intención, la alianza terapéutica,….Incluso con ble, invisible,… que es difícil de captar con la lógica y de ellas no lo podemos explicar todo. En la ecuación expli- estructurar. Una de las etiquetas más concretas con la que cativa que andamos buscando uno de los elementos con los estudios intentan manejar este concepto, bajarlo más a más peso es sin duda el misterio. lo empírico es el de “alianza terapéutica“ (Kidd, Davidson, y McKenzie, 2017). En estas páginas nos hemos permitido CONCLUSIONES no adherirnos ni siquiera a esta etiqueta, para tratar la in- Conozca todas las teorías, domine todas las sustancialidad del tema de forma más libre. Así hemos pre- técnicas, pero al tocar una alma humana sea sentado una división de 7 puntos, conscientes que podrían apenas otra alma humana ser más o menos y ser explicados desde muchas ópticas di- Carl G. Jung ferentes. Hemos intentado describir algo que no vemos, que no tocamos, que no olemos,… hemos descrito algo Los factores inespecíficos parecen ser más predictores basándonos solo en atisbos. Conscientes además de que de los resultados clínicos que cualquier técnica (Day, estos atisbos son subjetivos. Halpin, y Thorn, 2016; Laska, et al., 2014). De hecho, ¿Por qué en las facultades de psicología no tratamos (ca- los metaanálisis indican tamaños del efecto elevados- si) los factores comunes que existen entre las terapias? moderados de los factores inespecíficos, unos tamaños Pues porque son difíciles de plasmar en la pizarra, de mayores que los que presentan las diferencias entre tra- atrapar en un PowerPoint, de evaluar en un examen… tamientos (Laska, et al., 2014). Eso nos podría sumir en Son demasiado escurridizos sobre el papel. Así que segui- la indefensión, podríamos llegar a pensar que todos mos centrados en lo más fácil de explicar por puntos o nuestros esfuerzos, investigaciones, estudios, no sirven con guiones ordenados. Cuando un alumno se matricula para nada, pero ese sentimiento sería equívoco porque de primero de psicología lo hace lleno de expectativas, gracias a nosotros, independientemente de nuestro enfo- pensando que entrará en el misterio de la mente humana, que, muchas personas salen de su sufrimiento. Lo que dentro del mundo del inconsciente, dentro de un universo ocurre es que parece que la clave de la eficacia de lo mágico. A los profesores nos enternece esta visión, sabe- que hacemos no se encuentra donde nosotros pensamos. mos que no es lo que se va encontrar. Desde el primer día Tal como concluyen González-Blanch y Carral-Fernán- le vamos a afirmar de manera repetida que la psicología dez (2017) en su excelente revisión crítica sobre este te- es ciencia y vamos a estructurar su mente como un Excel ma publicada en esta misma revista: para que sepa diferenciar las diferentes patologías, las 28 JENNY MOIX Y VICTORIA CARMONA Artículos distintas especialidades, las metodologías, sobre todo de- Probablemente la “parte científica” del lector haya en- be entender las diferencias, debe aprender a dividirlo to- contrado este artículo poco riguroso y echando de menos do. Al acabar el grado, suele tener la sensación de que una fundamentación más teórica. Y es que las presentes no sabe nada, de que existen muchas casillas de ese Excel páginas no pretendían, ni ser una revisión, ni ofrecer una en que hemos troceado la psicología que desconoce, mu- taxonomía alternativa a las que ya existen sobre factores chas técnicas de las que ha oído el nombre pero nada inespecíficos. Ni tan solo tenía como objetivo llegar a más, así empieza su andadura hacia los cursos de post- conclusión alguna. De hecho más que ordenar ideas pre- grado, másters y doctorados, esperando encontrar algo tendía desordenarlas, porque la reflexión se promueve que llene esa sensación de no-saber que nunca se ve col- cuando tenemos que volver a ordenar ideas de diferente mada. Una sensación que de forma más o menos sólida forma. Este artículo por tanto no apela a la parte científi- sigue perdurando a lo largo de su (nuestro) camino profe- ca sino a la parte humilde del lector, a la que reconoce sional. que la naturaleza humana es un misterio. En el terreno de la investigación los factores inespecífi- Esa parte humilde es la que nos permite abrir la mente cos son simples actores secundarios, los papeles de pro- y como decía Kuhn (1962) abrir la mirada nos lleva a tagonista están en manos de los protocolos terapéuticos. nuevos paradigmas. La humildad es el recurso más po- Lo que más importa en la investigación es publicar, y pa- tente del que disponemos para caminar hacia la conver- ra que un artículo sea aceptado lo primordial es la meto- gencia de los distintos enfoques, dirigirnos hacia lo más dología empleada. Esto nos lleva a que podemos esencial y para dejar espacio a todo lo que no entende- investigar algo totalmente irrelevante pero con una meto- mos. Y lo más maravilloso es que esa misma humildad dología intachable y es publicado, pero a la inversa no nos multiplica la consciencia de lo fascinante que resulta pasa nunca. Los factores inespecíficos por su condición nuestra profesión. casi etérea son difíciles de encajar dentro de muchas me- todologías. Así que acabamos estudiando lo investigable, CONFLICTO DE INTERESES no lo importante. Investigar lo investigable no es el pro- No existe conflicto de intereses blema. El problema es que lo que no cae dentro de las redes de la ciencia, pasa a no existir. De ahí nuestra ce- REFERENCIAS guera. Afortunadamente, están surgiendo nuevas meto- American Psychological Association. (2013). Recognition of dologías más flexibles y enfoques más integrativos. psychotherapy effectiveness. Psychotherapy, 50(1), 102. Si pasamos de la docencia y la investigación a la psi- Bayés, R. (2007). El reloj emocional. Barcelona: Alienta. cología aplicada, algunos psicólogos optan por aferrar- Bayés, R. (2016a). Encontrar las palabras oportunas en se a sus teorías casi como a un salvavidas, aunque cada el momento preciso. Ágora de Enfermería, 20 (4), vez más terapeutas van cambiando hacia una mirada 149-151 más integradora y muchos se autodefinen como eclécti- Bayés, R. (2016b). Olvida tu edad. Barcelona: Plataforma. cos (Botella et al., 2015). Como afirman Corbella y Bote- Bordin E., (1979). The generalizability of the psychoa- lla (2004): “se abre ante nosotros un futuro que vendrá nalytic concept of the working alliance. Psychothe- marcado por un creciente interés por las posturas inte- rapy, 16, 252–260. gradoras en psicoterapia”. Botella, L. y Maestra, J. (2016). Integración en psicotera- Profesores, investigaciones, psicólogos aplicados… an- pia en terapeutas en formación: atribución de factores damos todos demasiado tensos. Perdidos entre tantos comunes e ingredientes específicos en casos prototípi- datos. Descentrados. Quizás nuestra mirada comprensi- cos de cinco orientaciones psicoterapéuticas. Revista va la dirigimos más a nuestros pacientes que a nosotros Argentina de Clínica Psicológica, 15, 39-48. mismos. Ante nosotros tenemos el misterio de la natura- Botella, L., Maestra, J., Feixas, F., Corbella, S y Vall, B. leza humana y pretendemos entenderlo desde dentro. (2015). Integración en Psicoterapia 2015: pasado, Anhelamos comprenderlo y controlarlo a la perfección. presente y futuro. Integración en Psicoterapia. doi: Si nuestros pacientes fuéramos nosotros mismos segura- 10.13140/RG.2.1.1351.3040. Documento de traba- mente les diríamos que no se exigieran tanto, que deja- jo. Recuperado ResearchGate: https://www.research- ran de analizar tanto, que confiaran más es su intuición, gate.net/publication/284869588_Integracion_en_psi en todo el potencial que llevan dentro. coterapia_2015_pasado_presente_y_futuro 29 Artículos EFECTIVIDAD TERAPÉUTICA Bulacio, J.M. (2006). Factores inespecíficos en la Psicote- Kirsch, I. (2013). The placebo effect revisited: Lessons le- rapia. 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