Reglamento de Seguridad Alimentaria en España

Las autoridades competentes de las comunidades autónomas envían una solicitud a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) para solicitar adaptaciones a los requisitos de seguridad alimentaria.

AESAN, junto con las comunidades autónomas, evalúa la solicitud y determina si se necesitan adaptaciones, realizando una evaluación de riesgos.

Antes de implementar las medidas de adaptación, AESAN las notifica a la Comisión Europea y a los demás Estados miembros.

Se pueden hacer excepciones y adaptaciones a los requisitos para pequeños mataderos.

AESAN y las comunidades autónomas trabajan juntas para asegurar la seguridad alimentaria.

Patas de ungulados domésticos pueden transportarse desde el matadero a un establecimiento autorizado para su procesamiento en alimentos. Estas patas deben estar limpias y se procesarán posteriormente mediante desollado o escaldado y depilado.

El tamaño de la marca sanitaria para corderos, cabritos y lechones puede ser reducido utilizando un sello de 4,5 cm de ancho y 3 cm de alto. Las letras y cifras deben tener una altura mínima de 0,6 y 0,8 cm respectivamente.

El sacrificio de ungulados domésticos considerados peligrosos y reses de lidia debe realizarse fuera de un matadero.

El Reglamento (CE) n.º 853/2004 regula el transporte de patas de ungulados a un establecimiento autorizado para su procesamiento en alimentos.

Las canales de animales como ungulados domésticos, aves de corral, lagomorfos y animales de caza menor silvestre pueden contener vísceras además del estómago e intestino, siempre que estén en conexión anatómica con el cuerpo.

En el caso de las aves, las canales pueden contener el proventrículo y la molleja, además de las vísceras permitidas.

Las vísceras de los ungulados domésticos deben inspeccionarse 'post mortem' para asegurar su salubridad.

Para aves de corral y lagomorfos, se debe garantizar la homogeneidad sanitaria de cada lote sacrificado.

En la inspección 'post mortem', el veterinario oficial debe examinar un porcentaje de animales de cada lote, revisando las vísceras y cavidades corporales.

Si durante el examen 'post mortem' se encuentran alteraciones en varias canales, el veterinario debe inspeccionar todas las canales del lote.

Los estómagos de rumiantes jóvenes y pequeños rumiantes lactantes destinados a la producción de cuajo deben escaldarse o lavarse en los mataderos.

Los estómagos de pequeños rumiantes lactantes pueden extraerse sin vaciar cuando se destinen a la producción tradicional de cuajo en pasta.

Los mataderos y establecimientos que producen carne picada, preparados de carne y carne fresca de aves de corral en pequeñas cantidades pueden estar exentos de las frecuencias de muestreo del Reglamento (CE) n.º 2073/2005, siempre que la autoridad competente lo apruebe, basándose en un análisis de riesgos.

La AESAN, junto con las autoridades competentes, creará una guía para ayudar a aplicar correctamente las exenciones de las frecuencias de muestreo.

El transporte de carne de ungulados desde el matadero a otro establecimiento para producción de productos específicos puede realizarse antes de alcanzar ciertos rangos de temperatura, siempre que la autoridad competente lo autorice.

El transporte de carne de ungulados para producción de productos específicos debe cumplir con los requisitos que las autoridades de origen y destino establezcan.

El transporte de carne de ungulados para producción de productos específicos debe ser directo, desde un único establecimiento de origen a otro de destino, sin pasar por otros establecimientos.

Se refiere al sacrificio de animales que no pueden ser trasladados a un matadero sin riesgo para su bienestar o para la persona responsable.

Las reses de lidia lidiadas o corridas se sacrifican en el mismo lugar y bajo las mismas condiciones que los animales que necesitan ser sacrificados de forma urgente.

La leche cruda de animales que no cumplen los requisitos en relación con la brucelosis y la tuberculosis se puede utilizar bajo ciertas condiciones.

Se permite el uso de leche cruda de vacas y búfalas que no muestren reacción positiva a las pruebas de la brucelosis o la tuberculosis, y que hayan sido sometidas a un tratamiento térmico.

Se permite el uso de leche cruda de animales de las especies ovina o caprina que no muestren reacción positiva a las pruebas de la brucelosis o que hayan sido vacunados contra la brucelosis.

La leche cruda que no cumpla los requisitos del Reglamento debe ser tratada térmicamente hasta mostrar una reacción negativa a la prueba de la fosfatasa.

Se permite el uso de leche cruda procedente de animales que no cumplan los requisitos, siempre que se cumplan las condiciones establecidas en el Reglamento (CE) n.º 853/2004.

Las autoridades de la comunidad autónoma deben establecer un sistema para inspeccionar la carne antes de la venta. En el caso de animales que pueden tener triquina, se debe hacer un análisis específico para detectarla.

La venta directa de carnes del productor al consumidor en el lugar de sacrificio es permitida.

El productor también puede vender su carne a un establecimiento de venta al por menor, sin intermediarios.

La comercialización de la carne solo está permitida dentro del municipio donde se obtuvo, o dentro de un área similar definida por la autoridad autonómica.

Las canales o partes de carne deben tener una marca rectangular que dice "VENTA LOCAL" y el número de registro del establecimiento.

Al comprar carne directamente del productor, el comprador debe recibir un documento con información específica sobre el animal, la carne y la fecha de caza.

Se usan métodos específicos para analizar la presencia de triquinas en animales.

El análisis de triquina se realiza con métodos establecidos en la Unión Europea.