4. DINAMIZACIÓN Realización de publicidad en el lugar de venta

La disposición del punto de venta es la forma en que organizamos y distribuimos los productos y secciones dentro de una tienda.

La publicidad en el punto de venta es una estrategia que busca animar a los clientes a realizar una compra en el mismo lugar donde se encuentran.

Los PLV son materiales como carteles, displays, folletos y pancartas que buscan atraer la atención del cliente e informar sobre los productos y ofertas.

La señalización es un sistema de información que ayuda a los clientes a encontrar lo que buscan, orientarse y navegar por una tienda.

La señalética se refiere a las señales que indican la ubicación de productos, secciones, servicios o salidas de la tienda.

Los stoppers son elementos de gran tamaño que se sitúan en lugares estratégicos para llamar la atención del cliente y destacar una zona o producto.

La rotulación es el diseño y aplicación de letras o gráficos sobre superficies para transmitir un mensaje o información.

Es la publicidad que se realiza dentro de un establecimiento comercial, con el objetivo de influir en la decisión de compra de los clientes.

Un conjunto de acciones que se realiza para promocionar un producto o servicio. Incluye la publicidad, la comunicación, la promoción y otras estrategias.

Es la última oportunidad para convencer al cliente de comprar un producto o servicio.

El punto de venta debe tener una imagen atractiva para que los clientes se sientan seguros y confiados al comprar.

Los elementos visuales como las carteles, flechas en el suelo, etc., sirven como guía y captan la atención del cliente dentro de una tienda.

Las experiencias interactivas como las muestras gratis, demostraciones de productos permiten al cliente probar o sentir el producto.

La publicidad en el punto de venta debe ser atractiva y concisa para que el cliente la recuerde.

Es importante que la publicidad en el punto de venta sea creible y no engañosa para que el cliente confíe en el producto o servicio.

Es vital definir los objetivos de la publicidad en el punto de venta para poder medir su eficacia y lograr los resultados deseados.

La PLV es la publicidad que se utiliza en el punto de venta para persuadir a los clientes a realizar una compra.

La PLV ocasional se caracteriza por ser temporal, barata y de fácil montaje, y se utiliza para generar interés y urgencia en las promociones.

La PLV permanente se caracteriza por su calidad y durabilidad, y se utiliza para destacar una marca o un producto a largo plazo.

Los catálogos, carteles y folletos son materiales de PLV que se pueden utilizar tanto de forma ocasional como permanente, dependiendo de su objetivo.

La entrada de una tienda es un lugar estratégico para colocar PLV ya que es el primer punto de contacto con los clientes y puede influir en sus decisiones de compra.

El color negro en el fondo de un cartel se asocia con elegancia, poder y sofisticación.

El color amarillo en el fondo de un cartel se asocia con optimismo, alegría y energía.

El color rojo en el fondo de un cartel se asocia con pasión, energía, urgencia y peligro.

El color blanco en el fondo de un cartel se asocia con pureza, limpieza, minimalismo y modernidad.

El color azul en el fondo de un cartel se asocia con confianza, seguridad, tranquilidad y profesionalidad.

El color verde en el fondo de un cartel se asocia con naturaleza, frescura, equilibrio y crecimiento.

Las tipografías serif son ideales para textos largos, como artículos de periódicos y revistas. Son más fáciles de leer que las sans serif.

Las tipografías sans serif son perfectas para títulos y subtítulos, ya que se enfocan en la claridad y visibilidad.

La ubicación de un cartel es fundamental para que sea efectivo. Los carteles situados en el nivel del techo captan la atención desde lejos.

Los carteles colocados a la altura de las góndolas de productos sirven para comunicar información específica sobre un producto o categoría.

La claridad en el mensaje publicitario se refiere a la utilización de palabras precisas y a la expresión de un sentido claro y comprensible para el público objetivo.

El mensaje publicitario debe ser atractivo para captar la atención de los usuarios y generar interés en el producto o servicio ofrecido.

El mensaje publicitario busca influir en la decisión de compra del consumidor, persuadiéndolo para que adquiera el producto o servicio que se promociona.

El mensaje publicitario se compone de diferentes elementos que se combinan para transmitir el mensaje. Estos elementos incluyen sonidos, imágenes y texto.

El mensaje publicitario debe estar dirigido a un público específico con necesidades e intereses particulares. La segmentación del público objetivo permite un mensaje más efectivo.