Procedimientos II - 2º Parcial de Fisioterapia

El TENS motor utiliza impulsos bifásicos simétricos con un ancho de impulso de 0,15 a 0,3 mseg. Estos impulsos son de corta duración y se repiten a una frecuencia específica para estimular los nervios y los músculos.

Los ultrasonidos de alta frecuencia se utilizan para tratar lesiones musculoesqueléticas, pero no pueden usarse para tratar el dolor neuropático. El dolor neuropático se produce por daño a los nervios, y los ultrasonidos no tienen la capacidad de reparar los nervios.

El ultrasonido utiliza un cabezal de tratamiento para concentrar la energía ultrasónica en una zona específica. El cabezal tiene una zona de Fresnel y otra de Fraunhofer. La zona de Fresnel es más cercana al cabezal y la zona de Fraunhofer es más lejana. La zona de Fraunhofer tiene una mayor profundidad de penetración.

Para tratar una tendinitis rotuliana crónica con ultrasonido, se recomienda usar una frecuencia de 1 MHz, pulsátil con una relación 1:10 y una frecuencia de repetición de 100 Hz. La dosis de energía debe ser de 0,8 W/cm2 . Este tipo de tratamiento se ha demostrado eficaz para reducir el dolor e inflamación en tendinitis crónicas.

Los ultrasonidos no se usan para tratar varices, ya que no son una condición muscular. Las varices son venas dilatadas y tortuosas debido a la presión arterial alta.

El ultrasonido se propaga a través de un medio material, no puede propagarse en el vacío. Por lo tanto, a diferencia de las radiaciones electromagnéticas como la luz, los ultrasonidos necesitan un medio material para propagarse.

El ultrasonido de mayor frecuencia tiene menor profundidad de aplicación en los tejidos. Esto se debe a que las ondas de mayor frecuencia tienen una menor longitud de onda y, por lo tanto, se absorben más rápidamente por los tejidos. El ultrasonido de 3 MHz tiene una menor penetración que el ultrasonido de 1 MHz.

El ultrasonido de baja frecuencia se utiliza para el tratamiento de tejidos profundos como músculos, tendones y ligamentos. El ultrasonido de alta frecuencia se utiliza para el tratamiento de tejidos superficiales como la piel y los tejidos subcutáneos.

El espectro en TENS analgésico convencional no se basa en variaciones automáticas de intensidad aplicada. La variación en la intensidad se realiza manualmente por el terapeuta.

La intensidad en TENS analgésico convencional se calibra hasta que el paciente percibe una sensación de hormigueo o cosquilleo intenso. Esta sensación, llamada parestesia, es un indicador de que los nervios están siendo estimulados correctamente.

El TENS cicatricial NO se basa en la producción de endorfinas. Este tipo de TENS utiliza corriente eléctrica para estimular la cicatrización y la reparación del tejido.

El TENS analgésico convencional NO se basa en el aumento de la liberación de sustancia P. Se basa en la teoría de la compuerta del dolor, donde la estimulación eléctrica bloquea las señales de dolor que viajan al cerebro.

El cátodo en corriente continua, en el tratamiento de úlceras por presión, favorece la cicatrización y la formación de tejido de granulación.

El ánodo NO mejora la consistencia del tejido de granulación. De hecho, puede aumentar el riesgo de infección bacteriana.

Las radiaciones infrarrojas (IR) de baja temperatura no alcanzan una profundidad mayor a 0.1 cm, mientras que las de alta temperatura pueden penetrar hasta 1 cm.

Las radiaciones ultravioletas tipo A (UVA) son las responsables de la pigmentación de la piel.

La laserterapia es un método terapéutico que utiliza la luz láser para estimular la producción de ARN, un proceso clave en la reparación celular y la reducción de inflamación.

Las corrientes de alta frecuencia NO provocan despolarización de las células excitables, como los músculos y las neuronas.

La Onda Corta por campo circuplode es la modalidad de alta frecuencia que tiene mayor efecto térmico en el tejido muscular y nulo efecto térmico en el tejido graso.

Las aplicaciones de corrientes de alta frecuencia en procesos crónicos se realizan en sesiones de 15-20 minutos.

En procesos agudos se utilizan dosis tipo III de corrientes de alta frecuencia, pero con menor tiempo de aplicación y menor intensidad.

En las microondas, la frecuencia de impulso no debe superar los 82 Hz durante las aplicaciones en procesos agudos.

La estimulación eléctrica transcutánea (TENS) es una terapia que utiliza impulsos eléctricos para aliviar el dolor. Para el tratamiento de úlceras por presión o úlceras en pie diabético, la intensidad del TENS se ajusta hasta observar actividad motora en el área afectada, es decir, hasta percibir una pequeña contracción muscular. Este ajuste permite una mejor estimulación de los nervios y mejora la circulación sanguínea.

En la construcción de la corriente TENS cicatricial se utilizan impulsos rectangulares alternados. Estos impulsos son de corta duración y se repiten a una frecuencia específica. La forma de la onda rectangular ayuda a estimular las terminaciones nerviosas y reduce el dolor.

El TENS cicatricial utiliza diferentes frecuencias para diferentes tipos de úlceras. Para úlceras por presión, se utiliza una frecuencia baja de 2 Hz. Para úlceras en pie diabético, se utiliza una frecuencia más alta de 80 Hz. Las frecuencias más bajas son mejores para estimular la reparación de tejidos, mientras que las frecuencias más altas ayudan a aliviar el dolor.

La magnetoterapia utiliza campos magnéticos para estimular la reparación de tejidos. Se ha demostrado que este tipo de terapia estimula el metabolismo del calcio, la actividad de los osteoblastos y acelera la cura de lesiones óseas. El colágeno, un componente clave del tejido conectivo, es afectado por la piezoelectricidad, lo que explica la efectividad de la magnetoterapia en su reparación.

La magnetoterapia utiliza bobinas de diferentes tamaños para generar campos magnéticos. El tamaño de la bobina determina la intensidad del campo magnético. Una bobina de mayor diámetro genera un campo magnético menos potente.

La magnetoterapia está contraindicada en pacientes con úlceras sangrantes. Los campos magnéticos pueden aumentar el flujo sanguíneo, lo que puede agravar el sangrado.

Los campos magnéticos tienen polaridad, con un polo norte y un polo sur. Estos polos no tienen cargas eléctricas positivas y negativas, sino que se refieren a la dirección del flujo del campo magnético.

La magnetoterapia es útil para relajar la musculatura estriada, ya que reduce la tensión muscular. También puede ayudar a aliviar el dolor y mejorar la circulación sanguínea. Sin embargo, no ha sido demostrada una disminución en la presión parcial de oxígeno en sangre por la magnetoterapia.

En terapia interferencial, la modulación de tipo sinusoidal se utiliza para fortalecer la musculatura. Esta corriente crea un efecto de vibración muscular, estimulando su contracción y aumentando la fuerza.

Las corrientes interferenciales rectangulares, con frecuencia de 2500 Hz, AM de 45 Hz y trenes de 0,5 seg de duración, se utilizan para aliviar el dolor crónico.

La terapia interferencial tetrapolar con vector de corriente eléctrica, portadora de 4000 Hz y AMF de 100-120 Hz, se utiliza para tratar el dolor agudo en el hombro.

En la aplicación tetrapolar de terapia interferencial, la profundidad de modulación justo debajo de los electrodos es del 100%.

La terapia interferencial bipolar con frecuencia portadora de 4000 Hz y AMF de 1-100 Hz se utiliza para favorecer la reabsorción de líquidos y estimular o sedar.

La terapia interferencial NO está contraindicada en pacientes con Enfermedad de Dupuytren.

La terapia interferencial permite obtener efectos similares a las corrientes de alta frecuencia.

En la terapia interferencial tetrapolar, las corrientes se cruzan en el tejido, creando una zona de interferencia donde se produce el efecto terapéutico.