Normativa de Infancia y Violencia de Género

Ley que establece un marco integral para la protección de la infancia y la adolescencia en Castilla-La Mancha, incluyendo medidas para la prevención, detección y atención a la violencia de género.

La Ley Orgánica 1/2004, modificada por la Ley Orgánica 10/2022, establece medidas para la prevención, persecución y sanción de la violencia de género.

Esta ley define la violencia de género como una forma de violencia que se ejerce contra las mujeres por el hecho de serlo.

El Código Civil establece que no se concederá la guarda conjunta cuando se demuestre que alguno de los progenitores ha intentado atentar contra la vida, la integridad física, la libertad o la seguridad sexual del otro progenitor o de los hijos.

La Ley establece que el progenitor que no ejerce la custodia podrá visitar a los hijos menores, pero la autoridad judicial determinará el tiempo, el modo y el lugar de las visitas, teniendo en cuenta la seguridad de los niños y niñas.

Ana tiene derecho a ser escuchada en todo procedimiento judicial que la afecte. Esta ley reconoce a los menores el derecho a participar en los procesos de decisión que les conciernen.

Se deben tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad de Ana y su madre, como la solicitud de una orden de protección, la separación física del padre, el apoyo psicológico y social, y la asistencia legal.

El caso de Ana ilustra la importancia de proteger los derechos de los niños y niñas en situaciones de violencia de género.

Es la capacidad que tiene una persona mayor de 16 años de tomar decisiones relacionadas con su salud sin necesidad de consentimiento de un representante legal.

Es la ley que regula la protección de datos personales en España. Establece que para el tratamiento de datos de un menor de 14 años se necesita el consentimiento de sus representantes legales, excepto en casos específicos que la ley exceptué.

Es una ley que establece la autonomía del paciente para tomar decisiones sobre su propia salud. Dentro de esta autonomía se incluye el consentimiento informado.

En el caso de Eva, que es una adolescente de 16 años, la decisión de compartir o no la información con sus padres la tiene ella, ya que es mayor de 16 años. La ley 41/2002, de 14 de noviembre, básica reguladora de la autonomía del paciente, y la Ley Orgánica 3/2018 de Protección de Datos Personales, le otorgan el derecho a tomar decisiones sobre su propia salud y a controlar el tratamiento de sus datos personales.

En casos de agresión sexual reciente, el centro de la mujer debe activar los protocolos de atención integral para la víctima, incluyendo la asistencia médica, psicológica y legal. Es esencial mantener la confidencialidad de la información, garantizando que la víctima se sienta segura y respetando su decisión de no informar a sus padres. En el caso de no ser agresión sexual reciente, el centro de la mujer debe explicar a la víctima sus derechos y opciones.

En el caso de la víctima, la preservación de su privacidad y control sobre su información es fundamental. El centro de la mujer debe respetar la decisión de la víctima sobre quién y cuándo compartir la información, y tener en cuenta su vulnerabilidad y protección.

El consentimiento informado es un requisito esencial en la atención médica. En el caso de una víctima de agresión sexual, puede elegir con quién compartir la información sobre el abuso. El centro de la mujer debe respetar la privacidad de la víctima y ayudarla a ejercer su derecho a la autonomía en la toma de decisiones.

Refers to a legal situation where a parent who is being investigated for committing crimes against their partner or children, including violence, is prohibited from having visitation or staying with the child. This applies to both criminal cases and cases where there are strong suspicions of domestic violence.

This refers to the legal right granted to a parent, usually the other parent, to visit their child in a supervised setting like a Family Meeting Point (PEF). This is often used when there are concerns about the safety of the child.

The court can establish a new visitation or communication schedule for the parent accused of abuse, especially if proven to be in the best interests of the child. This is a careful process where the child's needs are prioritized.

The court may allow visitation or communication with the parent in prison, even if convicted of domestic violence, but it must be carefully evaluated based on the best interests of the child and a detailed assessment of the parent-child relationship.

The child's right to express their wishes, opinions, and feelings concerning the relationship with a parent facing a criminal charge or accusation of violence.

The right of a child to have their needs and best interests considered in all decisions regarding their care, education, and relationship with their parents, especially when facing domestic violence.

A legal process where a judge investigates whether there are strong signs that a child is a victim of domestic violence or has been exposed to it.

A child can be offered psychological help and professional support from a child psychologist or social worker without the explicit consent of the parent facing criminal charges or accusations of abuse. This provision applies if there's evidence the child was exposed to violence.

This refers to receiving psychological care and therapy from specialized organizations or professionals. The consent of the other parent is not required if the child has been exposed to violence and the mother is receiving assistance from a violence prevention agency.

A mother can enroll her children in a new school without the father's consent in cases of domestic violence, even if they share parental responsibility. This right is protected by law and aims to ensure the child's safety.

This legal principle mandates that the best interests of the child should be the guiding factor in any decision affecting a child, especially in cases of domestic violence, where the child's safety, well-being, and emotional health are paramount.

The right of a child to receive education is considered a fundamental human right. This principle underscores the importance of ensuring that every child has access to quality education.

This law focuses on protecting victims of gender violence and includes provisions for ensuring immediate access to education for children who have been relocated due to domestic violence. This helps ensure stability and continuity in the child's life.

These laws establish specific requirements for proving a case of domestic violence in order to access the protections and resources available for victims, including access to education. Evidence can come from court decisions, protective orders, or reports from social services.