Ley 41/2002 sobre Derechos del Paciente

Esta ley establece los principios básicos que regulan el derecho a la información sanitaria y la autonomía del paciente en España.

La ley se aplica a todas las relaciones entre profesionales sanitarios y pacientes.

Son los principios que rigen las acciones de los profesionales sanitarios hacia los pacientes, como la confidencialidad, la autonomía y la beneficencia.

Es el derecho que tiene el paciente a recibir información clara y precisa sobre su estado de salud, las opciones de tratamiento disponibles y los riesgos y beneficios de cada uno.

Solo el paciente o su representante legal pueden acceder a la información sobre su estado de salud.

Consiste en dar al paciente un control sobre sus decisiones médicas. El paciente puede aceptar o rechazar un tratamiento y decidir cómo quiere que se gestione su información.

Es un documento que proporciona información sobre los riesgos y beneficios del tratamiento, y que el paciente debe firmar para dar su consentimiento.

En caso de que el paciente no pueda tomar decisiones por sí mismo, su representante, ya sea un familiar o un tutor legal, tiene el derecho a tomarlas por él.

Una declaración escrita de un médico que confirma el estado de salud de una persona en un momento determinado.

Cualquier tipo de documento que contiene información médica sobre un paciente.

El conjunto de documentos que registran la historia médica de un paciente a lo largo de su tratamiento.

Cualquier información que permita entender o mejorar la salud de una persona.

Un documento emitido por el médico al finalizar el tratamiento de un paciente, resumen de su historial, diagnóstico y recomendaciones.

Cualquier acción médica para la prevención, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación o investigación.

La facultad del paciente de elegir libremente entre diferentes opciones de atención médica.

El profesional responsable de coordinar la atención médica de un paciente.

La persona que necesita atención médica.

La unidad médica con recursos y profesionales para brindar atención sanitaria.

El derecho a conocer la información sobre los riesgos para la salud pública o individual.

Es la información que se genera sobre el estado de salud y los tratamientos del paciente.

El paciente tiene derecho a que se respete la privacidad de sus datos de salud.

Garantía de que el paciente tiene el poder de decidir sobre su tratamiento.

Toda acción médica requiere el consentimiento libre del paciente previa información.

El médico debe documentar las circunstancias del caso y comunicar su decisión a los familiares.

La historia clínica es un documento legal que contiene la información médica del paciente. Guarda y refleja la atención sanitaria recibida.

El contenido de la historia clínica se divide en partes: Identificación del paciente, Historia clínica, Documentación médica, Documentación de enfermería, Pruebas complementarias, Documentos administrativos.

La historia clínica se usa para planificar y evaluar la atención del paciente, comunicar información médica, investigar casos, realizar estudios y estadísticas, y garantizar la calidad de la atención. Es un documento clave en la atención médica.

Las historias clínicas se deben conservar durante un tiempo determinado según la legislación. La legislación establece la forma en que se deben guardar estos registros y por cuánto tiempo.

Los pacientes tienen derecho a acceder a su historia clínica, solicitar copias y solicitar correcciones si encuentran errores. También tienen derecho a confidencialidad, asegurándose de que su información se maneja de forma discreta.

El alta del hospital significa que el paciente ya no necesita la atención médica del hospital y puede irse a casa o a otro centro. Se emite un informe de alta que resume la atención recibida durante la estadía.

Los médicos tienen la obligación de informar a los pacientes sobre su estado de salud y los tratamientos, y también tienen la responsabilidad de documentar sus acciones médica y administrativamente.

Se deben seguir las leyes y regulaciones específicas de cada país** para garantizar la privacidad de los pacientes y el uso correcto de sus datos médicos. Las historias clínicas son reguladas por la ley.

La información relativa a la hoja clínicoestadística, autorización de ingreso, informe de urgencia, anamnesis y exploración física, evolución, órdenes médicas, hoja de interconsulta, informes de exploraciones complementarias, consentimiento informado, informe de anestesia, informe de quirófano o de registro del parto, informe de anatomía patológica, evolución y planificación de cuidados de enfermería, aplicación terapéutica de enfermería, gráfico de constantes e informe clínico de alta.

Se exige solo para procesos de hospitalización o cuando se determine en un protocolo.

Prueba biométricas, médicas o analíticas que se realizan para determinar el vínculo de filiación con la madre.

Criterios utilizados para llevar la historia clínica dentro de una institución asistencial.

La historia clínica se utiliza principalmente para asegurar una atención adecuada al paciente.

Método para permitir el acceso a la historia clínica de los pacientes.

Se debe especificar que la atención sanitaria es consecuencia de violencia contra menores de edad.

La historia clínica es un instrumento fundamental para la asistencia adecuada al paciente.

Un paciente puede decidir si quiere participar o no en un proyecto de investigación o docente, incluso si esto implica usar sus datos médicos. El paciente puede revocar su consentimiento en cualquier momento.

El paciente tiene el derecho a recibir información sobre su salud, las opciones de tratamiento disponibles y los riesgos y beneficios de cada opción. Pero este derecho tiene límites.

En casos de urgencia médica, el profesional puede actuar sin el consentimiento del paciente si hay una amenaza inmediata para la salud del paciente. Se debe intentar obtener el consentimiento de familiares o personas allegadas si es posible.

El paciente puede decidir, por adelantado, qué tipo de atención médica quiere recibir si llega a un estado en el que no puede expresarlo. Esto se hace mediante un documento llamado instrucciones previas.

El derecho del paciente a la información médica se limita por la salud del mismo paciente, la salud de otros, la salud pública y por las necesidades médicas del caso.

El paciente tiene el derecho de no ser informado, pero este derecho debe ser expresado por escrito. Aun así, se necesita el consentimiento para cualquier intervención clínica

Las intervenciones clínicas que son esenciales para la salud del paciente se pueden llevar a cabo sin el consentimiento del paciente en casos específicos de riesgo para la salud pública.