La Casa de Bernarda Alba: Lorca's Critique of Spanish Society

La casa de Bernarda Alba es una obra de teatro escrita por Federico García Lorca en 1936, pero no fue estrenada hasta 1945 en Buenos Aires gracias a la iniciativa de la actriz Margarita Xirgu.

La historia comienza en la casa de Bernarda Alba, donde dos criadas limpian la habitación de Angustias, la hija mayor de Bernarda, que tiene 39 años y se va a casar con Pepe el Romano.

Bernarda es una mujer autoritaria y obsesionada con la imagen que tienen los demás de ella y su familia, y antepone esta reputación a los valores y a sus hijas.

Angustias se da cuenta de que todas sus hermanas la envidian y se sienten atraídas por Pepe, lo que genera celos y discusiones entre ellas.

Adela, la más joven, se acicala con un vestido verde y se muestra interesada en Pepe, lo que despierta la sospecha de Bernarda y las criadas.

María Josefa, la abuela de las niñas y madre de Bernarda, está encerrada en una habitación porque su hija no la quiere dejar salir debido a su locura.

Poncia, una de las criadas, insinúa que Angustias se pasa de las manos con su futuro marido y que Adela y Pepe tienen un idilio a espaldas de Angustias.

Bernarda cree que Angustias debe casarse cuanto antes para evitar que siga habiendo peleas entre sus hijas, y Poncia insinúa que todo se debe a la represión y la falta de libertad.

La obra refleja la sociedad de la España profunda del siglo XX, donde la tradición y la violencia acallaban la voz de las mujeres, condenadas a un papel secundario.

Lorca deja ver en La casa de Bernarda Alba cómo una sociedad cruel y autoritaria puede envenenar las relaciones entre las mujeres hasta el punto de asesinarlas a base de odio y celos.

La obra es una crítica social que muestra la desigualdad entre ricos y pobres, y cómo el dinero y las clases altas tienen poder sobre las bajas.

La historia termina con la muerte de Adela, que se suicida después de que Bernarda descubre su relación con Pepe y se siente avergonzada y deshonrada.