El Riesgo en las Relaciones Internacionales

El riesgo es un concepto que se ha filtrado recientemente en las Relaciones Internacionales (RRII).
El análisis y la gestión de riesgos se han convertido en elementos importantes de las sociedades modernas.
Ulrich Beck y Anthony Giddens están asociados al estudio del riesgo y la gestión del riesgo en las ciencias sociales, especialmente con la tesis de la sociedad del riesgo.
El marco de la sociedad del riesgo de Beck no se trata del aumento de riesgos, sino de la aparición de nuevas formas de riesgos temporal y espacialmente ilimitados que trascienden las fronteras geográficas y los plazos calculables, escapando así a los mecanismos establecidos de seguro y control.
La tesis de la sociedad del riesgo de Beck se ha ampliado recientemente para incluir riesgos que entran más fácilmente en el ámbito tradicional de los estudios de la IR.
La literatura sobre el riesgo debe demostrar la utilidad del concepto de riesgo como herramienta analítica.
Es importante desarrollar formas de explicar la identificación, la evaluación y la gestión de riesgos (lo que podría denominarse "riesguización") y por qué algunas formas de gestión de riesgos surgen en algunas situaciones y no en otras.
La naturaleza inherentemente social y políticamente controvertida de la riesguización debe ser reconocida.

Riesguización y agencia

Un aspecto importante del desarrollo de la literatura de riesgos e IR es la identificación de los actores involucrados en la conformación de procesos particulares de riesguización.
Es importante preguntar: ¿Quién se resiste a los intentos de riesguización?, ¿Quién queda excluido de este proceso?
Gran parte de la literatura sobre el riesgo en las Relaciones Internacionales se ha centrado en identificar a los actores que buscan definir y gestionar los problemas como riesgos.
Se ha prestado mucha menos atención en identificar el papel de los actores que resisten las representaciones predominantes del riesgo, o incluso de aquellos actores que se definen como "arriesgados", en la configuración de los procesos de riesguización.
La concentración predominante en los actores que han tratado de actuar dentro de un paradigma de riesgo ha presentado en gran medida la riesguización como un proceso lineal.
Riesguización es donde determinados actores emplean el riesgo como forma de definir diferentes problemas y eventos en ausencia de contestación y resistencia política.
Se pasa por alto la naturaleza políticamente controvertida de la riesguización y la influencia de quienes se resisten a las representaciones del riesgo.
Se proporciona un buen ejemplo de la fuerza de la literatura más amplia sobre el riesgo y las Relaciones Internacionales al identificar a los actores que han tratado de abordar cuestiones y problemas concretos a través de los conceptos de riesgo y gestión de riesgos.
Los Estados Unidos, la Unión Europea y la OTAN participan en el cambio hacia las doctrinas estratégicas basadas en la gestión de riesgos que rigen los enfoques occidentales de la guerra.
Intervenciones en Kosovo, Afganistán e Irak comparten una "lógica de riesgo", motivada por la presencia percibida de diversos riesgos globalizados para la seguridad occidental.
Este hecho ha dado lugar a la utilización de técnicas de gestión de riesgos, como la acción preventiva o pre-emptiva, para evitar la posibilidad de que se materialicen futuros peligros.
La identificación de los problemas y cuestiones como riesgos es parte de un dispositivo de riesgo precautorio que proporciona una modalidad particular de ordenar y gobernar la realidad.
La cuestión de si los actores dentro o fuera de las poblaciones gobernadas se resisten a estos intentos de gobernar a través del riesgo, o qué influencia tiene esto en la configuración de los discursos y las tecnologías de gobierno, no recibe mucha atención.
Para entender el proceso a través del cual se formulan y cambian con el tiempo las racionalidades, las prácticas y las tecnologías basadas en el riesgo que comprenden un dispositivo de riesgo precautorio, es necesario identificar explícitamente a todos los actores involucrados en la configuración de este proceso, incluidos aquellos que están sujetos a, y/o se resisten a, estas formas de gobierno basadas en el riesgo.
La riesguización debe entenderse como un proceso dinámico y políticamente controvertido.

El contexto normativo de la riesguización

Un área crucial para que la literatura del riesgo y la IR aborde es la cuestión de por qué ciertos fenómenos o actores se representan como riesgos y cómo varían las percepciones, las definiciones y las respuestas al riesgo en los diferentes casos.
Incluso si los riesgos están enraizados en las condiciones materiales, la forma en que se abordan y entienden estará condicionada normativamente.
Esto puede explicar, por ejemplo, por qué algunos problemas se identifican como riesgos que requieren gestión mientras que otros no, incluso si las condiciones materiales son similares.
La definición de riesgo es extremadamente fluida: lo que se considera arriesgado en un contexto no es necesariamente un riesgo en otro.
Una de las consecuencias de la representación de los riesgos contemporáneos como "globalizados" y, por lo tanto, más impredecibles y abstractos, es que la autoridad y la ideología han llegado a reemplazar la opinión y el asesoramiento de los expertos como base sobre la cual se toman las decisiones al responder a los riesgos.
El recurso a ideas e ideologías concretas puede ayudar a explicar cómo se han definido y gestionado determinados riesgos en las diferentes maneras.
Algunos estudiosos se han centrado en el papel de los valores liberales en la riesguización de las cuestiones de seguridad contemporáneas.
Tras los atentados del 11 de septiembre, la administración Bush trató de definir la guerra contra el terrorismo como una batalla ideológica entre la ideología del "odio" de los terroristas y los valores occidentales de libertad y democracia.
Esto informó el enfoque de gestión de riesgos adoptado por la administración Bush, que consistía en tratar de promover la democracia liberal en los Estados de riesgo identificados (los llamados Estados canalla o frágiles).
El objetivo era perturbar las condiciones socioeconómicas y políticas que se percibían como productoras de radicalismo en individuos descontentos y negar a los terroristas "refugios seguros".
La forma en que la administración Bush definió el riesgo del terrorismo, y el modo de gestión del riesgo que se seleccionó en respuesta a él, se basan en ideas muy particulares de paz democrática y el poder de la democracia liberal para eliminar las condiciones en los Estados iliberales y frágiles que pueden dar lugar a actividades radicales y terroristas.
La riesguización es un proceso sustentado por normas e ideas específicas.
Es importante explorar la forma en que las identidades y los intereses de los actores están conformados por los procesos de riesguización.
La configuración de la identidad de un actor como "arriesgado", o incluso como "gestor de riesgos", puede tener potencialmente un impacto significativo en la influencia de sus intereses y comportamientos.
Es fundamental la forma en que las definiciones de riesgo, incluida la identificación de determinados actores como "arriesgados" o "gestores de riesgos", empoderan a algunos actores a expensas de otros.

Los efectos políticos y sociales de la riesguización

Un área crítica de debilidad en la literatura actual sobre el riesgo es la ausencia de análisis sistemáticos de los efectos sociales y políticos globales/internacionales de la riesguización, particularmente con respecto a las relaciones sociales y políticas entre los Estados y entre los actores estatales y no estatales.
Los efectos del riesgo y la globalización sobre el Estado, los efectos del riesgo en las relaciones interestatales y los efectos del riesgo en las relaciones entre los actores estatales y no estatales son temas de relevancia.
Una de las principales asociaciones en la literatura ha sido la de la globalización y la emergencia de formas de riesgo des-limitadas.
La globalización ha facilitado la aparición de nuevas formas de riesgo que trascienden los límites temporales y espaciales tradicionales.
La percepción de que los riesgos son cada vez más capaces de eludir y trascender las fronteras territoriales plantea la cuestión de cómo responderán los Estados.
La erosión de la distinción entre la gobernanza nacional e internacional y la consiguiente aparición de nuevos espacios de lo que podría denominarse "gobernanza transnacional" es relevante.
La identificación de riesgos globalizados abre nuevos espacios de gobernanza en los que se pueden gestionar y regular determinados problemas.
La definición de diversos riesgos contemporáneos como globalizados o "des-limitados" justifica la elevación de cuestiones que normalmente se tratan dentro de los procesos de gobernanza nacional hacia estos nuevos espacios de gobernanza transnacional que escapan a los controles nacionales existentes.
Los riesgos globalizados legitiman la intervención internacional y la apertura de espacios transnacionales dentro de sus instituciones nacionales, a través de los cuales los Estados y las sociedades que son objeto de la intervención son gestionados y regulados por los intervinientes, dejando intacta su forma soberana.
La reconfiguración de la distinción entre la gobernanza nacional y mundial no se limita necesariamente a las intervenciones de construcción del Estado ni a las zonas políticas concretas.
La adaptación de la gobernanza a través de diversas áreas políticas, como la seguridad, la economía y la salud, se ha convertido recientemente en un rasgo marcado de la mayoría de los Estados occidentales.
Los Estados han tratado de adaptar la gobernanza a una nueva escala y elevar ciertos problemas a nuevos espacios de gobernanza transnacional, sino también los conflictos sociales y políticos y el sesgo ideológico que han dado forma a este proceso, así como los actores para los que esta adaptación es atractiva y aquellos para los que es perjudicial.
Es importante es la cuestión de cómo la riesguización afecta a las normas y reglas que sustentan la conducta interestatal y ordenan las relaciones mutuas de los Estados.
La identificación de diversos riesgos de seguridad para Occidente y la utilidad del liberalismo y la democracia como respuesta a estos riesgos, tiene importantes efectos sociales y políticos para la sociedad internacional.
Este proceso de riesguización ha conducido a la formación de nuevas jerarquías dentro de la sociedad internacional, significadas por varias intervenciones diseñadas para promover o consolidar las instituciones democráticas liberales y la gobernanza dentro de los Estados "arriesgados".
Las normas y reglas de conducta dentro de la sociedad internacional han sido alteradas sustancialmente por la definición occidental de riesgos de seguridad particulares y su papel autoasignado como gestor de riesgos.
Estas intervenciones han resultado en la erosión de las normas de no intervención e igualdad soberana.
Las prácticas regulatorias de los principales estados occidentales han llegado a ser vistas como arriesgadas debido a su fracaso en la prevención del comportamiento que inicialmente condujo a la crisis financiera mundial.
Muchos de los riesgos identificados en la literatura involucran a actores no estatales, ya sea como riesgo, o como importantes definidos y gestores de riesgos.
El enfoque del marco de la sociedad del riesgo en la globalización y las diversas formas de riesgo des-limitado, por ejemplo, ofrece potencialmente una forma de analizar el papel de los actores no estatales en la facilitación, definición o gestión de diversas formas de riesgo des-limitado.

Conclusión

Desde el final de la Guerra Fría, la literatura sobre el riesgo y la gestión del riesgo dentro de las ciencias sociales ha crecido constantemente.
Impulsada en gran parte por la temprana labor de sociólogos como Beck y Giddens, la investigación sobre el riesgo se ha ramificado hacia nuevas áreas de investigación científico-sociales que incluye la ciencia política y la IR.
La literatura ha surgido recientemente, ya incluye varios trabajos significativos que intentan arrojar luz sobre algunas de las cuestiones más importantes de la IR que actualmente captan la atención de los estudiosos, como la estrategia o el terrorismo.
La riesguización, que comprende la identificación, la evaluación y la gestión de riesgos, debe entenderse como un proceso inherentemente social y políticamente controvertido.
Se han identificado varias áreas importantes de investigación, incluyendo cuestiones de agencia, contexto normativo y los efectos sociales y políticos de la riesguización.