Desarrollo Humano: Infancia y Nacimiento

Study Notes

El periodo neonatal abarca las primeras cuatro semanas tras el nacimiento.
Recién nacidos pesan entre 2.5 y 4.5 kilos y miden de 45 a 55 centímetros.
La falta de respiración durante más de cinco minutos puede llevar a daño cerebral o muerte por anoxia.
La escala de Apgar se utiliza para evaluar el estado del neonato uno y cinco minutos después del parto.

Bajo peso al nacer y prematuridad impactan en la capacidad de succión y regulación térmica.
Tratamientos incluyen incubadoras y cuidado del canguro, además de administración de surfactante.
Postmadurez se refiere a los bebés nacidos después de 42 semanas, con riesgo de daño cerebral.
Mortinato indica la muerte del feto después de la vigésima semana de gestación, afectando emocionalmente a la familia.

Principios cefalocaudal (desarrollo de arriba hacia abajo) y proximodistal (de adentro hacia afuera) rigen el crecimiento infantil.
El aumento de tamaño es más rápido en los primeros tres años.
La nutrición adecuada es esencial, con una alta tasa de desnutrición asociada a muertes infantiles.
A los dos años, muchos niños presentan daños irreversibles por mala alimentación.

La conformación del encéfalo es fundamental para el desarrollo físico y cognoscitivo.
Estructuras importantes: tallo cerebral (funciones básicas), cerebelo (equilibrio) y corteza cerebral (razonamiento y lenguaje).
Procesos de mielinización y desarrollo de reflejos son cruciales en esta etapa.

Los infantes desarrollan capacidades sensoriales como tacto, olfato, gusto, audición y vista desde el nacimiento.

Hitos clave incluyen el control de la cabeza, manos y locomoción, influenciados por el entorno cultural.

Se consideran seis enfoques para el estudio: conductista, psicométrico, piagetano, procesamiento de información, neurociencias y contexto social.
Enfoque psicométrico: evalúa el Coeficiente Intelectual (CI) y utiliza pruebas como la Escala de Bayley.
Enfoque piagetano: se centra en la etapa sensoriomotriz y etapas de desarrollo como uso de reflejos y reacciones circulares.
Principales desarrollos en esta etapa incluyen la permanencia del objeto y el desarrollo simbólico.

Hitos iniciales: vocalizaciones, percepción de sonidos, gestos, primeras palabras y frases.
Influencias en el desarrollo del lenguaje incluyen la interacción social y la estimulación lingüística del entorno.

Las emociones básicas como tristeza, alegría y miedo aparecen en los primeros años.
Tres patrones temperamentalmente diferenciados: niño "fácil", "difícil" y "lento para animarse".
El apego seguro se desarrolla a través de experiencias de confianza y cuidado, mientras que otros tipos de apego (evasivo, ambivalente) reflejan diferentes dinámicas relacionales.

Los infantes desarrollan un sentido de autonomía y las normas sociales mediante la interacción y guía de los cuidadores.
El sentido del yo y la confianza en el entorno se forman a partir de experiencias tempranas de apego y seguridad.