Derecho Hereditario Romano

Rama del derecho que regula las consecuencias de la muerte, como la designación de herederos y la transmisión del patrimonio.

La transmisión del patrimonio de un difunto a uno o más herederos.

Persona que fallece y deja un patrimonio.

La transmisión de todos los bienes o derechos hereditarios.

Conjunto de bienes, derechos y obligaciones que pertenecen a una persona.

Derechos que no se extinguen con la muerte, como el derecho a la propiedad.

Derechos que no se transmiten a los herederos, como derechos políticos.

Unidades de patrimonio que se transmiten a los herederos.

La forma en que se distribuye la herencia tras la muerte de una persona.

La sucesión que se establece según la voluntad del fallecido en su testamento.

La sucesión que se establece según la ley cuando no existe testamento o éste es inválido.

El principio que establece que nadie puede morir en parte con testamento y en parte sin él.

La parte de la herencia que aumenta la cuota de un heredero cuando otro heredero no la acepta.

Un tipo de sucesión en el derecho romano que otorgaba al pretor el poder de nombrar a los herederos.

Un tipo de bonorum possessio concedido por el pretor cuando existía un testamento válido.

Un tipo de bonorum possessio concedido por el pretor en ausencia de un testamento válido.

La obligación del emancipado de aportar una parte de su patrimonio a la herencia del padre fallecido.

Los descendientes del fallecido, tanto los que vivían bajo su potestad como los que se habían emancipado.

Los parientes del fallecido por línea masculina, que no comparten sangre.

Los parientes del fallecido por línea de sangre.

La madre del difunto recibió derechos de herencia gracias a este senadoconsulto.

Este senadoconsulto otorgó derechos de herencia a los hijos en relación a la muerte de su madre.

Las decisiones legales o decretos del emperador romano.

En el derecho justinianeo, la sucesión legítima se basa en la cognación, considerando el parentesco por ambas líneas (masculina y femenina). Se establecen cuatro órdenes de herederos: 1) Descendientes. 2) Ascendientes y hermanos carnales. 3) Medios hermanos. 4) Colaterales. El cónyuge superviviente se incluye a falta de otros familiares.

El liberto, persona liberada de la esclavitud, tenía un régimen especial de sucesión. Antes de Justiniano, la herencia del liberto iba primero a sus descendientes, luego al patrono y sus agnados, y después a otros familiares. Justiniano simplificó el orden: 1) Descendientes del liberto. 2) Patrono y parientes. 3) Cognados del liberto. 4) Cónyuge superviviente.

El testamento es un acto jurídico solemne de última voluntad por el cual una persona designa al heredero o herederos, dispone de sus bienes y puede incluir otras decisiones como legados o nombramientos de tutores.

En la Roma antigua, tres formas de testamento existían: el testamento calatis comitiis, realizado ante los comicios, el testamento in procinctu, frente al ejército, y el testamento per aes et libram, que consistía en una venta ficticia de los bienes.

Este tipo de testamento se realizaba en tiempo de paz, ante los comicios curiados, una asamblea que se reunía para este fin dos veces al año.

Este testamento se hacía durante la guerra, ante el ejército.

Este testamento, también llamado testamento mancipatorio, consistía en una venta ficticia realizada mediante la mancipatio, una forma de venta formal romana.

El heredero testamentario no solo heredaba los bienes del causante, sino que también sufría una especie de sucesión en sus relaciones sociales y religiosas. Por eso, la sucesión testamentaria prevalecía sobre la legítima.

La interpretación favorable del testamento, 'favor testamenti', busca preservar la voluntad del testador en caso de duda sobre las disposiciones testamentarias.

Las XII Tablas establecían que si un liberto moría sin testamento, la herencia pasaba a sus heredes sui (descendientes directos que estaban bajo su potestad). Si no los tenía, la herencia iba al patrono o a sus familiares.

El pretor, un magistrado romano, estableció un orden de sucesión para los libertos que otorgaba prioridad a sus descendientes, luego al patrono, a sus agnados y gentiles, y posteriormente a otros familiares.

El matrimonio cum manu era una forma de unión matrimonial en la que la mujer se incorporaba a la familia del marido, perdiendo su capacidad de ser autora de herencia. La mujer no podía ser heredera.

En este tipo de matrimonio, la mujer conservaba su propio patrimonio y podía ser autora de herencia.

Los hijos naturales y la concubina de un romano tenían derecho a una sexta parte de la herencia si no existían viuda ni descendientes legítimos. Si estos existían, solo recibían una pensión alimenticia.