Cuidados de la Persona Terminal

Análisis de la situación del paciente usando instrumentos y una historia clínica completa, incluyendo evaluación clínica, funcional, mental y social.

Evaluación de las capacidades del paciente para mantener su independencia.

Actividades Avanzadas de la Vida Diaria, que incluyen participación social y aficiones.

Actividades Instrumentales de la Vida Diaria, como cocinar, escribir, lavar y comprar.

Actividades Básicas de la Vida Diaria, como asearse, caminar y control de esfínteres.

Evaluación de la cognición y el estado de ánimo del paciente, usando tests específicos.

Dolor, náuseas, vómitos, y otros síntomas, relacionados con la enfermedad terminal, ubicación del tumor y gravedad.

Cuidados que se centran en aliviar los síntomas en la etapa final de la vida del paciente.

Considerar todas las necesidades del paciente (física, emocional, social y espiritual) y no solo lo físico.

Involucrar a la familia del paciente en su cuidado y tratamiento, considerando a amigos y personas de soporte.

Respetar la capacidad de decisión del paciente en su tratamiento.

Identificar y manejar los síntomas de la enfermedad, especialmente en etapas terminales.

Un grupo de profesionales con diversas especialidades para atender al paciente.

Priorizar el bienestar del paciente terminal, incluso en etapas avanzadas.

Creer que se puede mejorar la calidad de vida del paciente, incluso en situaciones difíciles.

Un ambiente de respeto y confianza donde el paciente se sienta cómodo para expresar sus preocupaciones y temores.

Una enfermedad en la etapa final que causará la muerte en un plazo relativamente corto, por lo general dentro de seis meses.

Sociedad Española de Cuidados Paliativos, entidad que define los criterios para considerar una enfermedad como terminal.

Rama de la medicina que se enfoca en el cuidado integral y la comodidad del paciente terminal, no en la cura.

Aplicar tratamientos agresivos o prolongados para prolongar la vida del paciente, sin considerar su calidad de vida.

Acción de provocar la muerte de un paciente terminal para aliviar su sufrimiento.

Manejar y aliviar los síntomas del paciente terminal, como el dolor, las náuseas y la dificultad para respirar.

Hablar con el paciente y sus seres queridos, escuchando sus necesidades y preocupaciones, ofreciendo apoyo emocional.

El proceso emocional que atraviesa el paciente al aceptar su muerte, incluyendo la negación, la ira, la negociación, la depresión y la aceptación.