Cuestión Agraria en el Perú (1968 en adelante)

Reforma implementada por el gobierno de Juan Velasco Alvarado para expropiar tierras de los terratenientes y redistribuirlas entre los campesinos.

Grupo de terratenientes que controlan la mayoría de las tierras agrícolas.

Grandes extensiones de tierra propiedad de una sola persona o familia, que generaban desigualdad.

Presidente militar que impulsó la reforma agraria.

Situación previa a 1969 donde la mayoría de las tierras agrícolas estaban en manos de pocas familias ricas.

Tocar tierras de personas para dárselas a campesinos.

Medidas implementadas para revertir los cambios radicales de la reforma agraria.

Líder campesino que lideró la ocupación de tierras antes de la reforma agraria

Organizaciones creadas en la sierra para repartir la tierra entre los campesinos y evitar la concentración de la riqueza.

Peleas entre los mismos campesinos dentro de las SAI’s, debido a la disputa por la tierra y los beneficios.

Las SAI's fracasaron debido al conflicto horizontal entre campesinos que no recibían beneficios de la reforma agraria.

La reforma agraria redujo la productividad agrícola, aumentó la desigualdad regional y el éxodo del campo.

Ley que revirtió la reforma agraria, implementando una contrarreforma que devolvió tierras a los terratenientes.

La contrarreforma benefició a los grandes terratenientes, pero no solucionó la desigualdad y la pobreza en el campo.

Grupos que creían que la reforma era un acto de justicia redistributiva que beneficiaba a los pobres, desplazó a los grandes terratenientes tradicionales, eliminó las relaciones serviles en las haciendas y democratizó la sociedad.

Grupos que consideraban la reforma como un retroceso técnico en la agricultura, que generó descapitalización del agro, pobreza rural y una incoherencia en repartir tierras e importar alimentos subsidiados.

La reforma tuvo resultados contradictorios, aplicada solo en la costa y sierra, no benefició a todas las familias rurales, solo ¼ de la población. La tierra distribuible era insuficiente y generó más desigualdad.

En la costa, las haciendas eran tomadas por la fuerza militar, sin que los trabajadores la reclamen ni los dueños puedan retirar sus pertenencias. Estas se convertían en CAPs, donde los militares dirigían la operación y los trabajadores eran socios de fundió.

La selva no se incluyó en la reforma, posiblemente por la dificultad de acceso a la tierra y la diversidad en la zona.

La reforma buscaba redistribuir tierras, pero no satisfizo a todas las familias rurales. Esto se explica por la existencia de familias campesinas que ya eran dueñas de latifundios y por la insuficiencia de tierras distribuibles.

Hubo problemas en los mecanismos utilizados para implementar la reforma, como la militarización de las tierras, la formación de cooperativas sin suficiente participación de los trabajadores y la falta de apoyo técnico.

Los ingresos reales de los socios de las cooperativas aumentaron un 78% entre 1968 y 1976, lo que podría sugerir una mejora en la situación económica de los trabajadores.

Esta ley modificó el sistema de propiedad de la tierra en Perú, permitiéndoles a las empresas poseer tierras y reduciendo las restricciones en el tamaño de las propiedades. Además, permitió la privatización de tierras pertenecientes a comunidades campesinas y nativas.

Permitió la privatización de las tierras de las comunidades campesinas y nativas, dando a los dueños de las tierras la opción de vender sus propiedades o mantenerlas.

La sierra del Perú alberga a la mayor parte de los campesinos y a dos quintas partes de la tierra agrícola. A pesar de esto, la población rural en la sierra enfrenta pobreza debido a la falta de desarrollo.

El conflicto armado entre Sendero Luminoso y las Fuerzas Armadas en la sierra condujo al deterioro de las condiciones de vida para los campesinos. Esto generó un flujo migratorio hacia Lima y otras ciudades buscando mejores oportunidades.

A pesar de la revolución capitalista, el sector exportador no tradicional ocupa solo un pequeño porcentaje de las tierras agrícolas en la costa. La sierra aún enfrenta pobreza y la selva se ve afectada por la destrucción de comunidades indígenas a causa de la falta de protección.

Las empresas mineras pueden contaminar las tierras agrícolas, afectando la productividad y la salud del suelo alrededor de las zonas de extracción.

Los cambios en los sistemas de propiedad de la tierra, especialmente en la selva, han dejado a las comunidades indígenas desprotegidas. Esto ha provocado desplazamiento y la destrucción de comunidades, como la de los ashaninka.

El Perú experimentó un crecimiento económico importante en 2007 debido a las exportaciones de minerales a China e India a precios altos.

Una protesta masiva que desafió el poder de Fujimori, mostrando un punto de resistencia en su gobierno.

Muchos peruanos perdieron su trabajo o tenían la amenaza constante de perderlo.

Personas que trabajan sin un contrato formal o seguridad laboral, un reflejo de la dificultad para encontrar empleos formales.

Un grupo que representaba a los empresarios y la burguesía agraria, dando voz a los intereses económicos de la clase alta.

El reto de mantener la cooperación y el apoyo mutuo entre personas pobres.

Lugares que proveen comida gratis a personas sin recursos, pero con dependencia externa.

Cuando el poder político utiliza ayuda social para obtener votos, no por verdadera preocupación.

La pobreza generalizada que enfrentaba la mayoría de los peruanos, con dificultades para acceder a recursos básicos.

El conjunto de políticas económicas que impulsaron la apertura del mercado agrícola peruano a la inversión extranjera, la privatización y la desregulación. Esto permitió la entrada de grandes empresas y la expansión de la producción para la exportación, pero también generó desafíos para los pequeños agricultores.

El aumento significativo en la cantidad de productos agrícolas exportados desde Perú, especialmente caña de azúcar, tras la implementación de políticas neoliberales en el sector.

Organizaciones de pequeños agricultores que se unían para trabajar en conjunto, pero que fueron transformadas por la entrada de grandes empresas, como Cartavio, Laredo y Casa grande, en el contexto neoliberal.

El aumento del consumo de carne, impulsado por la economía neoliberal, también provocó un aumento en el precio de los alimentos, afectando a la población más vulnerable, particularmente a aquellos que no podían acceder a una dieta variada.

La influencia de las políticas neoliberales, como la eliminación de aranceles al trigo, provocó que Perú dejara de producir trigo y depende, en gran medida, de las importaciones, sobre todo de Estados Unidos.

El aumento de precios de insumos esenciales, como la urea, debido a la influencia del precio del petróleo, impactó en los costos de producción de los agricultores peruanos, dificultando su actividad.

El debilitamiento del sol peruano frente al dolar, que es una consecuencia del neoliberalismo, perjudica a los exportadores pero beneficia a los importadores.

La dificultad para pagar préstamos adquiridos para mejorar los cultivos, que a su vez es una consecuencia de las políticas neoliberales, pone en riesgo a los agricultores de perder sus tierras.