Cosmología Aristotélica y Cambio

Aristóteles se pregunta cómo podemos conocer un mundo en constante cambio. ¿Es un mundo inmutable con una verdad absoluta o un mundo cambiante con una verdad relativa?

Aristóteles introduce los conceptos de 'sustancia primera' y 'sustancia segunda' para comprender el cambio.

Una 'sustancia primera' es una entidad individual y concreta. Es algo que existe y es único.

La 'sustancia segunda' es la definición de la sustancia primera. Es un concepto abstracto y universal que describe la esencia de la sustancia.

Los accidentes son características que pueden cambiar en una sustancia sin que esta deje de ser lo que es. Por ejemplo, el color de un gato es un accidente.

Aristóteles propone una teoría que explica el cambio a partir de la interacción entre la materia (hýle) y la forma (morphé). La forma da la esencia a la materia.

Las cosas pueden tener la potencialidad de ser algo que aún no son. Por ejemplo, una semilla tiene la potencialidad de convertirse en un árbol.

El cambio accidental es el cambio en un accidente, es decir, en una característica de la sustancia. Por ejemplo, un gato cambia de color.

La característica que diferencia a un conjunto de seres de la resta de los miembros del mismo género.

La materia, el elemento que compone la sustancia, lo que es físico.

La esencia, lo que define a la sustancia, lo que la hace ser lo que es.

Las sustancias son compuestos de materia (Hyle) y forma (Morphé), que coexisten en la realidad.

El problema del cambio propuesto por Heráclit y Parménides, que planteaba si la realidad es constante o cambiante.

La esencia de una cosa, que describe sus características fundamentales.

Componente inseparable de la realidad, compuesto por materia y forma.

La materia primordial, el substrato de las cosas.

El principio que da forma a la materia, la esencia de las cosas.

La capacidad de una cosa de convertirse en algo diferente. La posibilidad de cambio.

El estado actual de una cosa, la forma que tiene en este momento.

El cambio que ocurre cuando la materia adquiere una nueva forma. El proceso de transformación.

El tipo de no-ser que representa una posibilidad. Por ejemplo, una semilla no es un árbol, pero tiene la potencialidad de serlo.

El tipo de no-ser que implica la ausencia total de existencia. Por ejemplo, una piedra no puede convertirse en un árbol en absoluto.

Todo en la naturaleza tiene un propósito y tiende hacia un objetivo de mejora y perfección.

Aristóteles propone que el universo está compuesto por dos mundos separados: el mundo terrestre (sublunar) y el mundo celeste (supralunar).

El mundo sublunar, que contiene la Tierra, está compuesto por cuatro elementos: aire, tierra, agua y fuego. Se caracteriza por ser imperfecto y corruptible, con movimiento rectilíneo.

El mundo supralunar, que contiene los planetas y las estrellas, está compuesto por un quinto elemento. Es perfecto e inmutable, con movimiento circular.

El Primer Motor Inmóvil (PMI) es la causa final de todo movimiento en el universo. Es perfecto, inmutable e inmóvil. Actúa como una fuerza que atrae a todo a su perfección.

El cambio sustancial es cuando una cosa que no era, llega a ser. Es un cambio radical en la esencia del objeto.

Aristóteles identifica diez categorías que representan diez tipos de cambios accidentales.

Las cuatro causas de Aristóteles explican los factores que intervienen en la creación y el cambio de algo.

La causa material es la sustancia de la que está hecha algo. Ejemplo: el mármol de una estatua.

La causa formal es la idea o el modelo que se utiliza para crear algo. Ejemplo: la idea del escultor para la estatua.

La causa eficiente es la persona o el proceso que produce algo. Ejemplo: el escultor que crea la estatua.

La causa final es el propósito o objetivo para el que se crea algo. Ejemplo: la estatua puede ser creada para decorar un templo.