Características del Tejido Cartilaginoso

El cartílago es un tejido conjuntivo especializado, compuesto por condrocitos y una matriz extracelular abundante.
La matriz extracelular representa más del 90% del tejido, tiene un alto contenido de agua que permite la difusión de nutrientes y funciones de amortiguamiento.
El cartílago carece de vascularización, lo que implica que los nutrientes deben difundirse desde los vasos sanguíneos periféricos.

Los condrocitos son las células del cartílago, su nombre proviene del griego donde "condro" significa cartílago y "cito" significa célula.
La matriz extracelular está compuesta por colágeno tipo II, proteoglicanos, y glucosaminoglicanos.
Los proteoglicanos, como el ácido hialurónico, permiten la retención de agua en la matriz, mejorando la hidratación del tejido.

Cartílago Hialino:
- Presenta un aspecto vítreo y translúcido, encontrado en articulaciones, tráquea y esqueleto fetal.
- Funciona como un colchón entre los huesos en las articulaciones.
Cartílago Elástico:
- Contiene fibras elásticas además de colágeno, lo que le confiere flexibilidad.
- Se localiza en la oreja y el conducto auditivo externo.
Fibrocartílago:
- Mezcla de tejido conectivo denso y cartílago hialino, con colágeno tipo I y II.
- Se encuentra en estructuras sometidas a alta presión como los discos intervertebrales y los meniscos.

El cartílago hialino tiene un pericondrio que se divide en dos partes:
- Fibroso: con abundantes fibras y pocas células.
- Celular: con muchas células, llamadas condrocitos y células progenitoras.
La matriz extracelular se divide en:
- Matriz capsular: alrededor de los condrocitos, rica en proteoglicanos.
- Matriz territorial: que contiene colágeno tipo II.
- Matriz interterritorial: relleno menos teñido entre las matrices capsular y territorial.

Es una forma de cartílago hialino que recubre las superficies articulares.
Carece de pericondrio y tiene capas específicas:
- Zona superficial: fibras orientadas horizontalmente.
- Zona intermedia: fibras en disposición oblicua.
- Zona profunda: fibras verticales y condrocitos más pequeños.
- Zona calcificada: adyacente al hueso.

Comienza con células mesenquimatosas que se convierten en condrogénicas.
Las células progenitoras se diferencian en condroblastos, que se transforman en condrocitos una vez rodeados por la matriz.
El crecimiento del cartílago puede ser por aposición (de la capa periférica) o intersticial (dentro del tejido).

Actúa como un amortiguador entre los huesos, previniendo el contacto directo.
Proporciona soporte estructural en diversas partes del cuerpo, como la tráquea y los bronquios.
Facilita el crecimiento óseo durante la niñez a través de placas de crecimiento cartilaginoso.### Reparación del Cartílago
La reparación del cartílago es deficiente debido a su avascularidad, lo que significa que los nutrientes deben difundirse desde la periferia.
Este proceso de difusión es lento, lo que impide una adecuada regeneración del cartílago dañado.
La insuficiente regeneración cartilaginosa es una de las causas del dolor en las rodillas en adultos.

Cuando el cartílago se daña, pueden ocurrir dos fenómenos: la reparación deficiente y la calcificación.
La calcificación del cartílago se produce por la formación de vasos sanguíneos, lo cual puede activar factores genéticos que transforman el cartílago en hueso.
Este proceso es común en personas mayores, donde los anillos de cartílago se convierten en estructuras óseas.

Los condrocitos son células implicadas en la estructura y mantenimiento del cartílago.
La resorción del cartílago puede llevar a su destrucción, afectando aún más la función articular.

La calcificación del cartílago es un proceso normal relacionado con el envejecimiento, impactando la salud de las articulaciones.
Este fenómeno se observa frecuentemente en adultos mayores, quienes presentan cambios en la estructura cartilaginosa.

El cartílago es un tejido conjuntivo especializado, compuesto principalmente por condrocitos y una matriz extracelular.
Más del 90% del tejido cartilaginoso es matriz extracelular, rica en agua, lo que facilita la difusión de nutrientes y proporciona funciones de amortiguamiento.
Carece de vascularización, lo que implica que los nutrientes se difunden desde los vasos sanguíneos periféricos.

Los condrocitos son las células del cartílago, su nombre proviene del griego: "chondro" significa cartílago y "cito" significa célula.
La matriz extracelular contiene colágeno tipo II, proteoglicanos y glucosaminoglicanos, lo que aporta estructura y función al cartílago.
Los proteoglicanos, como el ácido hialurónico, son cruciales para la retención de agua en la matriz y mejoran la hidratación del tejido.

Cartílago Hialino: Tiene un aspecto vítreo y translúcido, se encuentra en articulaciones, tráquea y en el esqueleto fetal, actuando como un colchón entre los huesos.
Cartílago Elástico: Contiene fibras elásticas que le otorgan flexibilidad, localizado principalmente en la oreja y el conducto auditivo externo.
Fibrocartílago: Mezcla de tejido conectivo denso y cartílago hialino, con colágeno tipo I y II, presente en discos intervertebrales y meniscos, donde se requiere resistencia a alta presión.

El cartílago hialino posee pericondrio dividido en dos partes: fibroso (con numerosas fibras) y celular (con muchos condrocitos y células progenitoras).
La matriz extracelular se divide en tres partes: matriz capsular (alrededor de los condrocitos, rica en proteoglicanos), matriz territorial (contiene colágeno tipo II) y matriz interterritorial (menos teñida entre las dos matrices anteriores).

Variación del cartílago hialino que recubre superficies articulares, carece de pericondrio.
Presenta capas específicas: zona superficial (fibras horizontales), zona intermedia (fibras oblicuas), zona profunda (fibras verticales y condrocitos más pequeños) y zona calcificada (cercana al hueso).

Inicia con células mesenquimatosas que se convierten en condrogénicas, formando condroblastos que evolucionan a condrocitos al ser rodeados por la matriz.
El crecimiento puede ser por aposición (de la capa periférica) o intersticial (dentro del tejido).

Actúa como un amortiguador entre huesos, previniendo contacto directo.
Proporciona soporte estructural en partes del cuerpo como tráquea y bronquios.
Facilita el crecimiento óseo en la infancia a través de placas de crecimiento cartilaginoso.

La reparación es deficiente debido a la falta de vasos sanguíneos, los nutrientes deben difundir desde la periferia.
Este proceso es lento e impide una regeneración adecuada del cartílago, contribuyendo al dolor en las rodillas en adultos.

Ocurren reparación deficiente y calcificación tras el daño del cartílago.
La calcificación se produce por la formación de vasos sanguíneos que activan factores genéticos, transformando el cartílago en hueso, común en personas mayores.

Los condrocitos son esenciales para la estructura y mantenimiento del cartílago.
La resorción del cartílago puede llevar a su destrucción, afectando la función articular de manera significativa.

La calcificación es un proceso normal relacionado con el envejecimiento que impacta la salud articular.
Cambios en la estructura cartilaginosa son evidentes frecuentemente en adultos mayores, afectando su movilidad.