Resumen del Imperio Bizantino PDF

III) BIZANCIO, EL IMPERIO ROMANO DE ORIENTE En el año 476, tras la desaparición del Imperio romano de Occidente, la herencia romana pervivió en el Imperio romano de Oriente, también conocido como Imperio bizantino (ya que su capital era una antigua colonia griega, Bizancio, sobre la que se construyó...

III) BIZANCIO, EL IMPERIO ROMANO DE ORIENTE En el año 476, tras la desaparición del Imperio romano de Occidente, la herencia romana pervivió en el Imperio romano de Oriente, también conocido como Imperio bizantino (ya que su capital era una antigua colonia griega, Bizancio, sobre la que se construyó Constantinopla), durante diez siglos (hasta el año 1453). 3.1. EL IMPERIO DE JUSTINIANO El período de mayor esplendor del Imperio bizantino tuvo lugar durante el mandato del emperador Justiniano I “el Grande” (527-565) y su esposa Teodora. Las principales características de su gobierno: El emperador, siguiendo la tradición romana, era aclamado por el Senado y por el pueblo y concentraba en su persona todos los poderes: político, militar y religioso. Justiniano trató de reconquistar los territorios del antiguo Imperio romano. Su fuerte ejército, liderado por los generales Belisario y Narsés, logró recuperar regiones del norte de África (vándalos), de la península itálica (ostrogodos) y del sur de la península ibérica (visigodos), aumentando enormemente la extensión territorial del Imperio bizantino. Época de gran prosperidad económica gracias a una agricultura muy productiva, al desarrollo de una artesanía que suministraba productos de lujo, y al crecimiento del comercio por el mar Mediterráneo y por el mar Negro gracias a su ubicación estratégica. Gran desarrollo cultural e importante avance de la arquitectura y de las grandes ciudades, destacando su capital Constantinopla (actual Estambul) y la construcción de la gran basílica de Santa Sofía. Recopiló y adaptó las leyes y el derecho romano en doce libros que constituyeron el Código de Justiniano. 3 MATERIA: GEOGRAFÍA E HISTORIA. 2º ESO A/B/C. CURSO: 2022-2023 3.2. DECLIVE DEL IMPERIO BIZANTINO Tras la muerte de Justiniano y de Belisario (565), el Imperio bizantino entró en decadencia y se fueron perdiendo numerosos territorios como resultado de los ataques de los pueblos germanos (lombardos en Italia, visigodos en la península ibérica) y musulmanes (Egipto, Siria y Palestina), por lo que el Imperio se replegó sobre su zona oriental. A pesar de una nueva etapa de recuperación y prosperidad conocida como segunda edad de oro de Bizancio (siglos IX y X), desde el siglo XI se produjo una nueva crisis política que fue reduciendo progresivamente la extensión territorial del Imperio a Constantinopla. Finalmente, tras un largo asedio de seis semanas del sultán Mehmet II, Constantinopla iba a ser conquistada por los turcos u otomanos en el año 1453, lo que supuso el fin del Imperio bizantino y la desaparición definitiva del Imperio romano. 3.3. ORGANIZACIÓN DEL IMPERIO BIZANTINO EL GOBIERNO: UN EMPERADOR ABSOLUTO El gobierno del Imperio bizantino recaía en el emperador, que desde el siglo VII adoptó el título de basileus (“rey” en griego). Residía en Constantinopla, concentraba todo el poder (político, militar, religioso) y tenía un poder divino. Para gobernar, se ayudaba de una administración organizada en provincias (themas), al frente de las cuales había un estratega, de una fuerte burocracia de funcionarios, y de una sólida legislación basada en el Código de Justiniano. El basileus también designaba el patriarca de Constantinopla, que era la máxima autoridad religiosa de la iglesia cristiana en Oriente. ECONOMÍA E IMPORTANCIA DE LAS CIUDADES La base de la economía del Imperio era la agricultura, destacando la explotación de grandes extensiones de terreno (latifundios) que estaban en manos de las clases privilegiadas. También tendría una gran importancia la artesanía, donde destacaban productos de lujo como tapices, orfebrería, esmaltes y tejidos de seda. El comercio se benefició de la estratégica situación geográfica de Constantinopla, situada entre Europa y Asia y entre los mares Mediterráneo y Negro. A Bizancio llegaban artículos de lujo como las especias y el marfil de la India, ámbar y pieles del norte de Europa, o seda china de la famosa ruta de la seda. Por último, tuvieron una gran importancia las ciudades y la arquitectura, destacando Constantinopla, Tesalónica, etc. LA RELIGIÓN BIZANTINA La religión ejerció un papel muy importante en la sociedad bizantina. Durante siglos, las disputas religiosas fueron cada vez numerosas al enfrentarse dos posturas del Cristianismo diferentes entre los papas y los patriarcas: los primeros se reconocían como la única y máxima autoridad de la Iglesia cristiana, mientras que los patriarcas únicamente reconocían a los Papas como obispos de Roma, y por tanto como sus iguales. Todo ello iba a dar lugar, en el año 1054 a una crisis religiosa: el Cisma de Oriente, la separación definitiva entre la Iglesia católica romana (de Occidente, que reconocía la autoridad papal) y la Iglesia bizantina u ortodoxa (de Oriente, que reconocía la superioridad del Patriarca de Constantinopla). 4 MATERIA: GEOGRAFÍA E HISTORIA. 2º ESO A/B/C. CURSO: 2022-2023 CULTURA Y ARTE BIZANTINOS El Imperio bizantino mantuvo en un primer momento tradiciones y costumbres romanas como el latín, pero, poco a poco, la cultura griega-helenística fue sustituyendo a la latina y el griego se convertiría en la lengua oficial del Imperio. Las principales construcciones artísticas estaban relacionadas con la religión católica y con la figura del emperador, por lo que se edificaron numerosas iglesias, monasterios y templos, destacando la de Santa Sofía en Constantinopla, la de San Marcos en Venecia y la de San Vital en Rávena. La arquitectura utilizaba técnicas constructivas romanas que se caracterizaban por su gran tamaño, por sus exteriores de piedra y ladrillo, por su planta de cruz griega (los cuatro brazos iguales), por estar cubiertas con grandes cúpulas y bóvedas de arista, y por estar decoradas con ricos mosaicos, pinturas al fresco e imágenes e iconos sagrados que representaban tanto emperadores como figuras religiosas. IV) EL IMPERIO CAROLINGIO CREACIÓN Y ORGANIZACIÓN DEL IMPERIO CAROLINGIO A comienzos del siglo VIII, las luchas por el poder y la debilidad de los reyes francos les fueron debilitando. Poco a poco, los mayordomos de palacio, altos funcionarios de la corte, se hicieron con el control del reino. Uno de los más destacados, Carlos Martel, derrotó a los musulmanes en el año 732 en la batalla de Poitiers, que frenó el avance del Islam en Europa. Poco después su hijo, Pipino el Breve, destronó al último monarca franco y se coronó como nuevo rey con la aprobación del papa, fundando la dinastía carolingia. A Pipino el Breve le iba a suceder su hijo Carlomagno (“el Grande”, 768-814), una de las figuras más importantes de la historia. Desde joven, Carlomagno iba a engrandecer y expandir el territorio carolingio: conquistó el reino lombardo de Italia, se anexionó los territorios situados en Germania, etc. Además, sería un gran defensor de la religión católica (en lucha contra los musulmanes y la religión ortodoxa) e impuso el cristianismo en los territorios sometidos. Su poder y prestigio eran tan grandes que, en el año 800, el papa León III le iba a coronar como nuevo emperador de Occidente. Carlomagno iba a establecer su residencia en el palacio de Aquisgrán. Para facilitar el gobierno de su enorme imperio, lo dividió en condados (administrados por condes) y marcas (administradas por marqueses en territorios fronterizos). También contaba con los missi dominici, inspectores que vigilaban a los cargos más poderosos (obispos, condes, marqueses) para que cumplieran las leyes y sus funciones. Con Carlomagno, la cultura vivió una etapa de esplendor conocida como el Renacimiento carolingio: se crearon escuelas en monasterios y catedrales donde se organizaban planes de estudio (trivium y quadrivium), y se copiaban manuscritos antiguos. Además, se inventaría un nuevo tipo de letra: la minúscula carolingia. 5 MATERIA: GEOGRAFÍA E HISTORIA. 2º ESO A/B/C. CURSO: 2022-2023 DIVISIÓN Y FINAL DEL IMPERIO CAROLINGIO La unidad del Imperio carolingio no se iba a mantener durante mucho tiempo: a la muerte de Carlomagno le sucedió su único hijo, Luis el Piadoso, que a su vez dividió el Imperio entre sus tres hijos: Lotario, que sería el nuevo emperador, Carlos el Calvo y Luis el Germánico. Los hermanos no aceptaron el reparto y se enfrentaron en una guerra civil. La guerra terminó con la firma del Tratado de Verdún en el año 843, que supuso el fin de la guerra y el reparto definitivo del Imperio: Carlos el Calvo recibió la parte occidental, Luis el Germánico ocupó la parte oriental, y Lotario recibió el territorio intermedio entre los otros dos. La situación era inestable y el Imperio acabó por extinguirse. De su territorio nacerían dos grandes potencias: el reino de Francia y el Sacro Imperio Romano Germánico. 6