Estática de la Materia - PDF

matunivid132 (1398x2268x2 tiff) 111 ESTÁTICA DE LA MATERIA 30. MATERIA Y MATERIALISMO La n1anera más simple y directa de caracterizar la naturaleza es referirnos a ella con10 el inundo material. El ténnino materia tiene, por consiguient...

matunivid132 (1398x2268x2 tiff) 111 ESTÁTICA DE LA MATERIA 30. MATERIA Y MATERIALISMO La n1anera más simple y directa de caracterizar la naturaleza es referirnos a ella con10 el inundo material. El ténnino materia tiene, por consiguiente, el valor de establecer unos lúnites dentro del campo de la ontología: en el conjunto de todos los entes reales hay una parte constituida por los objetos materiales, a cuyo estudio se consagran las ciencias naturales. Materia es un nombre genérico que se aplica a una pluralidad inmensa de entes concretos. Convendría encontrar un vocablo adecuado para designarlos, y con frecuencia se acude al tém1ino «cuerpo». No hay duda de que los cuerpos son cosas mate- riales, pero tan1biénhay cosas n1aterialesincorpóreas. La idea de cuer- po, en efecto, contiene un n1atiz específico, que va unido a la impe- netrabilidad u ocupación exclusiva de una parte del espacio. Por eso se dice, por ejemplo, que la luz es material pero no corpórea --en la Edad Media algunos pensaban que al ser incorpórea no podía ser material-. Los físicos diferencian en este sentido losfermiones (par- tículas que no se pueden an1ontonarindiscrinúnadamente en un recin- to litnitado) de los bosones (partículas que sí son capaces de hacer- lo). Si tomamos prestada esta distinción, diríamos que los cuerpos son los fern1iones y todo aquello que los contenga, mientras que los bosones son o forman objetos materiales no corpóreos. Ahora bien, si la ocupación exclusiva del espacio no sirve para definir qué es la 1nateria, ¿qué otra propiedad o propiedades lo hacen? Si fué- semos capaces de definir la materia con exactitud, habríamos avan- zado un paso importante en el conocin1iento de la propia naturale- za. Pero no resulta tan simple hacerlo. El Diccionario de filosofia de Abbagnano distingue siete acepciones fundamentalmente diver- sas para el concepto; el de Foulquié, cinco; los de Ferrater Mora y Lalande no las nu1neran, pero efectúan largos recorridos históricos para tratar de aclarar la noción. [ 132]  matunivid133 (1387x2296x2 tiff) ESTÁTICA DE LA MATERIA [III, 31] 133 Existe una opción filosófica que hace de la materia el único tipo de realidad existente. Hay muchas escuelas de pensamiento comprometidas con ella, cada una de las cuales ha propuesto una versión diferente de lo que debe ser entendido por materia. Sería muy conveniente averiguar si entre ellas hay algún denominador común, aparte de la coincidencia terminológica. Parece que sí, ya que según uno de sus más recientes defensores: Puede sostenerse que el materialismo no es una ontología entre otras, sino la ontología de la ciencia y de la técnica. En particular, el mate- rialismo es la fuerza filosófica que ha impelido algunas revoluciones científicas tales como la fisica atómica y nuclear, la biología evolucio- nista, la teoría química de la herencia, el estudio científico del origen de la vida, la fisiología de la mente y los avances más recientes de la paleoan- tropología y la historiografía [Bunge, 1981, 9]. Este elogio de los méritos del materialismo es discutible desde un punto de vista histórico-biográfico, porque en las revoluciones científicas que menciona han participado adeptos a toda la gama del espectro ontológico. En cambio, desde el punto de vista lógi- co es trivial: puesto que el materialismo predica que no hay otra realidad que no sea materia, es evidente que el conocimiento correc- to de la realidad tendrá que pasar por ese elemental reconocimiento. Supuesto, claro está, que sepamos con claridad qué es la materia. De otra manera no habremos hecho otra cosa que proponer una equivalencia dogmática, esto es, únicamente habremos decidido que para nosotros ambos términos, realidad y materia, significan exactamente lo mismo. 31. ¿QUÉ ES LA MATERIA? Naturaln1ente, todos los n1aterialistas y muchos que no lo son han tratado de dar con una definición lo más exacta posible de mate- ria. Bunge, cuyo elogio del n1aterialismo acabo de citar, propone una definición adornada con algunas sutilezas de la lógica mate- 1nática: