Relación entre la pornografía y la violencia sexual

La violencia de género es cuando una persona convierte una relación que en principio es correcta, en agresión, por la intencionalidad, el tono, el poder o la fuerza.

Algunos indicadores de la conducta del agresor son exigirle mantener relaciones aunque ella no lo desee, ponerse irritable, agresivo o violento si ella no accedió a mantener relaciones sexuales, obligarla a prácticas sexuales no deseadas, requerirla sexualmente en momentos o lugares inapropiados, compararla en el ámbito sexual con otras chicas para humillarla, ocuparse de su propio placer sin tener en cuenta los deseos de la chica, y mostrarse desconsiderado y violento al mantener relaciones sexuales.

Algunas justificaciones sociales utilizadas para reforzar los indicadores de violencia incluyen la responsabilidad está en la chica, la representación del hombre como obsesivo sexual, el encubrimiento del machismo, y confundir la respuesta de la chica.

El pensamiento machista se refiere a justificaciones sociales permeadas por el machismo, como la responsabilidad está en la chica, la representación del hombre como obsesivo sexual, el encubrimiento del machismo, y confundir la respuesta de la chica.

La violencia de género se define como cualquier acción o conducta basada en la pertenencia al sexo femenino que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el ámbito público como en el privado.