Psicología: Sustancias Psicoactivas

Sustancias Psicoactivas

• Son compuestos químicos que, al ser ingeridos, inhalados o administrados, afectan el sistema nervioso central, alterando la percepción, el estado de ánimo, la conciencia y el comportamiento.
• Pueden provenir de diferentes fuentes: plantas, sustancias sintéticas y sustancias derivadas de plantas.

Clasificación de las Sustancias Psicoactivas

• Depresoras: disminuyen la actividad cerebral, produciendo efectos sedantes, relajantes e hipnóticos.
  • Ejemplos: alcohol, barbitúricos, tranquilizantes.
• Estimulantes: aumentan la actividad cerebral, generando efectos energizantes, excitantes y eufóricos.
  • Ejemplos: cocaína, anfetaminas, cafeína.
• Alucinógenas: alteran la percepción de la realidad, provocando alucinaciones visuales, auditivas y sensoriales.
  • Ejemplos: LSD, psilocibina, DMT.

Efectos del Consumo de Sustancias Psicoactivas

• Efectos físicos: alteraciones del ritmo cardíaco, presión arterial, respiración, temperatura corporal, etc.
• Efectos mentales: alteraciones del estado de ánimo, la percepción, la memoria, el juicio y la coordinación.
• Efectos a largo plazo: daños en el cerebro, el hígado, los pulmones, el corazón y otros órganos, adicción, problemas de salud mental, violencia, accidentes y muerte.

Razones para Consumir Sustancias Psicoactivas

• Búsqueda de placer: el consumo de drogas puede generar sensaciones agradables y placenteras a corto plazo.
• Automedicación: algunas personas recurren a las drogas para intentar aliviar emociones negativas como el estrés, la ansiedad, la depresión o el trauma.
• Presión social: el consumo de drogas puede verse como una forma de encajar en un grupo o de ser aceptado por los demás.
• Falta de información: la falta de conocimiento sobre los riesgos y las consecuencias del consumo de drogas puede llevar a decisiones erróneas.
• Curiosidad y experimentación: muchos individuos, especialmente jóvenes, prueban sustancias psicoactivas por curiosidad sobre sus efectos.

Consecuencias del Consumo

Salud Física

• Problemas cardiovasculares, respiratorios, hepáticos, y daños neurológicos.
• Riesgo de sobredosis y muerte.

Salud Mental

• Desarrollo o empeoramiento de trastornos mentales, incluyendo ansiedad, depresión y psicosis.
• Dependencia y adicción.

Consecuencias Sociales

• Problemas en relaciones interpersonales.
• Dificultades en el ámbito laboral o académico.
• Problemas legales, incluyendo arrestos y encarcelamiento.