Mujeres pioneras en la salud

Mujeres que transformaron la salud y análisis de la situación actual

1. Metrodora, doctora griega, escribió el texto médico más antiguo conocido escrito por una mujer que cubre áreas como la ginecología.

2. Florence Nightingale sentó las bases de la profesionalización de la enfermería y fue reconocida por su trabajo en la guerra de Crimea.

3. Elizabeth Blackwell fue la primera mujer en ejercer como médico en Estados Unidos y fundó una escuela de enfermería para mujeres.

4. Marie Curie fue una científica pionera en el campo de la radiactividad y la primera persona en recibir dos premios Nobel en distintas especialidades.

5. Margaret Sanger fundó la primera institución de planificación familiar de la historia y luchó por los derechos reproductivos de las mujeres.

6. Rosalind Franklin contribuyó a la comprensión de la estructura del ADN y del carbón, pero su trabajo no fue reconocido en su momento.

7. Gertrude Belle Elion desarrolló 45 tratamientos que ayudan al sistema inmunológico a combatir el cáncer y recibió el Premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1988.

8. Francoise Barré-Sinoussi fue galardonada con el Premio Nobel de Medicina en 2008 por su descubrimiento del VIH y sus contribuciones a la investigación del virus.

9. Las mujeres padecen trastornos psicológicos con mayor frecuencia que los hombres debido a factores biológicos y sociales.

10. En relación a las enfermedades crónicas, las mujeres tienen mayor prevalencia de enfermedades como la artritis y la osteoporosis.

11. Los accidentes domésticos son más frecuentes entre mujeres, mientras que los accidentes laborales son más comunes entre hombres.

12. Es necesario seguir trabajando en la equidad de género en la salud y en la prevención de enfermedades y accidentes en ambos sexos.La perspectiva de género en la salud: diferencias y desigualdades entre mujeres y hombres

13. Hay diferencias en la salud entre mujeres y hombres, como la mayor prevalencia de enfermedades crónicas en las mujeres mayores y la obesidad en los hombres jóvenes.

14. El consumo de frutas y verduras es mayor en mujeres, aunque tienen mayores índices de sedentarismo y consumen más analgésicos opioides.

15. Las mujeres tienen más riesgo de sufrir un segundo ataque cardiaco y menos acceso a servicios de rehabilitación cardíaca.

16. Los hombres presentan comportamientos de riesgo, como la conducción temeraria y el consumo excesivo de sustancias tóxicas.

17. Las mujeres tienen más probabilidades de modificar estilos de vida relacionados con el cuidado y las tareas domésticas, lo que aumenta su riesgo de padecer el Síndrome del corazón roto.

18. La brecha en la valoración de la salud se ensancha según se desciende en la escala social.

19. El consumo de alcohol intensivo es más relevante en hombres y las mujeres tienen más riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual.

20. El enfoque de género en salud debe contemplar los diversos ejes de desigualdad social, como la pobreza y la discriminación racial.

21. La teoría de la interseccionalidad examina cómo diferentes categorías de discriminación interactúan en múltiples niveles.

22. La perspectiva de género en los sistemas de salud busca proporcionar una atención centrada en el paciente, identificar y atender las necesidades y determinantes de género, y garantizar la equidad de género en el acceso a todos los servicios.

23. Para conseguir esto, se plantean medidas en los cinco componentes básicos de los sistemas de salud.

24. El doble estándar consiste en utilizar diferentes criterios para tratar y evaluar situaciones o problemáticas sustancialmente parecidas o idénticas para los sexos y géneros, y puede manifestarse en el dicotomismo sexual/de género y la reproducción de estereotipos sexistas y de género.Insensibilidad de género en la salud: el problema de no considerar las diferencias entre mujeres y hombres

25. La insensibilidad de género consiste en no contemplar el sexo como variable ni la dimensión del género en contextos donde son significativos.

26. Esto supone no cuestionar que situaciones aparentemente similares o idénticas puedan tener efectos diferentes y desiguales en mujeres y en hombres.

27. La insensibilidad de género tiende a perpetuar los desequilibrios existentes entre mujeres y hombres en relación a la salud.

28. Esta problemática puede tomar varias formas, como la desatención de las diferencias entre mujeres y hombres en su relación con el proceso salud-enfermedad-atención.

29. Otra forma de insensibilidad de género es la descontextualización, que consiste en ignorar el contexto social, económico y cultural en el que se desenvuelven las relaciones sociales entre mujeres y hombres.

30. También se puede dar la consideración del hogar o la familia como unidad de análisis sin tener en cuenta sus componentes (householdism).

31. Esta práctica implica ignorar las diferentes situaciones de las personas integrantes de ese agregado social en relación a la temática de estudio.

32. No obstante, esto no significa que no deba usarse la familia como unidad de análisis.

33. Es importante no perder de vista las desigualdades, en responsabilidades y recursos, de los diferentes miembros.

34. La insensibilidad de género en la salud tiende a perpetuar las desigualdades entre mujeres y hombres en el acceso a servicios de salud y en la prevención de enfermedades.

35. Es necesario incorporar la perspectiva de género en la investigación y en la atención sanitaria para reducir estas desigualdades.

36. La consideración del género y las diferencias entre mujeres y hombres en la salud es esencial para lograr una atención sanitaria equitativa y de calidad para toda la población.