Estructura de las células procariotas: Bacterias

Study Notes

Las células procariotas, como las bacterias, tienen una estructura única que permite su supervivencia.
El periplasma es una zona que separa la membrana plasmática de la pared celular y se divide en dos partes.
La pared celular, ubicada en el exterior de la membrana, está compuesta por peptidoglicanos, un polímero complejo que confiere rigidez y forma a la célula.
El periplasma es una zona rica en enzimas, proteínas y otras moléculas que participan en procesos vitales como la degradación de nutrientes, la resistencia a antibióticos y el transporte de moléculas.
Las membranas plasmáticas son la capa interna de la célula procariota y están formadas por una bicapa lipídica con proteínas asociadas.
Las membranas plasmáticas actúan como barreras selectivas que regulan la entrada y salida de sustancias de la célula, además de albergar enzimas para procesos metabólicos.
Las proteínas presentes en las membranas plasmáticas cumplen diversas funciones, incluyendo transporte, señalización celular y producción de energía.
La cápsula es una capa externa, generalmente compuesta por polisacáridos, que se encuentra en muchas bacterias.
La cápsula proporciona protección contra la fagocitosis por células del sistema inmune, facilita la adhesión a superficies y puede ayudar a la bacteria a resistir la desecación.

El periplasma juega un papel crucial en la supervivencia de las bacterias.
Ayuda a la bacteria a resistir la presión osmótica, ya que actúa como un amortiguador.
El periplasma alberga enzimas que degradan nutrientes, permitiendo la utilización de diferentes fuentes de carbono.
También contiene enzimas que desactivan antibióticos, contribuyendo a la resistencia a los fármacos.
El periplasma participa en la producción de exoenzimas que degradan moléculas complejas, como polisacáridos, para que puedan ser absorbidas por la bacteria.

La pared celular es una estructura rígida que proporciona soporte a la célula bacteriana.
Está compuesta principalmente por peptidoglicanos, un polímero complejo formado por cadenas de azúcares y aminoácidos.
La pared celular actúa como una barrera que protege a la célula de la lisis osmótica y confiere resistencia a la célula.
Las bacterias gram-positivas tienen una pared celular más gruesa, con múltiples capas de peptidoglicano, mientras que las bacterias gram-negativas tienen una pared celular más delgada con solo una capa de peptidoglicano.
Las bacterias con una pared celular gruesa son más resistentes a la acción de los antibióticos que afectan la síntesis del peptidoglicano.

La membrana plasmática es una estructura delgada, flexible y elástica que rodea el citoplasma de la célula bacteriana.
Está compuesta por una bicapa lipídica con proteínas asociadas.
La membrana plasmática es responsable de regular el transporte de sustancias hacia adentro y hacia afuera de la célula.
La membrana plasmática también alberga enzimas que participan en procesos metabólicos como la respiración celular.

La cápsula es una capa externa, generalmente pegajosa y flexible, que rodea a algunas bacterias.
La cápsula está compuesta principalmente por polisacáridos.
La cápsula protege a las bacterias de la fagocitosis por células del sistema inmune.
La cápsula facilita la adhesión a superficies, lo que puede ayudar a las bacterias a colonizar tejidos y formar biopelículas.
La cápsula puede también contribuir a la resistencia a la desecación.