Enfermedad de Hansen y Mycobacterium leprae

Study Notes

Enfermedad infecciosa y crónica causada por Mycobacterium leprae.
Afecta principalmente la piel, el tracto respiratorio superior, el ojo anterior, los nervios periféricos y los testículos.

Bacilo ácido resistente, midiendo entre 0.3 a 0.5 µm de ancho y 4 a 7 µm de largo.
Los bacilos viables se tiñen de manera sólida, mientras que los degenerados lo hacen de forma irregular.
No se cultiva en medios convencionales, caracterizándose por infectar patas de ratones de laboratorio.
Su ácido resistencia se inhibe con piridina y las suspensiones del bacilo pueden oxidar dopa.
Invasión de nervios del hospedador y producción de una reacción intradérmica característica.

El único reservorio natural probable es el armadillo de nueve bandas (Dasypus novencinctus).

La lepra es considerada infecciosa, pero no contagiosa en términos convencionales, requiriendo contacto prolongado.
La infección puede ocurrir a pesar de la exposición diaria, siempre que exista buena inmunidad.
Se desconoce la vía exacta de transmisión; la piel intacta puede liberar pequeñas cantidades del bacilo, especialmente con úlceras abiertas.
La mucosa nasal de pacientes no tratados puede contener grandes cantidades de bacilos viables.
Existen indicios de transmisión a través de la leche materna y evidencia creciente de transmisión congénita.

Aproximadamente la mitad de los casos de lepra se encuentran en África y la India, en la franja ecuatorial.
Se estiman entre 12 a 20 millones de casos a nivel mundial, con alrededor de 12,000 en América.

La infección implica transmisión al hospedador, entrada en el mismo y multiplicación.
El período de incubación es el tiempo entre la exposición al germen y la aparición de síntomas clínicos.
No se han identificado toxinas en M. leprae; los cambios patológicos se asocian a su habilidad para sobrevivir en macrófagos y provocar hipersensibilidad retardada.