El Siglo de Pericles y los Sofistas

Study Notes

En el siglo 5 antes de Cristo, Atenas se convirtió en un centro promotor del arte, la literatura, la medicina, la política, la filosofía, etc., gracias a la confluencia de varios factores históricos y sociales.
Este período de la historia es conocido como el Siglo de Pericles, ya que se considera que las políticas de Pericles contribuyeron a promover este desarrollo.
Atenas se había posicionado como la gran vencedora de las guerras médicas contra los persas, lo que le confirió mucho poder y la convirtió en un polo de atracción de talentos en diferentes ámbitos.
En este siglo, confluyeron en Atenas figuras como Fidias, Esquilo, Sófocles, Eurípides, Anaxágoras, Demócrito, Sócrates, Platón, etc.
La revolución cultural favoreció la aparición de los sofistas, un grupo de personas que se dedicaban a la educación y la formación en diferentes ámbitos.
Los sofistas más destacados fueron Protágoras de Abdera, Gorgias de León, Hipias de Elis, Trasímaco de Calcedonia y Antifón de Atenas.
Inicialmente, el término "sofista" significaba "hábil" o "experto" en un sentido genérico, pero evolucionó para referirse a aquellos que se dedicaban a la educación y la formación.
Los sofistas no pasaron inadvertidos en Atenas, y la opinión general estaba dividida; mientras que algunos los consideraban hábiles educadores, otros los veían como engañadores y charlatanes.
Platón dedicó buena parte de su obra a criticar a los sofistas, lo que contribuyó a que el término adquiriera un significado negativo.
Los sofistas eran extranjeros que se trasladaron a Atenas y se dedicaron a enseñar; habían viajado mucho y habían conocido diferentes culturas y formas de pensar.
Ofrecían la posibilidad de enseñar a hablar bien, a defender ideas propias y a situarse a un nivel similar al de la nobleza ateniense.
Los sofistas defendían el pragmatismo y la utilidad de la formación, y enseñaban retórica, ética, oratoria, etc.
Criticaban la tradición cultural y defendían la idea de que las instituciones y la cultura no son naturales ni divinas, sino producto del ser humano.
Fueron vistos como provocadores que criticaban las instituciones, y algunos de ellos se enfrentaron con el estado por sus ideas.
A pesar de las críticas, los sofistas tuvieron un papel remarcable en el pensamiento griego y la tradición filosófica posterior.