El libro de Ester: Banquete de Asuero y Vasti

• El texto relata un acontecimiento durante el reinado de Asuero, cuyo imperio se extendía desde la India hasta Etiopía, abarcando 127 provincias.

El Banquete de Asuero

• En el tercer año de su reinado, Asuero ofreció un banquete a sus príncipes y cortesanos en Susa, la capital del reino.
• El banquete duró 180 días, mostrando la riqueza y el poder del rey.
• Tras este largo banquete, el rey ofreció otro de siete días para todo el pueblo de Susa, desde el más grande hasta el más pequeño, en el patio del palacio real.
• El lugar estaba adornado con pabellones blancos, verdes y azules, sostenidos por cuerdas de lino y púrpura, anillos de plata y columnas de mármol.
• Los asistentes bebían en vasos de oro variados, y se servía vino real en abundancia.
• La bebida se ofrecía libremente, sin obligación, por orden del rey.
• La reina Vasti también ofreció un banquete para las mujeres en la casa real.

Desobediencia de la Reina Vasti

• Al séptimo día, el rey, animado por el vino, ordenó a siete eunucos: Mehumán, Bizta, Harbona, Bigta, Abagta, Zetar y Carcas, traer a la reina Vasti con la corona regia para exhibir su belleza ante el pueblo y los príncipes.
• Vasti desobedeció la orden y se negó a comparecer ante el rey.
• El rey se enfureció grandemente ante esta desobediencia.

Consejo de los Sabios

• Asuero consultó a los sabios conocedores de las leyes y costumbres, entre ellos Carsena, Setar, Admata, Tarsis, Meres, Marsena y Memucán, siete príncipes de Persia y Media que tenían acceso al rey.
• Preguntó qué castigo debía recibir Vasti por desobedecer su orden.
• Memucán argumentó que la desobediencia de Vasti no era solo contra el rey, sino contra todos los príncipes y pueblos del reino.
• Predijo que el ejemplo de Vasti llevaría a las mujeres a menospreciar a sus maridos.
• Propuso que se emitiera un decreto real irrevocable que prohibiera a Vasti presentarse ante el rey nuevamente, y que se eligiera a otra reina en su lugar.
• Sugirió que este decreto se divulgara por todo el reino para que todas las mujeres honraran a sus maridos.
• El rey y los príncipes aceptaron la propuesta de Memucán.
• El rey envió cartas a todas las provincias, en su propia escritura y lengua, ordenando que cada hombre afirmase su autoridad en su hogar.